«Un perfecto remake del genuino rock andaluz abordado desde la óptica de unos bicivoladores del espacio exterior». Así describe la nota de prensa oficial de Primavera Labels ‘Hilo negro’, el segundo disco de Derby Motoreta’s Burrito Kachimba. Entre menciones a Triana, Soundgarden y Smash o referencias a los efectos lisérgicos de su música o su sonido de extrarradio o cañí, queda claro por dónde irán los tiros, sobre todo si has escuchado el primer disco de la banda, que ganó el Premio Ruido de manera sorprendente pues su victoria no estaba tan clara como la de otros ganadores previos. ‘Hilo negro’ queda retratado como un disco basado en otras cosas, algo que es imposible de negar y que no es necesariamente negativo. «El disco de hard-rock que se merecía la generación Tik-Tok». Bueno, ahí igual nos hemos pasado.
Los «tiros» por donde va ‘Hilo negro’ son caminos ya conocidos por cualquiera que esté familiarizado con la fusión de rock progresivo, hard rock y flamenco (o lo que ellos llaman kinkidelia). Porque donde Rosalía ha reinventado el flamenco y donde Califato ¾ le han dado una vuelta de puta locura, donde C. Tangana ha reinventado el pasodoble, donde Rodrigo Cuevas ha reinventado el cancionero asturiano… está claro que a Derby Motoreta’s Burrito Kachimba prefieren conservar la tradición ante todo. ‘Hilo negro’ es el disco de un grupo que se conforma con sonar a su idea de lo que esa fusión de sonidos debe ser. Es, ni más ni menos, que un riguroso estudio estético del rock psicodélico aflamencado en toda su gloria, imitado de pe a pa, en el que no faltan ni las guitarras polvorientas del stoner rock, ni los teclados alucinados, ni las cuerdas tipo sitar, ni las estructuras complejas del rock progresivo, ni mucho menos las melodías clamorosas que caracterizan el género. Como su primer disco, pero con un sonido mejorado gracias, en parte, a la masterización de Brian Lucey, que ha trabajado con Arctic Monkeys o con los Black Keys.
Desde la premisa de que Derby Motoreta’s Burrito Kachimba realmente no busca hacer nada interesante con el rock psidodélico andaluz, sino simplemente recolocarlo en la actualidad tal cual lo han escuchado toda su vida, no se termina de entender su victoria en los Premios Ruido, donde también estaban nominados, por ejemplo, Novedades Carminha, que le han dado aire fresco a la música de verbena; y la escucha de ‘Hilo negro’ crea aún más confusión en ese sentido. La música de Derby Motoreta’s Burrito Kachimba ni siquiera busca sonar mínimamente actual, y la imitación es tan fidedigna que bordea el tributo. Ya no es que las guitarras jevis suenen a lo que esperas, es que las dosis de teclados lisérgicos que incorpora el disco, por ejemplo en ‘RGTQ’, no hacen flipar demasiado, y los coqueteos con la modernidad son pocos y pasan desapercibidos, como el vocoder de ‘Somnium Igni – Pt. 2’. El sonido es viejuno y quizá sea a propósito, pero si la kinkidelia ya existió, aunque no se conociera por ese nombre, ¿qué sentido tiene hacerla exactamente igual en 2021?
Algo que deja claro ‘Hilo negro’ es que Derby Motoreta’s Burrito Kachimba no son en absoluto malos músicos ni compositores. ‘El Valle’ saca toda su artillería de percusiones y guitarras para postularse como un buen single de presentación, ‘Porselana Teeth’ añade un sabor funk que destaca en el largo, y las estructuras complejas de ‘Gitana’ y ‘Somnium Igni – Pt. 2’ dejan a la banda cierto espacio para experimentar. A Bacca, Soni, Papi, Gringo y Dandy Piranha se les percibe encantados navegando en este océano de sonidos rockeros trasnochados y psicodélicos, pero también conformes en lo que es familiar. Las melodías son 100% clásicas, pero también suenan 100% pasadísimas de rosca, como oídas mil veces, y lo mismo sucede con las guitarras jevis, los sitars, los sintetizadores y toda la instrumentación del disco en general.
La sensación de imitación que deja ‘Hilo negro’ también afecta a las letras. La frase «el rosario de la aurora se ha formado en la farola del descampao» no parece tener demasiado sentido, por ejemplo, más que el de buscar cierto elemento místico en los textos. Pero es que luego al grupo le salen unas ñoñerías que ni Pablo Alborán: «desperté sobre la serpiente del amanecer», «mi amigo me enseñó que solo hay un paso de la rabia al amor», «una luz que ciega en medio de la tempestad, si me das la mano juro que todo va a cambiar»… Escalofríos. Cuando el grupo menciona «las palabras de Guadalupe», «el sueño de un profeta», una «gitana que se amarra el pelo», «sangre que brota de las rosas» o a una «sultana que llora su soledad», te das cuenta de que estas palabras no tienen ningún significado para ellos: son un añadido estético más. Y eso es básicamente ‘Hilo negro’.
Este domingo se han celebrado en Madrid los actos conmemorativos por el Dos de Mayo, Día de la Comunidad de Madrid. Entre las personalidades que han recibido la Gran Cruz de la Orden del Dos de Mayo se encuentra Nacho Cano, que ha recibido la medalla de la cultura y ha aprovechado su participación en el evento para apoyar indirectamente la candidatura de Isabel Díaz Ayuso en las elecciones del próximo martes. Con ella delante le ha agradecido su labor por la cultura durante la pandemia, la ha llamado «valiente» varias veces y se ha quitado la banda roja para colocársela a ella «por mantener los teatros abiertos». «La mereces tú por valiente y buena presidenta», le ha dicho.
«Siempre hemos echado de menos los años 80, siempre hemos dicho que los años 80 eran los mejores, y ahora vuelve esa energía, yo la siento», ha afirmado Cano al principio de su discurso. «En este tremendo momento que hemos vivido, sobre todo en el teatro musical, con Broadway y Las Vegas cerrado, el Circo del Sol en bancarrota y con miles de personas en la calle, nuestros amigos en Australia, Nueva York o Londres me llamaban para saber qué pasaba en Madrid, cómo seguían abierto los teatros. (Les sorprendía ver a) empresarios responsables, trabajadores responsables, publico responsable. (Me preguntaban) cuál es el nombre de ese milagro, y ese milagro tiene piernas, cabeza y corazón. Y me emociono porque todas esas familias han podido seguir dando arte, cultura e ilusión, que sin eso tampoco hay vida».
Llevo un rato con el vello de punta. Esto es lo que ha pasado cuando Ayuso le ha entregado la Gran Cruz del Dos de Mayo a Nacho Cano. pic.twitter.com/XwCzozaRZD
— Ismael Sirio López Martín (@ismaelquesada) May 2, 2021
A.G. Cook es uno de los nombres que han pasado esta semana por la playlist «Ready for the Weekend» gracias a su último lanzamiento, un remix de ‘The Darkness’ con Sarah Bonito, integrante de la banda de indie pop británica Kero Kero Bonito, y Hannah Diamond, quien junto a A.G. Cook es uno de los miembros fundadores del colectivo PC Music que tanto ha contribuido a modernizar (o más bien «futurizar») el pop contemporáneo. La versión original de ‘The Darkness’ aparece en ‘Apple‘, uno de los dos discos que Cook publicó el año pasado (el otro era el álbum de 7 discos ‘7G‘).
‘The Darkness’ no era una de las canciones que destacábamos en nuestra reseña de ‘Apple’ en un primer momento, pero el remix con Sarah Bonito y Hannah Diamond mejora con creces la grabación original. Cook ha contado que es la canción de ‘Apple’ que más escribió desde la perspectiva de «componer canciones pop para otra gente», y así considera que las «melodías vocales» de ‘The Darkness’ así como la prominencia de «sonidos tipo sintetizador» en la grabación la acercan a su trabajo más pop. No obstante, asegura que no quería hacer una canción pop demasiado obvia.
El remix de ‘The Darkness’ termina por ajustar algunos tornillos sueltos que se quedaron colgados en la grabación anterior. Por un lado, Sarah Bonito y Hannah Diamond cantan mejor que A.G. Cook y poseen voces más bonitas, interesantes y moldeables y, por el otro, la producción de ‘The Darkness’ suena más refinada esta vez, depurada al máximo. El resultado es una balada de trance-pop futurista (casi) perfecta. La escuchas y piensas que este es el tipo de pop que nos deparaba el futuro, pero que ya está entre nosotros: las cantantes suenan tan mimetizadas con la producción que sus voces parecen producidas por un sintetizador de voz.
Pero ‘The Darkness’ es una canción hecha por seres humanos aunque no lo parezca, y su historia está dedicada al amor. Sarah ve su «reflejo» en el espejo y desea salir para ser «libre», pidiendo a su amante que le coja de la mano para mostrarle «el mundo que hay a mi alrededor», y Hannah se siente «triste» porque «el amor en la vida es difícil» y su persona amada está «lejos» de ella. El estribillo «cada vez que miras a los ojos» seguiría emocionando en formato acústico.
El de ‘The Darkness’ es uno de varios remixes de ‘Apple’ que Cook ha dado a conocer en las últimas semanas. Los otros dos son ‘Oh Yeah’ con Caroline Polachek y ‘Beautiful Superstar’ con EASYFUN. También existe un remix de ‘2021’ (del disco séptuple) con umru. ¿Se viene álbum de remezclas? Bienvenido sea.
Como es habitual en las ediciones de Zahara, la edición física «CD deluxe» va a otro nivel con música extra, fotos, letras, relatos y detalles que redondean el concepto. Tienden a agotarse. Si en ‘Astronauta’ nos daba un mapa astral y una foto del mismísimo Café Verbena, entre otras cosas, ahora se supera con una banda de PUTA, un manual de autoyuda y otros detalles que ya hemos comentado en la crítica de ‘PUTA’.
En este artículo nos centramos en la música que ejerce de extra en un CD 2 titulado ‘Madre’ que no se ha subido a las plataformas de streaming. Musicalmente en general se compone de versiones acústicas y demos desnudas (la mejor es la de ‘sansa’ en la línea de ‘Médulla’ de Björk), que dan lo suyo a los cientos de miles de personas que en el último año han hecho de ‘Con las ganas‘ un single 4 veces platino a estas alturas de la película, por obra y gracia de OT. Lo interesante viene cuando la artista, en el libreto, explica qué pinta cada una de estas otras 11 canciones en esta edición extra. Es ahí donde comprendemos la evolución de Zahara desde que la conocimos como cantautora hasta la artista que contemplamos hoy. El cambio no ha sido de un día para otro y han sido muchas las pistas dejadas por el camino.
Obviamente, ‘Hoy la bestia cena en casa’, una canción de denuncia y feminista de su disco anterior ‘Astronauta’, fue un precedente de ‘PUTA’, también escrita junto a Martí Perarnau IV, y por eso aparece aquí en versión reducida. Antes de eso, tuvimos entre manos un álbum llamado ‘Santa’ y de él aparece un directo que pasa de ‘Rey de reyes’ a ‘Inmaculada concepción’. Zahara explica que es un intento de hablar de su sexualidad «sin ser capaz de hablar de la libertad en primera persona».
Pese a la ausencia de maquetas de la era de un álbum que se llamó ‘La pareja tóxica’, lo más curioso de este disco se produce con una serie de grabaciones de sus primeros tiempos, en los que con un sonido tipo Ella baila sola y Christina y los Subterráneos (aunque ella se compara a sí misma con una «Shakira extraña y Bebe», teniendo en la cabeza siempre a Alanis), habla sobre feminismo en algunas canciones, pero obligándose a poner un lado amable o divertido para no espantar, algo de lo que ahora se ha despojado por completo. En esa línea están el tema ‘Ahora que te dejo’ y ‘Carreteras secundarias’.
Aunque seguramente lo que más sea recordado de este CD que al fin y al cabo solo escucharán sus fans, los compradores de la cajita deluxe, es la canción de apertura. ‘Una palabra’ es un tema que escribió con 12 años, con ciertas ideas y la voz decidida que siempre conocimos (aquí pulula entre Cecilia y Mari Trini, nada menos) y finalmente se ha alzado hoy.
Corría la primavera de 2016 cuando os hablábamos de AURORA con motivo de su álbum debut ‘All My Demons Greeting Me as a Friend‘. Entonces mencionábamos su gusto por la imaginería naturalista y mística y comparábamos su sonido con el de otros artistas como Florence + the Machine, Bat for Lashes o Lorde, sin imaginar lo que terminaría pasando con su tema de apertura, ‘Runaway’, que ni siquiera destacábamos entre los mejores del disco.
Publicada en realidad en febrero de 2015 (!!!), ‘Runaway’ está siendo uno de los mayores éxitos de 2021 gracias a que se ha viralizado en TikTok. La canción, que habla sobre el sentimiento de «volver al hogar», resiste cerca de las 20 más escuchadas en Spotify Global y es una de las nuevas entradas en la tabla de Mediatraffic, que lista las 40 canciones más exitosas en el mundo. A punto de alcanzar los 200 millones de streamings en Spotify, ‘Runaway’ promete superar muy pronto las reproducciones de ‘Into the Unknown’ para confirmarse como el mayor éxito de la carrera de AURORA, con 6 añazos de retraso. Por supuesto, AURORA ha aprovechado la situación y acaba de reeditar el single junto a una versión al piano y otra a la guitarra.
Mucho antes de que participara haciendo aullidos en la exitosa canción principal de ‘Frozen II’, interpretada en realidad por Idina Menzel, la noruega Aurora Asknes empezó a conquistar las plataformas de streaming con singles como, ejem, ‘Conqueror’ o ‘Running with the Wolves’, si bien su mayor éxito comercial hasta entonces había sido una versión de una canción semidesconocida de Oasis, ‘Half the World Away’, que había sonado en una campaña navideña británica. Ahora, AURORA por fin puede decir que una canción propia ha «conquistado» al planeta. Queda por comprobar si el éxito de ‘Runaway’ será flor de un día o si, ahora que la generación Z la ha descubierto, la tomará como una canción completamente nueva y no la dejará marchar tan pronto.
Tras dos celebrados documentales -‘Ucrania no es un burdel’, sobre el movimiento Femen, y ‘Casting JonBenet’ (Netflix), sobre el asesinato de la “reina de la belleza infantil” JonBenét Ramsey- la cineasta australiana Kitty Green debuta en el largometraje con ‘The Assistant’, un drama seco, opresivo y muy sutil sobre el acoso sexual y laboral. La película transcurre durante un día de trabajo. Una jornada larga y extenuante que sobrelleva, con tanta diligencia como tristeza, una joven asistente de un poderoso productor cinematográfico. En ningún momento se menciona a Harvey Weinstein, ni tampoco aparece. Pero no hace falta. Su pegajosa presencia impregna la película como una baba tóxica.
‘The Assistant’ está contada en voz baja, como un cuchicheo en el ascensor o en la máquina de café. Pero su discurso resuena con la fuerza de una bronca en el despacho del jefe. A través de una narración austera, con muchos silencios y miradas entre los oficinistas (apenas hay música, solo los sonidos de la oficina), y de una fotografía fría y desangelada como la luz de una fotocopiadora, la directora consigue transmitir de forma extraordinaria el estado psicológico de la protagonista (fabulosa Julia Garner) y el clima de incomodidad, resignación y complicidad con el abuso que reina en la compañía. De lo mejor estrenado este año. 8’5.
Disponible: Filmin
Palm Springs (Max Barbakow)
Otro debut notable. Los bucles temporales han dado últimamente mucho juego en la ciencia ficción (‘Looper’, ‘Al filo del mañana’), el thriller (‘Código fuente’, ‘Los cronocrímenes’) o el terror (‘Feliz día de tu muerte’ y su secuela). Pero en la comedia no tanto. Y mucho menos en la comedia romántica. La razón es que la sombra de la fundacional ‘Atrapado en el tiempo’ es demasiado alargada. La comparación siempre va a ser inevitable.
Max Barbakow es muy consciente de ello. Tanto que ‘Palm Springs’ no disimula su origen. La película es un orgulloso esqueje de la obra maestra de Harold Ramis, una ingeniosa variación (no la voy a desvelar) que funciona –sobre todo al principio- de maravilla. A partir de esa ocurrente premisa argumental, el director narra una historia de amor tan fresca y chispeante como tirarte a bomba en una piscina en el desierto, pero también tan profunda y existencialista como leerte un libro de Kierkegaard o Albert Camus tumbado en una colchoneta en esa misma piscina. Las preguntas salpican el bucle: ¿hay que luchar contra el destino o resignarse a él? 7’5.
Disponible: Filmin, Movistar, Google Play, Apple, Rakuten
Shirley (Josephine Decker)
El éxito de la serie ‘La maldición de Hill House’ (Netflix) ha puesto de actualidad la obra de Shirley Jackson, una escritora muy popular en los años cincuenta (a partir de su celebrado relato ‘La lotería’, de 1948), pero olvidada y despreciada en las décadas posteriores. Fruto de este revival son las reediciones de sus relatos y novelas por parte de la editorial Minúscula (‘La maldición de Hill House’, ‘Siempre hemos vivido en el castillo’, ‘Cuentos escogidos’), y este singular biopic producido por Martin Scorsese y dirigido por Josephine Decker, autora de una de las joyas del cine indie de 2018: ‘Madeline’s Madeline’.
Shirley es una aproximación muy libre, tanto formal (está rodada con cámara al hombro, algo inusual en un biopic) como narrativamente, a la figura de la desdichada escritora californiana; una mujer que sufría agorafobia, era adicta a la comida, el alcohol y los barbitúricos, y falleció prematuramente a los 48 años. Ambientada durante el proceso de creación de ‘Hangsaman’ (1951), la directora realiza un retrato de Jackson (estupenda Elisabeth Moss) mezclando la realidad (su relación con una estudiante que acoge en casa) y la ficción (su investigación sobre la misteriosa desaparición de una estudiante), lo biográfico y lo psicológico, lo vivido y lo imaginado, el drama conyugal y el cuento de terror gótico-doméstico a la manera de los que escribía la propia novelista. 7’5.
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Fragmentos de una mujer (Kornél Mundruczó)
Otra película producida por Scorsese, una labor con la que el director neoyorquino está alumbrando obras de gran relieve: ‘Diamantes en bruto’, ‘The Souvenir’, ‘Lazzaro feliz’… Esta vez ha apadrinado el lanzamiento internacional del húngaro Kornél Mundruczó, un autor que se ha convertido en uno de los nombres fijos del festival de Cannes en los últimos años con películas como ‘White God’ o ‘Jupiter’s Moon’. ‘Fragmentos de una mujer’ es su primera obra rodada fuera de Hungría y en inglés. Y también la primera que apenas se ha estrenado en salas, ya que la adquirió Netflix para su distribución internacional.
Mejor no saber nada del argumento ni de su impactante primera secuencia, rodada en una sola toma coreografiada con enorme virtuosismo. Pero sí decir que la película es un drama sobre la maternidad muy estilizado, doloroso e intenso como un parto, con una banda sonora fabulosa a cargo del maestro Howard Shore (hay una secuencia entera en la que su música es protagonista), y con un duelo de actrices superlativo entre la sorprendente Vanessa Kirby (ganadora en el festival de Venecia y nominada a todos los premios importantes del año) y la veterana Ellen Burstyn (‘El exorcista’, ‘Réquiem por un sueño’), injustamente olvidada en los premios. Aunque las metáforas demasiado obvias que utiliza el director desluzcan un poco el resultado final, ‘Fragmentos de una mujer’ es uno de los grandes dramones del año. 8.
Disponible: Netflix
The Mauritanian (Kevin Macdonald)
Al británico Kevin Macdonald le suelen salir mejor los documentales (‘Un día de septiembre’, ‘Tocando el vacío’, ‘Marley’, ‘Whitney’) que –salvo la excepción de ‘El último rey de Escocia’- las ficciones: ‘La legión del águila’, ‘Mi vida ahora’, ‘Black Sea’… De hecho, ‘The Mauritanian’ podía haber sido un gran documental. La historia de Mohamedou Ould Slahi, que pasó 14 años detenido (y torturado) en Guantánamo, sin cargos ni juicio, acusado de pertenecer a Al Qaeda, daba para uno. Pero Macdonald decidió hacer un drama de denuncia basado en sus memorias, ‘Diario de Guantánamo’ (Capitán Swing). Y, en contra de lo esperado, no le ha salido nada mal.
‘The Mauritanian’ sigue a rajatabla los códigos y convenciones de este tipo de películas “basadas en hechos reales”, con un arco dramático demasiado previsible y una búsqueda de la emoción a cualquier precio (con los subrayados musicales como principal arma). Sin embargo, la película se eleva por encima de sus limitaciones gracias a dos aspectos: el eficaz y muy expresivo juegos de formatos (un oxigenado panorámico para el presente y un angustioso 4:3 para los flashbacks), y el fabuloso trabajo interpretativo de su cuarteto protagonista: Shailene Woodley, Benedict Cumberbatch y, sobre todo, Tahar Rahim y Jodie Foster, a quienes se echó de menos en los Oscar. En especial a la segunda, que había ganado el Globo de Oro como mejor actriz de reparto. 7.
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Justo cuando nos preguntábamos si lo que queda de año será tan aburrido como lo ha sido hasta ahora debido a la ausencia de grandes lanzamientos internacionales (lo que incluye a Rosalía), algunos artistas empiezan a mover ficha de cara a los próximos meses. El camino hacia el segundo disco de Billie Eilish ya está en marcha, Maroon 5 acaban de anunciar un nuevo álbum cuyo título hará tilín a Carles Puigdemont y Coldplay han confirmado su regreso con un nuevo single con el que pondrán toda la carne en el asador.
‘Higher Power’ sale el próximo viernes 7 de mayo y su título parece sugerir una temática espiritual, como la que el grupo exploró en su disco anterior, pero la noticia es que la canción estará producida por Max Martin, el productor pop por excelencia de los últimos 20 años. Así lo ha contado el grupo en sus redes sociales: «Higher Power es una canción que llegó en un pequeño teclado y en la pica de un lavabo a principios de 2020. La canción ha sido producida por Max Martin, quien es una verdadera maravilla del universo».
En Facebook, Coldplay han mostrado un fragmento de ‘Higher Power’ y, si te daba en la nariz que el grupo buscara su propio ‘Blinding Lights’ juntándose con su productor principal (y con Oscar Holter, que también estará en la producción), estás 100% en lo cierto: ‘Higher Power’ será un tema de power pop y synth-pop exactamente en la estela de lo que ofrecía ‘Blinding Lights’, y por tanto inspiradísima en los 80 de ‘Footloose’ y temas similares. Sonará lo suficientemente familiar como para que te recuerde a mil cosas, y lo suficientemente nueva como para que no puedas nombrar una en concreto.
Marta Movidas ha publicado uno de los discos de pop independiente más curiosos de lo que llevamos de año, con influencias tan variadas como el pop-punk, la new wave o el pop japonés. Especialmente sorprendente es el tema con que el disco se abre, ‘Por favor, no difundas las fotos íntimas que te mando solo a ti’, y que además de título tan singular, se construye con referencias a canciones infantiles como ‘El corro de la patata’ y ‘El patio de mi casa’. Es nuestra «Canción del Día» y Marta Movidas nos ha respondido un par de cuestiones sobre ella.
¿Qué nos puedes contar sobre la creación de ‘Por favor, no difundas las fotos íntimas que te mando solo a ti’? ¿Por qué decidiste empezar el disco por ahí? Y titularla así…
La verdad es que no soy una persona que se tome mucho en serio a sí misma, ¿sabes? Pero en realidad el disco tiene un corte bastante emocional, me abro mucho y cuento muchas movidas de una forma muy sincera. Pensé que si lo ordenaba de tal modo que la primera canción tuviera una rima tan tonta como es «paja» con «navaja», y el toque irónico que puede tener ese tema, le quitaría hierro al asunto. El título se lo puse pensando en un novio que tuve que hacía exactamente lo que cuenta, entre otras perlitas más, aunque para mí el topic es lo de menos. Realmente la compuse en un momento de mi vida donde investigué mucho sobre categorizaciones musicales, y la canción es una forma graciosa de mezclar los dos universos contrapuestos que establecemos siempre: la música de tradición escrita (la danza húngara de Brahms) y la música de tradición oral (‘El patio de mi casa’).
La canción tiene esas referencias a ‘El patio de mi casa’ o el ‘Corro de la Patata’, pero con un punto «perverted». ¿Cómo surgieron esas partes? ¿Era tu idea contraponer estas 2 cosas, la inocencia y el sexo?
Creo que, lo quiera o no, es mi sino. Además de ser una pava, también tengo un aspecto físico bastante infantil, y en los entornos sociales disfruto más cuando escucho que cuando hablo. Eso hace que no me suelan tomar muy en serio, ¿sabes? He tenido varios grupos de música con chicos, y en todos ellos hasta que empecé a tocar con la clari me trataban como si yo fuera gilipollas.
De vez en cuando sigue viniendo algún pobre diablo a explicarme la música como si yo no estuviera acabando el doctorado, etc. Al principio me frustraba un poco, pero luego me leí un libro (‘The sex revolts: gender, rebellion, and rock and roll’) en el que hablan de «mecanismos de subversión de las mujeres en la musica», bastante interesante, y empecé a jugar con eso. Hace poco leí a alguien decir que no hay nada más inteligente que performar ser una rubia tonta, y creo que tiene razón.
Por alguna razón la canción me ha recordado a ‘Las niñas’, la peli que ganó en los Goya, pues en ella salen canciones de patio de colegio un tanto tóxicas, como la de «soy capitán de un barco inglés y en cada puerto tengo una mujer». ¿Has visto la peli? ¿Alguna relación o alguna opinión sobre el machismo inherente en muchas de esas canciones populares?
No he visto la peli (la verdad es que no soy una persona especialmente cinéfila) pero sí que quiero verla. Creo que el machismo es inherente a cualquier manifestación cultural de una sociedad machista, no sé si me explico. Es normal (no estoy diciendo que esté bien) que el folclore sea machista, como cualquier género musical o ninguno en sí mismo, y más todavía cuando es una manifestación de una época pasada.
Luego está el enfoque que le demos cada uno, creo. Porque la parte que pillo yo de ‘El Patio de mi Casa’ más que machista me parece lo contrario, y luego está la canción esa de «yo no soy bonita, ni lo quiero ser, yo pago dinero como otra mujer», por ponerte un ejemplo que se me acaba de ocurrir. Sí que creo que por razones obvias el capital cultural global es eminentemente machista, pero también creo que hay muchas cosas que dependen más de la percepción que de la creación, y la significación colectiva que se le dé a un producto. La que sí que vi de los Goya es ‘Akelarre‘, y me puto flipó.
Fangoria mantienen en el número 1 de lo más votado de JNSP con ‘Momentismo absoluto’, que como os comentamos la semana pasada es el 5º top 1 del dúo en nuestro humilde top.
Esta semana encontramos solamente entradas en la zona baja de la tabla y son mayoritariamente underground, con alguna excepción. Están la cantante de R&B Tirzah y London Grammar, que han sido número 1 recientemente en Reino Unido con su tercer disco, además del dúo de pop Aly & AJ, pero es ocasión de descubrir revelaciones como los japoneses Still Dreams o el nuevo proyecto de Ortiga. De manera poética, el top 40 es uno de los movimientos del disco de Floating Points con Pharoah Sanders.
Noel Gallagher ha sorprendido esta semana con el anuncio de un recopilatorio de grandes éxitos llamado ‘Back The Way We Came: Vol 1 (2011-2021)’. Y digo sorpresa por varias razones. En primer lugar, Oasis nunca llegaron a publicar un recopilatorio digno: la secuencia y selección de canciones de ‘Stop the Clocks’ fue un absoluto despropósito, con algo llamado ‘Lyla’ como pista 4, ‘Supersonic’ relegada a la pista 12, ‘Don’t Look Back in Anger’ cerrando, sin ‘Stand By Me’. Un disco que no les hacía nada de justicia y que evitar. Después, ‘Time Flies’ fue otra sucesión de «hit & miss», en ese caso dejando fuera su obra maestra ‘Slide Away’ y la mismísima ‘Champagne Supernova’. Ni en un caso ni en otro se entendió nada.
En segundo, lo en desuso que han quedado los recopilatorios en la era playlist. En tercero, que no sale por Navidad sino el 11 de junio. Y en cuarto… ¿da para «greatest hits» la discografía de su último proyecto Noel Gallagher’s High Flying Birds?
Sobre esto se puede debatir por supuesto: la discografía de Noel en solitario no está mal, pero en el mejor de los casos se compone de tan sólo 3 discos, por lo que es bastante gracioso que su recopilatorio sea nada menos que triple, sumando un CD 3 con acústicos y remixes, a los que últimamente tanto se ha apegado en su faceta electrónica. En realidad, sus canciones más conocidas en solitario (‘The Dying of the Light’, ‘In The Heat Of The Moment’…) estarán contenidas en el CD 1, mientras el CD 2 concentrará su recién descubierta era electrónica que recuerda a sus colaboraciones en los 90 con Chemical Brothers y ha desarrollado después con David Holmes y en solitario. Ahí encontramos temas de EP’s y singles sueltos.
También hay un par de canciones inéditas, la primera de las cuales se llama ‘We’re On Our Way Now’, ha salido ya, referencia el clásico de Oasis ‘Cast no Shadow’ y es una aceptable balada de neo-soul.
Un resumen de las diferentes caras de Noel, que han sido bien acogidas especialmente en Reino Unido, donde sus 3 discos han sido multiplatino, platino y disco de oro, respectivamente, suponemos que para consolidar su marca en solitario tras esta pandemia sin conciertos.
Disco 1
01 Everybody’s On The Run
02 The Death Of You And Me
03 AKA … What A Life!
04 If I Had A Gun…
05 In The Heat Of The Moment
06 Riverman
07 Lock All The Doors
08 The Dying Of The Light
09 Ballad Of The Mighty I
10 We’re On Our Way Now
Disco 2
01 Black Star Dancing
02 Holy Mountain (Remastered)
03 A Dream Is All I Need To Get By
04 This Is The Place
05 It’s A Beautiful World
06 Blue Moon Rising
07 Dead In The Water (Live At RTÉ 2FM Studios, Dublin)
08 Flying On The Ground
Bonus Disc
01 It’s A Beautiful World (Instrumental)
02 If I Had A Gun … (Acoustic Version)
03 Black Star Dancing (Skeleton Key Remix)
04 Black Star Dancing (12” Mix Instrumental)
05 The Man Who Built The Moon (Acoustic Version)
06 International Magic (Demo)
07 Blue Moon Rising (Sons Of The Desert Remix)
08 The Dying Of The Light (Acoustic Version)
09 This Is The Place (Skeleton Key Remix)
10 This Is The Place (Instrumental)
11 Black Star Dancing (The Reflex Revision)
12 Be Careful What You Wish For (Instrumental)
Anitta publica hoy un nuevo single llamado ‘Girl from Rio’ que, como su propio nombre indica, presenta influencias de la bossa nova tradicional de Brasil, su país de origen, si bien filtrada por la vía del trap americano de moda. La canción utiliza la misma melodía de ‘The Girl from Ipanema‘ y acredita como autores únicos a Antônio Carlos Jobim y a Vinícius de Moraes, ambos fallecidos desde hace décadas. Curiosamente, ni en Tidal ni en Spotify aparece el nombre del autor de la letra de ‘Girls from Rio’, que es original y está escrita en inglés. Genius sí acredita, entre los autores, a la británica RAYE, además de a Anitta. El productor es Stargate.
El concepto de ‘Girls from Rio’ es el mismo que el de ‘I Like It‘ de Cardi B, J Balvin y Bad Bunny, que sampleaba ‘I Like It Like That (A Mi Me Gusta Asi)’ de Pete Rodriguez sobre una base de trap-pop y fue un éxito global. De hecho, los componentes de ‘Girls from Rio’ encajan sorprendentemente bien y la canción termina resultando más pegadiza de lo que esperas. En la letra, Anitta canta que en Río de Janeiro las chicas no son modelos sino mujeres con «curvas», recuerda que le ha salido un hermanastro de la nada (esto es una historia cierta) y dice que es una chica «de la favela». También hay una mención a su éxito ‘Vai malandra’, de 2017.
El vídeo de ‘Girl from Rio’ es una estampa de donde probablemente te gustaría estar, en una playa de Río de Janeiro, en verano, sin mascarillas y tomando el sol mientras te zampas una buena ensalada abierta de piernas. También hay referencias a la moda de los años 50 y 60, alternando pasado y futuro, como la canción.
«Siento que se han acostumbrado a escuchar nuestra historia / Ya no les importa, no tiene ningún valor (…) Ahora lloramos a escondidas / cuando la hostia que recibimos no es el cuerpo de Dios». En la era de la sobreinformación, cuando los «trending topics» duran un par de horas, aterra que olvidemos ciertas cosas demasiado rápido, que la peor atrocidad que podamos leer nos dé igual, que nos inmunicemos respecto al dolor ajeno. La pandemia es una muestra de ello, y también el movimiento #MeToo, que parece haber pasado a segundo plano en el último año, después de haber destapado millones de casos de acoso, abuso y maltrato a nuestras amigas, compañeras, hermanas y madres. Ese texto, uno de los que podemos encontrar en la caja deluxe de ‘PUTA’ de Zahara, viene -como el resto del disco- para poner en valor todas las historias porque todas importan. Y de qué manera lo hace.
Tener esta espectacular edición en la mano, con su banda de «Miss PUTA», sus textos, sus explicaciones, sus fotos en tetas y «sola y borracha», y sus letras, tres de ellas conformando un «pequeño manual de autoayuda para esta vida», pone sobre la mesa que ‘PUTA’ no es un disco. Es un relato completamente descarnado que desgraciadamente representa el de millones de mujeres. Es un retrato de una sociedad heteropatriarcal cuyo grado de putrefacción no imaginábamos. Es un exorcismo de fantasmas que nadie jamás debió ver. Y, desgraciadamente, historia de este país, y del mundo.
El primer single ‘MERICHANE’ va directo a la yugular con 4 estrofas asfixiantes -Zahara incluso jadea en una de ellas- siendo la última ya casi insoportable, por eso; revelando verso a verso el retrato de una mujer que ha tenido una vida sexual y de pareja completamente infeliz. Pasa por «Urgencias, acariciando el límite», entre episodios de bulimia, crisis de fe, paternalismo en el mundo laboral y una inseguridad que marca de por vida. ¿Quién no ha acelerado el paso fingiendo que hablaba con su hermano? En ‘PUTA’ la canción aparece precedida por ‘flotante’, una composición dividida en dos en la que la cantante pide perdón a los hombres con los que no ha podido mantener una relación normal, pasando a explicar por qué. Después, ‘MERICHANE’ es sucedida por ‘canción de muerte y salvación‘, que toca fondo hasta el punto de bordear la muerte («ojalá haberse dormido en aquella bañera»), y ahonda en el origen del problema, un abuso infantil («lo que había entre las piernas solo causaba dolor y problemas (…) te quedaste a vivir en la cárcel más cercana, la habías construido tú con los restos que quedaban de tu infancia»).
Son también muy duras las letras de ‘sansa’, que narra un maltrato psicológico de manera descarnada y sin disfraces («de todos los hombres que me han maltratado, tú que no me has tocado has sido el único que me ha matado»); y ‘TAYLOR‘ que, inspirada por el visionado de un documental de Taylor Swift, se convierte en una descorazonadora revelación de falta de autoestima y amor por una misma, una desolada llamada de socorro, y una sesión de terapia: ¿qué nos lleva a «ser yonkis del cariño ajeno», a «odiar» tanto, a sentir que «el amor no tiene sentido»? Es muy excepcional que una composición tenga una segunda estrofa más devastadora que la de apertura, y por eso la canción termina haciendo tanta pupa: como en ‘MERICHANE’, cada línea contiene más dolor que la anterior. No es de extrañar que, entre todo esto, Zahara necesitara un descanso, y se pusiese a escribir en «modo funcionaria» una canción hedonista ideada una Nochevieja en Berlín, ‘berlin U5‘, que ha situado justo en el centro del disco para aliviar(se ella misma), y que termina encajando porque su poso es agridulce, hablando del fin del mundo y el de la llama de un amor.
Por si todo lo contenido en ‘PUTA’ no fuera lo suficientemente relevante para nuestra sociedad, la música no es un mero acompañamiento ni tampoco un ejercicio rococó de emociones orquestadas: ha sido desarrollada para amoldarse a este relato por Zahara junto a su escudero en este caso, Martí Perarnau IV, más conocido como «Mucho» y compañero en el dúo _juno, cuyo desarrollo electrónico y experimental parece decisivo para el acabado de ‘PUTA’. El disco ha sido elaborado con las condiciones técnicas e instrumentos que permitía la pandemia y su resultado parece por tanto un accidente, pero difícilmente estas canciones hubieran podido encontrar un abrigo más adecuado: ‘TAYLOR’ coquetea con el ambient y la indietrónica, casi pareciendo una canción de caja de música en contraste con su terrible texto, paradójicamente realzando la desolación ante la pérdida absoluta y definitiva de la inocencia. El bombo que va emergiendo podría representar cada bofetada recibida en el camino. ‘sansa’ es extrañamente preciosista, angelical en el trato de voces, siguiendo la baza del contraste. ‘negronis y martinis’, que trata de conocer el propio cuerpo tras una metáfora trabajada en terapia, sigue una línea similar. ‘canción de muerte y salvación’ juega con el «spoken word» y los beats industriales… y mención aparte merece lo de ‘joker’ y ‘Ramona’, las dos canciones más arriesgadas que jamás haya grabado la autora de ‘La pareja tóxica‘.
‘Ramona’ es la primera canción que escribió para el disco, un cúmulo de sensaciones en directo sobre el abandono de un hogar, un matrimonio que se acaba y la primera vez que te atreves a enfrentarte a alguien que te ha puesto a caldo, en este caso una portera; y ‘joker’ es, de manera hilarante, un grito contra un «Cayetano«, a una cacerolada entregado, en plena pandemia. Zahara concluye, de manera irónica, que tal histérico no debe de quererse absolutamente nada a sí mismo, y se pone a gritarle por la ventana, como si haber ido a terapia consistiera en aleccionar a los demás. Dejando de lado por ahora que solo esta artista podría poner en un disco con tamaño mensaje tal nota de humor político, con mención a los «putos rojos antisistema»; ‘Ramona’ es un deslavazado «spoken word» que coquetea con el rap una vez que Zahara se ha quitado el miedo a parecer «Antonio Resines en los Goya» (sic), con su estructura particular, de la rabia a la calma final. Y ‘joker’ resulta la canción más bruta y radical del disco, un festival de beats sucios, graves, distorsiones y palabras mal acentuadas que recuerdan a la Björk más disonante.
El álbum escoge desembocar en una orilla ligeramente más amable, una copla llamada ‘Dolores’ formada con frases de coplas tradicionales, enarbolando un relato sobre la libertad, dedicado a las mujeres que han sido importantes en la carrera de Zahara. La artista lo llama su «Sagrada Familia particular» por la cantidad de capas, efectos e ideas que contiene; pero es ‘PUTA’ la obra que podríamos considerar como tal por el modo en que está construida. Un laberinto de pasillos interconectados, como el que une ‘MERICHANE’ con ‘canción de muerte y salvación’, el que une la letra de ‘Médula’ con la letra de ‘joker’ o el que nos lleva de ‘joker’ a ‘Ramona’ y ‘MERICHANE’ otra vez, y vuelta a empezar.
Funcionen más o menos en el desarrollo del disco algunas frases y «rapeados» en ‘Ramona’, que -eso sí- merecería ya solo la pena por ese grito doblado de «¡PUTA!»; y ‘joker’, pues además no sé si tiene mucho sentido apuntar que los momentos hermosos del disco (‘TAYLOR’, ‘sansa’, «negronis») son mejores, en un álbum precisamente llamado a incomodar, a mostrar lo feo; hay algo que trasciende todo esto. Cada crítico musical -casi todos somos tíos- y cada fan puede tener su favorita, pero de manera muy obvia, ‘PUTA’ es el disco más relevante y desangrado sobre el movimiento #MeToo que puede venir a la cabeza. O al menos uno de ellos, pues es importante subrayar que esto no va de apuntar que empezábamos a llamar «himnos de empoderamiento» a cualquier cosa, o de hacer de menos otros nombres femeninos. Al contrario, este disco va de recordarnos que todas las voces son importantes y que como sociedad estamos obligados a observar y denunciar qué caso contiene cada una de las canciones de cada artista: qué pasa en nuestros portales, qué no se cuenta en nuestros hilos de WhatsApp y en qué década de qué siglo dejará de ser necesario comprobar que una mujer ha llegado sana y salva a casa cuando ha marchado sola después de una fiesta.
‘PUTA’ tiene su cometido bien claro, y contiene un mensaje más. Zahara no ha dejado de repetir en las entrevistas y habla de ello en el primer texto que viene en la mencionada caja deluxe: este disco (esta obra maestra) no es «gracias a lo que le ha pasado», sino más bien «a pesar de». «Bajo ningún concepto me siento agradecida por lo que me pasó. A ninguno de ellos dedico estas canciones», dice el texto. «Sansa me dijo que cada impacto la había hecho más fuerte. Cómo es posible si yo a tu lado siento más cerca la muerte», dice la letra de ‘sansa’. Quienes hoy tenemos esta excepcional obra entre las manos, soñamos con un día, dentro de unos años -ojalá que pocos-, en que Zahara y cualquier mujer que se vea representada en ‘PUTA’, se encuentre esta caja de terciopelo en una estantería, la abra, y vea en ella un dibujo de un pasado inverosímil, tan remoto que a duras penas haya parecido existir.
Billie Eilish ha estrenado el tercer single de su disco ‘Happier than Ever’, que se publica el 30 de julio y del que se han conocido previamente otras canciones como ‘My Future‘ y ‘Therefore I Am‘. La nueva canción recibe el nombre de ‘Your Power’, hoy la «Canción Del Día».
Se trata de una canción acústica, de campo, con los ligeros toques electrónicos habituales de su hermano Finneas; pocos en este caso, dejando respirar la melodía y el carácter bucólico de la producción. Justo lo contrario de lo que podemos ver en el vídeo estrenado de manera simultánea, que ha sido grabado en un paraje desértico acorde, y donde la protagonista es una serpiente que va aprisionando a Billie Eilish.
Billie Eilish ha explicado que esta canción va de las «diferentes situaciones que todos hemos presenciado o experimentado sobre abuso de poder». «Espero que esta pueda inspiraros a cambiar», indica, mientras la letra reincide en la idea de manera sencilla, revelando quizá que el trasfondo es una relación tóxica: «Ella dijo que eras un héroe e hiciste ese papel / pero la destrozaste en un año, no hagas como si hubiera sido difícil».
Más adelante, la letra de ‘Your Power’ sugiere que efectivamente se trata de una canción muy personal, dedicada a una relación con el rapero 7:AMP (Brandon Adams) con el que Billie salió cuando él tenía 22 años y ella 16. La letra incluye una posible referencia a esta circunstancia: «¿solo te sentirás mal cuando anulen tu contrato»? 7:AMP aparece en el documental ‘The World’s A Little Blurry‘.
Kings of Convenience, el querido dúo de folk-pop compuesto por los noruegos Erlend Øye y Eirik Glambek Bøe, han anunciado su primer disco en 12 años. ‘Peace or Love’ sale el 18 de junio y, efectivamente, es el primer trabajo largo de Kings of Convenience desde que, en 2009, editaran el estupendo ‘Declaration of Dependence‘. Ya entonces se les había echado de menos porque su anterior disco, ‘Riot on an Empty Street’, databa de 2004. El primero, ‘Quiet is the New Loud’, salió en 2001 y el pasado mes de enero cumplió 20 años de vida.
El primer avance de ‘Peace or Love’ es ‘Rocky Trail’, según la nota de prensa oficial “otra clásica composición de Eirik que se escapa a la estructura estrofa-estribillo-estrofa” y un tema que es «pop, pero no como el que conocemos”. El tema, de ritmo cercano a la bossa nova y decorado con violines y percusiones tipo vibráfono, habla sobre atreverse a decir las cosas que no se han dicho y sobre echar una mano a quien lo está pasando mal: «quizá me podrías haber dicho que había un mundo en tus hombros del que necesitabas deshacerte, quizá podía haberte ayudado con eso, el peso no es fácil de llevar, pero nunca sabes».
Sobre el disco, se explica que «‘Peace or Love’ es el sonido de dos viejos amigos explorando la última fase de sus vidas juntos, para encontrar nuevas maneras de captar la escurridiza magia». Ha sido grabado «a lo largo de 5 años en diferentes ciudades y suena tan fresco como la primavera: 11 canciones sobre la vida y el amor con la seductora belleza, la pureza y la claridad emocional que cabe esperar de Kings of Convenience».
El regreso de Kings of Convenience llega con el anuncio de una gira que arrancará en Reino Unido y que pasará por España el próximo mes de octubre. Estas son las fechas:
18 octubre, Madrid – Teatro Lope de Vega
19 octubre, Valencia – La Rambleta
21 octubre, Barcelona – L’Auditori
Maroon 5 han anunciado que su nuevo disco sale el 11 de junio. Se titula ‘JORDI’. Sí, como tu amigo catalán. No, no es una noticia de El Mundo Today. Para el grupo de Adam Levine (¿o es solo Adam Levine?), el título de su nuevo álbum es un homenaje a Jordan Feldstein, su antiguo mánager, que murió de un ataque al corazón en 2017. ‘Memories’, el reciente éxito de Maroon 5, estaba dedicado a él. Claro que, para el público español y catalán de Maroon 5, el título de su nuevo trabajo guarda un segundo significado. ¿Son Maroon 5 conscientes de que Jordi es uno de los nombres más comunes de Cataluña?
‘JORDI’ incluirá el mencionado ‘Memories’ y también ‘Nobody’s Love‘, aquel single en el que Maroon 5 pedían la legalización de la marihuana, y el reciente ‘Beautiful Mistakes‘ con Megan Thee Stallion. Este tercer tema es actualmente el 28º más escuchado en todo el mundo según la tabla de Mediatraffic, es número 32 en el chart global de Spotify y está siendo un hit modesto para Maroon 5 y Megan en Estados Unidos, donde acaba de subir al número 22. En Reino Unido se ha quedado en el 54, si bien subiendo desde el 66. En otras palabras, ‘Beautiful Mistakes’ no está siendo el éxito que acostumbran últimamente sus dos partes involucradas, pero tampoco el flopazo del siglo.
Según la nota de prensa oficial, ‘JORDI’ será el sucesor del «aclamado» ‘Red Pill Blues‘, que en realidad fue muy poco aclamado, como demuestra su media de 53 sobre 100 en Metacritic: en realidad no gustó nada de nada, al menos a la crítica (¿no habría sido más fácil decir «exitoso»?). El hit de aquella era fue por supuesto ‘Girl Like You’ con Cardi B, desgraciadamente uno de los mayores éxitos de 2018 y otro hit para Maroon 5 que nadie vio venir. Curiosamente, el título de ‘Red Pill Blues’ también dio que hablar en su momento aunque por otras razones.
Hoy 30 de abril sale ‘PUTA’, el esperado nuevo disco de Zahara, sobre el que hemos tenido oportunidad de hablar con su autora y que reseñaremos en unas horas. También ve la luz el nuevo disco de remixes de Róisín Murphy basado en ‘Róisín Machine’, uno de los 10 mejores discos de 2020 para la redacción de JENESAISPOP.
Por otro lado, dos queridas bandas del pop británico, Teenage Fanclub y The Coral, publican sus respectivos nuevos trabajos, girl in red y Julia Michaels sus cacareados debuts y DJ Khaled un álbum sorpresa que incluye mil colaboraciones estelares de Cardi B, Justin Bieber, Megan Thee Stallion, Post Malone, Drake o Justin Timberlake (pero no la de Beyoncé que se rumoreaba).
Otros artistas que lanzan disco hoy son Birdy, Julia Stone (con portada de Filip Ćustić), Sufjan Stevens (el de «celebraciones»), Robe de Extremoduro, Flying Lotus (la banda sonora del nuevo anime de Netflix ‘Yosuke’), Royal Blood (el primero en 7 años, solo el tercero de su carrera) o Malmo 040. También sale un split de Burial y Blackdown.
Entre los singles que ya puedes escuchar en la playlist de novedades «Ready for the Weekend», a destacar el nuevo de Billie Eilish, que hemos reseñado en portada. Además, Jessie Ware ha avanzado la reedición de su excelente último disco, Bizarrap lo ha vuelto a petar con Snow tha Product, y WILLOW ha presentado single pop-punk con Travis Barker de Blink-182.
Este viernes salen también nuevos singles de Ladilla Rusa, Fuel Fandango con Mala Rodríguez, The Kid LAROI con Miley Cyrus, Noel Gallagher’s High Flying Birds, Bomba Estéreo, Yarea, Self Esteem, Alec Benjamin, Cola Boyy con MGMT, Twenty One Pilots, The Coral, Diplo, Bebe Rexha con Lil Uzi Vert, Charli XCX (en un tema de Bladee), Afrojack con David Guetta, Leiva o el single feminista de Aitana.
Zahara da un gigante paso al frente con su nuevo disco, un álbum en el que desde su primer sencillo ‘MERICHANE’ habla del maltrato, los abusos sexuales, el acoso escolar, la bulimia y el machismo en la industria musical. Ni habiendo escuchado este tema y otros adelantos explícitos, ni sabiendo que el disco se llama ‘PUTA’, ni conociendo su portada, espero un disco tan oscuro en cuanto a sonido ni tan explícito en algunos de sus textos. Desde luego, no había sido por falta de pistas… pero parece que uno siempre va a esperar tontamente que aparezca un lado amable o un final feliz para las cosas.
‘PUTA’ como disco sobre la mujer en general y no tanto sobre sí misma ya rondaba la cabeza de la artista hacía un tiempo, pero la pandemia lo trastocó todo. Ver un documental sobre Taylor Swift en mayo de 2020 le inspiró «escribir por la noche un texto como un Quijote de largo con una copa de vino». Musicalmente, tenía en mente más bien Fiona Apple. Después, electrónica. De ese texto saldrían ideas para ‘médula’, ‘flotante’, ‘TAYLOR’, un poco de «negronis» o ‘MERICHANE’. Es ‘flotante’ el primer tema que trabaja junto a Martí Perarnau IV (Mucho), su compañero en _juno, un corte hecho a guitarrazos que luego se retuerce. «Tengo a mi hijo de lunes a jueves y en el tiempo que tengo para mí empiezo a hacer canciones compulsivamente cada semana. Me siento feliz con la canción, es un chute de adrenalina, pero estoy mal, empieza mi descenso. Abro y abro heridas».
Zahara va «soltando todo» hasta terminar de componer ‘Dolores’, «Berlín» y ‘joker’, las últimas incorporaciones al disco, en agosto. Junto a su mejor amigo, Guillermo Guerrero, al mando de los vídeos y cuestiones logísticas de su sello; Emilio Lorente, quien suele realizar los espectaculares diseños de las ediciones físicas (este incluye una banda de «MISS PUTA» además de los habituales relatos, fotos y textos); y la fotógrafa Noe Elías, va dando forma al disco que sale este viernes 30 de abril y que es nuestro «Disco de la Semana». Puede ser la quinta vez que entrevisto a Zahara, pero es la ocasión en que menos sé por dónde empezar. La conversación es intensa y dura, y en un momento a la cantante se le saltan las lágrimas mientras yo aguanto el tipo como puedo. A veces también nos da la risa, ya sabéis que Zahara nunca pierde el sentido del humor: jamás ha desprendido un halo apesadumbrado. «El llanto libera hormonas», me dice, aunque los dos sabemos que no hay nada que justificar. Foto: Sharon López.
¿Qué tal estás? Dame la versión larga…
Tengo un poco de mejunje… Por un lado, todo el proceso ha sido muy intenso y en muy poco periodo de tiempo para lo que yo soy, que tardo 4 años en imaginar, desarrollar, grabar… y este está hecho en menos de un año. Siento mucha felicidad de haberlo soltado todo, me siento muy liberada porque me he quitado una cosa que había pesado sobre mí: cada vez que alguien me decía algo bueno, yo sentía que era una farsa que alguien podía descubrir en cualquier momento, que todo estaba mal. En ese sentido estoy súper feliz. Llego a los sitios y me dicen: «qué fuerte todo lo que le ha pasado a esta muchacha» (risas), pero no hay condescendencia, ni paternalismo. Siento que no tengo que ocultar nada y eso me da mucha tranquilidad. Hablo de muchas cosas, pero lo he tratado tanto con mi psicóloga que lo llevo bien: cuento hasta donde yo quiero y siento que tengo el control de lo que estoy diciendo. Y por otro lado, tengo el pudor de los días previos, de decir: «Mari Carmen, ¿qué has hecho?» (risas) Es que tampoco he mostrado lo gordo del disco: ‘Ramona’, ‘joker’, ‘sansa’… Cuando digo lo «gordo» no es como «lo mejor del disco», sino para mí donde he ahondado más, o lo que menos se espera de mí. Son más jevis que todo lo que he mostrado, aunque no vayan a ser las más populares. Ahí van a ver lo turbio de verdad…
‘MERICHANE’ es bastante turbia…
Pero cuando la escribí, sabía que iba a ser la primera que mostrara porque sintetiza todo lo que quiero contar. Al haber sido la primera, aunque sea dura, tiene cierta amabilidad musicalmente. El estribillo se viene abajo pero tiene un estribillo, en forma es más clásica.
Has mencionado a tu psicóloga, ¿se puede afrontar esta promo, este disco, este proyecto, sin terapia?
Yo creo que no. El confinamiento me llevó a deprimirme tanto que afloraron cosas que estaban destrozadas desde hacía décadas, pero yo ya llevaba un año con mi psicóloga… como «pelando cables». Sentía que en vez de poros y piel tenía cables pelados, con filamentos tan expuestos que, a cualquier roce, todo iba a salir ardiendo. El problema en mi vida es que he evitado enfrentarme a problemas directamente porque no estaba preparada. Al tener que parar obligatoriamente por el confinamiento tenía que estar en mi casa por mucho que no quisiera. Un bolo me habría hecho olvidarme, pero es que no había otra. No había nada a mi alrededor, no quería tocar, ni limpiar, ni hacer yoga, ni ver series… Solo me quedaba estar compadeciéndome de mí misma o tomar las riendas. No quise, pero llegó un momento en que estaba tan abajo que no me quedaba otra que reaccionar.
“He tratado tanto con mi psicóloga que lo llevo bien: cuento hasta donde quiero y siento que tengo el control de lo que estoy diciendo”
En el disco hay frases que parecen proceder de una terapia (NdE: asiente), como en ‘sansa’ «yo no soy mejor porque tú me humillaras» o «lo que me ha hecho más fuerte es alejarme de ti».
Sí, pero esas dos son mías. ‘negronis y martinis’, en la que hablo de mi cuerpo como un árbol, sí es una metáfora recurrente que hemos tenido en las sesiones. Una psicóloga no te dice qué hacer o sentir, ella te escucha y tú sacas las conclusiones. Me han dicho mucho: «¡qué guay, mira la mujer en que te has convertido! ¡has hecho este disco gracias a lo que te ha pasado!». No, perdona, tío, no he hecho este disco gracias a lo que me ha pasado: intento ser buena persona a pesar de lo que me ha pasado. He hecho este disco gracias a que he tenido una familia que me ha inculcado la música como forma de refugiarme, a una psicóloga maravillosa y a que tengo amigos que me han acompañado. Pero que una persona me maltratara en mi vida no me ha hecho mejor persona. De hecho, lo raro es que no te vuelvas mucho peor persona, porque tendemos a proyectar lo que vivimos. Salen casos de niños que han sufrido abusos y luego son maltratadores. Cuando en ‘MERICHANE’ digo «jodiendo la vida a un extraño» es la parte en que reconozco que intentaba fastidiar a todos los tíos con los que me encontraba. Tenía sexo con ellos, no me importaban absolutamente nada y si podía, porque tenían pareja, dejar rastros míos que pudieran llevar a una discusión, mejor.
“No he hecho este disco gracias a lo que me ha pasado: intento ser buena persona a pesar de lo que me ha pasado”
Has hablado de un abuso sexual infantil en El País… ¿crees que el abuso sexual puede ser la causa de cómo se ha desarrollado tu vida? Está siendo muy visible el caso de James Rhodes con la ley «James Rhodes» y Dolores O’Riordan concedió una entrevista devastadora en que relacionaba un abuso sexual infantil con su bipolaridad.
Una de las cosas que he estudiado y he leído en libros, es que te disocias al sufrir un abuso. Huyes de ahí mentalmente. Hay mujeres, hombres, niños… que lo olvidan, tienen como 2 carriles en su vida y nunca se cruzan. Me cuadra que alguien sea bipolar o de todo, por eso. A mí me condicionó muchísimo mi personalidad. El sexo es algo que has de descubrir únicamente cuando quieres y con alguien que quiere, a la velocidad que tú quieres. Si tu primer encuentro sexual es sin tú querer, sin tú saber lo que está pasando, y sin entender lo que es el sexo, se entiende cómo luego todas tus relaciones sexuales van a estar basadas en eso. No es como cuando con 14 o 15 años, te morreas con uno y te toca una teta. A lo mejor no sabías si te gustaba eso, pero era un descubrimiento entre tú y un niño que te gustaba. Pero si eres más pequeña y no sabes ni lo que es tu cuerpo, la primera vez que alguien toca algo tuyo sin que tú quieras, obviamente marca todo.
«El sexo es algo que has de descubrir únicamente cuando quieres y con alguien que quiere, a la velocidad que tú quieres»
Una cosa que me sucedía después, cuando tuve un novio que me maltrataba, es que era incapaz de pararlo. Se crea una pescadilla que se muerde la cola. Porque pienso: «tengo que decirle que no, pero no puedo porque no sé». Entonces, vuelve a pasarme, y te justificas en tu propia incapacidad. En lugar de entenderla para decir: «voy a enfrentarme a ello, y si no se lo digo a él a la cara, se lo voy a decir a alguien que me ayude», lo que haces es decir: «me lo merezco porque no lo dije la primera vez». Todo el rato justificas las cosas como algo que te mereces. Yo era insegura, y eso me generaba un caos, porque yo tenía felicidad en mi hogar, mi abuela me cantaba coplas, la otra tocaba el piano, no conozco mayor bondad que la de mi padre… Y luego encontrarme esa inseguridad fuera… Me daban miedo los niños, los hombres, los novios, ir al cole, siempre pensando que la iba a cagar.
«No quería que mis padres vieran tanto el sufrimiento que narro como la liberación que supone»
¿Cómo han llevado tus padres enfrentarse a este disco?
Les envié algunas canciones, no las más jevis. Les dije que estaba haciendo un disco en el que me daba todo igual. Ellos son amantes de la música y fans de lo que hago, ya lo sabes, lo hemos hablado en las entrevistas. Vienen a _juno y me dicen: «¡ya entiendo la electrónica!» (risas). Aquí hay cosas que no le gustan a mi padre: la portada, el vídeo de ‘canción de muerte y salvación’, que ha removido todo…. Hay algo precioso en ellos, de respeto y de preguntarse: «¿por qué nunca supimos esto?». Desde antes de mandarles la primera canción, les dije que si había hecho este disco es porque estaba en un momento en el que lo podía hacer. Que yo hubiera sufrido en mi vida no significaba que ahora estuviera sufriendo, que si lo estaba contando es porque lo necesitaba y porque era bueno para mí. Que no vieran esta canción como el sufrimiento que narra sino como la liberación que supone, como que estaba sana mentalmente, y fuerte para hacerlo. Y mi padre me dijo que menos mal que le había dicho previamente que estaba sana porque obviamente es un palo. Me dijeron que ojalá lo hubiesen sabido para ayudarme. Y yo les dije que bajo ningún concepto se sintieran nunca culpables, porque yo no quería que lo supieran, yo no quería que nadie supiera nada porque me avergonzaba, porque «era mi culpa» y no quería que nadie se enterara de que estaba rota. Me daba vergüenza. Hice un ejercicio brutal para esconderlo, y si no os enterasteis de nada, es porque lo hice bien.
Me lo pregunto a mí misma respecto a mi hijo: es muy difícil ver algo que no esperas que pase y yo creo que nadie espera que eso le pase a su hijo. Es imposible de ver, ni esperándolo. Recuerdo estar con mi novio maltratador, insultándome al teléfono, y nadie a mi alrededor se podía imaginar lo que me estaba diciendo. Yo no alzaba la voz, yo sonreía. Y luego por la noche tenía un ataque de ansiedad, llorando en la cama durante horas. Pero yo en ese momento hacía una disociación: escuchaba las cosas más bestias que me han dicho nunca, mientras sonreía rodeada de amigos o familiares.
¿En qué momento te das cuenta de que has sufrido un maltrato así?
Cuando tengo la siguiente relación, que es buena. Normal. Un chico que cuando le digo que salgo con mis amigas, no me dice qué tengo que ponerme, no me dice a qué hora tengo que volver, no me pregunta qué llevo puesto, no me dice «¿y hay chicos»?. Ni siquiera cuando me pegaba pensaba que estaba mal, sabía que no estaba bien, pero hasta ahí lo justificaba, porque le había llamado «niñato» o porque iba con escote. Justificas todo lo que te pasa. Cuando tengo este otro novio y salgo, me dice: «qué guapa vas, disfruta, pásatelo bien». Y entonces yo es cuando digo: «ah, esto es lo normal». Y ahí es donde caigo.
Durante toda mi relación de maltrato estoy deprimida y no hago ni una canción, pero no soy consciente. No me siento triste. Solo estoy sin vida. Anulada. Soy la nada. No quiero salir, no quiero estar con amigas porque siempre es un problema, me lo ahorro todo, porque mi vida es como estar en una balsa, y en cualquier momento va a caer un tormentón e intento no moverme. Cuando empiezo con otra relación, solo comparando soy capaz de verlo. La libertad solo descubres que te falta cuando la tienes. Ahora se ve muy bien con el toque de queda, que es la vida lógica en una pandemia. Pero cuando se acabe el toque de queda veremos qué es ser libre. Interiorizamos unas normas, en esa cárcel te mueves, y como te puedes mover libremente dentro de tu cárcel, crees que eres libre. Y cuando derribas barreras, ves que había campo.
«La libertad solo descubres que te falta cuando la tienes»
¿Hasta qué punto la religión ha sido para ti un organismo opresor? Está en la imaginería del disco…
No lo ha sido directamente, el párroco que me dio catequesis era maravilloso. Pero cuando era niña, era súper creyente, rezaba 3 Avemarías antes de dormirme a los 7, 8, 9, 10, 11, 12 años. No me podía dormir sin rezar porque pensé que me moría. Ya eso dice mucho de cómo tenía la cabeza. Cada día le pedía a Dios que me dejaran de pasar estas cosas o que me diera fuerza para decirle que no a las personas que me hacían daño. No lo conseguía y seguían pasándome. Al ver día tras día que me pasaban estas cosas y cada vez iba a más, yo entendía que Dios entendía que yo me merecía esto. Dios observaba mi vida y nunca intercedía. Sentía que Dios estaba de acuerdo con eso, entonces era mi culpa. Toda esta carga me viene de la religión. Cuando decía a mis padres que las de mi pandilla no eran mis amigas, nunca me dijeron: «algo habrás hecho». Me intentaron entender, nunca me hicieron sentir culpable. Pero un ser superior sí me estaba diciendo «es que no eres suficiente para el grupo, ni para el que llamáis «el de las tontas», eres tan tonta que ni en las tontas funcionas». Concluyes: «Soy una mierda de persona, obviamente». Entiendo que los textos religiosos tienen interpretaciones positivas y que lo que para mí es, no tiene que ser para otra persona, pero a mí me hizo mucho daño la interpretación que yo hice y se hizo en mi entorno.
¿Crees que hemos avanzado en el acoso escolar? ¿Qué se puede hacer?
No sé. Cuando voy a mi profesor, la única vez en mi vida juvenil que pido ayuda porque ya nadie me habla en el colegio, y unos gemelos más jóvenes que yo, que eran los únicos que me hablaban, empiezan a poner «Zahara puta» por todo el colegio; ya no puedo más. Y el profesor me dice: «tú sabrás con quién te juntas». Vuelve otra vez la carga sobre mí, «porque yo me lo merezco». Yo imagino que ahora no pasa eso. Si un niño o niña dice «me están insultando», lo último que se hace es culpar a la víctima. Pero no sé cómo se hace porque el problema es que todos somos inseguros y a veces lidiamos por exceso o por defecto. El que es agresivo es muy inseguro. No sabría qué hacer como profesora. Cuando llevo a mi hijo al cole, revivo el cole y me da pánico. Entiendo que mi hijo es muy feliz y espero no transmitirle mi pánico, pero no lo paso bien, no me gusta.
«Cada día pedía a Dios que me dejaran de pasar estas cosas. Dios observaba mi vida y nunca intercedía. Yo entendía que Dios entendía que yo me merecía esto»
¿Has tenido alguna reacción de tu pueblo, alguien que se haya dado por aludido?
No. Nadie. He recibido cosas bonitas, mensajes de adultos que estuvieron en mi infancia, amigos de mis padres, gente mayor conmocionada, que me pedían perdón por no haberme podido ayudar. Lo último que pretendo es que aquellos que me dieron el refugio se sientan mal. A una mujer que sale en el vídeo de ‘Dolores’, Esperanza, le he dicho: «tu patio y tu casa eran para mí la felicidad, íbamos a cenar contigo, recuerdo el olor del horno»… Agradezco que me escriban. Pero ningún aludido me ha escrito. Me ha escrito algún amigo joven coetáneo con el que he tenido algún tipo de relación, y esto ha sido bonito también. Pero justamente los que me han escrito no me habían hecho daño (NdE: nos da un poco la risa, por no llorar) Yo cuento todo esto y lo suelto para mí, pero no espero que me llame nadie. Ni lo quiero. No lo necesito. Me da igual. Espero que si lo leen, digan «no tengo que hacer esto en mi vida». Por si siguen. Muchos maltratadores no son conscientes de que son maltratadores. Igual que las víctimas no somos conscientes de que somos víctimas. Ojalá sirva para eso, para cambiar el patrón, pero a mí me da igual que me escriban.
Con toda la carga que hay en este disco, lo que más pena me da es escuchar la frase de ‘MERICHANE’ «he dejado de ser quien había soñado». ¿Es imposible realmente que lo consigas? ¿Qué habías soñado ser?
Lo tengo súper claro (…) ¿Sabes esos vídeos donde hay un vagón, cuando una persona intenta agredir a otra persona, y esa otra persona se levanta y no le deja que le agredan? Yo siempre he querido ser esa persona, siempre he querido tener la fuerza de decir a una persona: «¡no me toques, no lo hagas!». Y gritarlo. Y a día de hoy, si me pasara algo, todavía no sé si sería capaz de hacerlo, yo no sé si estoy en una habitación, si alguien llega e intenta abusar de mí, no sé si sería capaz de pararlo. No está en mí (…) Cuando veía ‘Inocente, Inocente’ y hacían una broma desagradable y alguien se enfadaba… yo siempre habría bajado la cabeza, intentaría ser amable. El día que en Universal me sacaron unos dildos de plástico de Rammstein, yo quería tirarle las pollas a la cabeza: «¡gilipollas, qué haces, que tengo veintipocos años! ¿Llega una tía, a una oficina cerrada y te pones a enseñarle pollas?». Quería arrojárselas. Y lo que dije fue: «jeje». Me sentía desencantada. Yo tenía respeto por esta gente y perdí ese respeto. Si no les gustan las canciones no voy a sufrir, porque vaya panda de gilipollas.
«Muchos maltratadores no son conscientes de que son maltratadores. Igual que las víctimas no somos conscientes de que somos víctimas»
A lo mejor, si no me hubiera pasado nada de esto, yo seguiría siendo una persona que no sabe decir que no. Ahora ya no lo sé, yo solo sé que era muy pequeña y que en el momento en que tuve que decir que no, no lo dije ni la segunda, ni la tercera, ni la vez un millón, eso aplicado a todo. He conseguido en mi faceta profesional rodearme de gente tan clara y tan trasparente que sí he podido ser yo misma. Mi psicóloga me pregunta por qué me cuesta hacerlo en mi vida personal, si en la vida profesional sí he podido. Ese es mi aprendizaje, siempre es más fácil aprender a montar en moto si sabes montar en bici… pero creo que es una moto demasiado grande para mí y que me voy a matar, no me atrevo. Evitas situaciones donde pueda pasarte algo: igual que cuando vas por la calle por el lado de más luz, nunca te quedas en una habitación con un tío porque no sabes si te va a pasar algo. ¿Por qué tengo que tener este miedo toda mi vida? ¿Ni con 37 años, ni con un hijo, ni con este disco?
No busco un final feliz para esta historia, pero hay ciertas frases del disco que asocio a tu pasado, como cuando dices en ‘TAYLOR’ que no crees en el amor.
En las canciones dejo que me salga la víscera. En esa canción siento un desamor brutal hacia todo, hacia mí, porque soy consciente de que no me quiero. Pero las canciones no evolucionan conmigo. Están ahí. En ‘Ramona’ me voy de mi casa y no siento nada, me enfrento a una ruptura grande y mi cuerpo no siente nada. Ahora mismo no haría esa canción así. Le diría a mi ex: «nos llevamos de puta madre, qué buen padre eres». Pero las canciones son la foto de un momento. Cuando hago ‘TAYLOR’ no puedo estar más abajo. Me quiere la gente, que guay, pero siento que lo que estoy mostrando es mentira, mi amor es mentira y os odio a todos. Lo siento como lo único que es cierto. Solo hacer la canción libera mucho y sí que creo en el amor. Aunque el amor es jodido. En el momento en que te enamoras, guay, pero tienes que estar muy despierto para no perderte en lo que el otro espera de ti. Entiendo a mis amigas solteras que no se quieren enamorar (risas) Es un movida. Es bonito pero 5 minutos. Luego hay que lidiar con las expectativas.
Pasando a hablar del sonido del disco, ¿por qué comienzas con una canción dividida en dos, como ‘flotante’?
Es esquizofrénica, un resumen perfecto del disco en 2 minutos y medio, tampoco es que dure 7. Para mí son hasta 3, incluso 4 canciones. Está todo el disco ya ahí: belleza, melodía, agresividad, grito, distorsión, sintes, cuerdas, susurro… De una manera musical y sónica es una introducción. Empieza con la frase resumen «me han enseñado muy bien a intentar ser la mejor y muy poco a saber qué quiero, o si quiero ser la mejor», y es de lo que va todo el disco. Y esta canción acaba con un «perdóname», porque yo no voy a sacar toda la mierda sin decirle a algunas personas que lo siento: «He intentado quererte bien, no he sabido, te he querido de manera egoísta, esperando algo que no era, y no es tu culpa. Te voy a explicar qué me ha pasado». Me dirijo a los hombres buenos de mi vida porque siento que no lo hice bien. Y no es justificarme, sino explicarlo: «Te pido perdón porque ojalá lo hubiese sabido hacer mejor pero era imposible que lo hiciera mejor».
Para mí era narrativamente importante dirigirme a los hombres aludidos, que no me refiero a mi ex marido, aunque hable de mi hijo. Hablo de todos, de relaciones nuevas, porque los convierto en padres porque voy con un hijo, es mi mochila. Y pido perdón. Porque aunque yo diga que me da todo igual, es mentira, lo reconozco en la primera canción. Concibo el total del disco como obra narrativa, más que musical, y ‘flotante’ es una intro, ‘MERICHANE’ es el tráiler y ya viene todo, por orden, hasta ‘Dolores’ que es, no la reconciliación, sino la exaltación de la bondad en la infancia.
Todo eso lo has acompañado de sonidos bastante radicales en producción.
Este disco se compone, produce y graba en confinamiento. Yo tengo una acústica en casa y Martí un Moog, un Juno, el ordenador y el procesador, el «procés» como lo llama él (risas). Yo compongo con guitarra, porque aún soy más rápida que con el piano, pero ‘flotante’ son guitarrazos cabreados, y le digo «aquí está la Fiona (Apple) de piano machacón». Él trabaja con eso para que se parezca sónicamente a lo que tengo en mi cabeza. En ‘MERICHANE’ sustituye mi guitarra, y yo ya veo que esto va adelante. Martí siente que estos son los sonidos del disco, porque igual que yo estoy obsesionada con el metalenguaje, él se crea normas, y lo que descubre o descubrimos juntos es que yo estoy hablando de estar destrozada. Hay una abrasión, una sensación «en tu cara», de que yo no voy a esconder nada, y él empieza a buscar adaptar esto a la música. Hay una saturación en todo el disco, un chorus en mi voz en todo el disco, canto con mucha vibración, hay mucha tensión musicalmente. Cuando podemos llegar al estudio, ya no cambiamos de instrumentos: son los que teníamos en el confinamiento.
«¿Quién va a querer cantar pudiendo rapear?»
Hay momentos de spoken word, casi raps, textos que son diálogos… sobre todo en ‘Ramona’, una canción sobre una señora que también te llama «puta», y en ‘joker’. Hay partes muy poco poéticas.
Lo sé. ‘Ramona’ es la única preconfinamiento, de cuando cambio de casa. Yo estaba haciendo _juno y tengo una idea de lo que va a ser mi disco: quiero que se llame ‘PUTA’ y que hable de las mujeres pero no de mí. Cuando me cambio de casa, me siento vulnerable y escribo todo lo que me sucede. Tal cual, no hay variación entre ese primer texto y lo que es ‘Ramona’. Me había obsesionado con el disco anterior de Kae Tempest, el que trae ‘Europe Is Lost’, y leyendo las letras tenía la sensación de que había cosas que quería hacer pero no me había atrevido. No fue tan buscado «voy a hacer esta canción y voy a recitar», lo que era para mí recitar que ahora no sé lo que es. Y no había melodía para la palabra «lasaña» (risas) Le pedí a Martí un beat y empecé a leer mi texto encima, y todo me fluía. Supero la vergüenza que me da sonar a Antonio Resines en los Goya, porque ya soy una señora mayor y soy presa de prejuicios propios y ajenos, y entonces digo que me los voy a quitar yo. Es liberador quitar la melodía, ahora entiendo a Kendrick Lamar, a La Mala, a Gata Cattana. ¿Quién va a querer cantar pudiendo rapear? Hay algo ahí que no te da la melodía. Tú en la melodía te puedes engorilar, pero no es lo mismo. Cuando digo los «DENTRO», es mi cosa favorita de la vida.
En ‘joker’ percibo algo de ‘Hoy la bestia cena en casa’, pero también está el ‘Cayetano’ de Carolina Durante. Y hay un «putos rojos antisistema» en el que vuelves a hacer canción política.
Sí, me da un poco de pena decir esto porque es como decir «ironía on» en un chiste de Twitter: tener que explicarlo le quita la gracia, pero para mí es la canción más irónica del disco, la de más humor, a pesar de ser de las más jevis.
«Imagínate la chaladura que alcancé de gritarle ya a los vecinos desde mi balcón, porque no podía soportar lo de las caceroladas»
Parece literal, hablas de alguien a quien no vendría mal un abrazo…
Este disco es un viaje de autorreconocimiento y de respeto y ahí intento jugar. De repente alcanzo una superioridad moral: ¿gracias al psicólogo, me pongo a decir a alguien lo que tiene que hacer? Es lo contrario de lo que estoy hablando. Me dirijo a un Cayetano un día que estoy escuchando caceroladas. Un Cayetano como el de Carolina Durante, que ya es como un símbolo. Es un estereotipo, no estás refiriéndote a nadie en concreto sino a una imagen, y eso es más potente que jugar con nombres políticos. La canción no va tanto de políticos sino de esa actitud de ponerte a golpear cacerolas desde las 9 a las 10 de la noche con un hospital al lado, como pasó en mi barrio. Yo estaba en mi casa y me estaba cabreando de escuchar a una persona cabreada. Entonces me digo: «si tan zen te has vuelto, cada uno tiene derecho a expresarse como quiera». Pero lo que me salía era decir: «¿!!pero tío, qué te pasa!!?». Si yo estoy cabreada porque no me quiero, este tío que está cabreado con todo el mundo, no se quiere nada. Yo le gritaba literalmente desde mi balcón: «voy a tu casa y te abrazo, tío, ¡pero quiérete!» (risas) No me oía porque estaba muy lejos, pero imagínate la chaladura que alcancé de gritarle ya a los vecinos desde mi balcón, porque no podía soportar lo de las cacerolas. Muy gracioso hacer la canción de ese momento: he tenido una vida de mierda y no he intentado cargarme a todos los hombres que han venido después… tío, pues tú mírate lo tuyo (risas).
«Berlín» podría ser una canción que queda más descolgada del concepto, ¿no?
Puede ser, pero la compongo aposta para precisamente aliviar la carga que tiene el disco, porque si no, cuando llego a ‘sansa’ no soy capaz de seguir escuchando. Es la canción más calculada, en la que más conscientemente he trabajado como funcionaria en lugar de como artista. De ponerme con ella y escuchar Dua Lipa, Georgia, Lorde, Robyn… con esta cosa de la letra de llorar porque se acaba todo. Entiendo que es necesaria para sostener el disco. Es verdad que está más suelta pero es esa cosa que yo tengo de «te cuento esto pero te bailo». Lo necesito todo. Y no es que «si no pongo «Berlín», la gente se va a morir». No: si no pongo Berlín, me voy a morir yo. Me encantó vuestra crítica, la que hizo tu compañero. Es deliberado lo de matar el tecno y que predomine el pop, porque por encima de Jon Hopkins estaba Dua Lipa, pero en directo será al revés y es 20 minutos de tralla: hemos matado a Dua Lipa.
El disco se cierra con una copla que ya has explicado que va para tus abuelas y las mujeres que te han ayudado. Te quiero preguntar más bien por el género, porque tú eres andaluza, se nos había olvidado un poco, y es tu primera incursión en este género. ¿Seguirás en el camino, ahora que tanto se lleva bucear entre nuestras raíces?
Surge de una conversación con Martí sobre hacer un disco de coplas porque mi abuela me cantaba copla y me parecía un género poco entendido y que se merece más respeto. Empiezo a engorilarme hablando de copla y Martí me dice que haga una copla. Yo no le veo sentido a cantar en este disco ‘Ojos verdes’, pero me dice: «no, que escribas tú una copla». Soy yo misma contando la historia de la copla con frases tradicionales de copla, pero sustituyendo «copla» por «mujer» parece la historia de una mujer que parece que es libre, pero se le dice que tiene que quedarse en su casa… Cuando la compongo, Martí no tiene ni idea de copla, no ha escuchado copla en su vida, pero eso es maravilloso. Yo hago una copla lo más coplera que yo sepa hacer, con sus cambios armónicos, sus tensiones musicales y cantarlo lo más coplera que pueda dentro de que yo hago pop… y él se hace su propia idea de lo que tiene que ser una copla: lo imagina con voces antiguas, orquestas, mezclando cosas del pasado, del futuro, las pasa por una cinta, grabo una armonía como ‘Because’ de los Beatles, salvando las distancias (risas), las armonías pasan por un cassette que se desafina… Me fascina porque es la canción más compleja a nivel creativo. Es mi Sagrada Familia, sale de escuchar con atención muchas coplas, leer muchas coplas, y qué bonito es no haber hecho una canción de mí pero que hable de mí. Me gusta este camino. No sé qué pasará. Tengo pendiente hacer este disco de coplas algún día, pero no sé.
«‘Dolores’ es la canción más compleja a nivel creativo. Es mi Sagrada Familia»
Este disco es un reencuentro con cosas dolorosas, pero es fascinante que luego tienes la sangre fría, el talento o el sentido como conceptualista de aunarlo a nivel narrativo, producción… además con una canción llamada ‘Taylor’ con lo que se le ha criticado a Taylor Swift ser calculadora, algo muy mal visto siendo mujer… Tienes muy claro el principio, el final, el desarrollo, lo que quiere decir. ¿Cómo lo haces?
Lo he acabado descubriendo hablando de este disco. Es mi personalidad. Con mi psicóloga siempre he intentado encontrar un equilibrio. Soy muy ordenada, o muy desordenada. O como muchísimo, o como poquísimo. O estoy con mi hijo días o escribo un montón de canciones seguidas. Euforia o letargo. Voy pasando de una cosa a otra y en el medio estoy muy poco tiempo. En este disco se plasma mi personalidad. Por un lado están los textos más viscerales con menos pudor de mi vida. A nivel musical, hay una búsqueda intuitiva de a ver dónde voy, pero con una estructura que observo. Al principio no entendía cómo era posible, pero a mi alrededor las personas se sorprenden de esa frialdad: «¿cómo tienes esto en tu cabeza?». Es el reflejo del resto de cosas de mi vida. De un control minucioso de todo. Y el directo que viene lo he llevado al siguiente nivel. Es un trabajo de orfebrería.
Noches del Botánico celebrará su 5ª Edición en el Real Jardín Botánico de la Universidad Complutense de Madrid, en un entorno seguro y con un cartel variado que va del mainstream viejuno al indie/mainstream pasando por el apoyo a artistas nuevos.
Y es que el cartel que han compartido en Instagram revela que, entre los meses de junio y julio, pasarán por este espacio lo mismo Nathy Peluso, Estrella Morente, Love of Lesbian, Fuerza Nueva, Dorian, Iván Ferreiro o Amaral; que Rosario y Ana Torroja; que Amaia, María José Llergo o DORA.
Estas dos últimas compartirán cartel, y también Lori Meyers y Anni B Sweet, y otra conocida pareja, Fangoria con Nancys Rubias. Entre los nombres internacionales, están Rufus Wainwright y Jorge Drexler, entre otros. Las entradas ya están a la venta.
‘Putu any‘ fue una de las mejores canciones de 2020. Un himno pandémico, capaz de plasmar en una melodía y un estribillo redondos todo el fastidio y desazón del confinamiento. ‘Putu any’ no forma parte, por eso, de ‘Forats negres’, el primer disco de Aida Giménez Viñas, AKA GUINEU. Y un poco de menos sí que se la echa. Pero es que tras estos «agujeros negros» hay una intención de crear un disco conceptual, y ‘Putu any’ no encajaba.
Aida Giménez explicaba en una entrevista a Enderrock: «Comencé con ‘Entre birres’, que parecía escrita por Paolo Coelho, y creo que yo misma me aburrí de intentar hacer ver que todo está bien y no lo está. No lo está y no pasa nada”. Estas palabras pueden parecer algo derrotistas, pero nada más lejos. Aida ha cambiado ese buenismo por una visión más certera e irónica, pero tierna a la vez, que refleja muy bien ese momento de primera juventud, en que ya no eres una adolescente y comienzan a cernirse, oh, las sombras de la vida adulta.
‘Forats negres’ es un manual de supervivencia construido con un armazón del pop-punk noventero, como bien dijo mi compañero Jordi Bardají: «Un poco Liz Phair, un poco Weezer, pero también apta para seguidores tanto de La La Love You como de Carolina Durante, tanto de Cariño como de Anabel Lee (también de Terrassa)». También hay ecos de otras luminarias noventeras; de Magnapop, Belly, y por supuesto, de No Doubt. No en vano, Gwen Stefani es uno de los mitos confesos de Aida. Incluso su imagen recuerda, en esa foto de portada, chula y desafiante, a la de Liz Phair o Kathleen Hanna. Y la voz de Aida, aniñada, pero con el punto de seducción y de mala hostia cuando se necesita.
Estos son, pues, ocho agujeros negros de los cuales escapar. Situaciones vitales embarazosas, sin drama pero bastante fastidiosas, recogidas con bailoteo y humor. ‘Un record’, en que parece rememorar al padre (o madre) ausente, en forma de recuerdo infantil borroso, es muy representativa del sonido noventas, con ese riff de guitarra bien cañero, pero también con un ligero toque de melancolía. La preciosa melodía de ‘Ja no t’espero’, tiene unos bonitos dejes escapistas y un estribillo que nos empuja hacia arriba. Otro himno guitarrero y dispuesto al pogo es ‘Gira-Sol’. Pero también hay tratados de romanticismo adolescente, como ‘Ciència estranya’, lo más próximo a un tiempo medio en un disco acelerado y arrebatado. ‘No va ser’ es una canción anti-romántica y empoderadora, en que ya no se añora el antiguo amor y en el que Aida se reafirma, orgullosa, en su recuperada libertad: «No va ser especial. No vam viure tantes coses» («No fue especial. No vivimos tantas cosas”). El romanticismo, pero, reaparece, en versión agridulce, en el cierre con ‘La millor part’.
Todo este entramado suena clásico y, a la vez, fresquísimo, ya que GUINEU logra que la suya no parezca música del pasado, sino absolutamente actual. Son temas que podrían haber sonado perfectamente en antros míticos de los 90… pero también en los antros de ahora (¡cuando reabran!). Son ocho canciones sencillas, de apenas tres minutos, pero llenas de empaque. Suenan frescas, pero para nada amateurs. La confección de los temas es efectiva y precisa, en base a guitarras, redobles… Viejos trucos, que en sus manos suenan nuevos. Aparte del inmenso mérito, que pasa desapercibido (señal de su buen hacer), que es lograr llevar a sus modelos norteamericanos con pasmosa facilidad al catalán.
Entre las novedades que nos traerá este viernes, un tema de Aitana de temática social. Se llama ‘Ni una más’ y en su portada, junto a un abrazo entre dos personas, una de ellas en color morado (símbolo de feminismo), se puede leer el lema: “si un abrazo duele, que sea por soltar”.
Unas horas antes de este lanzamiento, Aitana lo ha promocionado en el programa de David Broncano. La cantante dice que el tema tiene un mensaje «feminista, de igualdad, de visibilizar la inseguridad de las mujeres» cuando van por la calle, aunque recalca que el tema no pretende ser exactamente sobre feminismo sino «un trozo de feminismo» como ella lo ve. El vídeo del tema retratará ese miedo de andar por la calle sola.
También asistimos a la típica conversación del formato, entre lo irrelevante y lo divertido. Hablando de paparazzis, por ejemplo, Aitana cuenta que ya no puede hacer pis en lugares donde antes sí hacía, refiriéndose a una ruta de alpinismo que entrevistador y entrevistada compartirán. “Me da miedo hacer pis en el campo”, confiesa refiriéndose a los fotógrafos que la persiguen de vez en cuando. «Va por épocas», indica.
También cuenta Aitana que Blanca Suárez es su casera temporalmente y al final del segundo vídeo, entona una versión de ‘Shallow’ de Lady Gaga y Bradley Cooper, que ella está a punto de bordar… de no ser porque Broncano provoca que le dé la risa con su ya típica voz deliberadamente fuera de tono.
Finalmente, lo más divertido es la retahíla de regalos que el programa sugiere para la madre de Aitana con motivo del inminente Día de la Madre. Entre un cuadro de legumbres imposible, destaca un poema con versos como «le meas en la cara a la madre de Rosa» o «por ti siempre digo no, cuando me ofrecen coca».
Nathy Peluso, que continúa en la lista discos española después de 29 semanas aún rondando el top 30 con el notable ‘Calambre’, comunica las fechas de su gira de verano, anunciando que las entradas para el Palau de la Música de Barcelona este viernes 30 de abril están agotadas.
Tras la cita en Barcelona y también ya con todo vendido, el 28 de mayo será el turno de Granada (Granada Alive!), para al día siguiente viajar a Sevilla (Sevilla Alive!, día 29). En junio estará en Madrid (días 11 y 12).
A estas fechas seguirán en julio Palma de Mallorca (día 15), Festival Jardins Pedralbes de nuevo en Barcelona (día 17), Riverland Fest en Asturias (día 23), Murcia (Murcia On, día 27), Alicante (La Plaza en Vivo, día 29) y Benicàssim (Luce Benicàssim, día 30).
Ya en agosto llegará el turno de Tenerife (día 6), Las Palmas de Gran Canaria (día 7), Starlite Festival en Marbella (día 12), San Fernando (día 14), Úbeda (día 15), para terminar por el momento el día 27 en Valencia (Valencia Alive’21).
La cantante que tanta polémica levantaba con su interpretación de ‘La violetera’ en los Goya, ha comunicado en redes: “MI GENTE Q EMOCIÓN CALAMBRE TOUR es real y empieza en España ES UN SUEÑO DE ESTOS Q SE CONVIERTEN EN REALIDAD ¿SABEN ESA SENSACIÓN? Hice este disco para tocarlo en vivo, ustedes saben q en el escenario soy despiadada así que dispónganse para el azúcar y el sabor que preparé para cada persona que venga a estos rituales llevo todos los juguetes, todo el sonerito, al compás de una banda durísima y la ilusión de compartir con ustedes mi corazón ta listo para el KALAMBRE LIVE MUSIC FOR MI GENTE ESTO ACABA DE EMPEZAR”.
Macy Gray prepara nuevo álbum para este año junto a su nueva banda The California Jet Club, y el primer single ‘Thinking of You’ es una de las novedades que has podido escuchar esta semana en la playlist «Ready for the Weekend«, que cuenta ya con 4850 suscriptores. El disco de Macy Gray iba a salir originalmente en San Valentín según declaraciones de la artista a un medio americano, pero finalmente no ha sido así y su fecha de lanzamiento se desconoce por el momento.
El primer avance de este nuevo disco es un medio tiempo de R&B de corte acústico, en estilo cantautor, que cautiva por los detalles. En la letra, la artista canta sobre un amor que no se puede sacar de la cabeza. «Me gusta todo de ti, me motivas y creas mariposas en el estómago, abres puertas para mí, me tratas bien». Cuando Macy canta «estoy bebiendo y estoy pensando en ti», su coro replica «estoy pensando en ti también», y un efecto de sintetizador cósmico entra para imitar esa misma euforia. En un momento dado, el nuevo amor de Macy representa todo lo que existe a su alrededor: «veo que el mundo cambia, que es extraño, pero lo único que importa es que nos tenemos el uno al otro».
Como decimos, ‘Thinking of You’ no admite realmente influencias del pop contemporáneo, como las había en el anterior disco de Macy Gray, ‘Ruby‘, o en otros de sus trabajos, tan inspirados por el hip-hop, sino que se conforma con ser una preciosa balada atemporal en el estilo de Al Green, Minnie Riperton o el primer Michael Kiwanuka, si bien la canción desprende una serenidad que recuerda a los primeros trabajos de Corinne Bailey Rae. Por supuesto, en ‘Thinking of You’ predominan instrumentos orgánicos como la batería, la guitarra o el piano, el último de los cuales vive su pequeño momento de gloria en el puente.
En una entevista, Macy habla sobre ‘Thinking of You’, pero no entra demasiado en detalles. «Para mí, ‘Thinking of You’ trata sobre cuidar a las personas que tienes cerca. Creo que la interpretación pertenece a los oyentes y a los fans. Cuando escuchas una canción y te gusta, esta pasa a tener un significado especial para TI. Pero puede significar una cosa diferente para otra persona. Esa es la belleza del arte».
El vídeo de ‘Thinking of You’ ha sido rodado en una sola toma y está inspirado en películas como ‘Birdman’. Macy dice que este tipo de películas son sus favoritas.
El productor argentino Bizarrap lo ha petado últimamente con su sesión con Nathy Peluso, la número 36, que en Youtube supera los 200 millones de visualizaciones. Después han llegado colaboraciones con los raperos YSY A y L-Gante, en las que entre influencias del trap o la música latina, ha seguido indagando en su gusto por las bases de hip-hop agresivas. Bizarrap también ha aparecido recientemente en el disco de Duki, ‘Desde el fin del mundo’, en el tema ‘Malbec’. Por cierto, Bizarrap tiene hilo propio en los foros, donde puedes comentar todas sus novedades.
La nueva sesión de Bizarrap se ha estrenado esta noche y ha contado con la colaboración de la rapera mexicana Snow Tha Product. La artista se dio a conocer hace una década con su debut ‘Unorthodox’, editado en 2011; ha publicado una decena de mixtapes antes y después del lanzamiento de aquel disco y últimamente sus singles ‘Dale Gas’ y ‘Waste of Time’ han amasado millones de reproducciones en las plataformas de streaming. Este año, Snow Tha Product publica su segundo disco, ‘VALEMADRE’, que ha presentado con singles como ‘Confleis (No Soy Santa) o ‘Bilingüe’, pero que sigue sin fecha de lanzamiento confirmada.
Claudia Alexandra Madriz Meza es conocida por su flow espídico, del que hace gala en esta sesión que ya es número 1 de tendencias en Youtube, con 4 de millones de reproducciones en 10 horas. La rapera alterna el inglés y el español para espetar versos de empoderamiento que son un verdadero desafío para cualquiera que se los quiera aprender de memoria. Rapea que «en inglés o en español» ella lo peta y lo cierto es que su empleo del «Spanglish» está muy bien traído. Son especialmente sonoros versos como «Pop back up, esto no se acaba / Vengo con cholos en un pinche Impala / Beat yo ass, make yo bitch a piñata / Shoulda known better, I’m a michoacana».
La base de ‘Snow Tha Product: Bzrp Music Sessions, Vol 39’ -estos son los no-títulos de las canciones de Bizarrap- es parecida a la de la sesión con Nathy Peluso: los bajos gordos y distorsionados vuelven a hacer acto de presencia en esta grabación que, no obstante, incluye sorpresa final con un cambio de ritmo inesperado, que lleva el tema a la discoteca e incluso a los años 80, al hacer uso de melodías de sintetizador tipo videojuego de máquina recreativa.
Juan Joya Borja, el humorista más conocido como El Risitas, ha fallecido a los 65 años por complicaciones de la diabetes que padecía. Joya Borja ya había sido ingresado en septiembre, en el hospital de la Caridad de Sevilla, pero este miércoles ha sufrido una recaída y ha tenido que ser ingresado de urgencia en en el Hospital Virgen del Rocío, donde ha fallecido.
El Risitas es uno de los personajes humorísticos más conocidos de España desde principios del siglo, cuando apareció junto al presentador Jesús Quintero en programas de televisión como ‘El Vagamundo’, ‘Los Ratones Coloraos’, ‘El Loco de la Colina’ o ‘El Gatopardo’. Popularizó la coletilla «cuñaoooo», imitada por todos los rincones del país, y contagiaba sus ataques de risa a la audiencia, provocados por sus propios chistes o por las historias que contaba sobre su vida. «Te voy a contar una cosa que me pasó en el paro» es una de sus introducciones míticas, así como su historia sobre las veinte paelleras que se tragó el mar. Por supuesto, El Risitas era conocido por aparecer en pantalla con un único diente en la boca.
El humorista hizo sus pinitos en el cine de la mano de Santiago Segura en ‘Torrente 3: El protector dirigido’. Este ha sido una de las primeras personas en recordarle: «Su buen humor y su risa se hicieron conocidas en toda España tras sus apariciones en el programa de Jesús Quintero. Era un tipo entrañable». Y más adelante, Joya gozó de cierta popularidad internacional: llegó a protagonizar un anuncio de pizza finlandés y gracias a los montajes que creaba el público basados en sus divertidas intervenciones televisivas, se convirtió en un meme también para la extrema derecha francesa. Apple utilizó el vídeo de la paellera para presentar el MacBook en 2015.