Con la taquilla en cifras para llorar, la gran idea de los grandes estudios ha sido posponer los estrenos más esperados hasta no se sabe cuándo. ¿Quizá hasta que no quede ni un cine abierto? Almodóvar no da crédito. Asegura que ahora es cuando hay que trabajar más que nunca y su propuesta ha sido conducirnos a los cines, entre semana y bajo la lluvia, para ver su primera obra en inglés, de 30 minutos, rodada después del confinamiento. Merece la pena tragarse los 15 minutos de anuncios previos para ver esta obra de media hora, aunque solo sea para reflexionar durante un par de ellos sobre cosas como «¿alguien ha oído algo parecido a «me contagié viendo una película en el cine»?».
‘La voz humana’ (1930) de Jean Cocteau, una obra fetiche en la filmografía de Almodóvar desde los 80, no es ajena a la historia del cine ni al mundo del pop. La idea era que la interpretara Édith Piaf aunque no llegó a hacerlo, Roberto Rossellini hizo una adaptación en 1948, Ingrid Bergman protagonizó otra en los años 60 y Alaska y Dinarama sacaron en 1986 una canción así llamada que parecía inspirada en este texto. Si la letra de aquella «Voz humana» decía «Júrame que llamarás, aunque no existas, aunque no sea verdad», esta nueva versión de Almodóvar es una vuelta sobre aquella Marisa Paredes que en ‘La flor de mi secreto’ se preguntaba: «¿Hay una posibilidad, por pequeña que sea, de salvar lo nuestro?».
El monólogo de una mujer a punto de volverse loca por una ruptura es el pilar de este cortometraje para el lucimiento de Tilda Swinton. La actriz tuvo que «pellizcarse dos veces» cuando recibió el mail de Almodóvar, pues ambos habían coincidido pero ella tendía a comportarse en esos encuentros como «un animal extraño y tímido» mientras el director estaba «rodeado de admiradoras»; y ahora es el espectador el que tiene que «pellizcarse dos veces» para sobrevivir a esa mezcla de «locura y melancolía» de la que su mismo personaje presume y que de manera tan fehaciente define a la protagonista de ‘Tenemos que hablar de Kevin‘.
Almodóvar, como es lógico, no le deja todo el protagonismo. ‘La voz humana’ era referenciada en ‘La ley del deseo’ (1987) e inspiró el personaje principal de ‘Mujeres al borde de un ataque de nervios’ (1988), donde la imagen de Carmen Maura al aparato es una de las más recordadas. Entre muebles utilizados en otras de sus películas, esa terraza con alguien que si se tira, que si no se tira, y ese libro de Alice Munro sobre una mesa, los «Eastern Eggs» a su carrera son continuos. El espectador se termina de sentir como en casa con la reconocible música de Alberto Iglesias.
Esa sensación de confortabilidad termina jugando también algo en contra de ‘La voz humana’, un corto cuyos máximos pros son la actuación de Swinton, reforzada porque esta adaptación presenta una versión más moderna del personaje femenino; y la dirección artística, un absoluto espectáculo con una inesperada referencia escenográfica al Lars Von Trier más teatral, el de ‘Dogville’, ‘Manderlay’ y ‘Wasington’.
El gran contra es que ambos mundos -el de Swinton y el almodovariano- no terminan de integrarse para crear un nuevo universo frente a un espectador impaciente por que se saque partido a ese hacha, a la referencia a ‘Kill Bill’, a toda la violencia que se insinúa durante esta media hora. Dejando el humor relegado a un cameo, Almodóvar es fiel a su visión de la mujer en general, y de la mujer doliente en particular, pero en ‘La voz humana’ ha trabajado sobre todo el lado formal y estético -del teléfono rojo a rozar el spot de Airpods-, sin turbulencias tarantinescas, ni afectaciones dramáticas, al menos que al espectador afecten. El director manchego continúa en ‘La voz humana’ la senda que tan buen resultado le dio en ‘Dolor y gloria‘ de jugar con el contexto cinematográfico (la película dentro de la película), interpretando la salida del escenario como una forma de liberación. Swinton y Almodóvar brillan por separado, sin atreverse a dar un paso histórico en unas carreras de vértigo. 7.
Este viernes pueden escucharse al fin el nuevo single Ariana Grande y el tema conjunto de Amaia y Alizzz, que salía el jueves. A lo largo de la semana han llegado a las plataformas también temas sueltos de Kanye West (‘Nah Nah Nah‘), Delafé y Suu (‘MUCHO MUCHO MUCHO’), FINNEAS (‘Can’t Wait to Be Dead’) o un ‘Slime’ de Shygirl producido por SOPHIE. Foto: Dave Meyers
Hoy viernes sale también un tercer adelanto de ‘DISCO’ de Kylie Minogue así como un nuevo pepinazo de Novio Caballo llamado ‘Celebritis’ que no es otra cosa que una versión de Fabio & Glitter Klinik. También presenta nuevo tema electrónico Russian Red, si bien este pertenece en realidad a Casero y Lourdes ejerce de vocalista invitada. Por otro lado, Miley Cyrus, que al fin ha anunciado su disco, ha subido su versión de ‘Zombie’ a las plataformas de streaming a la vez que Adrianne Lenker lanza un tema llamado ‘zombie girl’, perteneciente a su nuevo disco en solitario.
Entre los artistas que se han animado a adelantar us próximos proyectos se encuentran Ela Minus (su disco sale el viernes que viene, próximamente entrevista con ella), Arlo Parks con ‘Green Eyes’ (su debut sale en enero), Julien Baker con ‘Faith Healer’ (su disco sale en febrero), un Eguala cuyo nuevo single y vídeo hemos estrenado en estas páginas; Ty Dolla $ign con ‘Spicy’ acompañado de Post Malone, Nilüfer Yanya con ‘Crash’ (presenta EP) o Amatria, que publica «un disco» este viernes. Además, C. Tangana y yaeji se han puesto de acuerdo para añadir sendos «bonus tracks» a sus últimos lanzamientos, y el primero de ellos involucra a Chico Blanco.
Este viernes sí salen a la luz los nuevos trabajos discográficos de Bruce Springsteen, Gorillaz y su experimento ‘Song Machine’, Major Lazer, Actress, Jeff Tweedy, The Mountain Goats, Faithless, Laura Veirs, Songhoy Blues, John Frusciante, Boy Pablo, Bea Miller, Nothing but Thieves, clipping. o JunglePussy.
El disco que contendrá su éxito ‘Midnight Sky’, que hoy viernes podría ascender por primera vez al top 5 en Reino Unido como apuntan las «midweeks», se llama ‘Plastic Hearts’ y estará en el mercado en poco más de un mes, el 27 de noviembre, es decir, el mismísimo Black Friday. Su portada no puede ser un homenaje más explícito a Debbie Harry. El álbum incluirá la versión de ‘Heart of Glass’ que ha logrado situar en el top 40 británico, pero también la de ‘Zombie’, que se viralizaba el pasado fin de semana. «Dolores estaría muy impresionada», escribían los chicos de Cranberries en Instagram.
Miley se ha dirigido a sus fans a través de una carta publicada en Instagram en la que indica que comenzó este disco «hace 2 años» y que pensó que «lo tenía todo bien atado y resuelto, incluso su propia vida», pero se equivocó, refiriéndose al incendio en su casa de 2018: «Nadie pone a prueba tu ego como la vida misma. Justo cuando pensé que el cuerpo de trabajo había terminado, todo se borró, incluyendo la mayoría de la relevancia de la música porque todo había cambiado». De momento, se desconoce la secuencia del álbum: simplemente se sabe que ‘Midnight Sky’ será la pista 7, ‘Heart of Glass’ la 14 y ‘Zombie’ la 15.
Ariana Grande ha publicado su nuevo single ‘positions’, que vuelve a ser una producción de su habitual Tommy Brown junto a LondonOnDaTrack y Mr. Franks. En el estilo trap-pop de ‘thank u, next‘ o ‘Boyfriend’, el tema cede su gancho a un extraño instrumento de cuerda pulsada y presenta suculentas armonías vocales en el estilo de Brandy.
El vídeo de ‘positions’ vuelve a estar dirigido por Dave Meyers pero no es surrealista como los de ‘no tears left to cry‘ o ‘God is a woman‘. En este caso, Ariana ocupa la Casa Blanca para convertirse en presidenta de Estados Unidos a la vez que asume tareas del hogar típicas como cocinar, sacar a los perros o meter la cabeza dentro del horno. El vídeo vuelve a ser una superproducción, si bien parece pensado para el lucimiento de ella en todo momento y nada más.
La cantante había anunciado, por sorpresa, que su nuevo trabajo discográfico vería la luz «este mes» de octubre, lo que significa que el lanzamiento ya solo podrá darse en una fecha, el viernes día 30 de octubre, a menos que haya algún cambio de última hora, como que decida publicarlo en jueves o el huracán Adele mueva ficha de alguna manera. El día 30 es la fecha a la que apunta la cuenta atrás en su página web.
La «Semana Virtual de la Música Latina» de Billboard se está celebrando esta semana y, entre los artistas que han ofrecido entrevistas de manera conjunta, se encuentran Rosalía y Pharrell Williams -el integrante de The Neptunes participó en las sesiones de grabación de ‘El mal querer‘ pero sus producciones permanecen inéditas-. En la entrevista, Rosalía y Pharrell confirman que han trabajado juntos en «varias canciones» nuevas pero sin dar detalles, y destacan de cada uno su compromiso y dedicación en el estudio.
Otro de los temas abordados en la entrevista es el techo de cristal. Rosalía argumenta que las mujeres encuentran más dificultades que los hombres a la hora de ocupar posiciones de poder en la industria de la música tanto como artista como detrás de los focos: «es una bola: como mujer, a ti no se te da una posición de igualdad, y eso hace que no (obtengas) los (mismos) beneficios (que los hombres) y que nunca estés en la misma posición (que ellos). El crecimiento se hace mas difícil».
Cuando Pharrell introduce en la conversación el tema de las plataformas de streaming y los algoritmos, la autora de ‘Dolerme’ le coge el testigo para poner el ejemplo de un caso en el que opina que esta dificultad se ha dado, y que no necesita nombrar explícitamente para que quede claro que es ‘Relación Remix’, la remezcla del éxito de Sech en la que ha participado junto a Daddy Yankee, J Balvin y Farruko, y que sigue entre las canciones más escuchadas en Spotify a nivel global (16).
La cantante lanza su «hipótesis» y explica: «pongamos una canción en la que hay varios hombres y una mujer, y esa canción es un «remix»; en ese «remix», se le promete a la mujer que va a ser «main artist» y (de hecho) la mujer tiene más tiempo en la canción que el resto de hombres (que participan), pero luego hay artistas grandes que tienen muchos números y que, por el algoritmo, interesa que estén como «main artist» y ella como «featuring», eso va a hacer que ellos tengan todo el beneficio mecánico y ella no lo tenga, (por lo que) la mujer va a tener mucha mas dificultad de acabar teniendo los mismos números que esos hombres».
Como puede comprobarse en Spotify, ‘Relación Remix’ aparece acreditada a tres artistas principales, ninguno de los cuales es Rosalía: Sech, Daddy Yankee y J Balvin figuran como «main artist» y Rosalía y Farruko aparecen ya a la derecha del título de la canción como artistas invitados.
Lous and the Yakuza es una de las sensaciones pop del momento en el mundo francófono después del lanzamiento de su primer single, ‘Dilemme’, en septiembre de 2019. Su álbum debut, ‘Gore’, ha salido esta semana y en España es un trabajo que provocará interés como mínimo por quien se encuentra detrás de la producción: El Guincho. El músico y productor canario diversifica su plantilla de colaboradores y mientras ultima el próximo álbum de Rosalía, se ha aliado con Lous and the Yakuza y también ha participado en la producción del nuevo disco de FKA twigs.
¿Pero quién es Lous and the Yakuza? La mujer frente al proyecto se llama Marie-Pierra Kakoma y es belga. La palabra «Lous» viene de invertir el término inglés «soul» y «Yakuza» es el nombre con el que se conoce a los sindicatos del crimen organizado de Japón, si bien Kakoma lo utiliza para describir a su equipo de músicos y colaboradores. ‘Gore’ es su primer disco y, entre los sencillos que han avanzado su lanzamiento en los últimos meses, se encuentran ‘Dilemme’, ‘Amigo’ o ‘Solo’. Todos estupendos temas pero la artista se había reservado uno igual de fantástico para cuando saliera el álbum, ‘Dans la hess’, el que más está funcionando de manera espontánea en Spotify y que hoy es nuestra «Canción Del Día».
‘Dans la hess’ es una producción de El Guincho compartida con otros dos productores, Mems y Ponko. Como la totalidad de ‘Gore’, el tema ofrece un sonido de trap-pop elegante y de tonos cálidos similares a los de la portada del álbum, pero también destaca por sus capas de sonido hipnóticas y por su bonita melodía, que aguantaría una revisión más clásica sin duda. Para no haber sido single por el momento, puede ser el tema más inmediato y emotivo de todo el largo.
En jerga francesa, el término «hess» se usa para referirse a un estado de «miseria», y en ‘Dans la hess’, Kakoma nos viene a contar que todo lo que ha conseguido no ha caído del cielo, que se lo ha currado como la que más para llegar donde está. Y desde luego así ha sido si atendemos a su biografía: la cantante es hija de un ginecólogo congoleño y de una madre pediatra, esta llegó a ser encarcelada durante la Segunda Guerra del Congo cuando Kakoma apenas contaba 2 años, y cuando Kakoma cumplió 18 años, sus padres la desheredaron por querer dedicarse a la música en lugar de a la medicina y la echaron de casa. La artista vivió durante meses en la calle hasta que encontró un estudio de grabación en el que dormir, rehaciendo su vida.
En ‘Dans la hess’, Kakoma asegura haber «gritado, llorado y pedido ayuda» pero también haber salido de su «vida de mierda». Y entre recuerdos a sus «hermanos y hermanas» de la calle y a aquellos tiempos en que se veía forzada a «ganar algo de dinero para ir tirando» hasta que su vida mejorase, se crece desafiante ya en la primera estrofa, en la que canta que «no tiene tiempo para ir perdiendo oportunidades» y que su paciencia «tiene un límite». Así, ‘Dans la hess’ se convierte en un pequeño himno de superación y sobre todo de emprendimiento, de cómo coger el toro por los cuernos: «tienes que hacerte paso, nada de tarjetas de crédito, paga en especias, si has venido a jugar, hazlo a toda velocidad».
Hay algo mágico en la escucha de ‘Lilith’, el nuevo disco de Maria Rodés, que incluso trasciende su concepto. La autora presentaba este proyecto en 2019, en principio ideado tan sólo para el directo, como una manera de desestigmatizar la palabra «bruja», para reivindicar a las mismas como algo positivo: mujeres simplemente libres que quieren ser ellas mismas en una sociedad patriarcal que las juzga por razones por las que un hombre nunca sería juzgado. Tomando el nombre del folclore judío, la primera mujer de Adán que abandona el paraíso porque no quiere someterse a él, ‘Lilith’ acoge canciones salpicadas de referencias mitológicas y lo hace con un fondo musical a veces teatral o cinético, pero siempre embriagador. Uno de esos discos disfrutables en cualquier momento, pero que a altas horas de la noche se crece, adquiriendo otra dimensión.
‘Lilith’ presenta unos cuidados textos con campos semánticos muy determinados, y un fondo musical igualmente muy concreto. Maria Rodés se ha documentado sobre aquelarres -para ella, simplemente reuniones de mujeres- celebrados históricamente en el mundo para retratarlos en lo sonoro en el marco de su lugar de origen. Así, ‘Seguramente fui yo’, inspirada en un aquelarre de Aragón («hoy he escondido la escoba / en un rincón de la alcoba / para que bailes conmigo / y que se nos quite el frío»), presenta un festivo ritmo de jota. Llevando el mismo tema a sus viajes y su atracción por Latinoamérica, ‘Con los pies desnudos’ se inspira en la poeta argentina Alfonsina Storni, por lo que incorpora un ritmo de chacarera. Y ‘La extraña‘, dado su interés por la curandera mexicana María Sabina, que llegó a asesorar con sus ritmos chamánicos a los Beatles, se deja empapar de ritmos latinos, si bien en este caso derivando en una cumbia colombiana.
A ese ambiente místico que sabe generar ‘Lilith’ contribuye una sencilla estructura con «intro» y «outro», desde la breve ‘A la luna venidera’ a la conclusión ‘Les bruixes tornen’, que empuja este disco a lo conceptual: las «brujas», las «mujeres libres» volverán por mucho que se las queme en la hoguera. Y eso que tan sólo es un disco por accidente, debido a la pandemia, como nos ha contado Rodés en una entrevista que publicaremos próximamente. Armado con canciones como ‘Pelo rojo’ -de nuevo, más estigmas- o la versión acústica de ‘Recuerdos de Ypacaraí’, un tema que interpretaron desde Caetano Veloso hasta Julio Iglesias, logra formar un todo magnífico pese a que no fuera la intención inicial grabar estas canciones en el estudio.
Uno de esos discos conceptuales, eso sí, en el que son muchas las canciones que funcionan de manera independiente al margen de su contexto. Al fin y al cabo, al margen del rico discurso que esconden algunas letras sobre mitología y la historia de nuestra sociedad, hay oculto un poso de decepción, universal como el pop, en el retrato de un tipo de persona tóxica, que más que el amor busca alimentar su ego, de manera narcisista. De ahí ‘Carta al Diablo’ («sí, ya lo sé / no debí fiarme de mí / ya lo sé / pero es que la piel me decía que sí») y ‘Pelo rojo’ («hay que ser muy tonta para creer que un día el diablo te amará / ¿no ves que no puede ser? / si ni te ve, no tiene alma ni piedad»), si bien en algunos puntos del álbum la víctima parece convertirse en verdugo, enfrentando a la persona narradora con sus puntos más oscuros. El juego entre «bruja» y «diablo» es otro más de los entretenimientos que caben en estos 28 minutos.
A estas alturas y después de discazos como ‘Una forma de hablar‘ (2010), ‘Sueño triangular‘ (2012), ‘Maria canta copla‘ (2014) y ‘Eclíptica‘ (2018), debería ser redundante decir que Maria Rodés tiene un gusto espectacular para incorporar instrumentos orgánicos tradicionales, y también contados toques de electrónica (algunos coros y efectos apuntan a Julia Holter). ‘Con los pies desnudos’ no solo es un desafiante himno feminista en homenaje a la poeta que se suicidó en el mar («con los pies desnudos / por el agua voy / me río de todo, del diablo y de Dios»), sino que la solemne producción a lo Leonard Cohen le da una fuerza especial.
Hay un tema en este disco en el que me gusta pensar, aunque no es el caso, que Maria Rodés está reivindicando su lugar en la industria musical. ‘Oscuro canto’ comienza diciendo algo así como «no sube esta noche mi canto hacia el cielo (…) se pierde en la sombra mi voz desangelada». Rodés, con un lugar en la escena española pequeño pero muy fiel y constante, demostrado en cientos de conciertos, lleva ya demasiados discos enormes como para permanecer en un plano semi underground un segundo más. En un mundo en el que Sílvia Pérez-Cruz es superventas, ‘Me quedo contigo’ paraliza un país (ella la cantó antes) y el folclore nacional es top 2 en singles, urge que suba a otro nivel aunque esa, tampoco, sea su intención.
Calificación: 8,5/10 Lo mejor: ‘Seguramente fui yo’, ‘Carta al diablo’, ‘Pelo rojo’, ‘Con los pies desnudos’, ‘La extraña’ Te gustará si te gusta: Christina Rosenvinge, Jorge Drexler, Julia Holter Youtube:‘Seguramente fui yo’
C. Tangana y Chico Blanco han dado una sorpresa a sus seguidores al presentar un tema conjunto llamado ‘Ojalá’. La canción ha sido sumada al último EP de C. Tangana, ‘Bien:(‘, el que incluía la deslumbrante y diferente ‘Nunca estoy’, por lo que dicho EP pasa a tener 5 pistas en lugar de 4.
Era un EP introspectivo y por ahí va esta canción en su primera mitad, incluso claustrofóbica y próxima a los trucos del witch-house, si bien después se eleva, más funky. El tema, que se llama ‘Ojalá’, aunque parezca llamarse ‘Contigo encerrao’, es una curiosidad y una manera de presentar a quien no lo conozca aún a Chico Blanco, que este año nos conquistaba con la edición del estupendo ‘Gominola’.
Por su parte, C. Tangana es top 2 en España con un tema nuevo, la sobresaliente ‘Demasiadas mujeres’, peleando por desbancar a Maluma del número 1 oficial, cosa que ha conseguido hace unos días en Spotify España.
Hoy, 22 de octubre, se cumplen 30 años de la publicación del álbum ‘Behaviour’ de Pet Shop Boys. Pero ese no es el aniversario que vamos a celebrar en este artículo. Al menos, no estrictamente. Porque, junto con el álbum, también cumple 30 años ‘Being Boring’, su canción más emblemática. Fue lo primero con lo que toparon los oyentes del disco. ‘So Hard’, el single adelanto que se publicó en septiembre, era una falsa alarma: ‘Behaviour’ iba a ir por derroteros bastante desconocidos para Pet Shop Boys… o no tanto, pues ‘Later Tonight’, ‘King’s Cross’ o ‘Results’, el disco que le compusieron a Liza Minnelli, ya habían advertido previamente de la tendencia a la melancolía del dúo.
Pero expliquemos su trasfondo. Para ello, hay que tirar unos años atrás. 1981: se reportan los primeros casos en EEUU de un raro cáncer que parece afectar sólo a hombres homosexuales. Christopher Dowell, el mejor amigo de Neil Tennant, le comenta: “esto nunca podría pasar aquí”. 1987: aparece ‘Actually’, Pet Shop Boys son uno de los grupos más populares del momento y Christopher agoniza a causa de circunstancias relacionadas con el sida en el Hospital St Mary de Londres. A él va dedicado ‘It Couldn’t Happen Here’, el tema que abre la cara B de ‘Actually’. Neil Tennant pasa muchas de las tardes de su etapa imperial en el hospital visitando a su amigo. Christopher fallece en 1989. Su funeral es el argumento de la hermosa ‘Your Funny Uncle’, la cara B de ‘It’s Alright’. Pero no es sólo Christopher. Son más, muchos más, amigos, conocidos, los que se desvanecen a causa de la pandemia del sida. “Tenía un grupo de amigos muy sólido de adolescente”, explicaba Neil Tennant en una entrevista a The Guardian en 2018. “Fue una época muy intensa de mi vida y, de alguna manera, acabó con la crisis del sida, con muchos amigos que murieron, así que nunca me recobré de eso. No lo digo de una manera traumatizada, sólo que eso siempre está en mi historia. Es parte de lo que soy”.
En ‘One Hundred Lyrics and a Poem’, Tennant explica cómo estas pérdidas llenaron muchas de sus letras de la época de rabia y nostalgia. La canción es autobiográfica y está estructurada en tres partes: en la primera se narra una fiesta de 1974 en Newcastle, cuya invitación recoge una cita de Zelda Fitzgerald: “ella nunca se aburría, principalmente porque nunca fue aburrida”. En la segunda, Neil narra su llegada a Londres en 1972 sobre zapatos de plataforma, el inicio de una nueva vida. En la tercera parte, ya es famoso, ya ha conseguido ser “la criatura que quería ser” en sus sueños de juventud. Pero su amigo ya no está. “Pero pensé que, a pesar de todos estos sueños, tú estarías sentado por aquí conmigo”, canta Neil emocionado en la última estrofa.
Pet Shop Boys le birlaron el título a un diario japonés, que los definió así en la crítica de uno de sus conciertos de 1989. Sí, la canción es melancólica pero, aun así, también brilla su ironía. Y un algo de autodefensa: “Nunca fuimos aburridos porque nunca nos aburrimos”. El videoclip rodado por Bruce Weber fue el colofón a todo este maravilloso derroche de sensibilidad y melancolía. Celebérrimo fotógrafo de moda, autor del documental de culto ‘Let’s Get Lost’ sobre Chet Baker, Weber agarró a Neil, Chris y unos cuantos amigos y amigas modelos, los metió en una mansión de Long Island y rodó en fastuoso blanco y negro el videoclip perfecto. Pocas veces en la historia del audiovisual pop se han conjugado de manera tan insuperable la música y las imágenes. Una fiesta, gente hermosa, carpe diem, la sensación de ser un hermoso sueño del que, lamentablemente, despertaremos.
Musicalmente, algo también había cambiado. Neil y Chris decidieron grabar ‘Behaviour’ en Munich, con Harold Faltermeyer, autor de diversas bandas sonoras y afamado productor y arreglista (Donna Summer, Giorgio Moroder). Faltermeyer tenía en su estudio una colección de sintetizadores analógicos, que era lo que Pet Shop Boys necesitaban para dotar a su nuevo álbum de esa atmósfera más orgánica y cálida. El tema lo abre la guitarra de JJ Belle (¡Un susto! ¿¿Una guitarra eléctrica abriendo una canción de Pet Shop Boys??). Como bien recoge F.J. Barbero en ‘Plural’, la enciclopédica biografía del grupo que publicó en 2016, “El ritmo, inspirado en ‘The Funky Drummer’ de James Brown da un toque retro (…) La voz está doblada en distintas octavas en el último verso de cada estrofa y el estribillo. Este efecto provoca un efecto más expansivo, como si cada pista de voz representara el pasado y el presente. La estructura del tema es una progresión de cuatro acordes (La sostenido, Si sostenido, Sol menor séptima y Do menor) que crea un efecto (…) melancólico y agridulce. Sin embargo, el hecho de acabar el tema en Sol sostenido le confiere un tono que transmite cierta esperanza y optimismo”. Como el propio Neil afirma, han usado un truco de Stock, Aitken y Waterman. El puente triste muestra la pena por el tiempo perdido, el estribillo parece buscar confortación en la alegría de los viejos y felices tiempos.
¿Y las consecuencias? Agridulces, como la canción. ‘Being Boring’ apareció como segundo single de ‘Behaviour’ el 14 de noviembre de 1990, en una versión algo más corta que la del disco. Sólo alcanzó el puesto 20 en las listas británicas. Pet Shop Boys, niños mimados de los charts desde 1986, vivieron como una amarga derrota que su canción más brillante vendiera tan poco (para sus estándares). De alguna manera, asumieron como un fracaso que ‘Behaviour’ en general y ‘Being Boring’ en particular no alcanzaran el éxito masivo al que estaban acostumbrados. En su gira ‘Performance’ de 1991, no incluyeron ‘Being Boring’.
En ‘Pet Shop Boys vs America’, el estupendísimo diario de la rama estadounidense del tour que escribió Chris Heath (a ver cuándo lo traducen), se recoge un lamento de desesperación (y cierto retintín sarcástico) de Chris Lowe: “Creo que deberíamos despachar ‘Behaviour’. Ese fracaso de disco. Deberíamos escribir otro buen disco de música dance, declarar ‘Behaviour’ siniestro total. Somos un grupo de singles. No somos un grupo de álbumes. No deberíamos hacer buenos discos. Deberíamos hacer unos pocos singles y después sacarlos entre un montón de basura”. Pero el disco y el tema ya habían iniciado su propio camino al éxito… pero por otros derroteros. En el libro hay una aparición estelar de Axl Rose. Contra cualquier pronóstico, es fan total y confeso de ‘Behaviour’. “Un espectáculo maravilloso. Pero, ¿por qué no hicisteis ‘Being Boring’”, espeta al dúo después del concierto de Los Ángeles. Y como él, muchos más. ‘Being Boring’ enseguida obtuvo un estatus de culto. Fue el 22 de octubre de 1990 cuando muchos que les negaban el pan y la sal, descubrieron que Pet Shop Boys eran muy grandes. Ya lo eran antes. Pero, igual que un actor de comedia maravilloso debe lucirse en un papel dramático para ser tenido en cuenta, ‘Behaviour’ fue el disco circunspecto que sacudió a oyentes recelosos o prejuiciosos. Y ‘Being Boring’ fue la puerta a este nuevo mundo. Preciosa, majestuosa y sentida. Eterna.
Dolly Parton se ha pasado esta semana por el programa de Stephen Colbert para hablar de su libro. Sí, como Francisco Umbral. El 17 de noviembre, la artista publica ‘Songteller’, un libro en el que repasa su vida a través de sus letras. Ya os habíamos contado que la autora de ‘Coat of Many Colors’ se ha adelantado lo más grande publicando un nuevo álbum de villancicos a principios de octubre.
El paso de Dolly por el programa de Colbert es noticia después de que la artista haya hecho llorar al presentador tras arrancarse a cantar una canción de la nada. Lógico si se tiene en cuenta que la canción en cuestión es una verdadera tragedia romántica: ‘Bury Me Beneath the Willow‘ está narrada desde el punto de vista de una mujer que desea morir y ser enterrada «debajo de un sauce» después de descubrir que su prometido la ha engañado con otra, de manera que este llore su pérdida. La letra dice: «mañana era el día de su boda, ¿dónde puede estar él? Él se ha ido a casarse con otra, y ya no siente nada por mí».
El vídeo bajo estas líneas muestra que Stephen Colbert, que dice sentirse especialmente sensible debido a la difícil situación actual, empieza a llorar y a ponérsele la piel de gallina en cuanto Dolly empieza a cantar la canción. Al final ella descubre el dramita que ha provocado y le espeta al presentador: «mejor me piro antes de que te mueras de pena y no puedas terminar el programa».
‘Bury Me Beneath the Willow’ es una canción de «bluegrass» tradicional que fue registrada por primera vez en el año 1906, si bien su autor se desconoce. La canción alcanzó gran popularidad en los años 30 gracias a la versión de The Carter Family.
En esta locura de semanas en que Ariana Grande anuncia disco por sorpresa y Adele vuelve de la nada probablemente para anunciar también el suyo, parece que empiezan a amontonarse los macrolanzamientos que la gente comprará masivamente de cara a la Navidad.
Decimos esto porque ahora otro gigante de la música, Paul McCartney, ha anunciado nuevo álbum de estudio. De acuerdo, no venderá tanto como Adele, pero no deja de ser quien es. ‘McCartney III’ sale el 11 de diciembre. Es la tercera parte de aquella trilogía que el ex Beatle inició en 1970 con el lanzamiento de su primer disco en solitario, titulado ‘McCartney’, al que le siguió ‘McCartney II’ en 1980, 10 años después. Este llega solo 40 años después, pero mejor tarde que nunca. Además, el músico británico no ha estado precisamente parado en los últimos tiempos, pues su último disco, ‘Egypt Station‘, salió en 2018.
En una nota, Paul ha explicado que ‘McCartney III’ ha surgido sin que él lo esperara o planeara. «Tenía que hacer la música para una película, y cuando terminé me pregunté qué hacer después. Entonces fui grabando cosas que tenía medio acabadas. Hacía música para mí en lugar de por trabajo. No tenía ni idea de que estas grabaciones me llevarían a hacer un álbum».
Ty Dolla $ign, uno de los raperos favoritos de las estrellas del pop, y de también de muchos raperos, lo cual viene a ser lo mismo en realidad, ha anunciado que su nuevo disco ‘Featuring Ty Dolla $ign’ sale este viernes 23 de octubre. El título tiene gracia porque el largo se compone de 25 pistas, la mayoría de las cuales son colaboraciones con otros artistas. Está incluida aquella locura de canción que reunía a Kanye West, FKA twigs y Skrillex en un único lugar; serpentwithfeet y Burna Boy protagonizan sus propios interludios, y también asoman por el tracklist Nicki Minaj, Thundercat, Kehlani, Future… o Post Malone.
El autor del exitosísimo ‘Hollywood’s Bleeding’ aparece como artista invitado en el enésimo adelanto del álbum que se ha dado a conocer hoy (ya se conocían ‘Expensive’ con Nicki o la referenciada ‘Ego Death’). ‘Spicy’ es la pista 5 nada menos, por lo que difícilmente pasará desapercibida en un disco tan largo, pero además tiene toda la pinta de dar a ambos artistas un nuevo éxito en las listas.
La fórmula de ‘Spicy’, en este caso, aúna un agradable ritmo trap-pop con la melodía de una guitarra española… mientras Post Malone no deja de aportar su reconocible vibrato estreñido. Posty y Ty Dolla ya habían aparecido juntos en ‘Psycho’, uno de los mayores éxitos del primero… aunque fuera un horror para algunos. De hecho, Posty menciona ‘Psycho’ en su estrofa, dedicada en su mayor parte a una mujer que no puede aguantarse las ganas de «bajarle los pantalones» sin importarle que él esté ocupado. Os dejamos con el tracklist de ‘Featuring Ty Dolla $ign’:
1. Intro
2. Status
3. Temptations feat. Kid Cudi
4. Serpentwithfeet Interlude
5. Spicy feat. Post Malone
6. Track 6 feat. Kanye West, Anderson .Paak, and Thundercat
7. Freak feat. Quavo
8. Double R feat. Lil Durk
9. Expensive feat. Nicki Minaj
10. Burna Boy Interlude
11. Tyrone 2021 feat. Big Sean
12. It’s Still Free TC
13. Real Life feat. Roddy Ricch and Mustard
14. Nothing Like Your Eyes
15, By Yourself feat. Jhené Aiko and Mustard
16. Universe feat. Kehlani
17. Lift Me Up feat. Future and Young Thug
18. Time Will Tell
19. Dr. Sebi
20. Powder Blue feat. Gunna
21. Everywhere
22. Slow It Down
23. Your Turn feat. Musiq Soulchild, Tish Hyman, and 6LACK
24. Return
25. Ego Death feat. Kanye West, FKA Twigs, and Skrillex
Chet «JR» White, miembro fundador de la banda Girls junto al carismático vocalista Christopher Owens, ha muerto a los 40 años en su casa de Santa Cruz, California, debido a un paro cardiaco, informa Stereogum citando palabras de Dean Bein, fundador del sello -True Panthers- que publicó los dos discos del grupo. Su «corazón dejó de latir durante la noche».
El músico, que nació en Santa Cruz pero vivió buena parte de su juventud en San Francisco, fundó Girls junto a Owens en el año 2007. Además de integrante de Girls, él fue productor de los dos únicos álbumes publicados por la banda entre los años 2009 y 2011, unos ‘Album‘ y ‘Father, Son, Holy Ghost‘ que recibieron excelentes críticas por parte de la prensa especializada. ‘Album’ fue el 9º mejor disco de 2009 para la redacción de JENESAISPOP y «Holy», nada menos que el cuarto mejor disco de 2011 para esta publicación. Enormes fueron singles como ‘Lust for Life’, ‘Honey Bunny’, ‘Oh So Protective One’ o ‘Laura’. White produjo a su vez el EP de Girls de 2010, el estupendo ‘Broken Dreams Club‘.
Cuando Owens abandonó Girls en 2012, el dúo naturalmente se disolvió, y White pasó a ejercer de productor para otros artistas. Su trabajo más destacado es ‘Goon‘ de Tobias Jesso Jr, artista que terminaría haciéndose de oro gracias a su trabajo con Adele. ‘It’s Glitz’ de Glitz, ‘Sob Story’ de Spectrals y ‘Big Wheel and Others‘ de Cass McCombs son otros títulos producidos por el músico.
En Twitter, Owens ha recordado a su compañero: «Espero que no sientas otra cosa que paz ahora, hermano. Te quiero, te doy las gracias por haber creído en mí, y por todo lo que has aportado (a nuestro trabajo juntos). Siempre estaré orgulloso de ti y siempre recordaré cómo nos protegías a Liza, Patrick, Beta y a mí de los imbéciles».
Annie dice que su nuevo disco representa la «banda sonora de una película que aún no existe». La descripción es apta pues ‘Dark Hearts’ es un trabajo personal hasta lo autobiográfico, pero sobre todo porque las referencias estéticas del álbum apuntan muy abiertamente al cine y a la televisión de los años 80 y 90 y también de la última década: ‘Twin Peaks‘, ‘Drive‘, ‘Blade Runner‘ y ‘Crash’ vienen a la mente en un primer acercamiento a música y letras, mientras la peli de culto de 1988 ‘Miracle Mile’ (en España ’70 minutos para huir’) directamente titula una de las pistas y es sampleada en otra (la voz de Anthony Edwards irrumpe cual espectro digital en ‘The Bomb’).
‘Dark Hearts’, el primer disco largo de Annie en 11 años, tiempo durante el cual la cantante noruega sí ha publicado singles y epés sueltos, y además ha sido madre de dos pequeñajos, ha sido producido por Stefan Storm de The Sound of Arrows después de que Annie y él se conocieran en un pub en el año 2015. El concepto del disco le surge a Annie cuando ha de regresar a Bergen, su ciudad natal, para cuidar de su madre, que en 2017 es diagnosticada de Alzheimer, pues pisar ese lugar despierta en la cantante multitud de recuerdos de su juventud que entonces decide plasmar en un álbum entero. El punto de partida musical escogido por Annie para contar su «película» es el synth-pop más nocturno de los años 80 y 90, especialmente las bandas sonoras de ‘Twin Peaks’ y ‘Blade Runner’ (Julee Cruise y Vangelis son referencias explícitas), pero también el pop-rock de Bruce Springsteen o las fantasías oníricas de Enya. ‘Dark Hearts’ es uno de esos álbumes de pop que cobran vida a medianoche, igual que los sueños o recuerdos en los que se inspiran sus canciones.
¿Ofrece ‘Dark Hearts’ nuevos hitazos pop a la altura de ‘Songs Remind Me of You‘ o todo ‘Anniemal’? No exactamente… porque tampoco es su objetivo. Lo más cerca que queda el nuevo álbum de Annie de aproximarse al electro-pop de antaño es el tema titular, en el que Annie recuerda el modo en que la muerte de su padre a los 2 años de nacer ella ha influido su vida («no puedes escapar quien eres») pero la mayor parte de ‘Dark Hearts’ se compone de medios tiempos entre lo intrigante y lo romántico. Las letras no pueden estar más llenas de estereotipos (uno de los mejores temas se llama ‘Forever ’92’, el disco incluye referencias constantes a los recuerdos, a lo «jóvenes que éramos», a lo maravillosa que era la vida antes) pero la cantante no deja de mirar al futuro en ‘Stay Tomorrow’, una canción de ecos al ‘Nightclubbing’ de Grace Jones en la que expresa que «el mañana será mucho mejor que el ayer».
No obstante, ‘Dark Hearts’ es un trabajo dedicado al ayer sin mayor misterio que el de expresar la nostalgia por esos tiempos pasados que nunca volverán. Ya en la primera pista, la balada de synth-pop atmosférica ‘In Heaven’, Annie dice haber grabado música en una «cinta de casete» para escuchar en el coche «su canción» con la persona amada, y en la segunda, la preciosa ‘The Streets Where I Belong‘, la cantante regresa a Bergen para sumergirse en los recuerdos de su relación con Erot, un DJ que falleció trágicamente a los 23 años y con el que compartió muchos años y vivencias. La canción está abiertamente inspirada en Bruce Springsteen de la misma manera que ‘Corridors of Time’ lo está en Julee Cruise, pues ‘Dark Hearts’ no esconde sus influencias en absoluto, sino que las reproduce sin mayor misterio ni pretensión que el de la admiración por estos sonidos. En la mágica ‘Corridors of Time’, dos amantes bailan juntos por toda la eternidad, y el acompañante de Annie, que ha desaparecido para no volver, solo puede ser el joven músico.
A pesar del abuso de clichés y de lo obvio de las referencias, las canciones de ‘Dark Hearts’ están hechas para quedarse con nosotros mucho tiempo. ‘The Streets Where I Belong’ merece ser el mayor éxito de esta nueva etapa en la carrera de Annie, pero ‘Miracle Mile’ es otra balada conmovedora en la que la noruega deja que las «estrellas guíen el camino», mientras ‘American Cars’ alterna el espíritu macabro de J.G. Ballard y David Cronenberg («before we crash, kiss me under the stars» es, sin duda, la mejor frase el disco) con un texto recitado espeluznante, y el trance noctámbulo de ‘The Bomb’ se libera de cualquier estructura convencional para llevarnos a la distopía nocturna y lluviosa de ‘Blade Runner’, dando lugar a la producción más cinematográfica e inmersiva de un disco inspirado en el cine. Es el punto álgido de una segunda mitad de ‘Dark Hearts’ que deja tanto citas a Shakespeare algo desperdiciadas (‘Mermaid Dreams’) como medianías apocalípticas (‘The Countdown to the End of the World’), pero que se quita de cerrar con más oscuridad, prefiriendo darnos un final luminoso en ritmo de vals y acompañado por el «cante de los pájaros».
Calificación: 7,6/10 Lo mejor: ‘The Streets Where I Belong’, ‘Forever ’92’, ‘American Cars’, ‘The Bomb’ Te gustará si te gusta: ‘Twin Peaks’, Bruce Springsteen, Chromatics, el último The Weeknd Youtube:vídeo de ‘The Streets Where I Belong’
Spencer Davis, líder de a banda de beat inglesa The Spencer Davis Group, que triunfó en los años 60 gracias a éxitos como ‘Gimme Some Lovin’, ‘I’m a Man’ o ‘Keep on Running’, ha fallecido en California debido a una pneumonía a la edad de 81 años.
Después de haber colaborado con futuros integrantes de Rolling Stones y Fleetwood Mac, el cantante y compositor galés formó The Spencer Davis Group en 1963 junto a Steve Windood, Muff Winwood y Peter York. Sus primeros éxitos fueron sendos covers del cantante jamaicano Jackie Edwards, ‘Keep on Running’ y ‘Somebody Help Me’. Ambos alcanzaron el número 1 en Reino Unido a mediados de los 60. De hecho, el primero se apuntó el tanto de expulsar de dicha posición a los Beatles y su single ‘We Can Work It Out/Day Tripper’. Más adelante, The Spencer Davis Group obtendrían el mayor éxito de su carrera con ‘Gimme Some Lovin’ y después con ‘I’m a Man’, el segundo de los cuales sería versionado por la banda de rock Chicago.
Tras separarse la banda, Spencer Davis emprendió una carrera en solitario, y publicó los discos ‘It’s Been So Long’ en 1971 y ‘Mousetrap’ en 1972. Afectado por duros problemas económicos, Davis consideró declararse en bancarrota en el año 1970, pero tres años más tarde, una composición que él había escrito apareció en un álbum de los Allman Brothers que terminó vendiendo 6 millones de copias. «De repente, un cheque de 5.000 libras llegó a mi puerta y no había visto tanto dinero en mi vida», llegó a declarar, como recuerda Pitchfork. El artista había seguido grabando y actuando en los últimos años.
Esta semana al fin ha salido a la venta ‘Supercrepus II’, un disco totalmente nuevo de Joe Crepúsculo, que lo que sí incluye es una ristra interminable de singles que hemos venido conociendo durante el último año: ‘Cuarentena sin ti’, ‘Discoteca en ruinas’, ‘Ratas salvajes‘, la country ‘Te brilla la cara’, la versión de Roxette con Tomasito, ‘Serenata‘, últimamente ‘Chococristos’ y ‘Lo peor’… La lista casi no ha tenido fin. Y aun así le sobraban temazos como ‘Hoy no sale el sol’, que es hoy nuestra «Canción del Día». Foto: Silvia Roca.
‘Hoy no sale el sol’ es la típica composición en la que se explota un juego de contrastes: la letra es un desengaño amoroso, («ya no me creo lo que tienes que decir / porque ya no confío en ti nunca más»), una «segunda temporada de algo que no tuvo que empezar», pero la música es un bálsamo para dicha situación. Un riff de teclado aparece en la intro de la composición, sobre una base rítmica uptempo -y una línea de guitarra- que no puede resultar más Smiths. Y es que tras los buenos resultados dejados por ‘Discoteca en ruinas‘ en cuanto a jangle pop, ¿por qué no continuar esa línea? Una canción completamente embriagadora, rápida, breve y adictiva que se suma a su colección de hits.
Joe Crepúsculo es el primer invitado de los «bundles» de nuestra tienda: packs especiales en los que te podrás llevar 2 items casi por el precio de 1. En este caso, podrás hacerte en exclusiva con 2 camisetas (una de Crepus y una nuestra), casi por el precio de 1 (hay un recargo simbólico en deferencia a viejos compradores), solo por tiempo limitado. En cuanto al vinilo de ‘Supercrepus II’, puedes hacerte con él en la tienda de El Volcán. El álbum será presentado el 24 de noviembre en Madrid y el 28 de noviembre en Barcelona.
Renovamos nuestra playlist «Sesión de Control», centrada en el pop nacional y en castellano, comenzando con dos pepinazos como son el tema funky de la banda murciana Ayoho y el electro de GLAS. Nacho Casado nos lleva a las sonoridades de Kings of Convenience, Medalla han realizado un guiño a Camellos, hablando de la relación Madrid/Barcelona en la punk ‘Café para todos’, mientras Masoniería, Sonia de Papá Topo producida por Hidrogenesse, estrena segundo single. Tanto Orquesta como La Claridad nos pueden remitir al indie de los 90 de La Buena Vida.
En la sección urbana, compartimos ‘Papi’ de Mándale Mecha, un combo argentino-brasileño; las apuestas de La Vendición Money Style y KolomB con Locoalien, esta última más guitarrera; el nuevo hit de Albany llamado ‘Una loca’ y ‘Bae’ de tommy 3 balas, entre otras. En respuesta, Los Telepáticos -banda madrileña que este año lanzaba su primer disco- comienzan ‘Difícil de explicar’ diciendo: «justo cuando iba a bailar reggaetón, un camión me pisó». También en la vertiente del rock, Señor Suerte, Indigo Drone, unas Mourn más asilvestradas que nunca, mirror y Temerario Mario -miembro de Carolina Durante-, que se lanza a la piscina en solitario con un tema de 1 minuto.
Que hayamos dejado para el final la power ballad del baezano ALIS ‘No te vi venir’ no significa que sea menos impactante, como también llama la atención el nuevo vídeo de Monte Ventura. Hay discos nuevos de Tarik Rahim y 107 faunos (‘Recuerdos de ya’ va a encantar a fans de los Pixies), y hoy saca single Aiko El Grupo, que desde Elefant habían llamado la atención con su single ‘A mí ya me iba mal de antes’. Completamos la playlist con canciones del siempre interesante Alberto Montero, el proyecto de electrónica Al Pagoda, Ghouljaboy y Tuiste, trashi, Juanih South, Coco Champagne con Maria Escarmiento y nuestros queridos Blackpanda, que han hecho una versión de ‘Te estoy amando locamente’.
Este martes 20 de octubre tendría que haber sido el 70º cumpleaños de Tom Petty. Para celebrarlo como si el autor de ‘Damn The Torpedoes’ todavía estuviera con nosotros, una serie de artistas de primera fila se unirá en un concierto de 5 horas que será retransmitido online. Bajo el nombre de Tom Petty Birthday Bash, el evento reunirá a gente tan dispar como Eddie Vedder y Adam Sandler, como Beck y Lenny Kravitz, como Spoon y Post Malone, como Lucinda Williams y The Flaming Lips, como Foo Fighters y Stevie Nicks.
Habríamos visto venir lo de casi todos ellos, excepto el actor Adam Sandler y Post Malone, por mucho que este le haya pegado a la guitarra de vez en cuando. Este grupo actuará este viernes 23 de octubre a las 19.00 hora local de Nueva York y se podrá seguir a través de TomPetty.com. Pero desde algo antes, las 16.30, de nuevo hora local, se podrá seguir otro concierto, esta vez en formato audio, que incluirá intervenciones de The Killers y Kurt Vile, entre muchos otros.
C. Tangana entra en el número 2 de la lista de singles española con ‘Demasiadas mujeres’. El nuevo adelanto de ‘El Madrileño’ sí conseguía hace unos días desbancar a Maluma y su ‘Hawái’ del número 1 de canciones más escuchadas de Spotify España, y el tema continúa en dicha posición sumando unos 10.000 escuchas diarias más que el colombiano a tiempo de redacción de esta noticia. Sin embargo, ‘Hawái’ sigue arrasando, sus escuchas siguen siendo altísimas y por lo tanto permanece inamovible del número 1 de la lista de Promusicae. ¿Habrá «sorpasso» pronto? ‘Nunca estoy’ sí fue número 1 en su momento, todo un hito para una canción interpretada en español que no es de reggaetón y que además presenta una estructura pocas veces oída en canciones de música pop. En palabras de Antón, ‘Demasiadas mujeres’ es «el número 1 más extravagante de este país desde ‘Nunca estoy'».
En cuanto al resto de entradas, ‘La nota’ de Manuel Turizo, Rauw Alejandro y Myke Towers, el enésimo ‘Te boté’, se coloca en el número 9. Junto a ‘Hawái’, ‘Demasiadas mujeres’ y ‘La nota’, entre las 10 canciones más escuchadas en España actualmente encontramos también el remix de ‘Relación’ con Sech, Daddy Yankee, J Balvin, Rosalía y Farruko (4); ‘Una locura’ de Ozuna, J Balvin y Chencho Corleone (5), ‘Mi niña’ de Wisin, Myke Towers y Los Legendarios (6), ‘Vida de rico’ de Camilo (7), ‘Mami’ de Ptazeta y Juacko (8) y ‘A un paso de la luna’ de Ana Mena y Rocco Hunt (10).
Después, para encontrar la siguiente entrada en la lista de singles hay que bajar hasta el número 60, donde Cepeda coloca ‘Con los pies en el suelo’. De momento, el hit del disco, que sí ha entrado directo al número 1 de álbumes, ha sido ‘Gentleman’. Finalmente, ‘Siempre que amanece’ con Maka, DELLAFUENTE Y Morad entra en el número 66, ‘Amantes y amigos’ de Arcángel y Sech en el 90; y ‘What You Know Bout Love’ de Pop Smoke en el 99.
‘ENOC‘ de Ozuna ya no es el disco número 1 en España, y esto se debe a que el último lanzamiento de Cepeda, ‘Con los pies en el suelo’, entra directo al número 1 de la lista de álbumes de Promusicae. El segundo disco del cantante y compositor gallego salido de Operación Triunfo 2017 repite el dato registrado por ‘Principios’, su debut, el cual, publicado en 2017, también entró en el número 1 de la lista de álbumes española. La previsión es que ‘ENOC’ vuelva al número 1 la semana que viene ya que el disco de Ozuna está siendo escuchado consistentemente de manera masiva desde su lanzamiento, pero no hay que subestimar el poder de Cepeda: ‘Principios’ permaneció cinco semanas consecutivas en el número 1 tras su salida, a las que siguieron otras 56 en lista.
Siguiendo con el resto de títulos que entran en lista, saludan desde dentro del top 10 el cantante ilicitano Miguel Campello con ‘5’, que entra en el número 6; y John Lennon con ‘Gimme Some Truth. The Ultimate Mixes’, la caja con la que se ha querido celebrar el que habría sido el 80 cumpleaños del Beatle, que entra en el número 8. Más adelante, la reedición de ‘Hybrid Theory’ de Linkin Park, uno de los discos más vendidos del siglo XXI, entra en el número 22 y la reedición del primer largo de Iron Maiden lo hace en el 51. El recomendable nuevo disco de Travis, ‘10 Songs‘, aparece en el número 55 y ‘Rebelde’ de RBD, otra reedición que también ha llegado a las plataformas de streaming, lo hace en el 69. No es el único lanzamiento de RBD presente en la lista: ‘Para olvidarte de mí’ entra en el 77.
Cabe destacar la entrada en lista, casi por los pelos, del nuevo álbum homónimo de Carla Bruni. Entra en el número 95, muy por debajo del dato de ‘French Touch‘ (38) y ‘Little French Songs‘ (68). En Francia la tendencia también ha ido a la baja: ‘Carla Bruni’ es top 12 en Francia, quedándose cerca del dato de ‘French Touch‘ (top 11) pero lejos del de ‘Little French Songs‘, que llegó a ser top 2.
Finalmente, ‘Grande Raffaella’ de Rafaella Carrà, un nuevo recopilatorio de sus éxitos que sale tras el estreno de ‘Explota explota‘, debuta en el número 78 y la reedición de ‘Paranoid’ de Black Sabbath por su 50 aniversario, en el 85.
‘Magic’ de Kylie continúa siendo lo más votado de JNSP mientras la entrada más fuerte es la de una canción relacionada, también disco, pero en este caso una versión, la que ha realizado recientemente Sophie Ellis-Bextor. También entran esta semana Videoclub, C. Tangana, Annie y Travis Scott con M.I.A. Por el contrario, es momento de despedirse de ‘WAP’ y ‘Nuevo verano’ de Amaia, ya con 10 semanas de permanencia y en la mitad baja de la tabla. Podéis escuchar nuestra última lista de novedades y votar por vuestras canciones favoritas, aquí.
Un año después de ‘Flamboyant‘ –gran título-, Dorian Electra tiene estatus suficiente como para reunir en una misma canción a los americanos Village People -aún con Víctor Willis, el policía de la formación original– y a las rusas Pussy Riot, y en el mismo álbum a Rebecca Black -la de ‘Friday’- y a Faris Badwan de The Horrors -atención a la guitarra eléctrica de ‘Iron Fist’-. La «agenda» que plantea en este segundo disco y también en el corte homónimo es la de hablar de «homosexualidad» -«homosexual» es la palabra que repite incansable al término de ‘My Agenda’-, de «la crisis de la masculinidad», de la comunidad incel y de los roles de género desde una perspectiva «queer».
Uno de los momentos clave en el disco es el paso de ‘Gentleman’ a ‘M’Lady’, como otras pistas del álbum, por debajo de los 2 minutos de duración: en ambas Dorian Electra, de género fluido -en inglés usa el pronombre «they/them» para referirse a sí misme-, se pone en la posición de un «caballero, de gentil mano» buscando una «dama», tan sólo a modo de caricatura. La primera va bien cargada de un bobo sonido de trompetilla; la segunda, de gemidos.
Contra ese «jodido mundo» que nos ha tocado vivir, Dorian Electra no se achanta, sino que levanta los puños en señal de guerra con unas canciones que amenazan con «destruiros a todos» (‘My Agenda’), gritan contra la homofobia (‘Ram It Down’, con unos últimos segundos realmente descriptivos de arte y estado de ánimo) y adoptan una perspectiva irónica.
‘My Agenda’ no se despide con un tema que dé las gracias al mundo, pues ‘Give Great Thanks’ quiere decir todo lo contrario cuando invita: «enciérrame en una jaula / no me quejaré / mientras me jodes la cara / durante 100 días seguidos / gracias por tu castigo / gracias por tu generosidad». Una rabia que se manifiesta en una producción demencial en la que caben metal, jungle, brostep y más sonidos extraídos de la factoría PC Music, incluso dentro de la misma pista, como sucede en ‘F the World’.
El álbum ha sido presentado por diversos singles, de los cuales los más populares están siendo el que incluye la voz de Rebecca Black, ‘Edgelord’, y el sobresaliente ‘Sorry Bro (I Love You)’, que perfectamente podría pertenecer al repertorio lleno de hits de Charli XCX, a la que quizá se parece demasiado. Junto a ellas también hay que destacar esa respuesta a Aqua llamada ‘Barbie Boy’, que añade a su fantástica melodía un martillo trance. Jugando con la sumisión y la autoafirmación, otro ácido himno reivindicativo que puede dar mucho de sí en el futuro.
Calificación: 7/10 Lo mejor: ‘Barbie Boy’, ‘Sorry Bro (I Love You)’, ‘My Agenda’, ‘F the World’ Te gustará si te gusta: SOPHIE, Poppy, Grimes, Charli XCX. Escúchalo:Youtube
Un artista o grupo canta delante de un color. Punto. No hay más. Este es, básicamente, el concepto de A COLORS SHOW, un canal de Youtube de Berlín que lleva unos años triunfando en las redes gracias a su contenido musical.
Las actuaciones que ofrece el canal, de artistas más o menos conocidos y de diversos lugares del mundo, son en directo, pero no pueden ser más minimalistas -a menudo parece que el artista esté grabando la canción en el estudio en ese mismo momento- pero además potencia el componente visual como su propio nombre indica: una canción determinada es asociada con un color, como un ejercicio de sinestesia hecho a lo grande.
A COLORS SHOW es una herramienta estupenda para descubrir nueva música sobre todo tocada en directo ahora que tocar en directo es prácticamente imposible. Es como el Tiny Desk de NPR, pero estilizado visualmente al máximo. Estas son 10 actuaciones imperdibles:
Tierra Whack
Una de las mentes más locas del rap actual, Tierra Whack da una lección de fraseo, dicción y actitud en su presentación de ‘Unemployed’, cuyo videoclip oficial ya era un absoluto delirio. Mención especial a su atuendo «me camuflo pero no».
Lianne La Havas
‘Bittersweet’ es posiblemente la mejor canción de la carrera de Lianne La Havas, y si la grabación de estudio ya era estupenda, la versión ofrecida en A COLORS SHOW es cautivadora gracias a la maestría vocal de su intérprete.
Woodkid
El compositor francés acaba de publicar su primer disco en un lustro y se ha pasado por A COLORS SHOW para presentar uno de los singles. Por supuesto, el artista no iba a hacer cualquier cosa dado su gusto por el arte digital, y ha traído a su perrito robot -que es en 3D, ¿verdad?- a que le acompañe en la actuación.
Sofi Tukker
Posiblemente la actuación más editada a posteriori de la historia de A COLORS SHOW, a casi un cambio de plano por beat, Sofi Tukker demuestran en esta presentación de ‘Drinkee’ que verlos en directo jamás podría ser una mala idea.
Nathy Peluso
Nathy ha tenido los ovarios de presentar una superproducción como ‘SANA SANA’ casi a pelo. La canción claramente funciona mejor en su versión grabada, pero Nathy se encarga de que nos acordemos de ella elevando su expresividad al cubo. Algunos memes dan ganas de llorar de risa o apagar internet un año.
Sevdaliza
La artista de ascendencia iraní y holandesa se ha pasado recientemente por «COLORS» para presentar su nuevo disco, ‘Shabrang’. El tema escogido ha sido el mágico single ‘Gole Bi Goldoon’, y la presentación ha dado lugar a un pequeño momento histórico: es la primera canción interpretada en farsi que pasa por el canal de Youtube alemán.
Pimp Flaco
Aparte de Nathy Peluso, también Sen Senra ha llevado el español a «COLORS» incluso para debutar un tema de su próximo EP, pero, unos años antes, el rapero Kidd Keo obtuvo uno de los vídeos más vistos del canal, y Pimp Flaco presentó junto a Kinder Malo la simpática ‘Chemtrails’.
Sudan Archives
La autora de ‘Athena’ es una de esas artistas que no se ven tan a menudo, por lo que su actuación en la plataforma alemana tampoco es de las habituales. Su música es una mezcla de R&B y música clásica, ya que ella es violinista, y para su «performance» de ‘Iceland Moss’ le acompaña naturalmente un fondo verde mohoso.
Parcels
La banda francesa acaba de sacar un disco en directo porque sabe que su directo mola, y el que adjuntamos de ‘Lightenup’ no es una excepción. ¿Pueden hacer el disco entero? Además, tiene cierta gracia ver a tropocientos músicos acaparando plano en el canal, cuando normalmente actúa un solo artista, a lo sumo dos.
Moses Sumney
El autor del ambicioso ‘græ‘ ha pisado el estudio de «COLORS» para cantar ‘Cut Up’ y se ha marcado su propio tablao flamenco, pero cantando góspel. A todas luces, la actuación es un banquete visual que empieza por el mismo artista, cuyo atuendo medio chic, medio cowboy homoerótico no puede molar más.
Matt Berninger ha sacado un disco en solitario… o casi. Porque su ‘Serpentine Prison’ es una suerte de obra coral por la que pasean más de veinte nombres de relumbrón: Matt Barrick (The Walkmen), Andrew Bird, Scott Devendorf (The National), Gail Ann Dorsey, su colega en El VY Brent Knopf… Pero, por encima de todos ellos, el legendario Booker T. Jones. Booker no es sólo el productor de ‘Serpentine Prison’: el entendimiento con Berninger ha sido tan grande, que hasta han creado un sello juntos, Book Records, con el que editan su hijo en común. Matt está vivamente emocionado con la presencia de Booker; tanto, que dedica al menos un tercio de la entrevista a hablar de él. Como si aún no creyera que ha grabado un disco con el mito. ‘Serpentine Prison’ aleja a Berninger de la épica y el drama de The National, para mostrarlo en territorios de un soul orgánico, cálido.
Supuestamente la entrevista a Matt es vía Skype. Tengo todo preparado. Pero para lo que no estoy preparada es para que el enlace que me han enviado decida que mi Skype no es suficiente y que he de usar la versión Business. Pánico. La versión profesional no parece querer descargarse, confirmando todos mis temores ante una entrevista telefónica: que siempre va a fallar lo que menos esperas. Tras un par de minutos de histeria, entra una llamada telefónica convencional de Reino Unido. Alabado sea el cielo: es Matt. Le explico mis problemas con la tecnología. “Lo sé, lo sé”, se ríe. Matt es un torrente de palabras. Habla rapidísimo, deja frases inconclusas que cierra en su cerebro, pero no en la conversación, salta de tema de repente… Cuesta seguir el hilo de su verborrea. Foto: Chantal Anderson.
‘Serpentine Prison’ es tu verdadero primer disco como cantante en solitario, ¿no?
Sí, lo es. Supongo… (risas) Lo hice con al menos veinte genios (ríe). Pero sí, es el primero con solo mi nombre en la portada. No lo siento como si fuera un “disco en solitario”. A ver, lo es, lo hice, lo abracé, estoy muy emocionado y hacer un disco en solitario sienta muy bien. Pero cada vez que lo escucho, sé que está hecho con veinticinco personas. Creo que es más un disco comunitario que un disco en solitario. Pero bueno, yo era la persona al mando. Son canciones sobre mí y para mí, con ninguna otra pretensión que convertirse en un disco. No son para una película, ni para una obra de teatro, ni para una banda. Cuando empecé a trabajar en él iba a ser un disco de versiones. Pero tras mostrar a Booker las canciones originales [que iba a versionar], le di la vuelta. ¿Iba a hacer un “Rock & Roll Circus”? ¿Para qué?
¿Y cómo surgió la colaboración con Booker T. Jones? No solo ha producido el disco; también habéis fundado un sello juntos (Book Records).
Lo conocí hace 12 años. Me preguntó si quería cantar con Sharon Jones en un disco que estaba preparando titulado ‘The Road to Memphis’. Canté una canción titulada ‘Representing Memphis’. Estábamos en Manhattan, en un estudio minúsculo; Lou Reed iba y venía, Lauryn Hill estaba por allí, Sharon Jones… Es de esas situaciones en que te preguntas: “¿¿Cómo he logrado llegar aquí??”. Todo era caótico, yo estaba aterrorizado, Sharon entró y… fue increíble. Con Booker debí pasar unas tres horas y fue muy simpático. Tan amable y tan respetuoso conmigo… ¡Booker me trató de la misma manera que trataba a Lou Reed o Sharon Jones! Para Booker, yo era igual que esa gente. No estaba fingiendo. Es muy buen tipo. Cuando pensé en hacer el disco de versiones, me acordé de Booker. En las Navidades de 2018 escribí un e-mail al mánager de Booker (¡saqué el email de la web de Booker!) y resultó ser su hija Olivia. Me dijo “le encantará ayudarte”. Hablé a Booker del disco e, inmediatamente, quiso convertirse en el productor y arreglista. Y nueve meses más tarde, hicimos un disco. Sucedió todo tan mágicamente, tan rápido, de una manera tan orgánica…
Él es una leyenda. Mi siguiente pregunta iba a ser si te sentiste intimidado por él, pero ya veo que casi que has respondido.
Sí. Fue divertido ir al baño entre tantas leyendas. Él era la única persona allí que parecía simplemente un colega. ¡Un tipo que ha trabajado con toda esa gente a ese nivel! El otro día estuvimos hablando de Neil Young. ¡Me estuvo explicando quién era Neil Young! Para él Neil Young es uno de sus viejos colegas, y no está seguro de que todo el mundo sepa quién es, me hablaba de él de la manera en que hablas de un amigo. Le contesté que… ¡por supuesto que sabía quién era Neil Young! (risas) Pero Booker no piensa en términos de celebridad, sino en términos de amigos y músicos. Es alguien muy especial.
Y no sólo Booker T. Jones. Ya has comentado antes lo de los veinte genios. Hay gente como Andrew Bird, Matt Barrick (The Walkmen)…
Y la lista sigue y sigue. Hay gente de mi primer grupo, gente de mis grupos favoritos, gente de The National… Literalmente, gente de cada una de mis bandas. Creo que metí a todas las personas con las que he escrito buenas canciones.
El disco suena como como si se hubiera grabado en directo. ¿Cómo fue el proceso de grabación?
El verano del año pasado, durante dos semanas, volaron todos hacia Venice, California, a un pequeño estudio que está en la bahía, cerca de mi casa y cerca del océano. Y el estudio es fantástico, lleno de esculturas eróticas y fetichistas, muy de señora de California de los años 70. El estudio se llama Earthstar Creation Center. ¡Hasta el nombre es cósmico y maternal! Durante dos semanas la gente iba y venía, no llegamos a estar juntos todos a la vez; cinco o seis como mucho. Ensayaban y grababan su canción ese día. llegamos a grabar dos por día. Todo el mundo se concentraba en Booker; yo estaba haciendo mis comentarios sarcásticos, maníacos, yéndoseme la cabeza todo el rato. Booker era a quien todo el mundo hacía caso. Y yo era el tipo al que todos trataban de ignorar (risas). Era justo lo que quería: que la gente se divirtiera, pero que siguieran a Booker. Fue como meter un huracán dentro de la habitación, necesitas notar quién es el ojo del huracán. Él… (pausa) creo que es el mismo que era con 20 años. Se concentra en llegar al corazón de la canción. Y era un referente para todos. Ha trabajado con los más grandes músicos en el pasado… ¡y yo le traje a todos mis colegas! Y no trató a ninguno de manera diferente a la que habría tratado a Neil Young o Bob Dylan. Porque es gente que ama la música, gente que ama lo mismo que él ama. Fue muy amable. Por supuesto que me dijo que me callara cuando hacía falta que me callara (risas), me animaba cuando me tenía que animar, me espabilaba cuando necesitaba espabilarme… Actuó bastante como “coach”, era como un guía o pastor musical. Fue fantástico.
«Booker T Jones nos trató como habría tratado a Neil Young o Bob Dylan. Fue muy amable, aunque por supuesto que me dijo que me callara cuando hacía falta que me callara»
El sonido del disco tiene una calidad muy bonita, orgánica, como si estuvieras allí. Y suena muy calmo. Pero ha salido en una época bastante dura. ¿Lo ves como un bálsamo para los malos tiempos?
Las canciones fueron escritas antes de la pandemia. Y vivimos en esta era tan trágica. Un millón de personas ha muerto, porque no estábamos preparados desde el punto de vista sanitario. Pero el drama no es de ahora. En EEUU hace años hubo un drama, cuando una bestia horripilante de falsas promesas que había cometido abusos sexuales, una escoria, un trozo de mierda, se presentó a presidente de EEUU y ganó. ¡Eso es dramático! Esta pandemia es dramática a nivel global (pausa). Me da asco pensar que los católicos, que forman buena parte de su administración, estén apoyándole y apoyando el supremacismo blanco, una organización criminal. Yo soy un buen católico y no lo entiendo. Según dicen los salmos: perdónalos, porque no saben lo que hacen (pausa). Toda esta mierda, todos estos asuntos, pudieron afectar al disco… pero no directamente. No quiero escribir canciones ni estar pensando en los cimientos de esas némesis de patriotismo americano, no quiero escribir canciones sobre ello. Lo estoy viviendo; así que al estudio llevo mi mierda, mi corazón, mi alma. No quiero entrar en las almas de esos otros americanos. Me importan una mierda. No quiero pensar en ellos más.
«Me da asco pensar que los católicos, que forman buena parte de la administración Trump, estén apoyándole y apoyando el supremacismo blanco, una organización criminal. Yo soy un buen católico y no lo entiendo»
En la hoja promocional te leí que, antes, necesitabas meterte en la cabeza de otras personas para escribir canciones, lo que me sorprendió mucho, así que… ¿es esta la primera vez que escribes sobre ti? ¿O me equivoco?
Sí… Escribí ‘I Am Easy to Find’, con todos esos personajes diferentes, con los recuerdos de esos personajes, y muchos de esos personajes eran mujeres. Había el eco de la madre de la protagonista, el eco de su propio hijo… Creé todas esas letras con Mike Mills alrededor [NdE: el director del cortometraje del mismo título] con la intención de explicar la historia en abstracto de esta persona, pero sin generalizar. Fue fantástico. Escribir ‘I Am Easy to Find’ fue un auténtica guía hacia sobre alguna fuente de identidad intergénero. ‘Serpentine Prison’ era el lugar para colocar mis propias cosas. Esta vez no estaba hablando de las ideas de otros; estaba hablando de mis ideas. Supongo que mi cabeza entre y sale de las cabezas de otras personas, pero en este disco el único propósito era ser un disco. No para convertirse en una película, no para usarlo para la beneficencia o para publicidad. Es simplemente un disco para escuchar.
«Es probable que no haya conciertos de The National el próximo año»
Teóricamente, The National tiene programados conciertos para el año que viene (en España, en el Primavera Sound del 2021), pero… ¿crees que llegaréis a tocar en directo este año? Y segundo, ¿vas a hacer gira en solitario con este disco?
Tan pronto como la gente puede hacer esto [ir a conciertos] con comodidad, voy a hacer una gira en solitario, si pudiera ser con banda sería fantástico. Hay muchos conciertos de The National que han sido reprogramados. Me gustaría hacer algunos de estos shows, pero es probable que no haya conciertos de The National el próximo año. Podemos llegar a tener 20.000 personas en un concierto, amontonadas, sudando, llorando… Una marea de gente compartiendo eso. Ahora no puedo hacer un concierto de The National. No puedo. The National van a estar en espera hasta que todo eso no vuelva. Pero yo tocaré en recintos más pequeños tanto como pueda. Echo de menos el público, echo de menos cantar, actuar. Mucho. No echo de menos los hoteles, ni los aviones, el backstage. Pero sí echo de menos a la gente gritando en mi cara. ¡Echo de menos las bocas de la gente!
«The National conocíamos a Taylor Swift desde hace tiempo, teníamos amigos en común»
Esta es obligada: ¿qué opinas del ‘Folklore’ de Taylor Swift?
Creo que es súper emocionante; que tanta gente haya tenido esta oportunidad de hacer algo así. Casi todos los artistas que conozco están conectando con otros artistas con los que parecía que antes no se podía conectar. The National conocíamos a Taylor Swift desde hace tiempo, teníamos amigos en común y… este es el ejemplo perfecto de algo que creía que nunca pasaría. Coges a algunos de mis músicos favoritos y los juntas con Taylor, que es una de las mejores compositoras. El disco fue una hermosa e increíble sorpresa, poder ver a todos estos talentos juntos… Lo adoro. Mucho.