Triángulo de Amor Bizarro han estrenado ‘Ruptura’, primer adelanto de su nuevo disco. Lo han hecho en el programa de Ángel Carmona. La canción ya está en las plataformas de streaming tras haberse podido escuchar en el correspondiente podcast de Radio 3.
El primer avance de este trabajo, que NO es el single oficial según palabras del propio Carmona, es un tema abrasivo, realmente arrollador, con sintetizadores un poco Suicide y también un poco Merzbow, además de guitarras bastante duras, que puede recordar en general al trabajo de Fuck Buttons o de grupos de rock electrónico del estilo. La letra dice poco más que «no me arrepiento de nada» y «no quiero nada de ti» mientras la voz principal está pasada por un filtro de distorsión espectral. Si la banda se hace llamar a sí misma «picadora de ruido incomprensible» esta canción le hace honor en el buen sentido.
El pasado mes de octubre, Triángulo hablaban sobre la grabación de este disco, que sucederá al excelente ‘Salve discordia‘ (10/10 para JENESAISPOP) y para el que han vuelto a trabajar con el productor Carlos Hernández. Decían que se compone de «las canciones que más nos representan de todas las que hemos hecho». Y añadían: «Más allá del alcance, del reconocimiento, del éxito o del fracaso, de que sea el mejor o el peor de nuestros discos, de las reproducciones o los likes, estas canciones reflejan lo que somos, son lo que somos, lo que sentimos y lo que nos importa, lo que amamos y lo que odiamos. Estas canciones son, más que nunca, nosotros. Este disco representa la causa y el porqué de nuestra dedicación a esto».
Esta semana hemos escogido como «Disco de la Semana» el tercer álbum de Halsey, ‘Manic‘. Un álbum que no es fácil de digerir tanto por su extensión como por la aparentemente inopinada diversidad de estilos que contiene. Pero, tal y como está reconociendo gran parte de la crítica musical de todo el mundo y condición, se trata de un disco fantástico que recompensa las escuchas esmeradas, y en el que la autora de ‘New Americana’ da cuenta de su madurez personal y artística exponiendo en sus canciones sus sentimientos más íntimos y a la vez desplegando un gran número de influencias. A estas últimas dedicamos este artículo, desgranando cinco discos –aunque podrían ser muchos más– que parecen haber sido una influencia manifiesta en la creación del mismo.
Podríamos recurrir igualmente al exitoso y premiadísimo ‘WHEN WE ALL FALL ASLEEP, WHERE DO WE GO?’. Pero en realidad, dado que el proceso creativo de ‘Manic’ estaría más que avanzado cuando se publicó y pudimos asimilar el primer álbum de Billie, parece más lógico pensar que fue su primer EP el que realmente marcaría a Frangipane en la creación de ‘Manic’. Quizá siguiendo una tendencia minimalista cada vez más acusada en el pop mainstream, el eco de las exiguas producciones de Finneas O’Connell recorre prácticamente todo este nuevo trabajo de Halsey, incluido las más orgánicas y acústicas. Porque más allá de que el propio hermano de Eilish participe en una de las canciones de este –concretamente en ‘I Hate Everybody’, con esos teclados y arreglos tan beatlescos–, la influencia de ese espíritu sonoro impregna también otros temas en los que no participa como la fantástica ‘Ashley’ –benny blanco y Cashmere Cat están detrás de su producción–, la pseudo-infantil ‘Clementine’ –con John Cunningham, colaborador frecuente del desaparecido XXXTentacion– o los preciosos arreglos de ‘Forever (It’s a Long Time)’ –creados, como gran parte del álbum, con el cómplice más frecuente de Halsey, el noruego Lido–.
La obra maestra de Brian Wilson y sus colegas emerge, con su empleo del pop vocal y la imaginería surf, como una sorprendente influencia en uno de los cortes más refrescantes de ‘Manic’. Se trata de ‘Dominic’s Interlude’, una pieza de más de un minuto que, en contra de lo que se creía, no implica a Yungblud, el ex-rollo de Ashley que se llama en realidad Dominic Harrison. En cambio descubríamos que su co-autor e intérprete es Dominic Fike, uno de los nombres que están destinados a marcar el pop de 2020. Halsey y este joven rapero de Florida se hicieron buenos amigos nada más conocerse, y crearon este bonito número de transición para el disco. Curiosamente, y aunque no se ha hablado mucho de ello, Frangipane ya había colaborado con él un tiempo atrás: ella hace un cameo divertidísimo en el clip de ‘Phone Numbers’, el último hit de Fike. Volviendo a los Beach Boys, aunque este interludio sea un momento único en ‘Manic’, resulta significativo no solo para señalar la diversidad de sonidos que puebla el disco, sino también por lo alejada que su música podría aparentar estar de una estrella del pop de 25 años. Es una inmejorable excusa para revisitar aquel álbum grandioso que estuvo mal editado, primero, y perdido, después, durante años hasta su vasta reedición de 2011.
No cuesta demasiado imaginarse a una pequeña Ashley de 8-10 años fangirleando muy fuerte con ‘Complicated’, ‘Sk8r Boi’, ‘My Happy Ending’ o ‘Don’t Tell Me’. Incluso diría que el timbre vocal y la forma de frasear de Halsey recuerda un poco al de la propia Avril Lavigne. El caso es que ‘3AM’ no puede –ni quiere– eludir la querencia hacia aquel emorock en sus guitarrazos de pop post-grunge que tan buenos réditos comerciales dio a la canadiense. Se percibe claramente en su melodía dulce y pegadiza, pero sobre todo en los guitarrazos pseudometaleros que aporta el productor Greg Kurstin –el tío, como Halsey, le da a todo: es el mismo que le da el toque country a ‘You Should Be Sad‘– y la siempre contundente batería de Chad Smith, de Red Hot Chili Peppers. No cabe duda que el pop de la canadiense ha marcado a Halsey y, de hecho, apostamos a que fue todo un subidón para ella aquel dueto improvisado que se marcó con Lavigne cantando en una fiesta de Halloween su ‘Girlfriend’.
‘Jagged Little Pill’ de Alanis Morissette
Y nos vamos ahora a un precedente de la misma Avril. El debut de Alanis Morissette pudo ser a Lavigne lo que el de esta, citado en el anterior párrafo, supondría para la infante Frangipane. ‘Jagged Little Pill’, reeditado hace un lustro, fue un disco importantísimo en los 90, al traducir a un lenguaje apto para muchos públicos la colisión de rock tradicional y electrónica y aderezándolo con elementos de funk y rap, con una chispita de rabia generacional. Cuando se editó en 1995, Halsey apenas contaba con un añito de edad pero, como explica en esta entrevista con Zane Lowe, Alanis es «la original», fue la primera artista que «la agarró de las tripas» cuando su madre ponía sus discos en el coche. Ashley explica en la misma interviú que no esperaba respuesta, pero igualmente decidió escribirle una carta para pedirle esta colaboración, diciéndole que este era un disco en el que estaba poniendo partes muy importantes de sí misma y que ella era una de esas partes. Y dijo sí, dejando sin palabras a Frangipane. «No hay otro artista en el mundo que pueda provocar ese tipo de reacción en mí», asegura. El resultado es, pese a acotarse como interludio de ‘Manic’, una canción de casi tres minutos en la que Halsey canta unos llamativos «tu coño es un país de las maravillas». Un grito que proclama su bisexualidad y, a la vez, es una sentencia de empoderamiento femenino. Un concepto en el que Alanis ha sido fundamental para ella.
Aunque no fuera el brillantísimo disco de folk pop de Lady Gaga con el que fantaseábamos –algo a lo que sí se acercó la BSO de ‘A Star Is Born’–, es evidente que ‘Joanne’ ha marcado cierta tendencia en el mundo del pop en los últimos años. La prueba en ‘Manic’ no es tanto ‘You Should Be Sad‘ –a pesar del guiño a Germanotta que incluye su vídeo– como ‘Finally // Beautiful Stranger’. Este tema, pese a que como aquel está co-escrito e interpretado por Kurstin, no es exactamente un tema country para bailar en línea sino una romántica balada acústica que, salvo por la ausencia del constante toque bigger-than-life de Gaga, remite al rollo folkie de ‘Million Reasons‘, ‘Angel Down’ o la propia ‘Joanne’. En el caso de «Finally», supone una bajada de revoluciones considerable tras la iracunda ‘Without Me‘, cambiando de tercio con una preciosa canción de amor (la primera que ha compuesto en su vida, dice Halsey) dedicada a lo reconfortante que puede llegar a ser una relación fugaz con una persona a la que acabas de conocer. Como todo en este tercer disco de Frangipane, retrata con pelos y señales una experiencia personal: el affair que mantuvo con el británico Yungblud. A diferencia de con su ex-pareja G-Eazy, sigue hablando con cariño de él y mantienen su amistad.
Gorillaz vuelven pero no con un álbum exactamente. El nuevo proyecto de los autores de ‘The Now Now‘ estará relacionado con el «cine y la animación», pues en esta categoría subían a Youtube el primer teaser, que bajo el título de ‘Momentary Bliss’, ya anticipaba la participación del rapero británico slowthai y la banda de punk también británica Slaves.
En Spotify podían escucharse un par de adelantos de entre 23 y 44 segundos (incluida la «sintonía») de lo que parece que será una especie de podcast animado. De hecho, lo que presentan Gorillaz es la «temporada 1» de este proyecto, por lo que parece que este será lanzado a lo largo de los próximos meses en capítulos.
La propiamente dicha ‘Momentary Bliss’ es una canción de apenas 4 minutos de duración pero en diversas fases y estilos, que van desde el punk hasta lo circense, por momentos incluso dejando la sensación de estar escuchando un tema de Gorillaz featuring… ¡Blur! ¿La causa? Ciertas reminiscencias de ‘Parklife’ y por otro lado de ‘Blur’ y ’13’, de la parte más The Clash de los de Damon Albarn a la más lánguida. Por cierto, como curiosidad, toda esta mezcla de gente no era tan improbable: en ‘Nothing Great About Britain‘, el debut de slowthai nominado a un Mercury, ya colaboraban Slaves.
Blas Cantó ha estrenado ‘Universo’, la canción con la que este año representará a España en Eurovisión. El festival de la canción tendrá lugar en Rotterdam a mediados del próximo mes de mayo tras la victoria, el año pasado, del holandés Duncan Laurence con ‘Arcade’.
A lo largo de los días, Cantó ha ido revelando detalles de ‘Universo’, como la portada o datos sobre su composición. Ha explicado que «surgió en un viaje que hicimos a Edimburgo» con Dan Hammond, «quien propuso ir a Escocia donde trabajamos con otros compositores que ya tienen experiencia en Eurovisión» (Hammond ha trabajado con Carlos Sadness, entre otros). Por su parte, RTVE había afirmado que «Universo» es un mid-tempo, con un final épico y que, aunque es un registro nuevo para el cantante, conserva su esencia».
Lo que no había dicho nadie es que ‘Universo’ sería semejante mezcla de estilos. La canción empieza con unas cuerdecitas muy ‘Issues’, después evoluciona hacia los ritmos del pop tropical, y el estribillo es puro drama R&B-pop a lo ‘Halo’ de Beyoncé. El falsete final promete conmover y espantar a partes iguales. Por otro lado, el videoclip de ‘Universo’ ha sido rodado en Islas Canarias. Pronto publicaremos nuestro veredicto sobre esta canción que ha sido escogida entre 50 compuestas específicamente para Blas Cantó y su paso por Eurovisión.
A Camila Cabello no le ha ido horriblemente mal con su segundo disco ‘Romance’: ‘Liar’ lleva 200 millones de reproducciones en Spotify y el álbum se beneficia de contener su «monster hit» junto a Shawn Mendes ‘Señorita’. Sin embargo, las 400.000 unidades que ha vendido a nivel global quedan muy lejos del millón largo despachado por su debut, y eso que el disco salía en plena campaña navideña. Ni que decir tiene que ninguno de sus singles ha logrado el impacto de ‘Havana’: perdido entre aciertos latinos y baladas insulsas, ‘Romance’ pintaba a «flop» tras tener que conformarse con un humilde puesto 14 en Reino Unido o un humillante puesto 52 en Francia.
Pero una canción ha calado entre el público desde el principio, pese a no ser uno de los adelantos oficiales ¿‘Should’ve Said It’? No. ‘My Oh My’ junto a DaBaby ha sido carne de TikTok, la aplicación que tan de moda está poniendo algunos temas que los usuarios bailan; se ha presentado en el programa de Jimmy Fallon, con este diciendo que es su tema favorito del disco; y en definitiva ha conquistado las listas sin que Camila Cabello haya hecho un gran esfuerzo por ella.
Como viral, el tema es el más oído del disco ahora mismo, supera los 125 millones de streamings en Spotify y ronda el top 20 global de esta plataforma de streaming tras aparecer en la codiciada playlist «Today’s Top Hits», que tiene 25 millones de seguidores de nada. El problema es que su promoción en radios, galas tipo Grammys o en forma de vídeo se está demorando demasiado. Camila fue a los Grammy, sí, pero para cantar el baladón ‘First Man’ (?).
Existe el rumor de que esta imagen de Instagram se corresponde con el rodaje del videoclip de ‘My Oh My’, pero… ¿dónde está? El tema ya bajaba del puesto 20 al puesto 23 en las listas británicas de la semana pasada y con cualquier viernes de lanzamientos monstruosos, su «momento» podría desaparecer. ¿Tan grande es lo que trama como vídeo que está llevando semanas hacerlo? ¿Quedará el exitillo del tema en una anécdota de diciembre y enero? ¿O estamos ante una nueva carrera de fondo como la que vivió, incluso sin vídeo, ‘Love on the Brain’ de Rihanna?
A pesar de las evidentes diferencias –contexto histórico, repercusión- resulta tentador establecer paralelismos entre la carrera cinematográfica de Renée Zellweger y la de Judy Garland. Las dos alcanzaron el éxito bastante pronto: Garland como estrella juvenil en los años treinta junto a Mickey Rooney, y Zellweger con ‘Jerry Maguire’ (1996), solo tres años después de su debut. Se hicieron mundialmente famosas con un taquillazo: ‘El mago de Oz’ (1939) y ‘El diario de Bridget Jones’ (2001). Consiguieron ganarse el respeto como actrices “serias”: Garland con ‘Ha nacido una estrella’ (1954), con la que debió ganar el Oscar que se llevó Grace Kelly con la olvidada ‘La angustia de vivir’ (1954), y Zellweger con ‘Chicago’ (2002) y ‘Cold Mountain’ (2003), por la que ganó el Oscar. Y las dos fueron arrinconadas por Hollywood y vapuleadas por la prensa rosa conforme fueron sumando (o quitándose) arrugas a su rostro.
Además, existe una última semejanza. Tras varios años ausente, Garland resucitó para el cine con ‘¿Vencedores o vencidos?’ (1961), con la que recibió su segunda nominación al Oscar (esta vez se lo llevaría con todo merecimiento Rita Moreno por ‘West Side Story’). A Zellweger, con ‘Judy’, le ha ocurrido algo parecido. Después de seis años alejada de las pantallas, y de un regreso poco memorable en 2016 (‘Bridget Jones’ Baby’, ‘Toda la verdad’, ‘Uno tan diferente como yo’), la actriz ha vuelto a interpretar un papel importante. El resultado ha sido un Globo de Oro y seguramente su segundo Oscar.
Quizás esa conexión biográfica y emocional entre las dos actrices haya ayudado a que Zellweger se haya metido en la piel de Garland sin necesidad de tener que imitarla. A diferencia de lo que hizo el año pasado Rami Malek con Freddie Mercury en ‘Bohemian Rhapsody’, la actriz tejana no ha recurrido ni al playback ni a la prótesis hiperbólica ni a la mímesis exagerada para dar vida de forma convincente a Garland. Con la voz, la mirada y una caracterización muy sutil, le ha bastado para encarnar a la insegura, depresiva y vulnerable protagonista de ‘El mago de Oz’.
El director Rupert Goold, conocido por sus adaptaciones de Shakespeare para la BBC (‘Macbeth’, ‘The Hollow Crown’, ‘King Charles III’), ha intentado también desmarcarse del típico biopic musical. Lo ha conseguido a medias. ‘Judy’ no abarca toda la vida de la diva, sino que se centra en los últimos meses. Garland, arruinada, en pleno proceso de divorcio y enferma a causa de su adicción al alcohol y los barbitúricos, se marchó a Londres en 1969 para actuar durante varias semanas en un club nocturno. La película recrea, de forma cálida e intimista, ese periodo de efímera felicidad antes de su muerte por sobredosis a los 47 años. Unos meses en los que la artista se sintió arropada por el calor de sus admiradores británicos y vivió un amor fugaz con el músico Mickey Deans, su quinto marido.
En paralelo a esta línea narrativa, se desarrolla una segunda. A través de varios flashback, vemos cómo la joven Garland es obligada por la Metro-Goldwyn-Mayer a consumir anfetaminas y llevar una severa dieta alimenticia para no perder su muy rentable figura juvenil y seguir el exigente ritmo de rodaje de ‘El mago de Oz’. El director establece una conexión directa entre esos abusos cometidos por el estudio (se insinúan muchos más), y las adicciones y problemas psicológicos que arrastraría la actriz toda su vida. En ese sentido, ‘Judy’ habla del pasado pero también del presente. De ese tipo de productor de Hollywood denunciado por el movimiento MeToo, que va desde Louis B. Mayer a Harvey Weinstein.
Una interpretación de Oscar, un guión muy interesante… ¿Por qué, entonces, la película no acaba de funcionar? Porque, aunque en un principio no lo parezca, ‘Judy’ está más atada a las convenciones del biopic que Garland estuvo a la MGM. Según avanza la historia, la película se va haciendo más y más previsible, hasta desembocar en un final que no puede ser más acomodaticio. ¿Adivináis cuál es la última canción que canta Zellweger? Pues eso. 6,5.
Violeta la Burra, icono del transformismo durante la España franquista, ha fallecido a los 84 años en Sevilla, según ha informado el Ayuntamiento de Herrera y recogen medios como El Periódico.
Precisamente en el mencionado municipio sevillano nació Pedro Moreno en 1936, pero aquel niño que empezó a trabajar en los campos de olivos de su pueblo, con 20 años emprendió un viaje a Barcelona para cumplir su objetivo de ser artista, actuando en diversos cabarets de moda de la ciudad con el nombre de Violeta la Burra. La artista, que sobre el escenario interpretaba canciones de corte flamenco, progresó entonces hacia locales más importantes como Andalucía de Noche y Jardines de Córdoba, en los que compartió cartel con estrellas de su tiempo como Antonio Machín o Estrellita Castro.
Entre los grandes logros de la carrera de Violeta la Burra se cuenta haber formado parte del cuerpo de baile de Lola Flores, pero la artista vivió su gran momento de gloria un tiempo más tarde, cuando actuó en París durante dos años en que fue artista residente de la sala Paradis Latin. Violeta, quien también fue amiga de Salvador Dalí, llegó a publicar sus canciones a través de varios álbumes en formato casete, algunos de los cuales están listados en Discogs. Os dejamos con un par de sus temas.
Austra ha vuelto con su primer single desde 2017, año en que publicó el notable ‘Future Politics‘, su «ambiciosa obra de techno-pop de izquierdas, feminista, queer, antisupremacista, libertaria, sensual y extrasensorial» (en palabras de mi compañera Mireia Pería para este medio).
Esta vez, Katie Stelmanis mira hacia adentro en una nueva canción llamada ‘Risk It’ que detalla el final de una relación tóxica en la que se ha visto atrapada recientemente. La canción explora el «miedo» y la desesperación que puede sentirse ante el fin inminente de un amor, pero también la vergüenza por haber buscado a esa persona «eternamente» porque no la has podido «dejar ir». La canción busca representar esa desesperación a través de un gancho melódico apitufado, que contrasta con la fuerza de los vientos metal que componen la instrumentación principal, junto a una base rítmica muy noventera.
Dirigido por Jasmin Mozzafari, el vídeo de ‘Risk It’ traslada a imágenes el mensaje de la canción a través de una sola noche. «Quería construir una pieza narrativa que tuviera lugar durante el transcurso de una noche, y que se centrara en una protagonista atrapada por la inevitable encrucijada que sucede cuando un amor se desmorona», ha explicado. «Desde mi punto de vista, ‘Risk It’ es una canción que habla sobre el miedo a ser vulnerable. Al principio del vídeo, la protagonista intenta hacer todo lo posible para evitar ese sentimiento, pero al final se ve obligada a enfrentarse a él». Austra actúa en el Festival Mil·leni de Barcelona el 14 de mayo, en Mallorca Live Festival el 16 de mayo y en Tomavistas el 22 de mayo.
Danielle Balbuena, la mujer tras el alias 070 Shake, explica que la experiencia de formar parte del círculo de Kanye West durante aquellas semanas frenéticas en el rancho de Wyoming de la estrella en la que se grabaron ‘ye‘, su disco a medias con Kid Cudi, ‘Nasir‘ de Nas y ‘Daytona’ de Pusha T la cambió por completo. No solo por el altavoz que supone rodearse de nombres tan influyentes, que fueron fundamentales para ella en sus años formativos –tiempos complicados en los que con 13 años tuvo que superar una adicción a los calmantes administrados para, teóricamente, tratar su hiperactividad, y luego salir del armario ante una madre que por entonces prefería «verla en la cárcel» que con otra mujer–. Sino por todo lo que aprendió de la ética del trabajo de Ye, de su perfeccionismo y ambición.
El primer aspecto lo evidencia en sus declaraciones el co-productor del disco Dani Hamelin, que define a 070 Shake –un alias que la liga al colectivo artístico con el que creció en su barrio de Nueva Jersey– como una persona extremadamente detallista y trabajadora. Por ejemplo, se tomó diez meses tras terminar su debut ‘Modus Vivendi’ para volver a escucharlo y ver si seguía gustándole antes de dar luz verde a su publicación. Hasta tal punto es exigente consigo misma que, al más puro estilo Kanye, acaba de cambiar la secuencia del disco, diez días después de que haya visto la luz (y al loro, porque ambas pueden encontrarse en Spotify). Y, en cuanto a su ambición, resulta evidente que las aspiraciones de Balbuena con este disco van mucho más allá de ser la comidilla del mundillo indie.
Así lo indican los tres resplandecientes adelantos del álbum que ha publicado en los últimos meses, canciones que claramente revelan sus intenciones de trascender al ámbito del rap alternativo. Así, ‘Morrow‘, ‘Under The Moon‘ y ‘Guilty Conscience‘ destacan como las canciones más luminosas y poderosas de este álbum, que no desmerecerán en playlists que las sitúen junto a The Weekend o al Kanye más pop (qué tiempos aquellos…). En ese sentido, resulta significativo que, además del reputado Mike Dean y Myles William (Beyoncé, Eminem), uno de los principales implicados en su sonido sea Hamelin, conocido como miembro del grupo canadiense The Stills, también colaborador de Broken Social Scene y The Tragically Hip. Porque la transversalidad de estilos y el contraste de instrumentos tradicionales y sintetizadores retro con exagerados filtros vocales y bases electrónicas son una de las características primordiales de este trabajo.
La luminosidad de esos singles contrasta, sin embargo, con producciones mucho más desafiantes en lo formal y estético, en las que predominan las ambientaciones –a menudo oscuras– por encima de las melodías. En el mejor de los casos, resultan cautivadoras, como es el caso de ‘Microdosing‘ –el no-single más pop de ‘Modus Vivendi’–, ‘Divorce’ –con un fascinante arreglo de conga–, la sofocante ‘The Pines‘ –con esa coda de cuerdas–, una ‘Daydreamin‘ que podría haber sonado en ‘Yeezus’ o una ‘Terminal B’ que hace que influencias declaradas como Cocteau Twins o los Pink Floyd del ‘Dark Side of the Moon’ no parezcan delirantes ni impostadas. En el peor, en cambio, son tan prescindibles como la doble intro ‘Don’t Break the Silence’ y ‘Come Around’, o predecibles en su aproximación al hip hop prototípico como ‘Rocketship’ o ‘Nice to Have’. En ese sentido, decepciona un poco comprobar primer álbum de 070 Shake es que nos lleva de momentos realmente fantásticos a otros más bien olvidables.
De manera análoga, tampoco parece tener muy claro Balbuena hacia dónde quería ir líricamente. Buena parte del disco habla de conflictos emocionales, pero no de una manera muy enfocada, sino dubitativa y confusa. ‘Come Around’ y ‘Morrow’ hablan sobre el anhelo hacia una pareja y desearla, mientras que ‘Rocketship’ habla del lastre que puede ser el amor y ‘Divorce’ del matrimonio como un concepto caduco que limita a las personas; ‘The Pines’ y ‘Guilty Conscience’ retratan los celos y las infidelidades como ejemplo de nuestras inseguridades; ‘Nice to Have’ y ‘Under the Moon’ contemplan la empatía humana como imprescindible, mientras que ‘Microdosing’ emplea el concepto de la administración de drogas en pequeñas cantidades con el de darse a otra persona muy poco a poco; mientras que ‘Daydreamin’ habla sobre el estado frecuente de obnubilación que sufre Dani. Un considerable batiburrillo que, más bien, conduce a pensar que ‘Modus Vivendi’ muestra a una artista de enorme talento en pleno proceso de transición y evolución. Algo curioso, si consideramos que se trata de su primer álbum, pero razonable si atendemos al crecimiento de su talento desde que emergiera allá por 2016. Y la verdad es que lo que se vislumbra en su futuro, a poco que sepa a dónde quiere dirigirse y crezca en carisma, es muy grande. 070 Shake presenta ‘Modus Vivendi’ este sábado, 1 de febrero, en la Sala Apolo de Barcelona.
Calificación: 7,1/10 Lo mejor: ‘Guilty Conscience’, ‘Under the Moon’, ‘Morrow’, ‘Microdosing’, ‘Divorce’ Te gustará si te gustan: el Kanye West de ‘Yeezus’, The Weekend, Tierra Whack. Escúchalo: en Spotify
El último disco de Real Estate volvía a ser notable, pero también más de lo mismo. Quizá con ánimos de renovar un poco su discurso, el primer single de ‘The Main Thing’, el nuevo álbum de la banda de Nueva Jersey, sí suena algo distinto a lo que suele hacer y además para muy bien, logrando ser otro de sus himnos claros.
En algún lugar de ‘Paper Cup’ -sobre todo melódicamente- parece haber una canción que Prefab Sprout habría convertido en un hit, y de hecho su estribillo sobre «buscar algo verdadero» dentro del caos que supone vivir en la edad adulta, es totalmente cautivador. Sin embargo, la canción destaca en la discografía de Real Estate por tratarse de una colaboración (la primera de su carrera) con Amelia Meath de Sylvan Esso, que hace coros de manera prominente en el mencionado estribillo, y sobre todo por su elegante y sofisticada instrumentación. Las melodías de guitarra -acústica y eléctrica- y de un sintetizador que toma protagonismo hacia la mitad vuelven a ser tan importantes como la interpretada por las voces, mientras el tema presenta también una arreglo de cuerdas orquestado que parece moverse entre el «easy-listening» y el sonido country de Nashville. El conjunto es una pequeña maravilla de indie-pop a la altura de los mayores clásicos del grupo, como ‘Darling’ o ‘It’s Real’.
La edad adulta, como decimos, es el tema principal de ‘Paper Cup’, según ha explicado el cantante de la banda, Martin Courtney. ‘Paper Cup’ habla sobre la rutina, sobre descubrir que el trabajo que llevas diez años haciendo puede ser el definitivo, y sobre el desasosiego que puede producir ver a todo el mundo «evolucionar y asumir desafíos» mientras uno sigue con sus «mierdas» de siempre. También es una canción sobre la inseguridad que puede sentir un artista por su contribución al mundo en la «era de cambio climático y disturbios políticos y sociales» a escala global. En definitiva, ‘Paper Cup’ es una composición sobre «cuestionar el camino elegido en la vida y buscar significado en lo que haces» y sobre todos estos asuntos hemos hablado con Courtney, en una entrevista que publicaremos próximamente. No dejéis de ver el tragicómico videoclip de ‘Paper Cup’, protagonizado por una miserable ardilla-robot llamada Chipper y un niño inocente, ajeno a los problemas de la vida.
Hidrogenesse, que en 2019 editaban ‘Joterías bobas‘, están de vuelta con una nueva canción compuesta para la ocasión de una nueva exposición sobre arte y humor absurdo que podrá verse en el Centro de Arte Dos de Mayo de Móstoles (CA2M) a partir de hoy 30 de enero. Comisariada por Mery Cuesta, la exposición ‘Humor absurdo: una constelación del disparate en España’ explora «diferentes autores y propuestas humorísticas que se han producido en este país hasta la actualidad» basadas en el absurdo, y contará con obras de Joaquín Reyes (uno de los asesores), José Gutiérrez Solana, Faemino y Cansado, Miguel Noguera, Amparo Segarra, Millán Salcedo (Martes y Trece), Miguel Brieva, Flavita Banana, Manuel Summers, Mª Dolores de la Fe, Cifré o los mismos Hidrogenesse.
La nota de CA2M explica que «‘Humor absurdo’ define una constelación nueva de prácticas humorísticas absurdas en España: partiendo de los ‘Disparates’ de Goya, nos adentramos en los siglos XX y XXI de la mano de Ramón Gómez de la Serna para atisbar diferentes autores y propuestas humorísticas que se han producido en este país hasta la actualidad (…) El resultado de la exposición es una panorámica transgeneracional que define un humor que observa el mundo desde una posición lúdica y suspendida sobre las circunstancias de la pura actualidad. En un presente en el que el humor está hostigado por los límites y el odio, nuestro reducto de felicidad balsámica es éste arte del disparate que apuesta por el sinsentido como fuente de disfrute y como actitud ante la vida.»
‘¿De qué se ríen los españoles?’ es una de cuatro canciones que Genís Segarra y Carlos Ballesteros han escrito para dicha exposición, y es tan absurda como manda la ocasión. Los ritmos tecno-pop habituales del dúo vuelven a mandar en esta pieza que sin embargo incluye el cacareo de un gallo –que es, curiosamente, un sample de Ramón Gómez de la Serna– y los coros serios-pero-no de Elsa de Alfonso, Xoxé Tétano y Marc Ribera. La letra de ‘¿De qué se ríen los españoles?’ desafía «la lógica» y «la realidad» aún más si cabe con referencia a aquel «qué va, qué va, yo leo a Kierkegaard» de Faemino y Cansado y algún neologismo imposible, parece que con intención de satirizar la práctica de juzgar sin saber: «no he entendido casi nada pero tengo que juzgar», dice una de las frases de la canción. El vídeo de Fito Conesa pone en imágenes el texto y refuerza su buscado -y logrado- componente divertido y absurdo. Os recordamos que Hidrogenesse ofrecen un concierto benéfico el 15 de febrero en la sala Apolo de Barcelona para apoyar a la Protectora de Caballos ADE (Asociación en Defensa de los Équidos), y en el que recordarán su álbum de 2007 ‘Animalitos‘.
La aplicación para móviles TikTok, uno de los fenómenos adolescentes del momento, ha servido para catapultar numerosas canciones a lo más alto de las listas de éxitos. Así funciona: los usuarios escogen una canción, crean vídeos cortos de unos 15 segundos con ella y, si estos son suficientemente divertidos o creativos, se viralizan. ‘Truth Hurts‘ de Lizzo, ‘Old Town Road‘ de Lil Nas X o, más recientemente, ‘The Box‘ de Roddy Richh (tres canciones que han sido número 1 en el Billboard), se viralizaron antes en TikTok.
Menos habitual es que un viejo éxito se viralice gracias a esta aplicación llamada como el gran hit de Kesha, pero esto es lo que le ha pasado a Matthew Wilder. El productor de ‘Tragic Kingdom’, el álbum más vendido de No Doubt (el que trae ‘Don’t Speak’), y quien además dobló a Ling en ‘Mulán’ (interpretó la canción ‘A Girl Worth Fighting For‘), protagonizó una corta carrera como artista pop a principios de los años 80, de la que apenas logró un éxito significativo en las listas que, sin embargo, se ha vuelto a poner de moda 37 años después. Lanzado en 1983, en plena ebullición del new wave y el synth-pop, ‘Break My Stride’ alcanzó el top 4 en Reino Unido y el top 5 en Estados Unidos y logró buenas posiciones en Australia, Canadá y otros países europeos. Y ahora, gracias a TikTok, la canción es top 12 en el chart global de canciones más virales en Spotify. La razón es que sus usuarios han usado la letra de la canción para mensajear a familiares o amigos y hacerles creer que están contándoles una historia que les ha ocurrido de verdad, a espera que se den cuenta que se trata de la letra de ‘Break My Stride’. Esta recuerda un sueño que ha tenido Wilder en que el músico se dirige a coger una barca hacia China y, de camino, se cruza con una amiga que corre hacia la lavandería.
Dentro de que alberga un espíritu más simpático y pizpireto que épico, ‘Break My Stride’ es un absoluto temazo pop, y no cabe duda que ha perdurado en el tiempo gracias a su calidad, hasta el punto de haber conseguido conquistar a las nuevas generaciones. Por eso, sorprende descubrir que el sello de Wilder de entonces, Arista Records, se negó a publicar la canción por no considerarla lo suficientemente buena. Su autor recuerda así la composición de ‘Break My Stride’ en palabras para JENESAISPOP: «Cuando la escribí vivía en un pequeño apartamento en West Hollywood, acababa de firmar con Arista Records y luchaba por que el sello me prestara atención. Habían pasado dos años desde que firmé y el sello seguía sin dar salida a mi música. ‘Break My Stride’ sería, pensé yo en ese momento, la canción que salvara mi carrera, mi último intento de convencer al sello de mi valía como artista. Pero el jefe de Arista la escuchó y afirmó que «no era un hit». Entonces me rebelé contra el sello y les dije que, o bien publicaba mis grabaciones, o bien me dejaba marchar. Y me dejó marchar».
La suerte se tornó a favor de Wilder medio año después: «Habíamos grabado «Stride» de manera independiente, así que mis productores y yo logramos recuperar los «masters» y obtener un nuevo acuerdo discográfico. En resumen, firmé con otro sello y ‘Break My Stride’ se convirtió en un éxito mundial seis meses después». Sin embargo, el músico no recuerda aquella época con rencor: «quizá forme parte de la naturaleza humana mantenerse en una zona segura y decir «no» antes que arriesgar un trabajo… La tendencia de no reconocer un sonido nuevo, de desechar a un artista nuevo, es una historia tan antigua como el tiempo. Los Beatles fueron rechazados por todos los sellos importantes y al final se vieron obligados a firmar con uno que era conocido solamente por editar discos de comedia. ¿Hace falta saber más?»
Es surrealista ver ‘Break My Stride’ entre los temas más virales de Spotify en pleno 2020, también porque su sonido no puede ser más ajeno a la moda actual. Es pura nueva ola ochentera. «Con los 80 llegaron el new wave, Culture Club, Men at Work, ‘Heartbeat City’ de The Cars… este era el sonido que, en aquel momento, la música pop estaba asimilando», explica Wilder. «El movimiento me arrastró y, con él, yo me sentí totalmente liberado, inspirado por sus sintetizadores… ¡y por esos peinados! Después de tantos años intentando encajar en un estilo u otro, al final se me dio permiso para salirme de las normas y hacer algo diferente a lo habitual. La estructura de acordes de ‘Break My Stride’ y su letra «sin sentido» estaban inspirados en este nuevo sonido y en esta nueva actitud». ¿Pero por qué cree Wilder que ‘Break My Stride’ sigue siendo escuchada casi cuatro décadas después? Esta es su conjetura: «Yo sé el lugar en mi cabeza y mi corazón desde el que nació la canción, pero supongo que las nuevas generaciones siguen sintiéndose identificadas con su espíritu de rebeldía y diversión». Wilder no ha dejado pasar la oportunidad de publicar un nuevo «lyric video» de la canción inspirado en el meme.
‘Break My Stride’, que fue uno de los mayores éxitos de todo el año 1984, no ha estado falto de reconocimientos por parte de otros artistas que la han adaptado a su propio repertorio. En 1996, Puff Daddy incorporó la melodía de su estribillo en el de su hit de 1997 ‘Can’t Nobody Hold Me Down’, y el tema fue un éxito (efímero) en Europa gracias tanto a la versión del dúo austríaco Unique II, de 1996, como a la de la banda alemana Blue Lagoon, de 2004 y en clave reggae. Por su parte, Wilder no obtuvo hit igual en su carrera en solitario (aunque se acercó con ‘The Kid’s American’), y después de editar un segundo álbum se retiró de los focos para componer y producir para otros artistas como los mencionados No Doubt, Christina Aguilera (‘Reflection’, ‘Can’t Hold Us Down’), Kelly Clarkson (‘Beautiful Disaster’) o Miley Cyrus/Hannah Montana (‘Girls Just Wanna Have Fun’, ‘Back to Tennessee’).
De golpe, Dua Lipa acaba de confirmar dos de las noticias más esperadas de 2020: cómo será la portada de ‘Future Nostalgia’ y su fecha de publicación. La primera es una imagen del fotógrafo de moda Hugo Comte, en la que Dua conduce un descapotable a la luz de la luna llena. La segunda se marca para el día 3 de abril. Ya solo queda conocer su tracklist, que imaginamos se revelará cuando comience la pre-venta del álbum.
Quizá eso ocurra mañana, cuando se lance su nuevo single ‘Physical’, con cuyo vídeo la artista británica parece tener entre manos una era «blockbuster» como la fueron en su momento las de ‘Teenage Dream‘ de Katy Perry o ‘The Fame Monster‘ de Lady Gaga. Es decir, una era de las clásicas y de las que consagran definitivamente a una artista. Es pronto para decir qué ocurrirá con ‘Future Nostalgia’, el disco que Dua publica este año (que será el segundo, como los dos mencionados), pero los movimientos recientes de la cantante británica apuntan hacia esa dirección.
Como hemos explicado, Dua Lipa sigue triunfando con ‘Don’t Start Now’ y el «hype» en torno al sucesor de su debut homónimo es grande. Y la artista va a aprovecharlo: el siguiente single oficial es ‘Physical’, sale este viernes 31 de enero, puede ser igual de bueno o mejor que ‘Don’t Start Now’ y su videoclip, que saldrá a la vez, será de los épicos. Al menos por lo que se desprende de su tráiler oficial. Porque sí, Dua ha sacado un tráiler de su próximo vídeo, y eso solo puede significar que va a ser de los buenos. El hecho que esté dirigido y producido por CANADA apunta a que, al menos, estará cargado de imágenes memorables.
Mientras en Instagram ya había avanzado vídeo y canción, Dua Lipa presenta en el tráiler de ‘Physical’ el que será, con toda probabilidad, el principio de su videoclip. Con una sonata de Mozart de fondo, Lipa descansa en una habitación que luego se descubre que es parte del set de un rodaje, momento en que la cantante es llamada a grabar. Entre los componentes del clip se encuentran un cubo de Rubik, un pajarito rojo y una serie de bailarines que bailan con trajes de colores. ¿Habrá algún tipo de historia en todo esto? El 31 de enero saldremos de dudas…
FUTURE NOSTALGIA – THE ALBUM – COMING TO YOU APRIL 3RD – SHOT BY HUGO COMTE – 🌕🔐💛 pic.twitter.com/rRSiSbl2Oe
Nueva edición de nuestra Sesión de Control, sección dedicada a repasar las novedades más destacadas del panorama alternativo de nuestro país y Latinoamérica. Al final del artículo encontrarás la playlist de Spotify dedicada a esta sección que se renueva quincenalmente, conservando las canciones incluidas en la anterior entrega. [Foto exterior: Polock, por Alfonso Calza; Foto interior: Francisca Valenzuela.]
Con una semana de lapso debido a la publicación del especial Revelaciones 2020, retomamos la actividad del panorama independiente español y latinoamericano. En estos días se han publicado dos álbumes de artistas muy importantes comercialmente América Latina, como son ‘Disco estimulante’ de los mexicanos Hello Seahorse! (casi ocho años después de ‘Arunima’, su último disco de estudio) y ‘La fortaleza’, tercer trabajo de la chilena Francisca Valenzuela (que también llevaba seis largos años sin álbum). Más cerca de nuestro territorio, la portuguesa renovadora del fado Lina se ha aliado con Raül Refree en un disco conjunto, con el que –tras su gran disco junto a Rodrigo Cuevas– el catalán vuelve a rondar otra vertiente del folclore ibérico. Además, los sevillanos Vera Fauna han publicado su debut ‘Dudas y flores’, casi al tiempo que Subterfuge auspiciaba los nuevos discos de Ballena y Havoc. Además, el interesante dúo Chavales ha debutado con un EP en Elefant Records.
También incluimos en nuestra playlist varios avances de discos ya inminentes. Como ‘Ataque celeste’, de El Columpio Asesino, que llega hasta nosotros el 21 de febrero, acortando la espera con ‘Sirenas a mediodía’. Tversky también estarán publicando en las próximas semanas su esperado álbum debut, cuyo tercer avance ‘Addict’ se empapa del funk luminoso de unos Chic. Otro que debuta, pero en solitario tras haberse disuelto su proyecto nudozurdo, es Leo Mateos: la semiacústica y reposada ‘Valentino envenenado’ es el primer single de adelanto de ‘Demasiado Bellos para Ser Esclavos’, que estrenará en directo el 13 de febrero en la Sala El Sol de Madrid. Y tras dos adelantos, los valencianos Polock concretan con ‘Mar dorado’ la publicación de su primer disco íntegramente en castellano: ‘Romance’ llega este mismo viernes, 31 de enero.
Otros que nos hablan ya de un nuevo disco son los madrileños toledanos Veintiuno, un trabajo que adelantan con la magnética ‘Haters‘ –producen Santos & Fluren–. Será ya el tercero en su discografía, segundo en la multinacional Warner, y en las próximas semanas estarán avanzándolo en directo, dentro del ciclo GPS. El productor Pablo Jiménez, más conocido como Selecta, también ha anunciado estos días la próxima publicación de su debut como artista titular –aunque ya firmaba la producción completa de ‘City Pop‘– con ‘Otras dos’, un estupendo single de pop-rap contemporáneo que confirma el buen tándem que conforma con el MC de Carabanchel.
Completan la playlist los nuevos temas de Kokoshca –una sorprendente inmersión en el ¿reggaeton folk? de la mano del productor Villafranca–, el regreso del prometedor solista de folk-pop-rock St Woods y el certero ‘Teleoperador‘ de Alavedra –colegas muy cercanos a los revelación Pantocrator, están a punto de lanzar el EP ‘Mendizábal’–. También María Sioke –tras meses de perfil bajo, la sevillana del entorno de Pedro LaDroga ha reaparecido con los llamativos ‘Ruleta rusa‘ y ‘Convencerte‘, más future pop que trap–, GOMZ –el proyecto personal del compositor de ‘Tu canción’ ha presentado ‘Despega‘, segundo single tras ‘Follow Gomz‘, esta vez producido por Pional–, Tórtel –con un nuevo single entre álbumes, esta vez con un sorprendente poso dub– y el primer single de L E O –Leo López, músico a la sombra de Love of Lesbian, Dorian, Standstill o Sidonie, que se lanza en su propio proyecto con la connivencia de Lisandro y Marc de los propios Dorian en ‘Otros diez años en el limbo‘–.
Dolly Parton vuelve a estar de actualidad, si es que alguna vez se fue a algún lado. Esta semana hablábamos de la vigencia de su clásico ‘Jolene’, que tan versionado ha sido por artistas de tan distinto pelaje y nuestro colaborador Jaime Cristóbal, además de subrayar sus cualidades musicales, apelaba a Parton como fenómeno social. Indicaba en el nuevo texto de su sección «Hit de Ayer«, a raíz de la realización del podcast «Dolly Parton’s America» que «en mitad del mandato de Trump, con su país metido de lleno en una guerra ideológica entre dos Américas bien distintas, en el público que va a ver a Dolly parecen convivir con total armonía y respeto familias de claro corte tradicional derechista, viejos amantes del country tradicional, aficionados a música indie, y público LGTBI+».
Varios comentaristas recalcabais, con mucha razón por otro lado, que Dolly Parton es actualidad también por un meme, el #DollyPartonChallenge. Por petición popular, he aquí una pequeña compilación de lo mejor que ha dado de sí este curioso fenómeno. La autora de ‘I Will Always Love You’ subía a Instagram hace una semana un collage formado por 4 fotos suyas, cada una idónea para una red social: la profesional para LinkedIn, otra formal para Facebook, una más mónguer para Instagram y la más atrevida para Tinder. «Consigue una mujer que pueda hacerlo todo», retaba el texto, para alucine del mundo por el tanto que se había sumado de nuevo.
Eran muchos los usuarios y también los famosos que decidían seguir el #DollyPartonChallenge, desde la ahijada de Dolly Miley Cyrus a Will Smith pasando por Sharon Stone, Jared Leto, Tegan & Sara, Janet Jackson (confundiendo un poco Facebook con Instagram) e incluso Pablo Iglesias, este escudándose -para esto sí- en su CM. Entre los más llamativos en su adaptación, hay que destacar los casos de Diplo y los de Eminem. El bueno de Thomas ha pasado olímpicamente de cualquier formalidad para subirse de todas formas sin camiseta, mostrando eso sí una preciosa peluca rubia en la foto de Instagram que en su caso podría haber caído en cualquier lado. En cuanto a Eminem, estos días triunfando con ‘Music to Be Murdered By‘, ha sido mucho más listo que Jonas Brothers, pues donde estos han escogido para Tinder una portada de espaldas en formato trío que no les va a valer ni un «match»; Eminem apostaba directamente por cambiar Tinder por Grindr para recordar su icónica y explosiva foto desnudo, ciertamente más homoerótica que las míticas portadas de los Smiths. Mientras muchos usuarios le recordaban su uso reiterado de la palabra «faggot» («maricón») en sus letras, la propia App le daba un buen zasca, preguntándose quién era este.
Algunos recordaréis cuando empezamos a hablar del «disco vivo» con motivo de los múltiples cambios que añadió sobre la marcha Kanye West a ‘The Life of Pablo‘. En un momento histórico para la música, la versión primigenia que todo el mundo pudo oír del disco ya nunca fue la misma que la que perduró en el recuerdo. No cundió mucho el ejemplo, pero Fuel Fandango han puesto su «semillita» con algo que viene en su CD y también evolucionará con el tiempo, en concreto una flor.
Al dúo formado por Cristina Manjón y Alejandro Acosta le gusta cuidar los detalles estéticos de su discografía, videografía y puesta en escena, y para la edición física de ‘Origen’, su nuevo álbum tras el top 2 logrado en España por el anterior ‘Aurora‘, se les ha ocurrido una idea. Algo mucho más vivo que el mismísimo disco de Kanye West, y que cambiará de forma más, si cabe. En el libreto del CD, al margen de las letras, los créditos y el bonito diseño de Emilio Lorente, encontramos una especie de «flyer» del tamaño de una tarjeta de visita, al que cual hit de Hidrogenesse, dan ganas de gritar: «¡¡eres una planta!!». Como podéis ver en el Instagram del grupo, se advierte: «haz florecer esta tarjeta. Sumérgela en un recipiente con 5mm de agua. A la semana, transplántala a una maceta. Riégala y mantenla bajo el sol».
Hemos querido preguntar a Fuel Fandango por este invento y Alejandro Acosta nos responde muy amablemente vía telefónica: «Estuvimos pensando en algo que pudiésemos regalar en el formato físico y hablando con Emilio Lorente, el diseñador, salió la idea de una semilla. Hay unos papeles en que puedes incluir una semilla. Cierra el círculo en cuanto al concepto del disco: el origen, volver al origen. En este caso, el origen de la vida viene en la semilla. Encontramos ese papel, la gente que lo fabrica, y Emilio hizo ese diseño precioso. Ha sido un detalle que al final está gustando mucho y nos está escribiendo mucha gente dándonos las gracias y diciendo que le encanta la idea».
Ciertamente la idea pega totalmente con el disco, pues en la página central del libreto se incluye un texto que propone regresar a los «albores de la humanidad», a «aquella semilla donde nació todo lo que conocemos» para dejar un mensaje de «belleza y esperanza». Y aunque no se incluyera este texto, uno de los singles se llama ‘Huracán de flores’, otras pistas como ‘El bosque’ incluyen el verbo «florecer» y todas las letras están impregnadas de naturaleza y optimismo. Reseñaremos ‘Origen’ en breve, pero lo que es mejor, durante las semanas venideras, haremos seguimiento de cómo evoluciona en una maceta una pequeña parte de este disco. Seguiré informando (SPOILER: no se me dan especialmente bien las plantas). Disponible en Amazon.
Fuel Fandango tienen una larga gira por delante que les lleva este finde al Circo Price de Madrid en una fecha doble y que, entre otras muchísimas salas, incluye visitas a festivales como Cruïlla, FIB o Cooltural Fest (Almería).
Cruïlla sigue engrosando el cartel de su próxima edición, con el que vuelto a sorprender al personal gracias a la confirmación de Gwen Stefani. El festival barcelonés, que se celebra los días 2, 3 y 4 de julio en el recinto del Parc del Fòrum, incorpora hoy cinco nuevos nombres a su programación entre los que destaca el de Two Door Cinema Club.
El trio irlandés presentará en Cruïlla su último disco, ‘False Alarm‘, y no es la única confirmación internacional que presenta el festival en el día de hoy, pues este contará también con la presencia del «rey de la fiesta balcánica», el normacedonio Kiril Džajkovsk, más conocido como Djaikovski. Así, se suman a la nueva edición de Cruïlla el rapero Rayden, el proyecto de indie pop con electrónica de Fito Robles Siloé y también las «esculturas gigantescas» de Antigua i Barbuda, que volverán al festival para «dar vida a todos sus rincones» (efectivamente son esculturas, no ningún artista).
Estas propuestas se suman a las ya anunciadas anteriormente, con nombres como Gwen Stefani, Placebo, Txarango, Kase.O, Residente, Rag’n’Bone Man, Of Monster and Men, Tom Walker, Novedades Carminha o Ebri Knight. o La Fura dels Baus entre otros. Las entradas y abonos siguen disponibles en la web del festival.
Mikel López Iturriaga, director de El Comidista, el blog gastronómico de El País, probará suerte en un nuevo programa de televisión, tras un breve intento en laSexta. Ecoteuve, que informa en exclusiva de la noticia, revela que el programa se llamará ‘Banana Split’ y se emitirá en La 2. Cada programa contará con un invitado al que se intentará conocer en profundidad a través de la música y la comida.
A pesar de que se dice que «la idea es recorrer con el invitado distintas localizaciones, desde restaurantes a salas de música o bares», el formato puede recordar remotamente al de ‘Con las manos en la masa’. Allí, Elena Santonja contaba con invitados con los que se cocinaba y que a menudo provenían del mundo musical, hablando de todo un poco. Si la melodía era de Vainica Doble y Joaquín Sabina, como invitados vimos a gente como Víctor Manuel, Alaska, Martirio, Sara Montiel, El Gran Wyoming o Carlos Berlanga.
Tras el éxito de El Comidista y de sus libros, no todo el mundo recuerda el pasado de Mikel López Iturriaga como periodista musical, muy especialmente en la época dorada de Tentaciones de El País durante los años 90, pero también en Rolling Stone, Ya.com, la impagable web Loquesea.com o Séptimo de Caballería. Las referencias musicales han sido una constante también en su carrera gastronómica, como se ha apreciado en sus libros. Esperemos que con ‘Banana Split’ (¿una referencia a Lio?) haya nacido un nuevo clásico televisivo.
Carolina Durante han sido noticia estos días porque Diego Ibáñez, su cantante, expulsó a un chico de uno de sus conciertos por agredir a una chica. Ocurría el pasado sábado en Valencia, y el grupo empresarial Salamandra, dueño de la sala Moon donde tenía lugar el concierto, confirmaba los hechos. En el vídeo que ha circulado por las redes se ve a Diego diciendo: «¡Tú, fuera! Vas a pegar a una chavala… No me jodas, macho». También pidió: «el notas ese, fuera de aquí» e indicó a la audiencia que el agresor «había pegado a una chica».
El comunicado de la sala indica que «de inmediato, la seguridad del local se hizo cargo del incidente, expulsando al hombre de la sala», y condena este tipo de comportamientos. Desde Levante-EMV se indica que el expulsado «había estado mostrando una actitud agresiva y molesta durante la actuación».
A Irene Montero, ministra de Igualdad, no se le ha escapado la noticia y ha decidido felicitar a los autores de ‘Cayetano‘ en sus redes sociales con un «bien hecho» al tiempo que compartía el vídeo: «El grupo Carolina Durante ha expulsado sin miramientos de un concierto a un indeseable que agredió a una mujer. Bien hecho. Las violencias machistas no deben tener cabida en ningún ámbito de nuestra sociedad. Todas y todos, en privado y en público, tenemos que plantar cara».
Carolina Durante continúan hasta finales de este año con la gira de presentación de su disco de debut, al que sumaban recientemente el single suelto ‘No tan jóvenes’.
En los inicios de su carrera musical, Nicolas Godin, mitad de Air, mandó unas cuantas maquetas a las compañías discográficas, siendo siempre rechazado. Desmoralizado, decidió dejar la música y dedicarse a la Arquitectura, carrera que había estudiado entre 1989 y 1995, mucho antes de que llegara el pelotazo de ‘Moon Safari’ (1998). En un momento dado, llegó a convencerse de que la música no sería lo suyo. Arquitectura y música permanecerían unidas para él en cualquier caso, y así, su primera creación musical, ‘Modular Mix’, era un tributo al arquitecto Le Corbusier, y la música de Air era concebida como algo «espacial». Pero es ‘Concrete and Glass’, su segundo álbum en solitario, el que definitivamente ha querido unir ambas disciplinas.
Tras un álbum inspirado en Bach en el que no quiso utilizar ordenadores, Nicolas Godin ha desarrollado ‘Concrete and Glass’ después de que el artista francés Xavier Veilhan le pidiera producir música para diferentes exposiciones que estaba haciendo en espacios modernistas de todo el mundo. Tres trabajos en Los Ángeles de Pierre Koenig, John Lautner y Richard Neutra; uno en Rusia de Konstantin Melnikov, el Pabellón de Barcelona de Ludwig Mies van der Rohe y la Iglesia de Claude Parent en Nevers (Francia) son algunas de las obras sobre las que se han edificado estas 10 nuevas composiciones de Nicolas.
En ese sentido, para comprender por completo este disco es imprescindible leer la entrevista que Godin ha concedido a Purple.fr hablando de diseño interior, moquetas, poco de música (llega a tener que explicar lo que es un vocoder) y lo que tienen en común la arquitectura y la música como arte. En sus propias palabras, «lo que es importante de la arquitectura no son los muros y las formas, sino el espacio entre dos paredes (…) Y pasa lo mismo entre dos notas. Una nota por su cuenta no es nada. Pero dos notas juntas forman un acorde. Eso crea un espacio, un color».
Todos identificamos el «color» y el «espacio» creados por Air, tan «chill» y confortables, y ‘Concrete and Glass’ es un álbum ideado para todos aquellos que añoren el sonido de ‘Moon Safari’. Dice también Nicolas que no ha querido acercarse especialmente a las nuevas generaciones porque no quería sentirse «como una señora vieja de Beverly Hills» ni tan «tonto como parecía el Bowie que hacía jungle» con todo «lo fan que es de él». Eso puede producir que el disco suene un tanto fuera de onda, pero no que sea peor. Partiendo de un vocoder que nos habla de la búsqueda de una «casa de vidrio y hormigón», nos embarcamos en un viaje en ocasiones tan disfrutable como el propuesto junto a Kate NV. ‘Back to Your Heart’ es una canción que, al margen del edificio que la inspiró nos lleva al conocido Brill Building en sonido y en su texto a un «hogar» que añoramos y al que queremos volver y que es fácil deducir cuál es a partir del título de la canción.
Las composiciones se han deshecho de sus títulos provisionales o relaciones con los edificios que las inspiraron hasta el punto de en ocasiones quedar algo diluidas en su propósito, pero al margen de coartadas intelectuales, son varias las que sobreviven al margen de su contexto. ‘We Forgot Love’ con Kadhja Bonet recuerda a los mejores trabajos con voces femeninas de Tricky, Moby o Massive Attack (pienso exactamente en ‘Black Milk’ de ‘Mezzanine’); ‘What Makes Me Think About You’ habría encajado en el último de Daft Punk; y ‘Catch Yourself Falling’ es una de esas despreocupaciones que a Alexis Taylor le gusta cantar fuera de Hot Chip, aquí con un puntito chillwave. Puede que hace mucho que no te acordaras de que Sia cantó para Zero 7, pero una vez dentro de la experiencia, ¿a quién desagrada caminar sobre una moqueta?
Calificación: 7/10 Lo mejor: ‘We Forgot Love’, ‘Back to Your Heart’, ‘What Makes Me Think About You’ Te gustará si te gustan: Air, Zero 7, Washed Out Escúchalo: el mejor tema en Youtube
Los singles de ‘Hotspot’ de Pet Shop Boys, en estos momentos en el top 1 de las midweeks británicas, si bien con toda la pinta de terminar en el puesto 2 en las listas definitivas de este viernes, han causado cierta animadversión. Sin embargo, hay una canción en el álbum que como mínimo está a la altura de haber aparecido en ‘Super’. Y es que aunque se está metiendo en el mismo saco a los dos últimos discos de Pet Shop Boys e incluso hay quien prefiere el nuevo al penúltimo, pocas son las veces en que ‘Hotspot’ presenta canciones con la pegada de ‘Say It To Me’ o ‘Burn’.
Una de esas veces se produce cuando se abre el disco con ‘Will o’the wisp’, la canción que Neil Tennant y Chris Lowe han dedicado al «fuego fatuo«, inspirados por los libros de Christopher Isherwood. La verdad es que el álbum no puede empezar mejor, hablando de un encuentro tras «muchos años» con un sujeto con una «gorra de cuero» que se sigue manteniendo «guapo». «Eras un espíritu tan libre (…) ¿pero tal vez ahora te has hecho respetable, con mujer, trabajo y todo eso?», le pregunta Tennant sobre la base electro más contundente de todo el álbum.
El grupo sitúa este encuentro fortuito en la línea 1 de la U-Bahn berlinesa, muy popular entre los visitantes jóvenes de la ciudad pues conecta oeste con este pasando por el barrio de moda de Kreuzberg, y no dejando lejos ni de Neuköln ni de Berghain. Y lo hace porque Pet Shop Boys se han inspirado en un novio de Christopher Isherwood durante los años de ‘El Sr. Morris cambia de tren’ (1935) y ‘Adiós a Berlín’ (1939, sobre la que se basó ‘Cabaret’ en 1972), como ha contado la banda en The Times o Shangay. «Son una parte importante de la idea que mucha gente tiene de Berlín… Así que, como pasaba en ‘Please’, que arrancaba con una pareja que escapaba porque deseaban vivir juntos, este álbum comienza con un hombre montando en un tren, al que observa otra persona a la que siempre gustó». El dúo conecta así pasado con presente en uno de los viajes más decididos de esta era.
La cantante cuenta cómo al principio se veía como una anti-artista pero al final sí se ha terminado viendo como una cantante; habla sobre su condición de «icono» y la caducidad del trap (“puedo ser un icono toda la vida, pero el trap es una moda y yo tengo fecha de caducidad”) y defiende su show en vivo, polémico por su enorme componente sexual. Según ella misma en ese show hay “momentos tensos”: «Todo depende mucho de la energía: si hay un retrasado mental en primera fila que me está mandando una energía de mierda, de que no está entendiendo nada lo que estoy haciendo, eso me afecta mucho, me pone tensa. El show es muy punk y pueden pasar muchas cosas, de hecho yo siempre digo que la primera fila no es para fans, es para valientes y para gente que lo entienda, porque nosotras interactuamos con el público pero las que mandamos somos nosotras. Hay gente de repente que se cree que es un intercambio, y no: el show soy yo; yo marco las pautas e, igual que les digo que se suelten, también les paro los pies».
En relación, sobre feminismo, añade: «Hace años, cuando las mujeres estaban consiguiendo cosas superimportantes, que no digo que ya no quede nada por conseguir como mujer, pero me refiero a cuando no podías ni votar ni sacar dinero del banco, esa revolución fue para decir: las mujeres pensamos. En ese momento poner por delante nuestro cuerpo quizá no era la mejor manera de conseguir lo que se quería, de transmitir un mensaje de libertad. Era una revolución a nivel intelectual para decir que no éramos solo un par de tetas. Como ya hemos conseguido todas esas cosas, ahora lo que hay que reivindicar es la libertad total de la mujer. Se da por hecho que lo otro ya lo han entendido y por eso ahora hago lo que me sale del chichi, porque él tiene que ser capaz de mirar un escote y no empalmarse. Creo que estamos en otro momento de revolución feminista».
La cantante habla de por qué no quiso poner su relación personal con Yung Beef en el foco, y reivindica la valía del sello La Vendición frente a las multinacionales: “Al final no es gente a la que le gustaría estar en Sony, pero como no puede está aquí; no, es gente que prefiere estar en un sello así, cuyo principal objetivo no es vender, sacar comisiones y transformar tu arte a cualquier precio”. Después, añade al referirse a la esclavitud de las playlists de Spotify: “Existo por ser underground, por ser real, por hacer lo que me sale del chichi y sé que firmar con un gran sello significa que eso tendría que cambiar”.
Entre otras cosas también indica que echa de menos ser como las raperas de Estados Unidos: “Crean polémica del temazo que han hecho, eso es lo que a mí me gustaría, que me preguntasen quién es el productor, qué tipo de hierba fumaba cuando lo compuse y quiénes son mis ratchets preferidas”. Poco después, indica: “Además yo no soy Lana del Rey, lo que hago es música punk y la música punk no se explica”.
Este sábado 1 de febrero se celebra en RazzClubs (Barcelona) otra fiesta Lovesick Club, un ciclo de música pop sin prejuicios dentro de Razzmatazz y en horario de club, por el que pasan nombres nacionales e internacionales, más o menos noveles, como ha sido el caso de Cariño, Lisasinson o Mallrat.
La nueva cita será en la Sala 1, pues sus nuevas protagonistas no dejan de crecer. Se trata de Ginebras, que con la excelente ‘La típica canción’ han construido un himno intergeneracional que pueden disfrutar los seguidores de mainstream e indie de los 80 y de hoy, si es que hoy alguien sigue conociendo estas fronteras.
También son muy recomendables las demás canciones de su EP ‘Dame 10:36 Minutos’, hasta el punto de que su versión de ‘Con altura’ no es exactamente lo más destacado de su repertorio. Por algo acumulan 50.000 oyentes mensuales en Spotify en tan poco tiempo.
JENESAISPOP regala 4 entradas simples para el concierto de Ginebras de este sábado entre los lectores más originales, divertidos y escuetos que nos manden un mail a jenesaispop@gmail.com con el asunto GINEBRAS, y respondiendo a la siguiente pregunta: «¿cuál es «la típica canción» que ayer no te gustaba y de la que ahora presumes?».
Conmocionado por la muerte de Kobe Bryant en accidente de helicóptero, como dejó ver en sus redes desde un primer momento, en las que afirmaba «estar llorando», Bad Bunny ha dedicado un tema al jugador de baloncesto. ‘6 Rings’ recibe su nombre de los 5 anillos que ganó el jugador en la NBA junto al de casado, y ha logrado ser “trending topic” en Twitter y lo más visto de Youtube España, pese a que ha sido Soundcloud la plataforma en que ha decidido compartirla.
‘6 Rings’ es un corte improvisado de 2 minutos en el que la ausencia de estribillo no impide que se dejen una larga serie de frases que ha impactado a seguidores de cantante y deportista, por la emoción que contienen. Bad Bunny se pregunta «dónde estará Dios metido en estos momentos», subraya que la «vida es corta», y afirma que recuerda «el primer juego» de Kobe Bryant, confesando que en muchas ocasiones «le puso en pie».
Bad Bunny afirma que gracias a él es que «todo se hace con pasión» y que «el número 13 ya no es de mala suerte». Además de afirmar que «por siempre vamos a recordarte», concluye en su momento más emotivo: «Felicidades, tú también ganaste seis sortijas / Cinco en la NBA y un matrimonio que te dio tus hijas / Pensando que una se fue contigo, me descontrolo / Pero eso es para que en el cielo no juegues solo». Se desconoce si el tema aparecerá en las plataformas de streaming oficiales o si quedará en una curiosidad de Soundcloud, donde suma 1,4 millón de escuchas en sus primeras 11 horas.