El popular pianista y escritor británico James Rhodes reside desde hace muy felizmente en Madrid, tal y como explicó en una carta sobre España y la capital que polarizó a la opinión pública entre los que la adoraron y los que les resultó molesta. Habida cuenta de su actual vida aquí, el pasado jueves Rhodes pedía en Twitter que, “aunque estoy bien con los libros” y advirtiendo que comenzaría por Rosalía y Joaquín Sabina, necesitaba que alguien le recomendara “música española”, aunque acotando: “me encantarían algunos álbumes INCREÍBLES de música española para escuchar en vacaciones. (Reggaeton – de momento no estoy listo) 🙄”.
Por supuesto, las recomendaciones llovieron tanto de innumerables tuiteros anónimos como de Andreu Buenafuente, el periodista Víctor Lenore, Risto Mejide o las cuentas Indies Cabreados y Love Will Tear Us Aznar, que enviaron sus recomendaciones a Rhodes: Serrat, Sabina, Los Planetas, Rocío Jurado, Extremoduro, Radio Futura, Lola Flores, Alaska, Vetusta Morla… Incluso la propia Rosalía se tomó la molestia de elaborar una esclarecedora y jugosa lista en la que detallaba sus artistas y álbumes españoles favoritos, una ecléctica lluvia de nombres que incluyen Pablo Alborán, El Guincho, Enrique Morente, Lole y Manuel, Mala Rodríguez, Soleá Morente, Kaydy Cain, Miguel Poveda…
Tras destacar canciones de Extremoduro, Leiva, Alaska y Dinarama y Andrés Calamaro (sic) como primeras favoritas, la avalancha de tuits ha ayudado al autor de ‘Instrumental’ a crear una playlist un tanto extraña (“Hay algunos de Argentina porque son increíbles”; incluye la versión de ‘La negra flor’ de Fito y Fitipaldis, en lugar del original de Radio Futura) que está dejándonos una serie de tuits impagables, con frases como “gracias a dios por Spotify” o “hasta 2020 estoy ocupado” y reacciones totalmente inesperadas y emocionantes como “me siento como un niño otra vez”, “es seguro decir que creo que España puede estar tan orgullosa de su música como de su comida, clima, gente, amabilidad y corazón gigante”, “observé que solo una de las 49 pistas de esta playlist tiene una advertencia explícita de idioma. lo cual es increíble dado cuántas veces escucho coño todos los días 😂” o “Extremoduro. ¿Donde has estado toda mi vida? Cuántas cosas nos perdemos en este mundo…”. Y también esta valiosa reflexión: “la pasión por la música, como músico o como oyente / fan es contagiosa y hermosa y un recordatorio de la luz abrasadora de la creatividad. es pura bondad que viene directamente del alma en un mundo de distracciones superficiales”.
una idea. Educadme porfa. Estoy bien con los libros. pero con la música española no. Comenzaré con Rosalía y Joaquín Sabina, pero me encantarían algunos álbumes INCREÍBLES de música española para escuchar en vacaciones. (Reggaeton – de momento no estoy listo 🙄).
Mis cuatro canciones favoritas hasta ahora. Me siento como un niño otra vez, descubriendo nuevos compositores y pianistas! mucho más para escuchar en el tren a BCN… pic.twitter.com/lP2WGFNe0q
Después de todas sus maravillosas sugerencias, hice una Playlist de Spotify. (Hay algunos de Argentina porque son increíbles). Continuaré agregando mientras aprendo. ¡Espero que disfrutes!https://t.co/IJ6Vs1IZDI
la pasión por la música, como músico o como oyente / fan es contagiosa y hermosa y un recordatorio de la luz abrasadora de la creatividad. es pura bondad que viene directamente del alma en un mundo de distracciones superficiales.
Observé que solo una de las 49 pistas de esta playlist tiene una advertencia explícita de idioma. lo cual es increíble dado cuántas veces escucho coño todos los días 😂
Según medios norteamericanos, Aretha Franklin está en estos momentos en un grave estado de salud. Al parecer, la artista se encuentra «gravemente enferma» en Detroit, rodeada por sus amigos y familiares que piden oraciones por ella y privacidad. A tenor de la «exclusiva» del blog Showbiz 411, su fallecimiento podría ser inminente.
No han trascendido la dolencia que padece la célebre diva del soul, de 76 años, aunque su salud no ha sido buena a lo largo de los últimos años: en 2010 se le diagnosticó un cáncer por el que fue tratado y que, al menos en apariencia, superó. Tras aquello, retomó su actividad artística hasta que a principios del pasado año anunciaba su retirada de los escenarios. Su último concierto fue en agosto de 2017 en Philadelphia donde, según ese mismo medio, ofreció un concierto magnífico pese a su palpable fatiga y deshidratación. Aretha también anunció que grabaría un último álbum con Stevie Wonder a la producción, del que de momento no se ha vuelto a tener noticia.
Aretha Franklin es una de las voces más prominentes de la música popular del último siglo, que grabó su primer álbum de himnos gospel con tan solo 14 años. Desde entonces, Franklin ha sido la gran voz del soul, siendo denominada por la revista Rolling Stone como la mejor cantante de todos los tiempos.
Tal y como reporta El Mundo, anoche tuvo lugar el hundimiento de una plataforma portuaria en Vigo en la zona que acogía uno de los últimos conciertos de O Marisquiño 2018, el del rapero Rels B, provocando una caída desde gran altura de una parte de los asistentes, algunos de los cuales llegaron incluso a caer al mar. El incidente, sucedido en torno a la medianoche, ha producido más de 300 heridos, 9 de los cuales están en estado grave, según reporta El Diario. Por el momento se desconocen las causas del suceso, que evidentemente causó un enorme pánico e hizo que se cancelaran todo el resto de conciertos y actividades aún pendientes. En Twitter y en medios como El Faro de Vigo hay vídeos que muestran el momento del hundimiento.
Casualmente, ese concierto de Rels B ya se había visto envuelto por la polémica, dado que el mallorquín sustituía a Yung Beef, expulsado del cartel tras agredir a un espectador durante su actuación en otro festival gallego. Yung Beef había cargado contra su colega de profesión por ocupar su espacio en el festival en lo que él considera un acto de «censura previa».
O Marisquiño celebraba este año su décimo octava edición, un evento dedicado a la cultura urbana, lo cual incluye música, arte y deportes de acción como el skateboarding, el BMX, el baloncesto callejero o las acrobacias con motocicleta.
Actualización 11:30h AM: Según nuevas informaciones ofrecidas por la Xunta de Galicia, según El País, la cifra de heridos asciende a más de 300, muchos de ellos menores de edad. Muchos de esos heridos son personas que cayeron al mar y no podían nadar al recibir el impacto de más personas que caían tras ellos de la pasarela colapsada. Según ha declarado a la Cadena Ser la Autoridad Portuaria, la causa del colapso fue que cedió el hormigón de la estructura, «probablemente por un exceso de peso».
O MARISQUIÑO INFORMA: Ante el accidente ocurrido en el recinto portuario, os informamos que hay un puesto de ayuda e información en la Plaza de la Estrella. Si alguien echa en falta a algún familiar o amigo puede dirigirse allí en busca de información. Gracias. pic.twitter.com/mb9EhVQAe7
Mucha fuerza para todos los heridos en el Marisquiño si no encontrais a alguien hay un puesto d ayuda en la Plaza de la Estrella sentimos muchisimo lo ocurrido…
Hace ya tres años de ‘Chasing Illusions‘, el tercer disco de Anni B Sweet (Málaga, 1987), y la cantante está ahora inmersa en la preparación de su sucesor, del que aún sabemos muy poco. La principal novedad, el cambio al castellano, es también en parte responsable de este lapso, puesto que le ha sido más complicado adaptarse a componer en un idioma distinto al que, por lo general, tenían los anteriores álbumes. Hace un par de semanas vino al Centro Andaluz de Arte Contemporáneo de Sevilla de Sevilla para dar, dentro del ciclo POP CAAC, uno de los últimos conciertos antes de meterse 100% en el disco.
Aprovechamos esta visita para charlar con ella tanto antes como después del concierto, cuando, a pesar del lógico cansancio, nos atendió hablamente para responder preguntas sobre el futuro disco, sobre temas clásicos de su repertorio como ‘Shiny Days’ o la versión de ‘Take On Me’, sobre el tópico de “chica con guitarra”, sobre la posibilidad de escribir un libro y, especialmente, sobre dos temas por los que confiesa estar obsesionada (y en su discografía hay pruebas de ello) como son el paso del tiempo y la astronomía. La luz y la oscuridad fueron protagonistas tanto física –fue la noche del último eclipse lunar, la “Luna de sangre”– como metafóricamente, al abrirse la cantante por completo sobre sus pensamientos (o “mis locuras mentales”, como dice ella) en una entrevista que la propia Anni describía como una de las más especiales que había hecho.
En una entrevista que hiciste hace poco comentabas que, entre los temas que tenías en mente para el próximo disco, había 32 canciones. Me llamó mucho la atención ese dato.
Sí. (risas) Al ser en castellano, empecé pronto a escribir versitos, frases que me gustaban. Yo estoy escribiendo siempre, y acabo teniendo un montón de canciones, pero es verdad que nunca lo he dicho, porque tenía más claro el concepto del disco y lo que quería. Esta vez no ha pasado eso, había muchas cosas que me gustaban, y el único problema, por llamarlo así, era saber dónde centrarme. Hay un poco lo que ha habido en estos tres discos, hay un punto oscuro, un punto más orgánico, un punto más eléctrico… pero quiero ver hacia dónde lo quiero enfocar. También al ser algo nuevo parece que te inspira más. Lo he cogido todo con más frescura, con más alegría, y no he sabido desechar tanto. He estado experimentando mucho con el castellano.
¿Y tienes idea de cuáles van a ser las que entren? ¿O al menos algunas?
Tengo 32, pero no tengo las demos de todas, también puede ocurrir que esté empezando la maqueta de un tema y ver que no está tirando por buen camino, la aparcas y sigues con otra… y al final la anterior va quedando atrás. Y puede que ocurra eso, esa forma de elegir, una selección natural (risas). Pero me encantaría tener las máximas demos posibles y verlo todo más global, ver como “el bruto” del disco. Querría, por ejemplo, coger los temas que marcasen más una evolución mía de un disco a otro, que eso es algo bonito para hacer en un álbum.
Fecha para el disco no sé si habrá, pero ¿para el primer single? ¿O tienes al menos claro cuál sería el primer single?
Tengo más o menos en la cabeza cuál podría ser, pero luego las canciones nuevas te dan muchas sorpresas… puede que luego esté haciendo la demo de una de las nuevas, y que de pensar “ésta no va a ser gran cosa”, de pronto la grabe y resucita, ¿no? Pero sí tengo una idea de los dos que yo creo que podrían ser “el single” del disco, pero no puedo asegurarlo sin tener grabado el resto.
¿Y cuáles son esas dos? ¿Tienen título?
No. Bueno, sí, tienen títulos malos (risas). Una de ellas es ‘Convencido’, pero no se va a llamar así seguramente, pero es parte de la letra y es como “tiene pinta de este nombre”. Y la otra se llama ‘Estaré Mejor’. Una de ellas tiene muchísimo ritmo y un estribillo muy guay, que tengo muchas ganas de tocar en directo, y la otra es más pop, al estilo 60, más naif, pero eléctrico a la vez.
¿Y en cuanto a temática? ¿Hay algún tema de la actualidad que te haya influenciado en la composición de este disco?
Yo creo que suelo tirar siempre por los mismos temas: las luces, las sombras, la oscuridad y las metáforas con todo eso y, sobre todo, la astronomía y el paso del tiempo. Y todo lo que ello te hace sentir, lo que convivir con eso te hace sentir. La inspiración me sale de un montón de cosas, puede ser una fotografía, un viaje que he hecho, una conversación con una persona, un recuerdo… no hay una temática cerrada en el disco. Pero sí tira mucho de la melancolía, de la tristeza, de las cosas bellas, pero del fondo del mar, de lo profundo. Que tampoco te digo que las letras vayan a ser ahora súper abstractas y tiren todo el rato por metáforas, pero sí que es esa la inspiración. También hay muchas que parten de sueños que he tenido, y las interpretaciones que yo les doy, me llevan a una letra. Y en cuanto a temáticas actuales… lo actual que hay es mi día a día, y en mi día a día claro que influyen las noticias, lo que veo, eso me afecta y me hace escribir de una forma, pero no suelo hacerlo de forma concreta. Aunque puede que cuando saque el disco alguien me diga “oye, ésta va de tal cosa, ¿no?” y yo misma diga “pues es verdad”. O tú mismo me digas “será mentirosa, que sí que la había”. (risas) Pero de momento no.
«Tengo una especie de obsesión con la «enfermedad» que supone hacerse mayor (…) porque pierdes a gente que de pequeña piensas que son eternos, como superhéroes»
Como has dicho antes, un tema recurrente en tu discografía es el paso del tiempo. ¿Qué supone para ti, cómo lo vives?
La pregunta es jodida, te voy a contestar y no me voy a quedar a gusto… pero bueno, me va a pasar eso con toda la entrevista, me pasa siempre. (risas) A ver, tengo momentos pasados que son malos, y aunque sé que estoy yendo hacia un momento en el que me siento mejor, lo que está a mi alrededor va desapareciendo, se va desvaneciendo. Empiezan a desaparecer personas que te importan, gente que quieres, el dilema de si estas realmente aprovechando el tiempo… y todo eso a mí me afecta un montón. Entonces le tengo una especie de obsesión a la «enfermedad» que supone hacerse mayor… No por las arrugas y que se te caigan las tetas. (risas) No es eso, sino porque, como digo, pierdes a gente que de pequeña piensas que son eternos, como superhéroes, no te planteas que vayan a dejar de estar en tu vida. Y esa es una de las razones por las que el paso del tiempo tiene esa importancia para mí y supongo, para todos. La otra es porque el tiempo parece que erosiona, como el mar con las rocas, pues el tiempo con las personas. Tienes una forma de ser más exagerada cuando eres más joven… me lo estoy imaginando dibujado, tienes una forma así puntiaguda. (dibuja en el aire con el dedo) Como que todo lo vives con más intensidad, y al pasar el tiempo, todo eso va suavizándose, y al final queda una forma de ti muy curva, erosionada. Y eso no me gusta. La primera razón supongo que la comparto con todo el mundo, y la segunda igual es solo cosa mía… pero yo veo eso, es como que el tiempo va raspando poco a poco tu forma de ser, y dejándote una esencia muy difuminada de tu persona. Supongo que hay gente que sí conserva eso, pero yo a veces siento que lo pierdo.
También es cierto que esos cambios, pasar por experiencias y equivocarte, y cambiar, significa que estás aprendiendo más, ¿no?
Sí, pero yo no sé si es mejor equivocarse y tener otra actitud con respecto a la vida, que tener mucha experiencia y equivocarte menos. No lo sé realmente. O sea, ¿qué prefieres: la experiencia -y eso quiere decir no vivir las cosas con la inocencia con la que las vives por primera vez- o equivocarte y vivir las cosas con una pasión más fuerte? No sabría qué decirte. Según el día, ¿no? “Mira, hoy preferiría vivir las cosas con más pasión”. (risas) Es que incluso el dolor de un desamor, los momentos malos, eso se vive de una forma más fuerte… y, si te vuelve a pasar algo así y no lo sientes tan fuerte, por un lado mejor, pero por otro, significa que algo se está apagando, ¿no? Y ahí es donde yo lo uno mucho en mis canciones con la luz y las sombras. Cuando algo se apaga es que viene oscuridad. Y la oscuridad a mí me da mucha tranquilidad, que justo la podemos comparar con ese momento en que tu cuerpo está más dormido… pero a la vez se está apagando algo. Se está cómodo en un sitio oscuro, no tienes que hacer esfuerzos. Sólo cerrar los ojos y estar a gusto.
«Cuando eres pequeño, ¿no es eso la oscuridad? ¿No tener ni puta idea y no saber nada? Y justo, ¿no es cuando más feliz eres?»
Cómodamente adormecido, ¿no?
Exacto, como la canción de Pink Floyd. Exacto, sigues estando en la oscuridad y no viendo las cosas. Y yo juego mucho con eso porque es un misterio, no sé realmente qué elegir, qué es lo mejor. “Estoy bien en la oscuridad, pero, si estás guay en la oscuridad, ¿está fallándote algo?” ¿Por qué en la luz no estás tan bien? ¿Por qué la luz te incomoda, en muchos sentidos? Cuando eres pequeño, ¿no es eso la oscuridad? ¿No tener ni puta idea y no saber nada? Y justo, ¿no es cuando más feliz eres? O al revés, quizás esa es la luz, esa libertad de no saber y simplemente sentir y ser, sin saber nada, en la oscuridad. (risas) Hay una convivencia muy bonita, pero muy difícil de conseguir cuando pasan los años. En ‘Getting Older’ (de su álbum de 2012 ‘Oh, Monsters!‘) por ejemplo, hablo de que saber más me hace sentir peor, es como que ver la luz, ver la claridad de las cosas, no estás tan cómoda en un lugar así. Y me sigo sintiendo un poco así, la verdad, por eso sigue siendo un tema importante para mí. Supongo que me gusta hablar de las cosas que no entiendo, y hablándolas, creando canciones, me hace pensar que puedo entenderlo un poco más, pensar “claro, es normal que me pase esto”.
Otro gran tema para ti es la astronomía, y encima hoy has dado el concierto con el eclipse lunar de fondo.
Ha sido genial, parecía de mentira.
¿Desde cuándo te gusta y por qué te gusta tanto?
Desde pequeñita. Yo creo que realmente a todos nos gusta, lo que pasa es que no tendemos a mirar hacia arriba, miramos más al suelo que al cielo. Pero sí, desde muy pequeña me llamaba mucho la atención, pero no solía hablar de ello, en mi familia no se decía “a Ana le gusta mucho el cielo”, sino que yo lo tenía para adentro, para mí. Creo que es por lo mismo que te decía antes, porque las cosas que no entiendo me atraen un montón, para intentar entenderlas. Y con el tiempo además me he ido adentrando más, comprando las revistas de astronomía todos los meses, leyendo, metiéndome en la aplicación de la NASA, viendo en directo las imágenes del telescopio tal o la cámara cual. Y no sé, me da tranquilidad. Es como cuando estás en un festival con un montón de gente y de pronto te sales al parking, ¿esa calma, ese silencio de pronto? Pues algo así me pasa con lo del cielo. Y antes no me daba tanta cuenta de esto. Aparte, el cielo, aunque sea más parte oscura que luz, tiene mucha luz en él, es una convivencia, una metáfora muy bonita. Por lo visto, el 80% del universo es materia oscura, no sabemos muy bien qué leches hay ahí. Y en todo esto seguro que hay vida, entonces quien diga que la oscuridad es mala es que no tiene ni puta idea. (risas) No sé, hay algo ahí que me atrae mucho, y cuanto más sé, más me gusta. Mira que te he dicho antes justo lo contrario, que cuanto más sé de la vida, menos me gusta, pero con el universo me pasa al revés…
Igual es porque, al ser algo tan desconocido, realmente se sabe muy poco por mucho que aprendas, ¿no?
Totalmente, lo que sé es muy poco, pero vamos… (risas) Es muy difícil de entender, hay que estudiar seriamente, no solo leerse los cuatro libros que molan, hay que estudiar mucho. Me encantaría entender el Universo a otros niveles, aunque también es bonito dejarlo así: es como una canción cuando no sabes realmente de qué habla. Solo puedes entrever un poco. Y como te cuente el compositor de qué es y no tenga que ver con lo que tú pensabas, vaya bajona. Pero sí, a veces pienso que me molaría haber estudiado eso. De hecho, hay una canción del disco nuevo que habla de querer ser otra persona, lo que sea menos lo que eres en ese momento, y dice “estaría bien ser un astronauta”. Y a veces lo he pensado: ¿podría haber estudiado para ser eso? Creo que no sirvo, me das dos vueltas aquí en el patio y me mareo. (risas)
¿Tiene título esa canción?
Sí, sí, es una de las que te he hablado antes, ‘Estaré mejor’. Es un poco eso, “estaría mejor ser un astronauta”. Es que es un tema que me apasiona tanto y, por más que me lo pregunta la gente, nunca sé del todo bien por qué, es como… ¿Sabes cuando te gusta alguien mucho, y te preguntan “¿pero qué es lo que te gusta?” y tú señalas y dices “¡mira!”? (risas) Que dices “no lo sé, hay algo ahí que me atrae”. Pues con la astronomía me pasa eso. Es difícil de explicar… yo creo que escribo canciones porque se me da fatal hablar, de hecho.
«No sé si sería capaz de sacar un libro. Pero tengo como cinco libretas llenas de pensamientos, de poesías, y todo en castellano»
Sobre escribir en castellano, leí que comentaste que ya habías escrito en castellano, pero no canciones. ¿Es prosa o poesía? ¿Veremos un libro próximamente?
Jo, me fliparía. Pero le tengo tanto respeto a la literatura… Pero muchísimo, ¿eh? Así que no sé si sería capaz de sacar un libro. Pero tengo como cinco libretas llenas de pensamientos, de poesías, y todo en castellano. Se me ha hecho mucho más difícil cantar, pero por la forma en que tienes que pronunciar, por cómo meter unas palabras en la melodía que quieres, etc. Y que las cosas no suenan igual leídas que cantadas, se me hace más difícil. Pero jo, lo del libro me fliparía. Me lo han preguntado alguna vez, pero no en una entrevista. Me dijeron “¿no has pensado, con todo lo que tienes escrito?”, pero es que nada más pensarlo, es como que me digo a mí misma “¿dónde voy?” (risas) Le tendría que quitar mucho hierro a esta historia para sacarlo, con el respeto que le tengo a la literatura no sé si podría ahora mismo. ¡Si ya me cuesta sacar un disco!
En ese hipotético libro imagino que habría espacio para la astronomía y para estos temas que te atraen especialmente, ¿no?
Pfff, un montón… Sobre el cielo tengo un montón de cosas escritas. Y metáforas que me llevan a escribir otras cosas. Mira, te pongo un ejemplo, que igual no tiene mucho sentido, pero para que entiendas un poco el proceso que a veces hace mi cabeza. El Universo para mí es una oscuridad que me da calma, y pensar que en esa oscuridad convive la luz, que son puntitos que pueden representar los momentos felices. Y esa mezcla puede ser una metáfora de la vida para mí, traslado muchas veces las cosas de esa forma, el ver tal estrella, o el haber leído que en tal planeta hay tal cosa, siempre lo llevo a lo más cercano que tengo, a mi día a día. Y sería bonito que al escuchar las canciones, la gente también lo lleve a su terreno más cercano.
¿Habrá colaboraciones en el disco? Tanto de intérpretes como en la producción.
Yo creo que no las va a haber. Realmente tengo muchos amigos con los que estaría muy feliz de tenerlos en el disco, pero quiero que se dé de una forma natural. Y en cuanto a la producción, de momento la estoy haciendo yo en casa, estoy en ese momento aún, con las demos, grabando la batería, el bajo, los teclados… todos los arreglos, en el sótano. Luego quedaré con mi banda para que lo humanicemos todos, y grabarlo en un estudio, que no sé cuál. Tengo en mente salir fuera de España para ello, pero no sé. De momento son ilusiones que una tiene. Lo que pasa es que también me gusta estar cerca de mi gente cuando estoy grabando… lo quiero todo. (risas)
Mira, Zahara se ha ido a grabarlo a Gales.
Sí, pero yo no sé si… Cada una tiene lo que puede (risas) No sé si ha vuelto ya, le iba a preguntar que qué tal allí y tal, porque si es un sitio guay para ir a grabar, puedo pensármelo. Pero lo veo complicado conmigo. Aunque mira, siempre he hecho los discos tipo “las baterías y los bajos aquí, el teclado allá”, etcétera, y han salido guay. Así que puede que esta vez lo hagamos así, y que las guitarras y las voces podamos hacerla en un sitio muy especial, en plan “vamos a hacer esto con el equipo que tienen de los años 60 en no sé dónde”. Eso sí que lo veo viable, más que lo otro. Lo otro quizás para cuando vaya mejor la cosa. (risas)
«Muchas veces me ha hecho falta que un hombre me traduzca para que me tomen en serio»
[Ndr: En este punto, le hago un par de preguntas para un artículo especial de próxima publicación, y de ahí derivamos a los prejuicios que ha notado especialmente por ser mujer) ¿Ahí sí has notado que eso, ser mujer, ha hecho que te tomen menos en serio?
Sí, ahí sí que sí. Eso, un montón de veces. Y ya no de forma concreta, sino general y, a la vez que sutil, muy presente, como que todos lo dábamos por hecho. Desde estar en una prueba de sonido, comentar yo una cosa que creo que está mal en el sonido de los monitores y no tomarme en serio, que se lo tenga que decir otra vez mi guitarrista para que le crean, y habérselo dicho yo y que me digan “no, no, es que tienes que sacar más voz”. Muchas veces me ha hecho falta que un hombre me traduzca para que me tomen en serio. Recuerdo una foto que subí, que era una camiseta transparente y se me veía un poco el sujetador por debajo, me dijeron un montón de cosas y nadie hablaba de la música, hablaban de mi aspecto, y eso me mosqueó mucho porque hay mil fotos de grandes músicos sin parte de arriba, y no se les habla así. Pero con nosotras se centran en eso, en cómo vamos vestidas, en si enseñamos. Ahora estamos teniendo todos un poco más de cuidado con esas cosas, pero queda mucho por hacer, muchas cosas, incluso cosas de las que yo misma no me daré cuenta, porque las tendré tan interiorizadas que me parecerán normales. Supongo que me ha pasado de mil formas más y yo no me he dado cuenta.
«Que sea una chica con guitarra no quiere decir que no sea otras mil millones de cosas»
No sé si lo has sentido también por la propia prensa, con ese “género” que es el de “chica con guitarra”, que además se minusvalora.
Sí, eso te limita y… claro, sí, es infravalorar, porque al final te hace más pequeña. “Chica con guitarra” o “chica con voz de tal tipo haciendo tal”, y están todas en el mismo saco… entonces tú pierdes lo que te hace especial. Te quedas en una “chica con guitarra”, y ya está. Que eres una chica con guitarra, yo lo soy, claro que lo soy, pero soy mucho más que “una chica con guitarra”. Que sea una chica con guitarra no quiere decir que no sea otras mil millones de cosas… entonces ahí sí que ha sido aburrido durante un tiempo. Aunque también esto veo que se está difuminando, yo creo que ellos se han ido dando cuenta también… o se han aburrido. (risas)
«Me ha venido gente diciendo “buah, me encantas, tu mejor canción es ‘Take On Me’”, sin saber que es una versión»
Tu canción con más reproducciones en Spotify sigue siendo la versión de ‘Take On Me’. ¿Cuando hiciste la versión te esperabas ese éxito?
Ni de coña. Jamás me esperé esa repercusión, nos llamaron a tocar fuera de España y todo, y sobre todo fue por esa canción. Me gustaría poder decir otra cosa, pero… (risas) Bueno, por esa canción y porque supongo que, a partir de ella, escucharon más y les gusté, supongo que por una sola canción no me van a llamar. Pero sí, esa canción hace que mucha gente se fije en mi música… y ni de coña me lo esperaba. La tocamos en casa de Doria, fue a él a quien se le ocurrió, venía de hacer el primer disco, donde tuve que meterle mucho esfuerzo a la voz, y me gustó hacer ésta, que es una canción en la que… (canta una parte) Parece que estás como andando por casa, ¿sabes?, me pareció un punto de relax muy guay, incluso para los directos. Pero de repente ya nos llamaron del anuncio, una cosa, otra… fue como “si lo sé, me relajo antes” (risas). Yo he dicho muchas veces que no quiero tocarla más. Es que a ver, cuando haces una versión, es porque te flipa esa canción, pero pasan los años y tú cambias. Es una versión que en aquel momento tenía todo el sentido, y hoy en día… No es que me cueste cantarla, todo lo contrario, pero no me mueve nada por dentro cantarla. Me mueve más ver a la gente guay con ella, verla como agradecida, eso sí me motiva a tocarla, pero no por mí, no toco ese tema por mí. También me ha venido gente diciendo “buah, me encantas, tu mejor canción es ‘Take On Me’”, sin saber que es una versión…
Pues mira, para mí tu mejor canción no es ‘Take On Me’…
¡Gracias! Sea la que sea, ¡gracias! (risas)
…es ‘Shiny Days’. ¿Cómo surgió la idea de esa canción, que además no entró en ningún disco?
Ay, ¿en serio? Qué guay, ‘Shiny Days’. Tenía miedo de grabar esa canción en un estudio y que perdiese su esencia, parecía que ese tema era solo para escucharse en directo, ¿sabes? Y surgió en la casa donde yo he vivido toda mi vida, en Fuengirola. Ya había hecho el primer disco, llegué de Madrid, y la hice. Mi madre estaba en el salón, vino y me dijo “uy, esa canción tiene una melodía muy muy bonita”, y cuando empecé a tocársela a los amigos, era también la que más atraía a la gente, y era la que no estaba grabada. Y todo el mundo me decía de grabarla y sacarla en single, pero no quería, por el miedo este que te digo. Así que nunca se grabó del todo bien. Que es una lástima y a la vez me encanta que tenga eso especial, y en cada directo acaba siendo distinta. La canción vino de estar, hace… ostras, hace 11 años, 11 años ya. (risas) Viene de estar un poco perdida, de verte en una etapa de oscuridad y necesitar luz… debido a varias cosas. (Hace una pausa) Qué guay que te mole esa. ¿Sabes que, cuando la toco, veo a gente como con la lagrimilla y todo? Para mí eso es súper bonito. Muchas veces he pensado en sacarla de alguna forma, pero no sé…
«A veces pienso que, si fuese por mí, no grabaría discos y haría sólo directos»
Mira, podría ser un bonus track, como la única en inglés de un disco en español.
Podría ser, pero es que también la hace especial la cosa de quedarse ahí. Es que de hecho, a veces pienso que, si fuese por mí, no grabaría discos y haría sólo directos, ¿sabes? Rollo “en enero empiezo con mi nuevo directo de 2019”. Lo cual al principio sería una putada porque no os conoceríais los temas y puede que os aburrieseis, pero al final sería guay. A veces lo pienso. También porque soy muy cambiante, soy muy de “ay, esta canción ahora la habría grabado de otra forma”. Que vale, tengo los directos, pero ya tengo ahí el disco pa siempre, recordándome cómo lo hice aquel mes, que no tiene por qué ser más especial que cualquier mes de cualquier otro momento.
Le va a resultar más que difícil a Kiesza borrar de su carrera la sombra de “one-hit wonder” que le persigue tras el pelotazo que dio en 2014 con ‘Hideaway’, tras el que ninguna canción de su decepcionante debut ‘Sound of a Woman’, ni mucho menos sus contados singles posteriores, ha conseguido emular. Pero ella lo intenta. Tras regresar a principios de año con la sorprendente ‘Mother’, reaparece ahora –ya fuera del sello Island, perteneciente a Universal– con una inesperada vuelta de tuerca llamada ‘Phantom of the Dance Floor’.
Quizá espoleada por el hecho de que el house 90s que nutría su mayor hit es un claro referente en un éxito como ‘One Kiss’ de Dua Lipa y Calvin Harris o los últimos singles de Róisín Murphy y Azealia Banks, la artista canadiense retoma esa faceta bailable y nostálgica. Sólo que, como quitándose presión de encima, la aborda con un gran sentido del humor y un punto desquiciado: como si le hubiera dado un ataque de monicanaranjismo –circa ‘Europa’–, ‘Phantom of the Dance Floor’ implica aires operísticos que se materializan gracias a la colaboración de su compatriota Philippe Sly, un joven barítono de cierto renombre en el circuito clásico.
La canción es bastante WTF de por sí incluso más allá de las primeras escuchas pero, indudablemente, cumple con creces esa invitación al baile, salpicada de intros y paraditas dubstep. Pero si eso ya es desconcertante, su vídeo oficial –de presupuesto encantadoramente modesto, pero ejecutado con mucha gracia– va aún más lejos: con clara reminiscencia “Rocky Horror”, Kiesza se presenta como una Doctora Frankenstein que revive a su amado –el propio barítono– para amarse y, claro, bailar, rodeados de una serie de personajes insólitos –la ama, los elementos faciales humanizados…– hasta la tragedia final. No podía ser de otra manera, tratándose de ópera.
Pese a que su victoria en el talent-show de celebrities bailongas ‘Bailando con las estrellas’ hacía pensar que David Bustamante sigue gustando y cayendo bien a buena parte del público de RTVE, no todo el mundo parece tenerle cariño. El cantante cántabro ofrecía el pasado viernes en la localidad alicantina de Elche uno de los numerosos bolos programados en su agenda este verano cuando, casi finalizando la actuación, dos piedras cayeron al escenario.
Bustamante decidió en ese momento cancelar lo que restaba de actuación y salió corriendo del escenario junto con todo su grupo y el equipo de seguridad, dejando a los 8.000 asistentes con un palmo de narices. El diario Información da precisos detalles de lo acaecido, indicando que las piedras no impactaron en nadie, pero que Busta fue a buscar una de ellas y la mostró al público antes de interrumpir su actuación.
Este medio cuenta que no fue el único incidente de la noche, puesto que el que fuera finalista del primer Operación Triunfo hubo de detener su show a causa de un espectáculo pirotécnico que tenía lugar a la vez que el concierto. El diario también califica la decisión de “polémica” porque, dicen, nadie vio caer ningún objeto al escenario. Por su parte, el artista no ha hecho mención alguna al incidente en sus redes sociales. Más bien al contrario, daba las gracias en Instagram a las “10.000 almas” que acudieron al aparcamiento de la Universidad Miguel Hernández de Elche para verle. Dice, incluso que le «abrazaron». Hay amores que matan.
El matrimonio entre Phil Elverum, el cantautor de Anacortes más conocido como Mount Eerie, y la actriz Michelle Williamsha sido la noticia WTF del mes en el mundo de la música. Ni en un millón de años habría imaginado que Elverum, un tipo ermitaño que repudia la fama, tendría un día algo que ver con Hollywood, pero lo cierto es que Elverum y Williams comparten un pasado parecido marcado por la tragedia tras la muerte de sus respectivas parejas (la artista Geneviève Castrée en el caso de él, el actor Heath Ledger en el de ella), por lo que la relación entre ambos quizá no sea tan chocante al fin y al cabo.
Aunque Elverum ha rencauzado su vida, su material nuevo sigue dedicado a Geneviève, y tras el lanzamiento en 2017 de ‘A Crow Looked at Me’, dedicado completamente a la muerte de su mujer, con diferencia uno de los discos que mejores críticas recibieron el año pasado, esta primavera Elverum ha publicado ‘Now Only’, un trabajo que recopila seis canciones que el artista compuso tras la gira de “A Crow”, pero que es más que un simple apéndice de aquel. Elverum explica que el álbum trata la “sensación de desorientación que provoca intentar estar en el presente, pero que a la vez, mentalmente, el pasado te arrastre [a otro lugar]”, y efectivamente ‘Now Only’ representa un tira y afloja entre ambos estados, el de luto y el de la busca de la recuperación. Por eso, al contrario que lo que sucedía en el disco anterior, en las canciones de este nuevo trabajo sí se atisba un rayo de esperanza en los textos y también en el estilo de las composiciones, hasta el punto que el tema que titula el álbum, un retrato de la absurdidad de la muerte, presenta un estribillo abiertamente pop, de letra pueril que no puede ser sino totalmente intencionada (“la gente enferma de cáncer y muere, a la gente le atropella un camión y muere, gente que simplemente vive sus vidas, y que es borrada sin motivo, mientras el resto de nosotros miramos desde el otro lado”) y que incluso incluye con cierto carácter cómico como “tú ya no estás, y tu eco ya no está, y el llanto ya no está, ¿qué queda más aparte de este merchandising?”
Las canciones de ‘Now Only’ vuelven a ser confesionales, propias de un diario personal, y se presentan por tanto en verso libre, en el estilo de un Walt Whitman a quien Elverum de hecho menciona en ‘Distortion’, quizás la canción más importante del disco. En los casi 11 minutos que dura, Elverum, a través de un monótono rasgueo de guitarra acústica, que va enriqueciendo mediante autoarmonías y la “distorsión” de una guitarra eléctrica, el músico habla sobre descubrir que tras la muerte no hay nada, sobre el primer cadáver que vio (el de su tatarabuelo) y recuerda un susto de embarazo que vivió a los 23 años, cuando era un joven que vagaba por las ciudades buscando dedicarse a su arte, que le hizo “lamentar la muerte de mi independencia y mi soledad”. En una canción que es sobre todo un recuerdo del pasado, Geneviève es por supuesto central y de hecho la protagonista del verso más hermoso de la letra, en el que el artista se dirige a ella para decirle “te sigo respirando en mis pulmones, en un constante e incómodo corriente de recuerdos que van desapareciendo, hasta que yo muera también”.
Sin embargo, aunque estas canciones proceden de la tristeza de Elverum, nunca suenan tan sombrías como las contenidas en ‘A Crow Looked at Me’. Si bien es cierto que en ‘Earth’, en la que destaca la presencia de un hipnótico órgano sintetizado, Elverum se imagina bajo el mar, “abdicando su forma” y por tanto muriendo para reencontrarse con Geneviève, también es verdad que en la letra hay hueco para la esperanza, y en ella Elverum canta que su cuerpo está “lleno de la luz que iluminó nuestra casa todos estos años”. De hecho, el tema plantea desde el principio un dilema que puede considerarse el eje central del disco: “no quiero vivir con este sentimiento más de lo que debo, pero tampoco quiero te vayas”. En la ecfrástica ‘Two Paintings by Nikolai Astrup’, Elverum describe un cuadro del pintor noruego en el que varias personas aparecen bailando frente a una hoguera. “Esas personas conocieron la pérdida, y vinieron a bailar frente al fuego”, describe Elverum, asumiendo que tras un periodo de lamentación es natural empezar a buscar la alegría. De hecho, ‘Now Only’ no podría empezar con una canción más tierna sobre el recuerdo de Geneviève que ‘Tintin in Tibet’, que concluye con un verso que alterna esa memoria del pasado con la realidad de la hija que ambos comparten. “Ojalá estuvieras aquí para presenciar cómo se desarrolla el día a día de nuestra hija”, recita el músico.
Y como empieza el disco termina, con la presencia de la hija de Geneviève y Elverum iluminando los versos del músico. ‘Crow, Pt. 2’ es, para el propio Elverum, su canción favorita de Mount Eerie (lo cual es mucho decir, porque el artista es prolífico como pocos), y no podría ser una mejor conclusión para esta etapa en la carrera de Mount Eerie marcada por la tragedia, y que, podría decirse, termina (al menos con punto y coma) con su matrimonio con Michelle Williams. Dedicada a esa alma hermosa que hoy no es más que un “eco tranquilo en el fuerte viento”, ‘Crow Pt. 2’ es una canción preciosa, de delicados rasgueos, en la que Elverum recalca lo surrealista que le resulta la ausencia de Geneviève, pero también la esperanza que emana de su hija, junto a la que ambos “sobreviven, todavía llenos de amor”. El amor y no otra cosa alimenta absolutamente todas las canciones contenidas en ‘Now Only’, solo que ahora por suerte Evlerum parece estar listo para pasar página. Sin duda lo hará, no sin antes haber hecho un arte elegíaco maravilloso del que puede estar más que orgulloso.
Calificación: 8/10 Lo mejor: ‘Distortion’, ‘Earth’, ‘Crow, Pt. 2’ Te gustará si te gusta: Scoutt Niblett, Daniel Johnston Escúchalo:Spotify
Como los que se hayan despachado ya los 66 minutos de ‘Queen’, el nuevo álbum de Nicki Minaj publicado este 10 de agosto, el ya controvertido sample de Tracy Chapman que parecía obligar a postergar una semana la salida del álbum no aparece en la versión final del álbum. Y eso que Nicki la puso en un compromiso pidiéndoselo públicamente, pero se ve que la autora de ‘Fast Car’ no se ha ablandado ni por esas. Así las cosas, hoy Nicki ha decidido liberar la canción en cuestión, sin lanzarla de modo oficial, arrojando un poco de luz a la cosa.
La canción se llama ‘Sorry’, cuenta con un verso del rapero Nas –que recientemente lanzaba un álbum producido íntegramente por Kanye West– y es, prácticamente, una versión de un tema dancehall muy popular a finales de los 80 y primeros 90 titulado ‘Sorry (Baby Can I Hold You)’ que fue interpretada por varios cantantes como Sanchez como Foxy Brown. Que, pese a que Nicki lo creía así cuando dijo que era una canción de «una de las más grandes raperas de todos los tiempos», no es la rapera neoyorquina que precisamente colabora con ‘Coco Chanel’, otro tema del disco, sino una artista jamaicana de los 80.
La canción fue un éxito en el circuito de clubs pero, curiosamente, no hay registro oficial de ninguna de esas versiones, que sólo se encuentran en Youtube. Y la razón debe ser la misma por la que Nicki no ha podido incluirla: porque Tracy Chapman se habrá negado en rotundo a ceder los derechos de su éxito ‘Baby Can I Hold You’, que es la auténtica base del tema adaptado a códigos de la música jamaicana y, por tanto, también del de Nicki. En un tuit luego borrado, Nicki enlazaba este vídeo de Youtube con su tema acompañado del mensaje “La hermana dijo no 🤷🏽♀️”.
Las polémicas por el supuesto sexismo de sus letras y vídeos persigue a Maluma hasta el punto de que un clip suyo ha sido polémico incluso antes de estrenarse. Semanas atrás leíamos que el anunciado vídeo de su nuevo single ‘Mala mía’, estrenado ayer viernes, era objeto de críticas por la portada del mismo que el colombiano había compartido en redes. En ella, Juan Luis Londoño aparece tendido en una cama rodeado hasta ser prácticamente invisible por siete modelos vestidas con lencería fina. Una foto que fue calificada de “machista” por muchos usuarios de redes sociales, una etiqueta frecuente para el cantante.
Por descontado, la foto no es otra cosa que un fotograma del propio vídeo oficial de la canción, en el que efectivamente vemos a Maluma en una habitación de hotel, en una piscina, en un club… rodeado de mujeres arquetípicamente guapas y sexys que se mueren por sus encantos mientras beben o le dan de beber. De hecho, casi como si previera esas críticas, la propia letra de la canción no va dirigida a una mujer en particular sino a los críticos con él y su estilo de vida.
A pesar de la polémica (aunque cabe pensar que también sea gracias a ella) la canción, producida por el hasta ahora desconocido Nyal, está arrasando en Youtube y en menos de 24 horas ha alcanzado el número 1 de Youtube Tendencias en España, superando de largo los 6 millones de visitas y subiendo. Aunque también puede tener la culpa que se trata de otro buen tema de pop contemporáneo e inspiración caribeña que más que probablemente se convertirá en su enésimo hit. Curiosamente, se trata de un tema totalmente nuevo, ajeno al álbum de estudio que lanzó hace apenas unos meses, ‘F.A.M.E.’. Igual que ‘Clandestino‘, otro tema junto a Shakira estrenado hace pocas semanas.
¿No os parecía que os faltaba algo tras casi dos meses de novedades constantes por parte de Kanye West? Tras unas breves ¿vacaciones?, West reaparecía hace un par días en televisión para volver a sentarse junto a Jimmy Kimmel y charlar con él de porno y moda, y no charlar de Trump. Y, como si esa aparición hubiera abierto algún tipo de veda, ya mismo tenemos nueva música del artista de Chicago.
Como están reportando diversos medios norteamericanos, el veterano productor DJ Clark Kent –de nombre real Rodolfo Franklin, ha trabajado a lo largo de los años con The Notorious B.I.G., Jay-Z, 50 Cent o Mariah Carey– ha subido la canción ‘XTCY’ a WeTransfer en descarga gratuita. Lo ha hecho a través de un tuit –retuiteado más tarde por West– en el que cuenta que ha sido invitado a hacerlo por el propio rapero aunque, según Complex, Kent no es el responsable de la producción –deducimos que es, en ese caso, un trabajo en solitario de Ye–.
La canción está acompañada por una imagen en la que se ve a su esposa, Kim Kardashian, junto sus célebres hermanas, Khloe y Kourtney Kardashian y Kendall y Kylie Jenner –la foto es de la fiesta de cumpleaños de esta última, celebrada ayer en Los Ángeles–, todas ellas con sus dedos anulares bien levantados. Podría ser un detalle sin importancia, de no ser porque sus cuatro cuñadas son citadas en el primer verso de la canción: “¿Tienes pensamientos retorcidos? Yo tengo más / ¿Tienes una cuñada a la que te follarías? Yo tengo cuatro”. ¿Todo bien, Kim?
Musicalmente, ‘XTCY’ tiene bastante del viaje lisérgico al que alude su nombre y que conforma, con un machacón sampler, la base de la canción. Quizá será por esos “whoopity-whoop, scoop-poop-woop-toop», pero este “lanzamiento” parece tener menos con esas idas de olla llamadas ‘Lift Yourself’ y ‘Ye VS. The People’ que también presentó sin previo aviso hace un par de meses. Lo mejor de ‘XTCY’ es que aquellas fueron el preámbulo de un aluvión de nueva música suya, así que quizá esté a punto de lanzar algo más serio, o lo que sea.
Sitting in the studio with my man @kanyewest and he said.. "Clark, let that new "XTCY"joint go!!! So.. ENJOY: NEW KANYE WEST.. https://t.co/n2LfhUvMxR
La internet “va espuni”, que diría el papá de Julio Iglesias. Hace sólo dos días que se estrenaba el primer adelanto de ‘Dancing Queen’, el disco de versiones de ABBA que ha grabado Cher para promocionar aún más la secuela de ‘Mamma Mia!’ en la que aparece. Se trataba del archiconocido ‘Gimme! Gimme! Gimme! (A Man After Midnight)’, single que los suecos lanzaron hace casi 39 años como bonus-track (!) del álbum ‘Voulez-Vous’ y que se mantiene fresco como una rosa.
Como todos sabemos, se trata de una canción que Madonna también contribuyó a popularizar entre otras generaciones construyendo su hit ‘Hung Up’ –que, de momento, no figura en este top 60 de canciones de la Ciccone que culmina con el cumpleaños de la diva la próxima semana– sobre su característico riff. Por eso parecía cuestión de tiempo que a alguien se le ocurriera hacer un mash-up de ambos temas. Lo que no esperábamos del todo es que fuera en menos de 48 horas. Como ha notado Billboard, un artista de Toronto llamado Alex Simpson ha mezclado ambos temas en uno y, evidentemente, todo encaja a la perfección.
No cabe duda que es algo que incluso podrían esperar las propias Cher y Madge y que hará bastante gracia cuando lo conozcan. Aunque en algún momento del pasado haya parecido que había algún tipo de beef entre ellas, es evidente que les unen ciertos posicionamientos ideológicos, como demostraron posando amigablemente en la Marcha de la Mujer de 2017.
Omar Banos es uno de los millones de estadounidenses que, como descendiente de familia latinoamericana (mexicanas, en su caso), emplea indistintamente el español y el inglés para expresarse. Lo hace también en sus canciones bajo el alias Cuco, las que le han llevado a convertirse en un héroe del nuevo underground norteamericano. Uno que, como es el caso de Clairo –con la que acaba de colaborar, como no podía ser de otra manera– o el sueco Boy Pablo –con ambos comparte estética lo-fi y la misma edad–, ha alcanzado el plano internacional proyectándose desde la intimidad de su dormitorio, vía Youtube y autogestionando su música.
Cuco, que comenzó tocando la trompeta en la banda de marchas de su instituto (como demuestra en algunas de sus canciones), se presenta como una especie de Mac DeMarco –una sonoridad de guitarras muy parecida, reminiscente de los 80, los ambientes sintéticos que anegan sus temas– que ha tenido el hip hop como parte fundamental de su crecimiento personal y artístico. Ya en canciones de su EP debut oficial de 2016, ‘Wannabewithyou’, como ‘Lover Is a Day’ o ‘Amor de siempre’ –como decía, el español y el inglés fluyen indistintamente en títulos y letras de sus canciones, un poco a lo Devendra Banhart– su manera de cantar tiende a una rítmica de rap.
Pero fue el año pasado, con el EP ‘Songs4U’ –que contenía temas tan brillantes como ‘One and Only’ y ‘Lava Lamp’– y sobre todo con el single ‘Lo que siento’ –a día de hoy, su mayor hit con más de 15 millones de reproducciones sólo en Spotify–, cuando afianzó ese estilo a medio camino del pop rock romántico y el trap pop. Un estilo que en los últimos meses ha consolidado ese espacio con ‘Chiquito’, un nuevo EP en el que colabora también su amigo el MC J-Kwe$t, y que ya hace innegable que Cuco representa a toda una generación de chicanos –como el mismo se define– que están perfectamente arraigados en la sociedad yanqui y su arte es capaz de alcanzar a cualquiera de las múltiples etnias con las que convive. El perfecto ejemplo de la Norteamérica que Trump se empeña en negar, vaya.
Pero, independientemente de consideraciones sociopolíticas, lo importante en este caso es que canciones deslumbrantes como ‘Dontmakemefallinlove’, ‘Lucy’, ’Summer In The High Time’ o la preciosa ‘Drown’, su nuevo dueto con Clairo, invitan a depositar las mejores esperanzas en su pop post-millenial. Cuco, por cierto, traerá sus canciones a España el próximo otoño: el 30 de noviembre estará en la sala Gotham de Madrid, y el 1 de diciembre en La [2] de Apolo, en Barcelona. Las entradas están ya a la venta en Ticketmaster.
En una época y un ámbito del pop en los que la sobreexplotación de la imagen se ha convertido en una pieza fundamental, Bea Pelea no hace vídeos y mantiene un perfil discreto, alzando apenas la voz para posicionarse del lado de su amigo Yung Beef en su conflicto con el festival O Marisquiño y ha renunciado a actuar allí por lo que considera un acto de censura (el regidor de Vigo, Abel Caballero, aseguró que no permitiría al Seco actuar en su ciudad). La impresión es que esta trotamundos nacida en Málaga que pasó también su infancia en México, Guatemala y Granada opta por hacer, sencilla y llanamente, las mejores canciones para hacer bailar y emocionar a su propia generación. Y sin duda, como ha demostrado el éxito que, sin más promoción que el boca oreja, han logrado varios temas de su EP debut ‘Reggaeton Romántico (Vol. 1)’, su capacidad para llegar a aquellos que hemos aprendido a respetar y disfrutar el reggaeton como un género inclusivo y rico es enorme.
Tras el éxito de aquel lejano ‘Oye Papi’ junto a La Zowi y Ms Nina, este miniálbum resulta la confirmación del enorme magnetismo de Beatriz Constenla, de un flow carismático que se adapta con asombrosa versatilidad a cualquier deriva urban que le sirvan. Así, se monta con idéntica soltura en el perreo oscuro de F1ILTHY en ‘La gasolina’ (con La Favi), en el proto-dembow a lo Bad Gyal que plantea Pipo Beatz en ‘Si no te vuelvo a ver’ o en los palos más reggaetoneros que presentan los audaces y certeros Los Del Control. Suyas son las producciones de varios de los momentos más sorprendentes e inmediatos del disco, como la irresistible neo-cumbia ‘Sé que me buscas’ o ese picante dembow junto a El Mini y Kaydy Cain que es ‘A los dos’. Ningún palo se le resiste a la andaluza, ni siquiera un ritmo ponzoñoso y lento como el de ‘Arrecha’, dueto con Somadamantina y la gran joya de este disco: un reggaetón sexual catártico, en el que las dos cantantes se roban con descaro e impunidad al hombre que quieren, pasando por encima de su pareja. “Pegajosísimas”.
En toda ese abanico de estilos, la pauta y gran parte de los ganchos los domina Pelea, con un lenguaje que aunque bebe de las calles de Madrid, Granada y el DF no es descuidado, ni cutre. Y, sobre todo, destaca por verbalizar de manera precisa que las mujeres del reggaetón están lejos de ser sumisas o machistas, a las que por supuesto les encanta follar, pero que no dependen de un único hombre dominante, como acotan las letras de ‘La gasolina’ (“ando hangeando con mis gatas por ahí, tu tiempo ya pasó, anda olvídate de mí”), ‘Culona’ (“no me hagas más dramas, no soy tu mama”, canta Ms Nina) o ‘Sincera’ (“ya no vuelvo corazón, aunque extraño tu calor, (…) sé que tu juré mi amor, luego me fui con dos”). ‘Reggaeton Romántico (Vol. 1)’ es un estupendo muestrario de nuevo pop urbano latino que quizá no esté gozando de mucho predicamento mediático, pero su éxito entre los chavales de las plazas y calles de tu barrio es merecidísimo.
Tras cancelar su participación en O Marisquiño, Bea Pelea actuará junto a Yung Beef y MC Buseta en la Discoteca Clip de Cangas este domingo 12 de agosto.
Calificación: 7,4/10 Lo mejor: ‘Arrecha’, ‘A los dos’, ‘Sé que me buscas’, ‘La gasolina’ Te gustará si te gusta: Tomasa del Real, Bad Gyal, La Zowi Escúchalo:Spotify
Hay mucha tela que cortar en ‘Queen‘, el nuevo disco de Nicki Minaj, quizá tanto para bien como para mal. Mientras los fans y el resto del mundo degustan al fin el primer disco de la rapera en cuatro años, empiezan a despuntar en el tracklist algunas de sus canciones hasta ahora inéditas, entre ellas la penúltima pista, ‘Coco Chanel’, cuyo final se ha separado en la pista siguiente por alguna razón (¿o será un “glitch”?), dando lugar a un “outro” de 52 segundos totalmente inútil.
‘Coco Chanel’ es una de las varias colaboraciones que incluye ‘Queen’, en este caso con la rapera Foxy Brown, que triunfó en los 90 con éxitos como ‘Get Me Home’ o ‘I’ll Be’. Curiosamente, tanto Minaj como Brown son de Trinidad, y la autora de ‘Anaconda’ ha asegurado que Brown es una de sus mayores influencias (solo la portada de ‘Chyna Doll‘ parece una premonición de Minaj); de hecho, ambas han llegado a actuar juntas en directo.
¿Qué resulta de la colaboración entre quien fuera una de las raperas más importantes de los 90, y quien es una de las raperas más importantes de la actualidad? ‘Coco Chanel’ es una canción oscura, de ritmo reggaetón (se nota que las dos raperas tienen raíces caribeñas), pero fondo frío e industrial, en el que sin embargo Minaj y Brown despliegan versos con cierto carácter cómico, empezando por el estribillo chapurreado en “spanglish” “ellas quieren coco, y yo tampoco / número uno, me llaman Yoko”. Aunque el mejor verso lo pone Nicki al final, cuando rapea “they call me Mrs. Bitch, but I don’t miss, bitch” para luego preguntarse: “Who me? I’m physically fine / Who she? It’s like we know she dyin’ / Bitch ain’t see the board in 2017 / Had to drop Queen on ‘em like a guillotine”. Se desconoce a quién se refiere Nicki con tanta mala baba en ese “ella” y en ese “ellos”, pero mientras lo descubrimos deja un sonoro y memorable rap como solo los hace ella, perfecto para terminar ‘Queen’ en todo lo alto.
Lori Meyers han sacado un recopilatorio llamado ’20 años. 21 canciones’ en el que repasan su carrera desde su formación 1998 (su primer disco salió en 2004, pero la banda funcionaba desde antes mediante la edición de maquetas, conciertos, etcétera). El álbum recopila 21 temas escogidos por 21 amigos, colaboradores o fans famosos, lo que incluye gente como Dani Rovira, El Chino de Supersubmarina, Anni B Sweet o varios locutores de radio. Hablamos con la banda sobre este disco, su carrera o el concierto con el que se van a despedir de los escenarios durante un año, que se celebra el día 29 de diciembre en el WiZink Center de Madrid. Las entradas están disponibles en Ticketea.
Contadme por qué sacáis un recopilatorio cuando ya todo el mundo puede hacer una playlist con sus canciones favoritas de Lori Meyers. Veo que la edición física es espectacular…
Alejandro: «Por un lado, está la edición física y por otro que no es un «greatest hits». Nosotros no hemos confeccionado el setlist del CD1. Hemos pensado en 21 personas que tienen una relación personal o profesional importante en la carrera del grupo, y la gente ha ido escogiendo su canción favorita. Evidentemente hemos puesto pautas, como que hubiera canciones de todos los discos. Hay singles, pero también alguna cara B como ‘Vigilia’, que la ha escogido El Chino de Supersubmarina, y ha contado su experiencia personal. En el CD2 colaboramos más: hay maquetas y canciones inéditas de ‘Cronolánea’, de ‘Impronta’. El libreto tiene material pre-‘Viaje de estudios’, no del que está en las redes. Es para fans y para no fans. Es recopilación pero también tiene contenido extra. Es una forma de dar una vuelta a lo que es un recopilatorio. Nos resultaba más interesante que gente que le guste el grupo o haya sido importante para nosotros elija sus favoritas».
El problema es que se parece bastante a un «grandes éxitos»… sólo que faltan un par de temas de los más escuchados de Lori Meyers, ‘Zona de confort’ y ‘Luciérnagas y mariposas’.
Alejandro: «No hemos entrado dentro de la selección. Jon Sistiaga ha escogido ‘Luces de neón’ porque a lo mejor no conoce ‘Hostal Pimodan’, Carles Conesa ‘Ya lo sabes’ de ‘Viaje de estudios’ porque su relación con el grupo es más de la primera época… Claro que hay canciones que son hits, pero son ellos los que han diseñado el setlist».
Pero tampoco podía faltar ‘Mi realidad’, ‘Alta fidelidad’, supongo.
Noni: «La gracia era delegar en los demás».
Alejandro: «Sebastián (Krys), que ha sido una persona importante para la carrera del grupo, sin preguntarle, estaba claro que iba a escoger ‘Mi realidad’, conociéndole. En las maquetas la vio, la trabajamos, fue un punto de inflexión para el grupo. Virginia Díaz iba a escoger ‘Alta fidelidad’ porque es su canción favorita».
Oasis y Björk tienen recopilatorios imperfectos, en los que faltan temas muy famosos, ¿no teníais ese miedo?
Alfredo: «No, somos un grupo de canciones, más allá de los éxitos más populares o menos. Siempre hemos tratado cada canción como única. No queríamos un «greatest hits» sino que cada uno escogiera una canción a través de su experiencia personal. Nunca se nos ha planteado el miedo».
¿No os da rabia que haya quedado algo fuera?
Noni: «Ninguna y mogollón. Tampoco era el tema. El CD1 está guay para la gente que escribió, pero lo mejor para la gente que nos sigue desde hace tiempo, que es fan de Lori Meyers, es el CD2, con cosas que teníamos en cajas, rarecillas que están chulas».
Alejandro: «Sí nos hemos dado cuenta de que hay 4 canciones inéditas en el CD2, y el otro día encontramos una canción en un disco duro para ‘En la Espiral’. La canción habla del concepto de la espiral, la habríamos metido en este y, por lo que sea, ha quedado en la oscuridad».
¿Cómo ha sido bucear en los archivos viejunos del grupo?
Noni: «Me lo he pasado bien y me he reído mogollón. Hay cosas que dan vergüencilla, letras que hacía en plan lectura automática, pero nosotros ya estamos perdiendo la vergüenza. Lo más guay es que la gente escuche las cosas con sus fallos. Hay maquetas muy chulas porque guardaban el rollo nuestro de hacer cosas a nuestra manera. Con inéditas me he partido el culo».
Alejandro: «Te ves como otra persona».
¿Lo que hay en el CD es de risa guay o de risa no guay?
Alejandro: «Hay más risas escondidas (risas). Pero hay que ceñirse al formato».
Noni: «Ha quedado fuera alguna letra súper imbécil, cosas con errores, una versión de Miguel Ríos que se nos olvidó».
Alfredo: «‘Vuelvo a Granada'».
Noni: «Tenemos mucho boceto que está guay ir sacando, para los fans de Lori Meyers está guay».
¿Te habrá hecho ilusión que esté ‘Océanos’, ¿no, Alejandro?
Alejandro: «Sí, por qué voy a decir que no… Y ‘Explícame’ la hace Arturo (García) porque tuvo mucho relación conmigo, porque hicimos una gira con él con Cecilia Ann, con mi hermano Julián, que estaba al principio en Lori. Hay un componente sentimental».
Al final el que veo un poco infrarrepresentado es el último disco y ‘Océanos’ tampoco se promocionó.
Noni: «¿Y ‘No estoy solo’, que la compuse y no la hemos tocado ni una vez? Llevas cientos de canciones para un disco y al final tocas seis».
Alejandro: «El problema es que es difícil gestionar singles. La gente ha hecho singles canciones que no eran singles como tal. Estamos deseando tocar canciones que musicalmente son más gustosas de tocar, pero hay que atender al público, y con los discos pasa igual. ‘Océanos’ y ‘Vértigo 1’ son de mis favoritas del disco y no son de las más populares».
¿Estáis contentos con la recepción del último disco o esperabais más?
Alejandro: «El disco era necesario y el contenido que tiene es lo que había. No creo que hubiera ido de otra forma con otros singles. Es un disco fundamental en nuestra carrera, el sexto, con el que queríamos romper ciertas cosas que veníamos haciendo».
Noni: «Angel Carrión (Universal) inventó el concepto la canción cero, el tema cero (risas)».
Me comentabais que hay textos muy diferentes en el libreto, ¿verdad?
Alejandro: «Hay gente como El Monaguillo, que ha hecho un texto humorístico, textos más emotivos como de El Chino de Supersubmarina, porque ‘Vigilia’ fue importante para él para dedicarse a la música… El de Jon Sistiaga es diferente porque habla de una experiencia con su hija en la parte de atrás del coche en la que tuvieron una conversación y empezaron a cantar ‘Luces de neón’… Son experiencias personales.
¿Y el de Dani Rovira?
Alfredo: «Es curioso que en su texto y en el de El Monaguillo es llamativo que los dos son malagueños y hablan de una experiencia similar, de cómo les ayuda la música a desarrollarse en sus carreras al cambiarse de ciudad… Sin haber hablado entre ellos la experiencia que narran es parecida. Es lo guay de este formato. Son nuestras canciones pero vistas por otras personas. Es como si nos viéramos desde el público, desde fuera donde no podemos vernos».
¿Cómo los habéis organizado? ¿Quién se ha encargado de compilarlos y corregirlos? Porque no todo el mundo sabría escribir…
Alfredo: «Los textos han sido libres, y yo creo que los que lo mandaban ya pasaban un corte de estilo».
Noni: «Había un hilo de mails, con el sello en copia, íbamos recopilando y una persona se ha encargado de juntarlos».
Lo preguntaba por si habíais comentado alguno en el hilo de mails o por WhatsApp más que otro.
Alfredo: «Todos tienen su punto especial, unos son más emotivos, otros cuentan su experiencia y ves hasta dónde puede llegar la música. Jesús Gallego ha hecho ‘Zen’ porque la ponía su mujer y era su favorita».
Noni: «Hay uno que es totalmente especial, el de Paco Méndez, el padre de Álex, es el más largo y cuenta los inicios del grupo porque él fue quien nos introdujo en la música. Anni es mi pareja, es súper amiga, pero en realidad uno de los más importantes es el de Paco Méndez porque resume nuestros inicios».
Ya que mencionas a Anni, el disco en español que graba, ¿dónde está metido?
Noni: «Va a estar muy guay y poco tengo que ver. Lo está haciendo todo sola. Va por su camino, hay un cambio difícil al cambiar al español, en la voz, en muchas cosas. Está siendo guay el cambio. Espero que le mole a la peña».
Os lo estarán preguntando mucho, pero no me he enterado de por qué hay 21 canciones para celebrar los 20 años.
Alejandro: «Mejor dejar propina que quedarse corto».
Noni: «Al final recibimos un comentario más. Los números no nos importan, pero no queríamos dejar fuera a nadie».
Alejandro: «Contamos mal».
Noni: «Ya hemos dicho en alguna entrevista que las matemáticas no son lo nuestro».
En la nota de prensa habláis de las disidencias y los momentos malos, ¿lo consideráis importante también en la historia del grupo?
Alejandro: «Totalmente, quizá en el libro no viene, pero en las entrevistas sí estamos contando que tuvimos un momento malo en ‘Hostal Pimodán’, cuando se fue Julián. Hemos contado con muchos músicos, pero lo suyo fue más doloroso porque era fundador. Hubo un problema, no solo porque se fuera él, pero de eso nos hicimos más fuerte los tres».
¿Tenéis contacto con él?
Es mi hermano.
Yo qué sé, mira Mecano.
Noni: «Se fue a Los Planetas y Miguel se vino de Los Planetas, a Jota no le gustó al principio pero luego le gustó más (risas)».
Alejandro: «Cambio de cromos».
¿Cómo va a ser el formato del WiZink Center? ¿Es The Ring?
Alfredo: «The Ring con el fondo entero, aún quedan 6 meses».
Alejandro: «Vamos a ir abriendo en función de cómo vaya».
Noni: «Todo lo que se pueda. Si ves muchas personas en cartón-piedra… (risas)».
Amaral lo hicieron así también, ¿no?
Alejandro: «Todos los grupos lo hacen así, a menos que vendan 10.000 entradas en dos días».
Noni: «Para nosotros el último empujón suele ser muy importante, y llevamos un año anunciándolo porque WiZink tiene dos años de fechas reservado» .
Alfredo: «Nos preocupa más que sea especial que que haya 2.000, 3.000 o 15.000 personas. Estamos más en lo artístico».
¿Estáis mirando invitados, sorpresas…
Noni: «Invitados especiales no, porque es lo típico y tenemos un montón de amigos. Tendríamos que llamar a todos, y tendrían que entrar 3 músicos por canción. Sí va a haber algo especial de formato artístico. Vamos a intentar que la gente entre en nuestra historia nada más entrar al WiZink Center. Nos vamos a permitir varios lujos. Es un hasta luego porque no vamos a tocar en año y pico, mínimo, y tenemos preparadas cosas para que esa noche sea especial. Es un reflejo de toda la carrera, con cosas que en un festival por tiempo no puedes hacer».
¿Y necesitáis un año y medio para hacer un disco? Normalmente, no se necesita tanto…
Noni: «Nosotros sí, ¡hazlo tú! Vente a casa conmigo y te voy viendo cómo lo haces, llamamos a Guille Mostaza…» (risas).
Alejandro: «Teniendo en cuenta cómo ha sido con el último, queremos decir de antemano que un año y medio, y si viene antes, pues vendrá antes. Hay ya 7 canciones…»
Noni: «No sabemos ni si va a haber productor. Si empiezas a tocar, los festivales ya no empiezan en junio, sino en marzo, mayo, abril. Con la «Espiral», fuimos a México, en España no teníamos productor… y al final pasaron 2 años».
Alfredo: «Lo que nos apetece es centrarnos en el ensayo. ¿Que es un año? ¿que es medio? Lo que queremos es dejar un barbecho».
Noni: «Luego Mariño (mánager) cerrará 3 bolos, JENESAISPOP dirá que no hemos cumplido lo de no tocar… (risas) Me da igual, me das el WhatsApp y yo te lo chivo. Si alguien paga, tenemos a la crew detrás diciendo: «¡¡hay que trabajar!!». Pero vamos a intentar que no».
Habéis mencionado 7 maquetas, ¿en qué punto están?
Alejando: «Está ya ensayadas. No terminadas. Son bocetos y maquetas».
Alfredo: «Hay que parar la gira, meterse, acabar, centrarnos en el próximo disco…».
¿Y a qué suenan?
Alfredo: «reggaeton, trap, rap…» (risas)
Oye, no sé, mira la canción del verano de Sidonie…
Alejandro: «Lo oí ayer con Virginia (Díaz)».
Alfredo: «Le dijo el padre de Marc a Marc que parecía de Georgie Dann».
Creo que lo llega a poner en la nota de prensa oficial. ¿Y este contrato que ha pululado por aquí durante la entrevista? ¿Sólo tenéis un disco más firmado con Universal?
Alejandro (risas): «Es el contrato para este porque canciones que no estaban registradas, maquetas… es el contrato de obra».
El 5 de octubre se publica ‘Trench’, el nuevo álbum de Twenty One Pilots, uno de los grupos más populares de la actualidad gracias a canciones como ‘Stressed Out’, ‘Ride’, ‘Heathens’ o ‘Tear in My Heart’ que, fusionando géneros como el rock, el pop, la electrónica y el hip-hop, han logrado conquistar a cientos y cientos y cientos de millones de personas en todo el mundo, y solo hay que observar sus espectaculares cifras en las plataformas de streaming para comprobarlo (solo ‘Stressed Out’ suma más de 800 millones de reproducciones en Spotify).
Tras lanzar ‘Jumpsuit’ y ‘Nico and the Niners’, el dúo de Columbus, Ohio compuesto por Tyler Joseph y Josh Dun es actualmente número 12 en la lista de vídeos más vistos en Youtube España con el videoclip de su nuevo single, ‘Levitate’. Dirigido por Andrew Donoho, el vídeo halla a Joseph y Dun en un bosque poblado por campistas con antorchas, y en el que parece haberse instalado una anarquía. De hecho, Joseph y Dun llegan a actuar frente a un coche en llamas. Por otro lado, parece importante en el vídeo la presencia de los buitres y, de hecho, en la letra de la canción, Joseph declara ser un “buitre que se alimenta del dolor”.
Como os contamos, Twenty One Pilots presentarán ‘Trench’ el año que viene en España, primero en el BEC! de Barakaldo, el 15 de marzo, y después en el WiZink Center de Madrid, el 16 de marzo. Las entradas están disponibles en Ticketmaster.
Demi Lovato ha cancelado el resto de su gira para entrar en rehabilitación, ha confirmado en declaraciones a Variety Live Nation, que confirman Lovato desea “concentrarse en su recuperación”. Quedan canceladas seis fechas en América Latina, concretamente en Chile, Argentina y Brasil, que debían de tener lugar en noviembre. La cantante presentaba ‘Tell Me You Love Me‘, su último disco, en una gira que sí llegó a España a finales del mes de junio.
Lovato se recupera actualmente de una sobredosis (se comprende que de algún tipo de opiáceo), por la que fue hospitalizada en Los Ángeles el pasado 24 de julio. La cantante permaneció ingresada una semana, tras lo cual publicaba un comunicado en Instagram agradeciendo a su familia, a su equipo, al personal médico que la atendió y a sus fans el apoyo recibido y la preocupación, e indicando que “seguirá luchando” para superar sus adicciones. “Lo que he aprendido es que esta enfermedad no es algo que desaparezca o se diluya con el tiempo. Es algo que debo seguir superando y todavía no lo he hecho”, apuntaba. Sobre su recaída en las adicciones cantó Lovato en ‘Sober‘, la canción que estrenó solo un mes antes de su hospitalización.
Sacudido por la inesperada rectificación de Nicki Minaj que ha decidido sí publicar hoy su nuevo álbum ‘Queen’, tal cual estaba previsto inicialmente, este viernes se preveía tranquilo en lanzamientos, pero a lo tonto hay un buen montón de novedades. En cuanto a álbumes, por ejemplo, destaca el primer disco en solitario de Pedrina (del dúo Pedrina & Río), los nuevos discos de Jake Shears (Scissor Sisters), The Coral, Miles Kane, Jason Mraz, un álbum con invitados tamaño Diplo del prometedor Trippie Red y los debuts del productor británico Ben Khan y Tirzah, producida por Micah Levi. También se publican EPs de Moses Sumney, Son Lux y Folly Rae, además de un disco del audaz productor español $kyhook.
En el apartado sencillos, a las novedades presentadas a lo largo de la semana por Aphex Twin, Cher, Troye Sivan, Ciara, Matthew Dear (con dos adelantos de su álbum de regreso), Art Brut (también anuncian disco, 7 años después del último) o Alex Winston (primera canción propia en muchos años, tras la aventura en formato dúo de Post Precious), hoy hemos amanecido con nuevas canciones de Twenty One Pilots, LSD (Labrinth, Sia, Diplo), Cecilio G. (desatado), Paul Simon, Big Red Machine (proyecto de Justin Vernon –Bon Iver– y Aaron Dessner –The National–), Quavo, Elle King (la del hit neosoul ‘Ex’s & Oh’s‘), Wild Nothing, Mitski, Gepe, Marissa Nadler, Gallant, Soap&Skin, Ten Fé, Hello Seahorse!, Maluma, Jesse Reyez, Example, Danny Ocean, Broods, Anteros…
En cuanto a remixes, inéditos y otras zarandajas similares, LCD Soundsystem presentan un EP de remixes, emerge un tema inédito de Vampire Weekend de la era ‘Contra’ (una versión alternativa de ‘California English’ que aparecía en la cara B de ‘Cousins’), Fall Out Boy presentan un remix de un single de su último disco junto a Princess Nokia, una nueva versión de ‘Zeroes’ de David Bowie (imaginamos que se aproxima una reedición de ‘Never Let Me Down’), Kacey Musgraves versiona a Roger Miller para un álbum tributo y Lykke Li hace lo propio con ‘U Got It Bad’ de Usher en una sesión para Spotify. Aunque la palma se la llevan Toto, que devuelven la ¿broma? a Weezer versionando su ‘Hash Pipe’.
Probablemente Iggy Azalea no se imaginaba, cuando lanzó ‘Ignorant Art’ en 2012, hasta dónde llegaría su éxito dos años después… pero menos aún se imaginaría lo efímero que iba a ser. Con ‘The New Classic’ y después de ‘Work’ y sobre todo ‘Black Widow’ y ‘Fancy’ parecía claro que iba a ser una nueva superestrella, con las ya superestrellas peleándose por colaborar con ella: ¿os acordáis de ‘Problem’ de Ariana Grande? ¿De ‘Pretty Girls’ de Britney? ¿Del segundo ‘Booty’ de J. Lo (mucho mejor que la original con Pitbull, por cierto)? También Selena Gomez, Ellie Goulding, MØ, Demi Lovato, Pusha T, Tinashe, Katy B… Iggy estaba en todas partes. Hasta que se convirtió en una de las personas más odiadas de la industria musical –y en la enemiga número uno, y mira que la lista es larga, de Azealia Banks–. Mil polémicas, sumadas a desvaríos varios en lo musical y problemas con su discográfica, hicieron que su supuesto segundo álbum ‘Digital Distortion’ nunca llegase, y que Iggy haya dejado de intentar ser una superestrella pop (o que hayan dejado de intentar convertirla en eso), y se haya centrado en hacer lo que le gusta. O eso parece a juzgar por el EP que acaba de lanzar.
En una entrevista reciente, Iggy reconocía que cometió muchos errores en el pasado, y que verse atacada por todas partes hizo que respondiese a la defensiva y no tanto reflexionando sobre lo que le decían, aunque también considera que hubo mucho machismo en el hecho de que a ella se le crucificara, y con tantísimos raperos blancos no hubiese habido tanto problema. Luego, preguntada por si había considerado abandonar la música después de todo lo ocurrido, Iggy responde que no, y añade “tampoco es que tenga una elección en realidad… es mi pasión”. Quizás por eso este EP parece más auténtico que la mayoría de lo que había ido sacando hasta ahora: el sonido recuerda a sus inicios, aunque con un punto más oscuro -sobre todo en ‘Tokyo Snow Trip‘, con unos susurros que funcionan especialmente bien-, y la sensación de que ha tenido más control sobre este EP se simboliza también con las intervenciones de su amiga Alejandra Hernández, encargada de abrir el EP en el tema homónimo y cerrarlo en la repetitiva pero divertida ‘OMG’. Además de Hernández, Iggy se ha rodeado en la producción de Ljay Currie (con quien ya trabajó previamente con su EP gratis ‘4 My Ratz’), Ronny J (colaborador de XXXTentacion y Lil Pump), Wallis Lane (Drake, el último de Travis Scott), Bedrock, GT of Ear Drummers (Mike wiLL Made-It) o Smash David (Khalid, Big Sean).
El resultado de todo esto es una colección de seis temas que evidentemente abordan su controversia y sus haters, a veces de forma más facilona (“nosey hoes askin’ bout my brand new nose / but my bank account, got some brand new 0’s”), otras más conseguida (“he love the white chocolate, I’m ticker than a Snicker”, “they tellin me be humble but they know I’m cocky”), otras con shade, como el que le lanza con “lemme drop a lil wisdom / crack kills, you a victim” a Halsey (recordemos que ésta dijo estar fascinada al ver “cómo la carrera de esa puta idiota se disolvía”) y, en general, con una producción y un ambiente en el que se ve más cómoda a la rapera, que no en vano entrega aquí con ‘Kream’ su mejor tema desde la época de ‘Work’ (aunque ‘Mo Bounce’ y -sobre todo- ‘Switch’ son dos buenos placeres culpables). Si ‘Survive The Summer’ es el preludio de un futuro segundo disco –esta vez sí– de la australiana, son buenas noticias, porque éste es el camino a seguir. Y, a juzgar por lo bien que le está yendo a ‘Kream‘ en streamings, es bastante probable que Iggy sobreviva a su metafórico verano de mierda. Green light, switch!
Calificación: 6,3/10 Lo mejor: ‘Kream’, pero también ‘OMG’ y ‘Tokyo Snow Trip’ Te gustará si te gusta: la primera Iggy, Cardi B, Brooke Candy, Nicki Minaj, Bad Gyal Escúchalo:Spotify
Meses después de que LSD, el proyecto conjunto de Labrinth, Sia y Diplo bautizado con sus iniciales en lisérgica combinación, se presentaran en sociedad con sus dos primeros singles, hoy llega el tercero. Se trata de ‘Thunderclouds’, un tema basado en un ritmo de medio tiempo soul, con arreglos doo-wop en los coros que respiran cierto clasicismo.
También en su estructura, que pone en primer plano su estribillo, cantado alternativamente por la australiana y el británico la melodía más certera que el trío haya lanzado hasta el momento. Por su parte, la letra retrata una relación de pareja en la que las inseguridades hacen mella, pero finalmente uno presta confianza al otro para que “no tema esas nubes tormentosas”.
En el mes de mayo este más o menos inesperado (Labrinth y Sia ya habían colaborado en el pasado) trío publicaba primero ‘Genius’, encabezada por aquellos dramáticos arreglos orquestales, y luego ‘Audio’, un tema más contemporáneo en fondo y forma. Tras este ‘Thunderclouds’ casi clásico, parece aclararse que el leitmotiv de LSD es no casarse con ningún estilo concreto o con todos al mismo tiempo. También se intuye, dado el esmero de la parte gráfica y las imágenes promocionales, que se trata de un proyecto muy serio y con visos de continuidad, quién sabe si incluso de un álbum completo. Estaremos muy atentos, sin duda.
Kanye West concedía anoche a Jimmy Kimmel (al que una vez llamó “cabrón manipulador” tras un enfrentamiento dialéctico) su primera entrevista televisiva en directo en mucho tiempo. Serio y algo nervioso, West acudía para hablar de su nuevo disco, ‘ye’, y de hecho lo hizo: Kimmel le cuestionó en particular sobre ‘I Thought About Killing You’, lo cual derivó en hablar de suicidio y su bipolaridad (“Es importante que tengamos conversaciones abiertas sobre salud mental. En la comunidad negra no tenemos terapeutas”, dijo), y ‘Violent Crimes’.
En ella, una de las mejores canciones del disco, su letra le sitúa en el punto de vista de padre ante los hombres que quizá podrían tratar con machismo o incluso abusar de su hija North en un futuro. “¿Tener una hija ha cambiado tu percepción hacia la mujer?”, le cuestionaba el presentador. “No. Sigo viendo Pornhub”, contestó West tajante e hilarante a la vez. Su categoría favorita es «negro sobre blanco, obviamente». También hubo espacio sobre esa teoría suya de que en las escuelas se enseña mucha historia pero no se enseña a proyectarse en el futuro (aquello que le llevó a aseverar que «la esclavitud fue optativa»), y a hablar del amor de una gran fuerza.
Pero los esfuerzos de Kimmel por sacar a colación a Trump, al que West ha alabado repetidamente causando no poca controversia, repetidamente no terminaron de dar fruto: primero le preguntó si por un momento le molestó ver que su esposa, Kim Kardashian, se reunía a solas con el Presidente en el famoso despacho oval. Ye eludía la respuesta diciendo que Trump es un “casanova” (“a player”, dijo); más tarde, y de forma bastante incisiva y dura, el conductor atacó el asunto de la política migratoria de Trump. Tras mencionar cómo está separando a niños de sus padres cuando estos intentan atravesar ilegalmente la frontera con Estados Unidos, cuestionó “nos guste o no su personalidad, sus acciones son lo que importan. De forma célebre y poderosa dijiste una vez que a George Bush no le importaba la gente negra [Nde: lo dijo por su gestión de la tragedia del huracán Katrina]. Me hace preguntarme ¿qué te hace pensar que a Donald Trump sí le importa?”. Ante la contundencia de la pregunta, West guardó un visiblemente incómodo silencio (probablemente madurando su respuesta), pero tras unos segundos Kimmel dio paso a publicidad y la cuestión quedó en el aire, salvándole de mojarse, como puede verse en este vídeo con la entrevista completa.
Pese a que la pasada semana se dio por confirmado que ‘Queen’, el nuevo disco de Nicki Minaj, se publicaría el próximo 17 de agosto, finalmente será hoy, justo como estaba previsto inicialmente, cuando vea la luz. Aunque la decisión ha sido tomada in extremis: el anuncio lo realizaba esta madrugada la propia Minajen su nuevo programa de radio en la emisora Beats 1, explicando que había terminado apenas 3 horas antes de entrar en antena. Sobre la bocina, vaya. De hecho, aunque pensaba radiar algunas de sus canciones durante la emisión, tuvo que desistir por problemas burocráticos o administrativos de su sello: “Iba a poner el álbum ahora mismo, pero alguien la ha cagado. Ahora mismo hay mucho drama corporativo por aquí”, dijo según Pitchfork.
Como recordaréis, el teórico motivo de la demora sería un problema para legalizar un sample de Tracy Chapman, para lo cual Minaj hizo un llamamiento directo a la autora de ‘Fast Car’. La repentina noticia del lanzamiento “prematuro” no deja claro si finalmente Tracy ha dado su consentimiento o no, pero lo que es seguro es que, de aparecer, no será como un featuring. Así lo comprobamos en el tracklist final que ha presentado la rapera en sus redes sociales. Al margen de la inclusión de singles previos como ‘Bed’, con Ariana Grande, y ‘Rich Sex’, con Lil Wayne, otros artistas invitados son The Weeknd, Eminem (en ‘Majesty’, que también cuenta con Labrinth), Future, Foxy Brown y Swae Lee. Sorprende la ausencia de ‘Barbie Tingz’, que incluso tuvo su vídeo oficial cuando fue lanzada con ‘Chun-Li’ (en este caso sí figura en el tracklist final).
Por el momento ’Queen’ no está disponible en las plataformas digitales, puesto que el lanzamiento oficial tendrá lugar a las 12:00h PM de la Costa Este norteamericana, que serán las 18:00h PM en Europa. Aunque Nicki ha asegurado que en una hora realizará una nueva emisión de ‘Queen Radio’ para anticipar el álbum completo. Actualización: ‘Queen’ ya está disponible en Apple Music y en el resto de plataformas de streaming.
14 añazos después de que se estrenara la oscarizada ‘Los Increíbles’, el maravilloso acercamiento de la factoría Pixar al universo de los superhéroes, tenemos entre manos su secuela, ese filón que ha encontrado la subsidiaria de Disney para alimentar sus finanzas a base de bien: tras ‘Buscando a Dory‘, ‘Cars 3’ y esta, próximamente veremos una segunda aventura de Rompe Ralph y ‘Toy Story 4’. ‘Los Increíbles 2’ es un nuevo exitazo rotundo de taquilla en sus primeros días de estreno y lo cierto es que no por esperable deja de estar totalmente justificado en varios aspectos. 4, en concreto.
La acción
Curiosamente, para la familia Parr, superpoderosos protagonistas de estos filmes de Brad Bird (director de films tan distintos como ‘Ratatouille’ y ‘Misión Imposible: Protocolo Fantasma’), apenas han transcurrido unos días desde que les veíamos tratando de salvar su ciudad de un villano. Y así, una vez más, comienza ‘Los Increíbles 2’, con una vibrante escena de acción. Una de las docenas que contiene la película, tanto corales como individuales, nocturnas, diurnas, tecnológicas, domésticas, por mar, aire y tierra… Un auténtico carrusel que se convierte en el leitmotiv de esta secuela y que la convierten en un desenfreno visual total, una auténtica gozada que apenas da respiro.
El humor
Sin duda, las escenas de Mr. Increíble superando obstáculos cotidianos como si se tratase de robots asesinos en la isla de Síndrome es uno de los grandes aciertos de Bird y su equipo en ‘Los Increíbles 2’. Aunque sin duda el gran descubrimiento de esta secuela está en Jack-Jack, una mina de situaciones desquiciadas, inesperadas y trepidantes –sus escenas con el mapache y con Edna son de lo más hilarante de la factoría de animación en un mucho tiempo– en las que el bebé no está tratado como una cosa cuqui y que da risa per se. Lástima que ese toque humorístico se vaya diluyendo disimuladamente hasta prácticamente desaparecer como la adolescente Violeta cuando emplea sus poderes.
La estética
Técnicamente, ‘Los Increíbles 2’ es una nueva maravilla de Pixar en la que la realidad de los efectos de iluminación y los elementos naturales es verdaderamente alucinante. Una ultrarrealidad que está sorprendentemente bien equilibrada con la estética 50s –un bonito homenaje a los orígenes del cómic de superhéroes que se hace explícito en la cabecera y créditos–, el toque de exageración caricaturesca de los héroes adultos y, sobre todo, los escenarios, donde se alterna arquitectura a lo Frank Lloyd Wright con futurismo y oscuridad al más puro estilo Gotham City de forma siempre elegante.
El mensaje
Sin desvelar demasiado la trama, diremos que el foco deja definitivamente de ser para Bob Parr, Mr. Increíble, y se reparte a partes iguales con toda su familia. Especialmente con su esposa, ElastiGirl, pero también con sus hijos, Violeta, Dash y Jack-Jack, que terminan siendo más que cruciales en la historia. Así, nos encontramos con el poderoso equivalente a Superman del universo Disney cediendo “los pantalones” a la capaz Helen y asumiendo su faceta de padre. El mensaje de igualdad y paridad de roles familiares que esto presenta a los niños es fantástico, como también lo es el hecho de que los pequeños descubran que no deben temer asumir responsabilidades en la vida, y que no son el centro del universo sino la parte fundamental de un engranaje vital y emocional.
Hasta aquí los puntos fuertes de ‘Los Increíbles 2’ que, de haber mejorado en 2 factores en particular, incluso podríamos aseverar que esta segunda parte es una excepción a la regla y mejoraría a la primera. Pero…
El guión
Pese a disponer una historia lo bastante compleja como para mantener la atención de adultos y niños por igual, Bird abre tantos frentes que el resultado final termina por ser algo deslavazado. Una trama que se va revelando en lo fundamental algo predecible, con demasiados superhéroes invitados que en realidad no aportan tanto a una historia que se va haciendo cada vez más previsible conforme avanza, especial y curiosamente donde no se debe fallar: en el redoble final. Da la sensación de que la historia ha sido cerrada como una maleta demasiado llena cuya cremallera se resiste: a empujones. Con el riesgo de que algún calcetín se nos queden colgando. claro.
La moraleja
Y es que, pese a lo bien encaminada que parecía esa intrahistoria familiar, la lectura secundaria y adulta que ofrece Pixar en muchas de sus mejores películas queda desplazada con un trazo grueso, a puñetazos, carreras, rayos y bofetones, en aras de la acción. ¿Dónde queda, mediada la primera hora, esa potencial llamada a la igualdad de roles de madres y padres? ¿Y dónde ese rompedor discurso del villano Raptapantallas, anticapitalista e inconformista, que denuncia la idiotización de la sociedad? Hechos cenizas, sepultados bajo el mar… Quién sabe… Quizá Bird se dio cuenta de que si seguían dejando al malvado explicar bien sus ideas, acabaría despertando cierta empatía. 7.