Ya sabíamos que ‘Not the End of the World’ de Katy Perry era mucho peor que ‘The End of the World’ de Skeeter Davis, pero al menos Katy se ha dignado a hacerle un videoclip a su canción inspirado en las películas de ciencia ficción de bajo presupuesto y en el que aparece Zooey Deschanel en lugar de la propia Katy, algo que a Skeeter Davis nunca se le ha ocurrido.
El vídeo de ‘Not the End of the World’ es uno de los temas más comentados de la tarde por razones evidentes. Desde que Katy Perry le daba al «lesbian chic» lleva hablándose sobre el parecido físico entre ella y la co-protagonista de ‘(500) Days of Summer‘, hasta el punto de que muchos las confundían. La publicidad que iba a dar esta unión estaba servida a pesar de que la etapa de ‘Smile‘ está siendo un fracaso de los grandes y de que la participación de Katy en el vídeo se limita a realizar una breve aparición paseando a su criatura. Al menos el single está bien escogido porque ‘Not the End of the World’ es uno de los temas destacados del álbum: el tema cruza la épica de ‘Rise’ con los sonidos robóticos del pop sueco, y de hecho Oscar Görres, que ha trabajado para Tove Styrke y Troye Sivan, está involucrado en la producción.
El vídeo de ‘Not the End of the World’ sigue la línea humorística habitual de Katy para presentarnos a una Zooey que es abducida por unos extraterrestres y termina «salvando el mundo» dejándolo sin internet. Esperemos que no sea premonitorio. Desde luego poca visión ha tenido el equipo de dirección del vídeo porque en el minuto 3.32 se puede apreciar perfectamente a un operador de cámara trabajando con la mascarilla puesta. ¿Tan lejos tenía que llegar la estética de peli de serie Z? ¿Ha sido a propósito?
57 semanas después de su lanzamiento, ‘Blinding Lights’ de The Weeknd logra al fin ser top 1 en JENESAISPOP. Hasta ahora, no había pasado del número 2. El funcionamiento de la canción en España ha sido propio de sleeper y es ahora -gracias al remix con Rosalía- cuando asciende al top 5 en la lista oficial española, donde hasta ahora no había llegado al top 10. Esta semana, por otro lado, Taylor Swift, The Avalanches, Dorian y King Gizzard llegan al top 40 de JNSP. ¿Quizá alguna de ellas logre llegar a la cima dentro de un año? Podéis escuchar nuestra última lista de novedades y votar por vuestras canciones favoritas, aquí.
My Expansive Awareness preparan el lanzamiento de su nuevo álbum, ‘Taste of Blood’, para el mes de febrero. El primer adelanto ya puede escucharse y es un tema llamado ‘Flow’ que recuerda al pop-rock grande y lisérgico de bandas como The Stones Roses. Haciendo honor a su propio nombre, el grupo de Zaragoza protagoniza una nueva edición de nuestra sección «Meister of the Week» -en la que artistas hablan sobre sus aficiones no relacionadas con la música- para sumergirnos en su afición por el mundo de los sueños, las pesadillas y esas experiencias de «expansión de la conciencia» que pueden darse cuando estamos bien despiertos. José Briceño (cantante y guitarrista) y Jota García (bajista) nos invitan a su subconsciente.
¿Por qué habéis escogido el tema de los sueños para hablar en esta sección?
“…el vivir sólo es soñar; y la experiencia me enseña que el hombre que vive, sueña lo que es, hasta despertar”. La vida es sueño.
¿Eres de recordar lo que sueñas o en absoluto? ¿Recuerdas el último sueño que has tenido?
No suelo recordar los sueños y cuando los recuerdo se me olvidan al poco rato de despertar. Por lo que he leído esto es algo bastante frecuente. A veces pienso en tener a mano una libreta para apuntarlos nada más abrir el ojo, pero luego nunca lo hago. Qué típico… Dicen que si fumas porros no recuerdas los sueños, pero yo dejé de fumar y sigo igual, aunque creo que ronco menos.
«Hay otras formas de alcanzar esos estados alterados de conciencia y conectar con la substancia cósmica y las energías extracorporales. Es algo revelador, se pasa de la fascinación al miedo en cuestión de segundos y se aprende mucho»
¿Cuál es el sueño más extraño que has tenido?
Tener una banda de música.
En cuanto a pesadillas, ¿recuerdas alguna especialmente terrorífica o extraña?
Tener una banda de música.
Esta experiencia de la parálisis del sueño no puede ser más terrorífica. ¿Cuándo te suelen ocurrir?
Sobre todo en momentos de cambios y cuando duermes en una habitación que no es la tuya o con más gente, pero también en tu propia habitación solo. Puedes estar gritando a tu hermano durmiendo al lado y él nunca te escuchará gritar.
¿Qué has «visto» en alguna de esas parálisis? ¿Qué ha sucedido?
En la primera casa en la que viví al irme de casa de mis padres, un extraña sombra de una persona delgada, alta y con el pelo largo y liso, me visitaba apareciendo siempre desde la esquina de la habitación. Empezaba como una esfera oscura y se transformaba en esa sombra, parecía reclamar su lugar, así que cambié el dormitorio a otra habitación y más tarde me cambié de casa.
¿Recuerdas la primera vez que te sucedió?
Si, era muy pequeño, dormía con mis tres hermanos. Me desperté pero no estaba despierto porque no me podía mover y nadie me podía oír.
¿Has tenido alguna experiencia extracorporal, o de viaje astral? ¿Cómo la describirías?
La verdad es que sí, aunque no precisamente soñando… Hay otras formas de alcanzar esos estados alterados de conciencia y conectar con la substancia cósmica y las energías extracorporales. Es algo revelador, se pasa de la fascinación al miedo en cuestión de segundos y se aprende mucho… Hasta que no sales y te alejas, no tienes perspectiva para ver el conjunto y entender dónde estás realmente. Desconectarse de vez en cuando del ego y del yo es un ejercicio fantástico para aumentar la libertad y la consciencia.
¿Conoces datos psicológicos y/o neurológicos que expliquen estos fenómenos?
Datos pocos, pero si que hay teorías que intentan explicar estos cambios. Hay quienes piensan que la mente y la percepción humana son como válvulas que solo dejan pasar una parte de la realidad y de una forma determinada. Es como si fueran filtros y moldes que transforman la información y le dan un aspecto determinado. Ocurre lo mismo con los pedales: tienen un input de señal y según como es cada uno y como lo configuras, el output es diferente; y si combinas varios pedales, empieza la fantasía. Realmente la señal del input también puede ser de características muy diferentes, así que las posibilidades son infinitas.
En los sueños, la configuración de pedales es más estrambótica de lo habitual y suelen ser efectos con ruletas que no entendemos ni sabemos manejar… Además, el input bebe del subconsciente y lo mezcla todo con la experiencia, creando realidades sin lógica ni sentido aparente… Moraleja: toma conciencia de tus pedales mentales y de cómo están configurados y juega con ellos para abrir tu mente.
¿Te interesan las explicaciones más esotéricas? ¿Alguna que puedas compartir?
¡Me interesan mucho! Hay tantas explicaciones como experiencias, pero todas vienen a decir que son momentos en los que nuestra mente se encuentra en un nivel de intelecto superior y conecta con la conciencia única universal de la que proviene, Brahma, Dios, como lo queráis llamar. Correteando por un plano en el que existen todos los espacios y todos los tiempos a la vez. Pero como hemos apuntado, esta experiencia no tiene por qué darse exclusivamente mientras dormimos. Es igual de satisfactoria en un momento cualquiera de un día cualquiera.
«El dream pop suele estar inspirado en sueños agradables y blanditos. A nosotros nos gusta el dream pop y el helado de vainilla»
El disco de Billie Eilish, el más vendido del año pasado, precisamente habla de estos temas. ¿Lo habéis escuchado?
No.
¿Te interesa especialmente la música que habla de sueños o que es «ensoñadora»?
Claro, los sueños siempre han sido combustible para toda forma de arte. Hay multitud de música genial relacionada con los sueños: ‘9th Dream’ de John Lennon, ‘One Rainy Wish’ y ‘Purple Haze’ de Jimmi Hendrix, ‘In Another Land’ de los Rolling Stones, luego la etapa surrealista de Dylan, Debussy, el ‘Daydream Nation’ de Sonic Youth, Dream Baby Dream de Suicide, ‘Phosphene Dream’ de Black Angels…
¿Ves una relación entre esto y el «dream pop» más terrorífico o confortante?
El dream pop suele ser bonito, ¿no? Está más ambientado e inspirado en la parte luminosa y dulce de los sueños… En sueños agradables y blanditos, podríamos decir. Nos gusta el dream pop y el helado de vainilla.
¿Hasta qué punto los sueños inspiran la música de My Expansive Awareness? Vuestra canción más escuchada se llama ‘Wake Me Up’…
La verdad es que no consideramos que los sueños inspiren directamente nuestra música, aunque quizá si lo hagan indirectamente a través de subconsciente… En los sueños este queda libre y su influjo nos salpica al despertar, de manera sutil y a veces imperceptible. ‘Wake Me Up’ habla de otra cosa, es una metáfora de la vida y de las resacas, de las proyecciones que lanzamos al presente y al futuro, que un día desaparecen y se sustituyen por otras…
¿Conoces algún libro o documental que hable sobre el tema de los sueños que te guste?
Recuerdo un libro y un documental interesantes: ‘Fantastic Fungi’ (documental) y ‘El lobo estepario’ de Herman Hesse (libro).
Bunbury ha sido uno de los nombres más mediáticos este año, no siempre por las razones que él esperaba. Publicó un disco nuevo, ‘Posible’, que se ha negado a presentar en vivo porque no quiere hacer directos de aquella manera; y durante su promoción se pilló los dedos vinculando a Bill Gates con el coronavirus y apoyando a Trump en la salida de Estados Unidos de la Organización Mundial de la Salud. Además, un libro ha desgranado su método de composición, documentando decenas de inspiraciones en otros autores.
El artista no ha debido de pasarlo nada bien, pero en lugar de ahogarse en un vaso de agua por un mal «trending topic», ha elaborado un álbum que solo puede entenderse como una respuesta a todas estas polémicas. Ya en los últimos tiempos le habíamos adivinado preocupado por el «qué dirán», por el reconocimiento. Ahora, en la primera canción de este otro álbum, le oímos hasta ladrar.
Una de las composiciones nuevas es la lynchiana ‘Malditos charlatanes’ y es tan explícita en su crítica a las redes sociales como sigue: «Demasiadas bocas que cerrar / Ahora se les olvidó leer más allá de un titular / Y comprender de verdad, sin agarrarse al clavo que arde más / Criticar por criticar / Y opinar de cualquier cosa». Después, continúa: «Escribiré contra el olvido / Porque mientras yo escribo / Otro habla de lo que hago o digo con aires de superioridad moral, y una incapacidad total para crear algo de belleza / Si sólo puede desarrollar destreza para destrozar». En la línea, ‘El precio que hay que pagar’ reconoce: «Sé que digo tonterías / Y a veces me río de la moral». Y plantea: «Preferiría no tener que explicarme delante de una audiencia hostil». Por su parte, ‘El día de mañana’ advierte: «cuida el carácter que gastas, que lo mucho cansa, y solo te vas a quedar».
‘Curso de levitación intensivo’ termina con una canción sobre los errores y el agradecimiento, ‘Tenías razón en todo’, pero en general la temática sociopolítica manda en unos temas que cuestionan las mentiras del «nuevo orden mundial» (‘N.M.O.’) y lo políticamente incorrecto. Dice ‘El momento de aprovechar el momento’: «Vamos a hacer lo incorrecto o lo más indicado para una generación / Por no reconocer nuestra vulnerabilidad en un acto de vanidad común». ‘El pálido punto azul’ parece arremeter contra el egocentrismo, y es significativo que lo primero que oigamos en el disco sea un sample de la frase «artículo de opinión: comenzamos».
El fondo musical es decidido y monocorde: la inspiración, como en ‘Posible’, continúa siendo ‘Blackstar’ de David Bowie y el último Nick Cave, quizá también los últimos Depeche Mode -los más sobrios y austeros, los más «cantautores»-. Los saxos de los músicos Santi del Campo y Pau Vidal marcan unas grabaciones de cierta querencia jazz, con la salvedad de algún número aislado un poco más pop, como el mencionado ‘El precio que hay que pagar’.
Es de agradecer que Bunbury haya hecho y sacado un disco en tan pocos meses, en lugar de pillarse un cabreo y encerrarse en sí mismo. El gran problema de ‘Curso de levitación intensivo’ es que a veces parece más bien una sesión en el psicólogo o un artículo de opinión en su defensa que un álbum, pues las melodías, a veces incluso un tanto feístas, quedan en un plano muy secundario respecto al mensaje. Apenas esa guitarra eléctrica que aparece hacia el minuto final de ‘El día de mañana’, el guiño al bajo de New Order de ‘El momento de aprovechar el momento’, los vientos en ‘La gran estafa’ o el cambio de melodía en el estribillo de la dream pop ‘Ezequiel y todo el asunto del Big-Bang’ nos recuerdan que estamos escuchando un álbum y no un discurso, porque aquí lo que importa es ante todo lo que se dice, no cómo se dice. Un álbum para quien tuviera unas cuantas preguntas sobre los controvertidos pensamientos del Enrique Bunbury de 2020.
Calificación: 6/10 Lo mejor: ‘El precio que hay que pagar’, ‘El día de mañana’, ‘Ezequiel y todo el asunto del Big-Bang’ Te gustará si te gusta: Depeche Mode, Nick Cave, el último Bowie y él mismo Youtube:vídeo de ‘El precio que hay que pagar’
José Cadahía, uno de los nombres clave de la escena indie española de la década pasada, ha muerto este mes de diciembre en su apartamento del barrio del Eixample, en Barcelona, a los 49 años de edad. El Periódico informa de que la muerte de Cadahía se produjo en realidad el pasado 10 de diciembre, sin que haya trascendido la causa.
Como recuerda el periodista Nando Cruz en su obituario para el mencionado medio, Cadahía pasó de ser un joven asiduo de la noche indie barcelonesa a abrir su primer negocio en la Plaça del Sol del barrio de Gràcia, el Mond Bar, y después el Mond Club en la extinta Sala Cibeles. Más adelante compró la sala Zeleste para reconvertirla en Razzmatazz, una de las macro-discotecas y salas de conciertos más importantes de Barcelona aún a día de hoy, 20 años después de su apertura. Cadahía, que rebautizó la sala con el título de una de sus canciones favoritas de Pulp, compartía la propiedad de dicho espacio con su amigo de la infancia, Daniel Fadiella, quien es su propietario actual.
Más turbulenta fue la relación de Cadahía con el negocio de los festivales de música de nuestro país. Seducido por la idea de que España debía ser el centro de los festivales de música, Cadahía adquirió la licencia de Creamfields en 2004, en 2006 fundó Summercase y en 2008, el año de la crisis económica, llegó a organizar hasta nueve festivales, conociendo un descalabro económico que por poco termina con Razzmatazz, motivo por el cual esta pasó a manos de Fadiella. Cadahía terminó en la ruina y huyó a San Paulo, Brasil, donde vivió varios años antes de aterrizar en Florencia, Madrid y Barcelona, donde vivió sus últimos días.
Se trata de una bonita canción acústica, sencilla, en la que manda el sonido de la guitarra y el de la voz de Sheeran, la cual ha sido pasada por el filtro del Prismizer (o un sintetizador de voz parecido), lo que hace que la canción remita de inmediato a la obra de Bon Iver. La letra es romántica, habla de estar «borracho de amor» con la persona amada e incluye una referencia a Iron & Wine «sonando en la radio». Por otro lado, el vídeo de ‘Afterglow’ simplemente muestra a Sheeran tocándola frente un paisaje rural, por lo que el artista podría estar anticipando esa era folki y lo-fi de la que hablaba hace unos años. De momento, el artista ha confirmado que ‘Afterglow’ no es el primer single de su próximo trabajo.
A pesar de que esto pueda parecer el «comeback» de Sheeran, lo cierto es que el artista no se ha ido jamás a ninguna parte: en 2019 publicaba un exitoso álbum de colaboraciones, por si le echábamos de menos después de firmar uno de los discos más exitosos de la pasada década, ‘Divide’, que vio la luz en 2017 pero siguió promocionando incansablemente hasta bien entrado el año pasado, a través de una gira mastodóntica que no nos perdimos. Luego anunciaba su retirada de los escenarios para descansar… pero de eso solo ha pasado un año.
Sheeran ha sido noticia en los últimos tiempos por estrenarse como padre, de lo que es fácil deducir que su nuevo material abordará la paternidad de alguna manera. El nombre de la criatura, Lyra Antarctica Seaborn Sheeran, daba que hablar por lo curioso del mismo.
Como si haber nacido en Suiza, pero haberse criado entre Reino Unido y Alemania, y vivir ahora en Berlín -dónde si no- le hubiera hecho ser un culo de mal asiento desde pequeña, Sophie Hunger no se casa con ningún estilo, ni con ningún idioma. En su séptimo álbum de estudio publicado este año -ahora acaba de sacar otro junto a Dino Brandao y Faber-, encontrarás canciones de todos los estilos, desde el rock teñido de electrónica de los Radiohead de los últimos años 90 y los primeros 2000, hasta la balada transcendental a piano de un Nick Cave.
La artista, que ha sido número 1 o número 2 en Suiza con todos sus discos desde 2008 y ha tenido una buena repercusión en Alemania sobre todo desde que ‘Supermoon’ (2015) fuera top 6, abre ‘Halluzinationen’ con un tema intimista dominado por un piano wurlitzer en el que se va introduciendo la electrónica. ‘Liquid Air’ nos habla de adicción al dolor y al alcohol, con multitud de inquietudes («puedo vivir en cualquier lado pero justo aquí no»). Tras un principio así de torturado, sorprende que encontremos en el álbum canciones próximas al pop o incluso bailables.
El tema titular, ‘Halluzinationen’, una canción de contradicciones («os odio, os amo y ya no me puedo defender a mí misma», entona en este caso en alemán), parece influido por Kraftwerk en el uso de sintetizadores. ‘Everything Is Good’ tiene el color en los teclados, la melodía saltarina y los beats suficientes como para haber transcendido a nivel internacional. Y ‘Alpha Venom’ es posiblemente la canción más relevante del álbum al hablarnos del machismo en la industria musical.
Escrita para una serie de la televisión alemana, sobre una actriz que lucha por sobrevivir en un mundo dominado por hombres, tiene algo de «teoría marxista y verdadero feminismo», como ha explicado en una entrevista reciente. «No olvides quién hace la música: soy yo quien hace la música», ha de reivindicar una y otra vez por razones por casi todos conocidas.
También hablan sobre la mujer con perspectivas diferentes ‘Maria Magdalena’ y ‘Rote Beeten aus Arsen’, esta última dedicada a una «mujer alemana» que nos hace daño, a la que se apela constantemente, mientras ‘Security Check’, «llorando en un taxi», parece aludir a una separación. Son todas canciones de espíritu libre en las que o bien un piano o bien un sintetizador pueden conseguir que entres definitivamente en el mundo de Sophie Hunger, en un trabajo rematado con la producción de Dan Carey (Fontaines DC, Kae Tempest). Hay un atractivo añadido: fue grabado todo en directo en una toma continua, en Abbey Road.
Calificación: 7,8/10 Lo mejor: ‘Everything Is Good’, ‘Hallutinationen’, ‘Alpha Venom’, ‘Liquid Air’ Te gustará si te gusta: Regina Spektor, Radiohead, PJ Harvey, Nick Cave Youtube:vídeo de ‘Everything Is Good’
Dua Lipa ha sido la última invitada musical de 2020 en Saturday Night Live. Normalmente, un artista acude a este programa para presentar un trabajo que está a punto de salir o, en el caso de Adele, porque sí, pero Dua lo ha hecho para poner el broche de oro al que, sin duda, ha sido su año por varias razones.
Las canciones que ha cantado Dua Lipa en Saturday Night Live han sido ‘Don’t Start Now’, el primer single de ‘Future Nostalgia‘, y el gran bombazo de esta era, y ‘Levitating’, el último single extraído del disco que, después de un inicio titubeante en las listas de éxitos, ha remontado a lo grande gracias a un remix que incorpora la participación de DaBaby, uno de los raperos de moda. Es el éxito actual de ‘Future Nostalgia’ y permanece entre los temas más escuchados a nivel global.
Dua no ha dejado de participar en el típico «sketch» de Saturday Night Live y, junto a la presentadora Kristen Wiig, ha viajado hasta los años 40 para hacer una extraña versión de ‘It’s Not Right, But It’s Ok’ de Whitney Houston, incluyendo un típico bailecito de salón con los brazos cruzados.
Estos días, la cantante británica ha sido noticia por realizar otra aparición televisiva, en este caso para cantar ‘Christmas Is All Around’ con Jimmy Fallon. La canción es conocida por aparecer en varios sitios, sobre todo en la película ‘Love Actually’ cuando es interpretada por el actor Bill Nighy. Sin embargo, es una versión de una canción mucho más antigua, firmada por la banda de pop The Troggs y publicada en el año 1967.
BENEE ha arrasado con la simpática ‘Supalonely’ con Gus Dapperton pero su primer disco ofrece sonidos bastante dispares en los que la joven neozelandesa plasma todas sus influencias. Una de ellas es el sonido de Lily Allen y Gorillaz, reflejado en el tema que más ha funcionado de manera espontánea al margen de los singles.
Y la referencia a Lily Allen tiene bastante más sentido de lo que parece, y no solo porque esta aparezca de hecho en el disco de la joven cantante: si ‘Kool’ habla de una persona a la que BENEE admira hasta el punto de querer ser ella, la letra puede interpretarse desde el punto de vista de un fan que se dirige a su artista favorito y, por culpa de los nervios, de su boca solo salen bobadas sin sentido. Le pasó a Stella Rose Bennett cuando conoció a la autora de ‘No Shame’ después de ejercerle de telonera en Nueva Zelanda: «cuando conocí a Lily Allen, nunca antes había conocido a ningún artista antes, y lo que le dije fue en plan… ¿tienes cinco años? Fue súper incómodo.»
‘Kool’ es una canción de pop de ecos funky que recuerda a la Lily Allen de ‘Alright, Still‘ y a los también mencionados Gorillaz… o a los Ting Tings más «groovy», los de ‘Soul Killing’. BENEE la escribe en su pequeño estudio casero y su letra no puede reflejar más esa ansiedad adolescente de querer convertirte en ese alguien al que idolatras por un día. «Hablas tan bien, tienes tanto control cuando caminas, estás afuera fumando, tu piel luce increíble, eres como un ángel, me encanta tu confianza, quiero sumergirme en tu vida». La cantante aclara que ‘Kool’ no versa tanto sobre «querer ser otra persona» literalmente sino sobre el deseo de vivir una vida «sin ansiedad» a través de los ojos de esta.
Otra de las lecturas que realiza BENEE de ‘Kool’ es que la persona a la que va dirigida es muy social, cuando ella no lo es tanto. Es más casera. No sorprende, por tanto, que el vídeo de ‘Kool’ muestre a la cantante viviendo la vida de otra joven como ella… a través del videojuego ‘Los Sims’. Por supuesto desde casa, en el recogimiento del hogar, que hay una pandemia ahí afuera.
Barack Obama, el Pedro Sánchez estadounidense, ha vuelto a publicar sus listas de los libros, discos y películas que más le han gustado este año. En el apartado musical, su resumen vuelve a dejar nombres de lo más interesantes que no imaginaríamos en la playlists de Donald Trump, Pablo Iglesias o Isabel Díaz Ayuso ni en un millón de años. Una lista de lo más «cool» que Obama ha elaborado, eso sí, con la inestimable ayuda de su hija Sasha, la «gurú de la música de la familia». ¡Así cualquiera!
En primer lugar de la lista de Obama aparece nada menos que el ‘Savage Remix’ de Megan Thee Stallion y Beyoncé. ¿Alguien puede visualizar a Obama cantando eso de «I’m a savage / classy, bougie, ratchet / sassy, moody, nasty»? Es uno de varios temas de la lista en los que se percibe a Obama muy atento a la música que ha triunfado en las listas de éxitos en los últimos 365 días: también están ‘La difícil’ de Bad Bunny, el remix de ‘Levitating’ de Dua Lipa con DaBaby o ‘Franchise’, ese tema de Travis Scott que, este año, ha llevado a M.I.A. a alcanzar el número del Billboard para sorpresa de todos. No, él tampoco es fan de The Weeknd.
Como suele ser habitual en las listas de Obama, vuelve a haber en ella bastante que rascar en cuanto a su reivindicación de canciones que han gustado más a un público «alternativo»: Jessie Ware ha tenido que «acostarse» un momento para asimilar que ‘Rememeber Where You Are’, la pista que cierra su último disco, el segundo mejor de 2020 para nuestra redacción, aparece por aquí. ¿Nadie en la familia de Obama es más de ‘What’s Your Pleasure?’ También Waxahatchee asoma en la lista con ‘Can’t Do Much’ y Phoebe Bridgers lo hace con ‘Kyoto’. De Bob Dylan a Little Simz pasando por Faye Webster, así le ha quedado la lista al ex-presidente.
En una escena de ‘El desorden que dejas’, el personaje de Bárbara Lennie explica a sus alumnos que tiene “una naturaleza muy adictiva”. Está hablando de sí misma, pero bien podría ser un guiño meta, porque a la nueva miniserie de Carlos Montero (cocreador de ‘Élite‘ junto a Darío Madrona) para Netflix le pasa como a las Pringles: te costará horrores limitarte a un solo capítulo y no devorar los ocho en estos primeros días. Su punto de partida es la llegada de una profesora coruñense a un pueblo para sustituir a la antigua encargada de Literatura, que se suicidó semanas atrás. “La nueva” empezará a obsesionarse con su predecesora, y con la posibilidad de que no se suicidase, sino de que fuese asesinada… y de que las mismas personas que acabaron con su vida la tengan a ella misma como nuevo objetivo. El arranque puede ser interesante, pero lo es más si os digo que las dos profes están interpretadas por Bárbara Lennie e Inma Cuesta, que el denostado Aron Piper os va a sorprender, y que, la verdad, resulta bastante refrescante que cada vez más los thrillers aprovechen las infinitas posibilidades que ofrece nuestro país, sin limitarse a Madrid y Barcelona. El siguiente paso es no tener que recurrir al “motivo de peso” de los thrillers, pero supongo que poco a poco.
‘El desorden que dejas’, que adapta un libro del propio Montero, engancha tanto como ‘Élite’, pero está orientada a un público más adulto. Es muy simbólico el uso de ‘Turnedo’ en una de las últimas escenas, y de una banda sonora que responde bastante a este target, empezando por supuesto por el tema de cabecera de Xoel López. La principal diferencia de la serie con respecto al libro es lo que para muchos ha sido el mayor atractivo de cara a plantearse verla: la presencia de Bárbara Lennie. En el libro, su personaje ni mucho menos comparte protagonismo con Raquel: solo sabemos de Viruca a partir de otros personajes. Pero comenta Montero en una entrevista reciente que precisamente fue el mundo de Viruca el que se quedó con ganas de explorar cuando la escribió, “porque era la parte que tenía que ver más con el deseo y el sexo, y cuando tuve la oportunidad de hacerlo serie dije “ésta es la mía””. Desde luego no se puede decir que no se haya quedado a gusto: además de la controvertida escena de la pintura, se retratan multitud de encuentros sexuales del personaje de Viruca, pero también del de Raquel, por no hablar del erotismo presente en las escenas que comparten Iago y Roi. Pero, más allá de los emoticonos de fueguitos y de alegrarnos la vista, Montero usa el sexo como vehículo para hablar de uno de los temas principales de la historia: la autodestrucción que comparten las dos protagonistas, una autodestrucción que se llevó (ya sea directa o indirectamente, que no queremos hacer spoiler) por delante la vida de una de ellas, y que amenaza con hacer lo mismo con la otra.
Es ahí donde reside una de las fortalezas de la serie, en ese juego narrativo entre Raquel y Viruca, y en el buen hacer de sus dos actrices. Aunque tenga debilidad por Lennie, reconozco que Inma Cuesta también se sale en una tesitura muy complicada: es la protagonista principal (al fin y al cabo, es la que está viva), pero para el espectador es más fácil empatizar e interesarse por el personaje de Viruca, que empieza mucho más carismático frente a lo paraíta que es Raquel. Esto, por supuesto, no se mantendrá así, y os sorprenderéis a vosotros mismos diciendo “qué heavy eres, Juana” a Viruca más adelante. Hay que destacar además el trabajo de Aron Piper, mil veces mejor como Iago que como Ander; el de su padre Alfonso Agra, y también el de Tamar Novas, Roque Ruiz e Isabel Garrido, aunque estos tres están lastrados por el comportamiento incomprensible de sus personajes, un problema que afecta a casi todos en mayor o menor medida, pero especialmente a sus Germán, Roi y Nerea. Muchos de los personajes parecen actuar de una u otra manera en función de lo que haga falta para la trama, y no tanto de sus propias motivaciones, que en ocasiones acaban siendo un poco anodinas para lo grave de ciertas acciones.
De hecho, se ha comentado mucho el tema de coger a actores no-gallegos para hacer de gallegos, y del acento más o menos acertado que resulta de ello -a los andaluces nos pasó hace poco con ‘Brigada Costa del Sol’ -, pero yo diría que los momentos en que tenemos que recurrir muy fuerte a la suspensión de incredulidad no son tanto por el acento como por lo que comento del comportamiento de los personajes, o del propio contexto de éstos. Por ejemplo, nadie se cree a cierto personaje hablando de cómo vive “en la miseria” y de que tiene los calzoncillos roídos (!!!), y las alusiones a la clase social flojean teniendo en cuenta que casi ningún personaje tiene una “humilde morada” precisamente. Lo mismo podría decirse de ese IES Novariz, del que al menos un personaje verbaliza que “es un colegio público pero no lo parece” (ya te digo yo a ti que no lo parece).
En definitiva, ‘El desorden que dejas’ no parece tener una intención realista ni destaca por el retrato de sus personajes (más allá del interesante juego de espejos entre Viruca y Raquel), pero sí funciona como un entretenidísimo thriller -esto no es fácil- al que os volveréis adictos durante sus ocho episodios, y con el que decir “OYOYOY” con cada giro de guión, o con cada vez que intuimos que el personaje de Bárbara Lennie va a liarla. En estas (atípicas) navidades que parece que vamos a pasar más que nunca en casa y sin mucha compañía, podemos distraernos escandalizándonos con la realidad que presenta ‘El desorden que dejas’ en vez de con la nuestra. 6,2.
Raphael ha ofrecido este sábado un concierto ante 5.000 personas (según las cifras que están siendo reproducidas por los medios generalistas) en el WiZink Center de Madrid que se repetirá hoy domingo. El concierto está siendo muy comentado por lo que implica que un evento de esta envergadura tenga lugar en mitad de la pandemia. De hecho, desde que Camela actuaran frente a 10.000 personas en el mismo recinto el pasado mes de marzo, antes de que se decretara el estado de alarma, no se había producido en España un concierto de esta magnitud. Marc Dorian reflexiona: «¿ya se pueden hacer conciertos de 5000 personas o solo Raphael?»
Las medidas sanitarias activadas por el WiZink Center han incluido «test de antígenos a todo el personal, renovación completa del aire del recinto cada 12 minutos o doble separación entre butacas», según un comunicado publicado en su página web. El aforo ha sido reducido al 30% (un 10% menos del habitual) y separado en cuatro sectores de 1.200 personas cada uno. Manuel Saucedo, CEO de Impulsa Eventos e Instalaciones, sociedad que gestiona el recinto, ha explicado a El Confidencial que estos sectores «son espacios totalmente independientes, como si fueran cuatro recintos diferentes con 1.200 personas cada uno», y que también «hemos abierto casi todas nuestros puntos de entrada al recinto, y eso son casi 90 puertas para que los asistentes no se crucen al entrar». Ha indicado que «no solamente cumplimos las normas de seguridad de la Comunidad de Madrid, sino que las multiplicamos».
Por otro lado, Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, ha defendido la realización del evento, explicando: «El concierto de Raphael cumple escrupulosamente las medidas. Las imágenes confunden: solo hay 30% de aforo. Si el contagio subiera en Madrid se suspenderían estos espectáculos. Pero es en el ámbito privado donde se registran más casos.
El concierto de Raphael ha provocado naturalmente un «escándalo» en las redes sociales, donde los usuarios comparten vídeos de dicho evento con indignación y estremecimiento a partes iguales. Hay quien anticipa que muchos de los asistentes acabarán en urgencias dentro de 14 días, quien critica que se puedan realizar este tipo de conciertos pero no viajar para reunirse con familiares por Navidad, y quien se toma la polémica a broma, como un usuario que señala: «Si lo llego a saber les compro una entrada para el concierto de Raphael a toda mi familia para reunirnos allí todos por Navidad».
Os dejamos con el comunicado oficial de WiZink Center sobre el concierto de Raphael:
El concierto recordó a las grandes noches de Raphael en el Wizink Center, aunque la situación provocada por el Covid-19 hizo que, salvo su música, todo fuese muy distinto a otras citas del artista de Linares en la capital. Raphael hubiese llenado el aforo del Wizink Center, y sin embargo, por protocolo sanitario sólo se le permitió un 25% de la capacidad total del recinto, y fueron 4.368 personas las que llenaron los asientos habilitados, cuando por normativa se hubiese podido activar hasta el 40% del aforo. Artista y recinto habían acordaron a la hora de programar el conciertos aplicar esta limitación.
La capacidad total del Wizink Center, que puede alcanzar un aforo de 17.400 personas, permitió además duplicar el distanciamiento entre los asistentes. La norma establece un asiento de distancia entre el público, mientras que en esta ocasión la distancia se duplicó hasta dos asientos, lo que representa más de un metro de distancia, e incluso no se usaron las filas de delante y detrás del público asistente lo que aislaba totalmente a los grupos de asistentes.
Como es habitual en los grandes conciertos, y más en estas circunstancias, días antes del concierto se celebró la reunión de Seguridad en la delegación de Gobierno de Madrid, en la que la Dirección de Seguridad del Wizink Center planteó el Plan de Seguridad del concierto, que recibió el visto bueno tanto de la delegación de gobierno, como de Bomberos, protección Civil y Policia Municipal.
Este Plan de Seguridad establecía, y así se hizo, que el recinto se iba a sectorizar, estableciendo módulos diferenciados de gradas: Goya, Felipe II, Fuente del Berro y pista, para limitar la movilidad de las personas. A cada uno de estos sectores se entraba por puertas diferencias, de las más de 50 que se abrieron para la ocasión, son sistemas de toma de temperatura, dispensadores del geles desinfectantes y control de entradas sin contacto físico. Lógicamente, era obligatoria en todo momento el uso de mascarilla y el público dispuso de un sistema informático para solicitar bebida y comida a sus asientos para evitar la circulación por los pasillos.
El protocolo de Seguridad también incluía un número adicional de informadores y acomodadores, tanto en el exterior como en el exterior, del recinto, para evitar concentración de personas, lo que hizo que la entrada, como la acomodación fuese muy fluida. Los cerca de 300 profesionales que trabajaron en la organización, horas antes de comenzar el concierto se sometieron a un test de antígenos para garantizar su estado. Los datos fueron incorporados al fichero de los test que está realizando la Comunidad de Madrid.
Atendiendo a informes sobre la propagación del virus en recintos cerrados, el Wizink Center modificó su sistema de ventilación, anulando la recirculación del aire y forzando la renovación completa del aire cada 12 minutos, lo que logra una calidad del aire IDA 2, cercana a IDA 1 (cuando por reglamentación bastaría con un IDA 3), es decir, muy similar al que podemos encontrar al aire libre. Para controlar la concentración de CO2, se realizaron también mediciones cada hora, con resultados en torno a las 600 ppm, muy próximos a los datos del exterior, también controlados, y que midieron sobre las 400 partículas por millón.
Al finalizar el evento, el acta del servicio de inspección de espectáculos, de la Policía Municipal, reflejó que el concierto se había desarrollado dentro de la más absoluta normalidad. El protocolo de Seguridad Sanitaria, en su momento, recogió las observaciones transmitidas por la dirección de Salud Pública de la Comunidad de Madrid y el Plan de Seguridad aplicado en para este concierto cumplió toda la normativa aplicable.
El concierto de Raphael en Madrid parece un acto destinado a reducir el gasto en pensiones de la Seguridad Social. Lo de España es increíble.pic.twitter.com/0YGZJgphl9
Mientras unos hablan a los ciudadanos de vacunas, pandemias y estar en casa, Raphael congrega en el WiZinkCenter a 5000 personas en un concierto. En fin… #L6Nnavidudaspic.twitter.com/0uBYmyVBWk
Recapitulemos: Las Ruinas, el trío formado por Edu Chirinos, Toni López y Jaime Beltrán, anunciaron en su momento, a forma de chanza, que sacarían diez discos en diez años y después se separarían. Promesa cumplida. Y, para cerrar el círculo, decidieron que su décimo disco sería un directo, como toda buena banda de rock que se precie. Y, claro está, publicado por su sello de siempre, El Genio Equivocado. Este directo, ‘Arruinaos’, fue grabado los días 15 y 16 de marzo en la sala Vol del Poble Nou. Recoge de manera fidedigna el buen hacer de la banda en directo, pero también la complicidad de un público que los había visto cientos de veces (yo entre ellos). De hecho, Las Ruinas eran, más allá de su prolífica producción, su aún más prolífica presencia en los escenarios de Barcelona: Hi Jauh Usb?, Heliogàbal, Almo2bar, la propia Vol, etc.
El sonido de ‘Arruinaos’ tiene un puntito infame, pero eso también forma parte de su encanto: que suene como si realmente estuvieras en la sala Vol. Todo se escucha con un punto de baja fidelidad; las voces están demasiado altas respecto a los instrumentos y tienen cero tratamiento de posproducción. Edu, por ejemplo, suena a garganta desgañitada, a voz en cuello. Pero también llega toda la vibración, fuerza y alegría que desprendía su clásica formación de guitarra, bajo, batería, con su característico punk-rock que bebía del alternativo americano de los 80-90. Y sin respiro: las canciones aparecen encadenadas, sin freno, hasta encajar 23 temas en 54 minutos. Y resulta el recopilatorio perfecto de sus nueve discos anteriores. Aquí todo son hits «ruinosos», si se me permite el chiste: el punk-funk seco de ‘Piensa por ti mismo’, los quiebros Pixies/Breeders de ‘Lo que siento por ti’, los aires a Kiko Veneno de ‘Viva la Resolución’, Lou Reed paseándose por ‘Ramón y Cajal’ (la calle del Heliogàbal), la cumbre pop de Jaime, la estupendísima ‘Gabriel y Vencerás’… E ironía a patadas: la coña a costa de los músicos de rock plastas, cuadriculados y fans de Satriani en ‘Jam Session Man’, espantados ante cualquier cosa que suene a distorsión, el himno ‘Cerveza Beer’, en el cual, sí, consiguen que te veas en Joaquim Costa rodeada de lateros. Sus canciones atrapaban la realidad de su momento, de unas salidas nocturnas tan, pero tan concretas, que les podemos poner nombres y apellidos.
La pandemia puede hacer cambiar enormemente la percepción de un disco. Este directo de Las Ruinas se ha convertido, en mi caso, en el ejemplo más claro; de cómo un disco en directo divertido, fresco, pensado para celebrar la carrera de los barceloneses se convierte, por (mala) arte del virus, en un artefacto cargado de nostalgia y sentimentalismo. Porque todo aquello a lo que cantan, que vivimos con ellos, se ha esfumado. Queremos creer que no para siempre, que volverá. Pero vivimos inmersos en un impasse de duración incierta. Y ‘Arruinaos’ es una estupenda manera de recordar los no viejos tiempos que ahora parecen tan lejanos.
Calificación: 7,3/10 Lo mejor: ‘Lo que siento por ti’, ‘Piensa por ti mismo’, ‘Viva la resolución’, ‘Gabriel y Vencerás’, ‘Cerveza Beer’ Te gustará si: no sólo echas de menos el Hi Jauh Usb?, sino que echas de menos todos esos conciertos en salas pequeñas de grupos de tu ciudad a los que has visto cien veces y matarías por volver a ver cien veces más. Youtube:el disco entero
The Avalanches han publicado un disco tan bueno que cuatro de sus pistas han pasado por nuestra sección «Canción Del Día» y ahora se suma a ella una quinta. ‘The Divine Chord’ se ha posicionado enseguida en el número 1 de canciones más escuchadas de The Avalanches en Spotify y no solo porque reúna en una misma producción a dos artistas tan queridos por el público como MGMT y Johnny Marr, conocido por ser el guitarrista de los Smiths.
‘The Divine Chord’ era el gran single de ‘We Will Always Love You‘ que The Avalanches se reservaban para el lanzamiento del álbum. Como ‘Music Makes Me High‘ es una producción de disco cósmico y psicodélico que nos lleva a las pistas de baile de los años 70, pero ahora para exudar un espíritu más inocente y celestial, tan religioso como puede indicar ese título que alude a un «acorde divino». La canción se basa en un sample de ‘It’s Love that Really Counts’, una canción de pop de 1962 grabada por las Shirelles y compuesta por Burt Bacharach y Hal David, y su maravilloso estribillo se basa en el de unos coros infantiles que han sido grabados para la ocasión. Pertenecen a The Yarra Voices, un coro infantil de Melbourne que, ya a finales del año pasado, declaraba encontrarse «grabando samples» para el nuevo álbum de la banda australiana.
También suena inocente la voz de Andrew VanWyngarden, y ‘The Divine Chord’ se queda a poquito de parecer una canción que podría haber aparecido en el álbum debut de MGMT, dada la presencia de sonidos lisérgicos en su producción. De hecho, es Andrew quien lleva esta producción a otro lugar gracias a su registro inconfundible, el cual también emite cierto aire de inocencia. Es imposible no creérselo cuando aborda esta letra en la que reconoce haber decepcionado a la persona amada hasta el punto de llegar a una ruptura. «Aún me acuerdo de ti, del modo en que soñaba contigo» canta antes de agarrarse a la esperanza: «puede que me convierta en la persona que creías que era, antes de conocerme». Es sublime cuando el estribillo apunta a unas «estrellas que se están reorganizando», como si el dolor de Andrew afectara al mismísimo cosmos.
Ryan Murphy está liadísimo. Crear tres series -‘Hollywood’, ‘Ratched’, la segunda temporada de ‘The Politician’- y dos películas -‘Los chicos de la banda’, ‘The Prom’- en solo un año no lo aguanta ni Jess Franco en sus mejores tiempos. Los 300 millones que le dio Netflix para-lo-que-te-de-la-gana se han traducido en un puñado de obras menores que parecen salidas de una cinta transportadora de una fábrica californiana. Productos bien confeccionados y envasados, pero convencionales, repetitivos y desechables. Murphy convertido en marca comercial.
Estética (neo)camp, discurso LGTB+, manierismo metanarrativo, reivindicación de las actrices mayores… Todos estos elementos que hicieron de Murphy un creador a contracorriente en la ficción televisiva del siglo XXI, en el director que logró introducir con éxito un poco de colorida pluma en un universo audiovisual bastante grisáceo y recio, se ha transformado en una simple fórmula en 2020. ‘Hollywood’, ‘Ratched’ o ‘Los chicos de la banda’ tenían un pase (sobre todo la primera, que con sus fallos, me pareció muy disfrutable), pero ‘The Prom’ es pura decadencia.
Y eso que no empieza mal. La premisa argumental, adaptada del musical homónimo de 2016, tiene bastante gracia y resulta muy prometedora como sátira: cuatro actrices y actores de Broadway, en pleno declive profesional, deciden dar un impulso a sus carreras a través del activismo social. Para ello eligen apoyar el caso de una adolescente lesbiana de un “trumpista” pueblo de Indiana (el estado natal de Murphy), a la que han prohibido ir al baile de graduación acompañada de su novia.
Meryl Streep, sin duda lo mejor del filme, se hace enseguida con las riendas de la película y la sostiene ella solita durante la primera media hora. Los mejores números musicales y diálogos -sobre el fracaso, la hipocresía, el narcisismo de las celebrities- son suyos. Sin embargo, cuando se echa a un lado y emerge el protagonismo de una sosa Nicole Kidman (qué manera de fastidiar el número homenaje a Bob Fosse, también por culpa de una fallida puesta en escena llena de innecesarios cortes), una esforzada Jo Ellen Pellman (pero tan ñoña como abrazar un árbol) y un insufrible James Corden (su interpretación parece un cruce paródico-mariquita entre el televisivo Ross Mathews y el Eric Stonestreet de ‘Modern Family’), la película se viene abajo como un bizcocho sin levadura.
La dirección de Murphy tampoco ayuda. ‘The Prom’ parece rodada con prisas y siguiendo un rígido manual de instrucciones: números musicales colocados estratégicamente para el lucimiento de cada estrella, la mayoría bastante pobres, rodados sin imaginación y sin demasiado peso en la narración; interludios dramáticos con discurso inclusivo tan bienintencionado como poco sutil y elaborado (la excepción sería el número protagonizado por Andrew Rannells en el centro comercial); movimientos de cámara constantes y porque sí, con una lógica narrativa que recuerda al dinamismo postizo y atolondrado de ‘El Hormiguero’; y una duración, más de dos horas, que juega en su contra.
‘The Prom’ no es el peor musical de los últimos años. Ese “honor” sigue siendo para ‘Cats’. Pero sí el más anticuado, desganado y autocomplaciente. Más cerca de la fallida ‘Hairspray’ (2007) que de la estupenda ‘Glee’ (2009), del propio Murray. 4.
‘evermore’, el disco sorpresa de Taylor Swift, hermano del anterior ‘folklore’, es el nuevo número 1 de las listas británicas, pese a que no existe aún en formato físico. Es su 6º disco en ser número 1 en Reino Unido convirtiéndose en la tercera artista femenina con más tops 1 en este país, tan solo por detrás de Madonna (12) y Kylie (8) y empatada con Barbra Streisand. Eso sí, el single ‘willow’ no ha podido provocar el doblete ni con los puntos de su vídeo y entra al número 3 contenido por ‘Last Christmas’ de Wham! en el número 2… y Mariah Carey, claro, que se mantiene en el top 1 con ‘All I Want for Christmas Is You‘, que alcanzaba la cima por primera vez la semana pasada después de 26 años aguardando.
Además, Taylor Swift coloca los 3 singles reglamentarios en la lista de singles: además de ‘willow’, ‘champagne problems’ llega al número 15 y ‘no body, no crime’ al puesto 19. En este último caso, otorga el 6º top 40 en singles a Haim. El mayor éxito de estas en Reino Unido sigue siendo… no su colaboración con Calvin Harris, sino ‘The Wire’, que llegó al puesto 16.
Debido a la ausencia de edición física, y de las fechas en que nos encontramos, ‘evermore’ ha tenido entradas muy modestas en mercados tan importantes como Alemania (24) e Italia (26); aunque no en Noruega (4), Holanda (4) , Irlanda (3) o Suecia (3).
Compartimos una nueva edición de nuestra sección «10 Fotos Que» con algunas de las fotos que más nos han divertido o sorprendido en redes sociales.
Pi-FKA-chu
Cuando paseas por la ciudad y te encuentras con Pikachu. Y cuando tú eres FKA twigs. El encuentro no podía pasar desapercibido. La autora de ‘MAGDALENE‘ ha sido noticia estos días por otros asuntos más serios, pero antes nos regalaba esta curiosa instantánea en la que dos universos colisionan.
La autora de ‘Madame X‘ ha hecho muchas cosas en su vida, pero nunca se ha hecho un tatuaje. Dicen que hay una primera vez para todo y la artista ha esperado a cumplir 62 años para tintarse en la piel las iniciales de sus cinco criaturas. Ya no es «virgen» de los tatuajes.
El actor de ‘Élite’ ha estrenado el tráiler de ‘Madrid se mata’, un corto sobre Madrid durante la pandemia, y la canción oficial de la película es una composición de La Bien Querida que solo podrá escucharse en dicho cortometraje. Ambos han celebrado su colaboración compartiendo este selfie. Y sobre Omar, Ana ha dicho que es «una fábrica de ideas, un hombre de acción y me encanta la gente así».
La cantante británica ha tenido una de las respuestas más divertidas a la publicación de las listas de lo mejor del año. Su disco ‘SAWAYAMA‘ es número 7 en la lista de NME y la artista ha contestado entusiasmada: «muchas gracias, solía poner anuncios para buscar compañeros de banda en la revista. Y ahora mírala, todavía sin poder tocar en directo». Por lo menos queda la música grabada…
La autora de ‘Lilith‘, uno de los mejores discos de 2020, resume el sentir de los músicos durante la pandemia en este tuit lleno de incertidumbre: «En esta foto parezco una cantanta de villancicos preocupada por las celebraciones de Navidad: ¿Se harán? ¿No se harán? ¿Me dejarán tocar la pandereta?» No es para menos, no…
En esta foto parezco una cantanta de villancicos preocupada por las celebraciones de Navidad: ¿Se harán? ¿No se harán? ¿Me dejarán tocar la pandereta? 🎄 pic.twitter.com/laNvlhFECE
La autora de ‘Golden Hour‘ está que lo tira últimamente y, después de colaborar con Troye Sivan y Mark Ronson en un remix de ‘Easy’, se ha embarcado en dos nuevos proyectos: aparecerá en la nueva temporada de ‘Barrio Sésamo’ y además doblará al inglés uno de los personajes de la nueva película de Studio Ghibli, ‘Earwig y la Bruja’. Kacey también cantará la canción principal de la película, ‘Don’t Disturb Me’ .
La autora de ‘Pang‘ ha sido noticia estos días por estrenar su versión grabada de ‘Breathless’ de The Corrs, que irá incluida en el disco de remixes que saca en abril. Sin más novedades a la vista, la cantante ha decidido hacer un «update» a sus fans muy propio de ella: «si os preguntabais por qué no habéis sabido demasiado de mí últimamente, la razón es que no había wi-fi dentro del cisne». Al menos sabemos que, con este tipo de aves, puede comunicarse.
in case you wondered why i’ve been a bit quiet lately it’s cause no wifi in swan https://t.co/gBcFjegUDU
Sin comerlo ni beberlo, Nathy Peluso ha conseguido el mayor éxito de su carrera hace unas pocas semanas: su tema con Bizarrap acumula 42 millones de visualizaciones en Youtube y en Spotify va por los 16 millones de escuchas, por lo que ya ha hecho sorpasso con el que hasta ahora era su tema más oído, ‘No se perdona’ con Rels B. El «challenge» con el tema en TikTok también ha gustado mucho y aquí aparece Nathy marcándose los pasos correspondientes con sus amigas, Úrsula Corberó y Lali.
Hablando de Úrsula Corberó, esta no aparecerá en el regreso -por un episodio- de ‘Física o química’, del que ya se conoce el tráiler y… ¿¿no pinta mal?? Javier Calvo, que ahora triunfa con ‘La Veneno’, sí participa en él, y esta información no tiene nada que ver con la foto que veréis a continuación, subida por el mismo Javier a su feed de Instagram, y en la que el director aparece trepando por unas paredes cual Spiderman. Talentos ocultos.
Cada cierto tiempo surge un debate en las redes sobre la forma de cantar de Christina Aguilera, siempre tan dada a los alaridos incluso cuando pone voz a una canción navideña como la que acaba de presentar en la tele. En respuesta a las críticas, Christina ha subido la apuesta en un vídeo publicado a sus redes cantando con todo el poderío que la caracteriza. Por cierto, la autora de ‘Back to Basics’ cumple hoy 40 años. ¡Felicidades!
Iseo & Dodosound firman una de las novedades de hoy viernes con un nuevo single llamado ‘Atrapada’ que hoy es nuestra «Canción Del Día». Estamos ante el segundo sencillo publicado en 2020 por el popular grupo de dub y reggae navarro, pero donde ‘Quemando’ apostaba por un ritmo animadillo, el de ‘Atrapada’ es melancólico de principio a fin.
Mucho más envolvente y sintetizado también, pues incluso se da un aire con el ‘Hotline Bling’ de Drake, el nuevo sencillo de Leire Villanueva y Alberto Iriarte versa sobre la distancia que, este año, ha provocado la cuarentena. La distancia entre familiares, amigos, amantes… entre seres queridos en definitiva, inspira esta composición que va de un sentimiento de angustia general, haciendo referencia a las calles desiertas de Madrid; a uno más personal, al mencionar las «cuerdas rotas» de una guitarra o al incluir frases como: «cuando la herida no parar de sangrar puedo cantar, pero no puedo curar tu pena».
«Esta canción refleja un sentimiento colectivo de este último año, en el que no solo se ha visto damnificado el ámbito económico, sino también (y no menos importante) el social», explica la banda JENESAISPOP. «La distancia entre todos nosotros ha sido mayor que nunca, donde la única forma de comunicarnos ha sido a través del teléfono. ¿Dónde han quedado los abrazos? Hemos pasado un año lejos de nuestra familia (somos dos Navarros viviendo en Madrid), como muchas otras personas, y de eso habla ‘Atrapada’. A este 2020 se le tenía que dedicar o bien 1 minuto de silencio, o bien una canción. Y nosotras hemos elegido la segunda opción». La artista apunta: «Un buen amigo, al escuchar la canción, nos dijo que este tema «nos hace humanos», y puede que sea una forma sencilla pero acertada de describirlo. Creemos que este single tiene mucho de Leire y Alberto, plasmado musicalmente en Iseo & Dodosound, pero no dejamos de ser dos chavales que han pasado un año jodido, como todos».
‘Atrapada’ nace en septiembre después de un periodo de bloqueo: «Es curioso cómo, cuando en marzo empezó la pandemia, nuestra gente nos decía «qué bien, aprovecharéis entonces para componer un montón», cuando lo único que estábamos pensando era «qué está pasando en el mundo?», explica el grupo. «Las primeras semanas fueron de bloqueo creativo, como es normal, la inspiración no viene solo por tener mucho tiempo en casa (como era la situación de la cuarentena). Necesitas una paz mental que en aquellas semanas era imposible concebir. Pero poco a poco fuimos viendo que esto iba para largo, y adaptándonos a lo que se venía, empezamos a componer (a un buen ritmo, de hecho). Aún así, esta canción salió sin pensarlo, sin pretenderlo. Y viendo la letra, decidimos que adelantara al resto de material para publicarla ahora, que creemos que es cuando mejor puede venirle a la gente. Con este tema no solo diremos que esperamos que a la gente le guste, sino que en él encuentren cobijo y el calor de esos abrazos que tanto hemos necesitado este 2020».
La historia de ‘Atrapada’ llega enmarcada por la conversación telefónica entre Iseo y su madre, una fórmula similar a la de la base de ‘Nunca estoy’ de C. Tangana. La conversación es real y quedó grabada de manera accidental: Iseo terminó de grabar las voces de la canción y entonces llamó a su madre, sin pensar en que el micrófono seguía grabando. La llamada muestra a Iseo hablando con su madre a las tantas de la noche, cuando esta se encuentra cenando con su familia, buscando -quizá- ese tipo de charlas banales que se tienen en el día a día. Entre oportunas referencias a la «cuarentena» y a «corazones que también están en ERTE», otro acierto de Iseo & Dodosound y van…
Anaju edita hoy un EP llamado como una de las palabras más siglo XXI que existen, ‘MOOD’, en el que es posible encontrar sus interesantes dos singles recientes, ‘Ese o ese‘ y ‘Rota‘. El primero estaba producido por BRONQUIO, que firma otro corte en el epé, ‘Si supieras’, y Raül Fernández «Refree» era la persona detrás del segundo.
Hay más nombres interesantes en el EP de Anaju. El tema ‘Carbón’ es una producción de _juno, esto es, el dúo musical formado por Zahara y Martí Pernarnau de Mucho que este mismo año ha publicado su debut largo, uno de los mejores discos de 2020. ‘Carbón’ lleva la firma inequívoca de ambos en producción (la mezcla de pianos y sintetizadores atmosféricos) y melodía, que no puede recordar más a la autora de ‘Santa’, sobre todo a sus momentos más dramáticos y sentimentales. La letra relata la trágica historia de una familia minera que «no consigue calentarse las manos tras el día de labor».
El origen de ‘Carbón’ hay que trazarlo en la estancia de Anaju en la Academia de Operación Triunfo de este mismo año. La artista cuenta a Los40 que ‘Carbón’ nace de su propósito de asimilar el sentimiento de ‘Catalina’ de Rosalía, canción que le tocó presentar en una de las galas del programa. Explica: «Carbón no es una historia directamente mía, es una historia que yo me inventé para poder defender la canción de Catalina en la gala de Operación Triunfo. Entonces, esa historia está traducida a canción sobre una niña llamada (de esta manera)». Anaju apunta que ‘Carbón’ «trata un tema de amor pero desde el punto de vista de una familia», ya que es «la historia de una niña que narra lo que le pasa a su padre».
Eminem publica hoy viernes una edición «de lujo» de su disco editado a principios de este año que de hecho incorpora un disco entero de canciones nuevas en las que caben colaboraciones con Dr. Dre o Ty Dolla $ign. Es la segunda parte de ese trabajo inspirado en la obra de Alfred Hitchcock que no ha aparecido en demasiadas listas de lo mejor del año, pero que tampoco ha pasado desapercibido en las comerciales: el álbum ha vuelto a ser un éxito y su single principal ha dado al artista otro macrohit.
Publicado por sorpresa, como el reciente ‘Music to Be Murdered By’ y ‘Kamizake‘, el nuevo trabajo de Eminem incluye un corte llamado ‘Zeus’ que está siendo uno de los temas más comentados de la mañana debido a que, en él, el rapero se disculpa con Rihanna por una canción que se filtró a finales de 2019 en la que decía «ponerse del lado de Chris Brown» en relación a la agresión de este a la cantante del año 2009. La frase en concreto era: «deja que aporte mi opinión: yo estoy del lado de Chris Brown, también daría una paliza a cualquier zorra». La canción, grabada precisamente en 2009, aparecía dos años después en un disco de B.o.B con una letra diferente.
En ‘Zeus’, la pista 14 de ‘Music to Be Murdered By – Side B’, Eminem rapea: «me disculpo sinceramente con Rihanna por esa canción que se filtró / lo siento, Rih, no pretendía hacerte ningún daño / pero, en cualquier caso, fue un error por mi parte». Por otro lado, el sonido sentimental de la canción recuerda al de ‘Love the Way You Lie’, otra composición en la que el artista pide perdón por su tendencia a abusar física y psicológicamente de las mujeres… y en la que aparecía la misma Rihanna como artista invitada.
En realidad, el sencillo que presenta el nuevo trabajo de Eminem es otro: ‘GNAT’ presenta otro de sus raps imposibles espetados a la velocidad de la luz y otro de sus vídeos payasetes, en este caso con referencias al coronavirus y a las armas.
Hoy viernes 18 de diciembre publica por sorpresa Eminem su nuevo disco, tal y como hacía a principios de año con ‘Music to Be Murdered By‘. El nuevo trabajo del rapero está relacionado con aquel pues supone su «cara b», que no sus caras b. También puede escucharse desde hoy el nuevo disco de Paul McCartney, la tercera parte de su trilogía iniciada hace 40 años, una colección de canciones de Maggie Rogers previas a ‘Alaska’, y esta semana ha visto la luz un disco de Mica Levi. En el plano nacional, Pablo López edita largo con título épico y Anajú un primer EP que incluye muchos de sus singles lanzados hasta el momento. Además, Soto Asa (del sello La Vendición) lanza su tercer trabajo largo con colaboraciones de Bad Gyal o La Zowi.
En cuanto a singles sueltos, ya hemos comentado la versión de The Corrs por Caroline Polachek producida por pC Music o la nueva burrada de cupcakKe. En realidad, tres de los temas destacados que salen hoy viernes son covers: por un lado, La Bien Querida se apropia de ‘Soy rebelde’ de Jeanette; por el otro, Él Mató a un Policía Motorizado y Carolina Durante unen fuerzas para reivindicar ‘Espacio vacío’ de Séptimo sello, y ojo a la perversión del ‘Santa Claus is Comin’ to Town’ perpetrada por Najwa y Kase.O, llevada al español.
También puedes escuchar en nuestra playlist de novedades el nuevo single de Rels B, que se da un aire a un tema de Nathy Peluso, con la que ha colaborado; y lo nuevo de Carlos Sadness, Iseo & Dodosound, Modo Avión, Kinder Malo y Pimp Flaco o Alba Reche con Cami.
Molchat Doma es una banda de new wave, synth-pop y post-punk de Minsk, la capital de Bielorrusia, que este año ha visto cómo una de sus canciones se viralizaba de manera masiva a través de TikTok. Las 43 millones de reproducciones que acumula ‘Судно’ («Sudno») a día de hoy son el sueño de cualquier artista emergente y la canción, dedicada al poeta y geólogo ruso Boris Ryzhy, quien se suicidó a los 26 años, es un tiro de post-punk tenebroso que merece todo el éxito que ha recibido.
Sin ser exactamente un grupo emergente, pues su primer disco vio la luz en el año 2017, seguido por el segundo en el siguiente, el trío formado por el cantante Egor Shkutko y los músicos Roman Komogortsev (guitarra, sintetizadores, batería) y Pavel Kozlov (bajo, sintetizadores) publica su tercer largo a través del sello neoyorquino Sacred Bones, conocido por editar el trabajo de artistas tan interesantes como Zola Jesus, Jenny Hval o Lust for Youth. Compuesto a principios de año, durante el primer confinamiento, ‘Monument’ es otro estudio del sonido de The Cure, Joy Division o Bauhaus con incursiones ocasionales en la pista de baile, que entretiene por lo que tiene de familiar y de apto en esta época tan incierta… y la que nos espera.
Las composiciones de Molchat Doma, cuyo nombre significa «casas en silencio», el cual ya evoca una imagen de un lugar que antes fue habitado, pero que ahora ha sido abandonado, llevan títulos tan propios del género en el que incurren que parecen autoparódicos: «ahogarse», «condenado»… Hasta hay una pista llamada «no tiene gracia». Sin embargo, las canciones de Molchat Doma suenan sinceras y genuinas incluso cuando no se tiene el traductor delante para entender las letras, debido a la pasión con la que sus autores las abordan. La desesperación de una canción como ‘Не Смешно’ («ne smeshno»), que suena 100% a los The Cure de ‘Faith’, como buena parte del álbum, es palpable e imposible de fingir, y el ritmo disco a medio tiempo de ‘Обречен’ («obrechen») suena tan apesadumbrado como esa letra que habla sobre «heridas que tendré que curar por toda la eternidad».
‘Monument’ se abre con un corte de casi 6 minutos llamado ‘Утонуть’ («utonut'») que se queda cerca de ser un pepinazo y por el que asoman influencias muy obvias de Kraftwerk en su entramado de sintetizadores y percusiones mecanizadas. Y la música de baile sintética de los años 80 está muy presente en un tema llamado abiertamente ‘Дискотека’ («diskoteka») que el grupo dedica sin misterios al poder sanador de este lugar («no me importa lo que paso conmigo después, yo sigo bailando»), y en el que se envuelve de sonidos que remiten a grupos como Soft Cell. Sin embargo, en el álbum mandan ante todo las sensaciones del post-punk más adusto y desangelado de finales de los 70 y principios de los 80 -esas melodías de guitarra tristonas, esas baterías gélidas- y el espíritu de Ian Curtis está muy presente en la voz Egor Shkutko… aunque decir esto parezca una obviedad.
Igual de obvias son unas letras que hablan de desilusión, soledad, desamor e incertidumbre ante una existencia vacía de significado que parece derretirse como nieve en la ciudad: sí, los grises paisajes post-soviéticos parecen nutrir las atmósferas de estas canciones, como la propia cubierta del disco sugiere. En ‘Ответа Нет’ («otveta net»), el intérprete, encerrado en su «triste apartamento», tan solo que lo único que es capaz de oír es el «crujido del suelo» al caminar, clama: «canta una canción triste conmigo, no tiene sentido, ¿pero acaso algo lo tiene?»; en ‘Звезды’ («svezdy») culpa insistentemente a la persona amada por tener el «corazón malherido», y en ‘Утонуть’ incluso llega a rogarle que le «deje ahogarse en paz». Supere o no Molchat Doma la repercusión del viral, lo cierto es que su música sigue teniendo sentido.
Calificación: 6/10 Lo mejor: ‘Utonut’, ‘Obrechen’, ‘Discoteka’, ‘No smehsno’ Te gustará si te gusta: The Cure, Joy Division, Motorama, Depresión Sonora Youtube:vídeo de ‘Diskoteka’
Taylor Swift volverá a ser número 1 en Estados Unidos y Reino Unido de manera simultánea con su nuevo disco, ‘evermore‘. Una de las canciones del disco que más están gustando de manera espontánea -y con razón- es la colaboración con Haim, que llega muchos años después de que se sepa que las cuatro comparten una amistad.
‘no body, no crime’ es la canción que une a Taylor Swift y a las hermanas Haim (tanto la primera como las segundas han firmado dos de los mejores discos de 2020 para nuestra redacción) pero no es la típica colaboración entre dos artistas que se admiran. Es verdad que Danielle, Alana y Este se limitan a hacer coros -de manera muy prominente, eso sí- en este gracioso medio tiempo de country-pop-folk clásico producido por Aaron Dressner y la propia Taylor, pero su protagonismo en dicha composición no se queda ahí.
La propia Este, la bajista de la banda, es una de las protagonistas de la letra y su nombre es la primera palabra que escuchamos en ella. ‘no body, no crime’ narra la historia del asesinato de Este después de que esta acuse a su marido de haberla sido infiel, pero después es Taylor quien decide vengar la muerte de esta asesinando a su viudo, aprovechando que posee una «licencia de navegación desde los 15 años» (lo cual es cierto) y que ha «limpiado suficientes casas para saber cómo cubrir la escena de un crimen». La coartada de Taylor: «las hermanas de Este estaban conmigo».
La propia Taylor ha explicado el origen de ‘no body, no crime’ y de la colaboración, así como la decisión de que Este forme parte de la historia: «La colaboración surgió poco después de escribir yo una canción bastante oscura sobre un misterioso asesinato, en la que uno de los personajes se llama Este porque ella es esa amiga que tengo a la que le encantaría aparecer en una canción de este tipo». La artista indica que, ultimando la letra de ‘no body, no crime’, envió un mensaje de texto a Este en el que le hacía escoger su restaurante en cadena favorito de una lista que le había sugerido. Poco después, Taylor reveló a Haim la existencia de ‘no body, no crime’ y Haim aceptaron cantar en ella, entusiasmadas.
En cuanto a la demora de esta colaboración, Taylor ha dicho: «No sabemos muy bien por qué ha tardado tanto en suceder: hemos girado juntas, hemos tocado juntas en directo, hemos hecho coreografías como si estuviéramos en un campamento de verano, pero ha tenido que surgir una canción sobre vengarte del asesinato de tu amiga para dar nosotras este paso». Taylor señala que el lanzamiento de ‘no body, no crime’ confirma que ella es la «cuarta hermana Haim».
Publicadas nuestras listas en las que repasamos la mejor música de 2020 (discos y canciones), como siempre llega el momento de que la audiencia haga oír su voz y reivindique ese disco de Grimes que no ha aparecido en nuestra lista, ese de Miley Cyrus que tampoco, o ese trabajo de «folk nórdico acústico» de Myrkur que tantas buenas reseñas ha recibido pero que, por H o por B, no ha terminado haciéndose un huequito en nuestras páginas.
Los usuarios habituales de los foros podéis dejar vuestro top 5 de discos y canciones del año en este hilo. La fecha límite para votar es este viernes 18 de diciembre por la noche. Los que no seáis usuarios de los foros podéis mandarnos vuestro top 5 siempre mezclando nacional e internacional a jenesaispop@gmail.com hasta el domingo 20 de diciembre a las 23.59.