La próxima semana se publica el segundo volumen de la serie ‘Mes Excentricités‘, el nuevo proyecto audiovisual de Mónica Naranjo. Se trata de un EP titulado ‘Les Quatre Saisons’, editado en una cuidada edición física que evoca el «art nouveau» de Alfons Mucha y que, además de las dos versiones de ‘Temptations‘ –sintonía del reality ‘La Isla de las Tentaciones‘–, mezcla versiones de canciones tan variopintas como ‘Creep’ de Radiohead o ‘P-Machinery’ de Propaganda con algún tema propio nuevo como ‘Alma y carne’.
Y hace unas horas se ha revelado el primer avance del disco, que no es otra que una versión del clásico de Kim Wilde, ‘Never Trust a Stranger‘, rebautizada por Naranjo como ‘¡Hoy no!’ Producida por ella misma con la colaboración de sus habituales Pepe Herrero y Oriol Crespo, se trata de una reinterpretación tecno bastante épica que, con llamativos breakbeats, acelera los BPMs de la canción y realza su estribillo con la potencia vocal desatada de la de Figueres, cantando «Y yo me sentí una mierda… Pero hoy no». Una sentencia que da sentido al título de la adaptación y le da un cariz personal, llevando a recordar el trance sentimental que Mónica pasaba recientemente y del que ha buscado sacudirse y sacar partido (emocional y profesional) con el buen docu-reality ‘Mónica y el sexo‘.
El tema se presenta con un vídeo filmado en tonos sepia que muestra a la artista cambiando «estrellas» por «estrechas» a lomos de un descapotable por las calles de Madrid, donde diferentes habitantes de la capital cantan junto a ella la canción. En cierto modo, este clip dirigido por Raúl Vaquero para la productora Sr. Mono tiene bastante sentido justo hoy, a horas de que España se libere definitivamente del confinamiento y entre en la llamada nueva normalidad… que esperemos sepamos cuidar y nos dure como poco hasta la llegada de una vacuna contra la Covid-19. ¿Seremos capaces?
Dua Lipa sigue triunfando este año con ‘Future Nostalgia‘: el álbum no se apea del top 10 británico, tampoco del español (donde solo cuenta el streaming hasta nuevo aviso) y en Estados Unidos se mantiene dentro del top 30 de los discos más exitosos del país. El primer single, ‘Don’t Start Now’, continúa en el top 10 de canciones más escuchadas a nivel global en Spotify más de medio año después de su lanzamiento, y los dos singles posteriores, ‘Physical’ y ‘Break My Heart’, han sido sendos éxitos y se mantienen en listas internacionales más que dignamente. Ni cabe decir que ‘Future Nostalgia’ es uno de los discos más importantes del año tanto a nivel comercial como de crítica.
La cantante británica se ha currado varias ediciones físicas de ‘Future Nostalgia’, y tiene sentido que el disco exista en vinilo y cinta dado su concepto sonoro y visual, fijado en actualizar el pasado -sobre todo el sonido de los años 80- desde un prisma contemporáneo. En concreto, el vinilo es indispensable para cualquier fan del álbum ya solo por la portada, una instantánea espectacular de Dua Lipa obra del reconocido fotógrafo francés Hugo Comte, y en la que la artista, mezclando pasado y futuro, aparece conduciendo un coche a través del espacio exterior. El cartón de la edición física no termina de hacer relucir la imagen, pero es la única pega que le podemos poner a esta edición cuyo disco ha sido editado en varios colores, entre ellos el rosa fucsia.
La carpeta del vinilo de ‘Future Nostalgia’ se abre para descubrir una imagen alternativa de Dua al volante que cubre ambas caras, y poco más encontramos dentro: no hay libreto, pero sí una lámina de cartón de color negro en la que aparecen, en letra de color plateado, los créditos y los agradecimientos, y también una nota a pie de página que indica que el vinilo ha sido debidamente masterizado en los estudios Abbey Road de Londres. Una edición clásica en el mejor de los sentidos, nada excesiva, pero lo suficientemente cuidada para que valga la pena tenerla entre manos.
Este sábado 20 de junio se celebra, de manera un tanto atípica, el Record Store Day en España. La entidad española aplazó a este día la celebración del Día de las Tiendas de Discos meses atrás, en pleno inicio de la pandemia, con la esperanza de celebrarse en un momento más propicio. Y casi lo han clavado: a las 00:00h de mañana domingo, España da inicio a la llamada nueva anormalidad. Así que, buscando que el público se vuelque en la medida de lo posible y con las debidas precauciones sanitarias, muchos establecimientos que tanto han sufrido durante la crisis de la Covid-19 realizan hoy ofertas y ponen a la venta lanzamientos musicales muy especiales. Bajo el lema «Salvemos las tiendas de discos», muchos artistas se han propuesto colaborar con la iniciativa publicando reediciones, singles especiales o incluso novedades: de Nueva Vulcano a Raphael, pasando por Aviador Dro, Betacam (estrenando nuevo EP, en su caso), Cariño, Coque Malla, Nacho Vegas, Triana, Miqui Puig, Natalia Lacunza, Karol G & Nicki Minaj (un 7″ de ‘Tusa’) y muchos más, animan hoy a visitar presencialmente (o incluso virtualmente) tu tienda de discos favorita. Puedes encontrar un listado completo de los lanzamientos aquí.
También participan en esta jornada Pantocrator, ya una de las revelaciones nacionales de este extraño y dramático 2020. El cuarteto barcelonés pone a la venta una edición limitada de un 10″ de vinilo rosa en el que reúne, a razón de uno por cada cara del vinilo, los dos EPs que habían lanzado sólo digitalmente, ‘Villacapullos’ (2019) y ‘La masacre de las putis’ (2020), que incluía la fulgurante ‘No te puto pilles‘, que ya fue «Canción del Día» en esta web meses atrás. Ocho canciones de punk pop que certifican la genialidad y singularidad del grupo formado por la «pésima gestión emocional» de Marta Delmont y Marina Correa, asistidas por Xiri Romaní a la batería y Rober Busquets a la guitarra.
Una genialidad y singularidad de la que han vuelto a dar cuenta recientemente, con el single ‘Putas de internet’, que nos ha fascinado por muchas razones. Primero, porque lo hacen desde una perspectiva musical distinta: aprovechando el confinamiento para «aprender a utilizar el garageband», se han lanzado a hacer su propia aproximación al city pop nipón de los 80, que encontró su completa sublimación en las sintonías de series de anime de los años 80 como ‘Ranma 1/2’, ‘City Hunter’, ‘Cat’s Eye’, ‘Urusei Yatsura’ (conocida aquí como ‘Lamu’)… que también se traslada a la portada que la diseñadora gráfica Cruelaudia ha creado para la ocasión.
Y, segundo, porque emplean un nuevo hallazgo melódico memorable para «quedarse bien a gusto» contra todo el odio que dicen recibir en las redes sociales. «Inspirado en un tuit de La Zowi», ‘Putas de Internet’ denuncia «de una forma crítica y satírica los abusos de algunos haters en las redes sociales» con una letra que, otra vez, no tiene desperdicio. Desde su mismo inicio, cuando describen su «miedo a entrar en Twitter» por «una persona que se ceba con mi grupo» y otro «que hace memes, nos pone a parir el muy gañán» hasta que deciden rebelarse contra esas «putas de internet» y les recomiendan fumarse un porro o tomarse un Diazepam. O, mejor aún, montar su propio grupo y dejar «de rajar de gente que hace cosas de verdad». Esto se corona con un descacharrante vídeo, «cutre para variar, pero hecho durante el confinamiento por la propia banda».
Alec Benjamin está llamado a ser uno de los nuevos cantautores de moda. Como Ed Sheeran y Taylor Swift, dos artistas con los que se le puede comparar por estilo, el bueno de Alec escribe canciones de pop narrativas, muy bien resueltas y memorables desde el segundo cero, si bien lastradas por una producción demasiado Disney que parece enfocada a un público adolescente.
La mayor baza de Alec Benjamin es su aguda y nasal voz, un instrumento peculiar y adictivo que imprime a todas sus canciones una personalidad inconfundible. Luego están sus melodías, incontestables en la mayoría de casos, como la de su mayor éxito ‘Let Me Down Gently‘ o la de muchas canciones de este ‘These Two Windows’ que ejerce de debut oficial. El primer single, ‘Must’ve Been the Wind‘, es una monada si dejamos de lado su letra sobre una chica a la que Alec oye ser abusada por su pareja desde el piso de abajo, y a la que él decide ayudar porque su corazón así se lo guía. «Pongo ‘Lean on Me’ para que sepa que puede apoyarse en mí», canta y se queda tan pancho. ‘Must’ve Been the Wind’ es la típica canción de chico con complejo de salvador de las nenas cuyo ánimo es solo noble en la cabeza de su autor, porque para los demás es un poco «creepy». Pero como canción, funciona.
Las demás canciones de ‘These Two Windows’ transitan temas como la ansiedad, la madurez o las relaciones amorosas que han llegado a su fin, esta vez sin espiar a nadie. La animada ‘Mind is a Prison’ es una emocionante apertura que habla sobre estar encerrado en tu propia mente, y la irresistible ‘Oh My God’ usa el truco del estribillo vocoderizado para retratar ese momento en que descubres las losas que acarrea ser una persona adulta («¿qué ha pasado? Me miro en el espejo, antes era joven y no tenía nada que temer»). Y por ñoña que sea, la majestuosa balada con cuerdas ‘The Book of You & I’ haría a cualquiera llorar como una magdalena. Mucho menos creíble es una ‘Match In the Rain’ que busca una atmósfera épica y desolada ante una ruptura sin conseguirla, o una ‘Alamo’ en la que el bueno de Alec nos intenta convencer de que es un rebelde. Con esta producción blanda y aséptica no cuela, pero entre canciones simpáticas como ‘Jesus In LA’ o tiernas como ‘Just Like You’, dedicada a su padre, Alec tiene papeletas de sobra para hacerse oír mucho en los años venideros, sobre todo si su talento cae en buenas manos.
Calificación: 7/10 Lo mejor: ‘Must’ve Been the Wind’, ‘Mind is a Prison’, ‘The Book of You & I’ Te gustará si te gusta: Ed Sheeran, Taylor Swift, el rollito Natalie Imbruglia, John Mayer… Youtube:vídeo de ‘Must’ve Been the Wind’
Natalia Lacunza estuvo el jueves en La Resistencia y ese es el viral visto en Youtube, pero lo verdaderamente apoteósico vino después, con la entrada de Boris Izaguirre. Foto: Facebook.
El guionista de ‘La dama de rosa’ no se cortó un pelo al hablar de sexo, recordando un buen día en el que estuvo en una fiesta en la que tuvo que explicar a Rosalía qué era el cruising porque esta no lo sabía. Boris habla del Retiro de Madrid como lugar en el que se hacía «antes de que naciera Pablo Alborán», refiriéndose a su reciente salida del armario, y, ya puestos, recuerda aquel día en Montecarlo en que Jon Bon Jovi se puso a mear a su lado y «retrocedió un poquito para atrás». Dijo Izaguirre: «Me voy a asomar, porque yo creo que esto es perfectamente lícito. Voy a ver a Bon Jovi orinando y voy a ver cómo es todo con esa curiosidad que uno tiene de si la gente es completamente rubia (…) Me pareció ver como mucho vello y sospeché que podía no haber nada más y de repente ¡plaf!, apareció una Bratwurst muy agradable».
El speech de Boris Izaguirre ha llegado a los titulares de la prensa generalista, si bien es más noticioso todavía lo peculiar que es como «entrevistado»: no dejó hablar a Broncano ni a Queque, él manejó la conversación de un tema a otro como le dio la gana, introduciendo lo que promocionaba cuando le pareció, y cuando le pareció, se marchó.
Este viernes se ha celebrado Juneteenth, la fecha que conmemora la abolición de la esclavitud en Texas en 1865. En medio del clima político por la muerte de varias personas de raza negra a manos de la policía estadounidense, son varios los artistas que han decidido posponer sus discos, como Jessie Ware, y muchos otros, en gran parte afroamericanos, que han lanzado temas de corte reivindicativo, como ha sido el caso de Public Enemy, Alicia Keys o Anderson. Paak, todos los cuales los puedes escuchar en nuestra playlist de novedades Ready for the Weekend. Además, el de H.E.R., de manera muy expresa titulado ‘I Can’t Breath’, que fueron las palabras de George Floyd cuando un oficial le aplastaba con su rodilla, fue nuestra «Canción del día«.
Beyoncé, que es de Texas, ha decidido no quedarse callada, si bien con algo de retrasillo. Son muchos los himnos en que ha reflexionado sobre la discriminación de su raza, especialmente en ‘Lemonade’, donde encontrábamos ‘Freedom’ y ‘Formation‘. El nuevo tema publicado a colación del Juneteenth se llama ‘Black Parade’ y suena precisamente como un cruce entre ‘Formation’ y algo que podría haber encajado en la banda sonora alternativa de ‘El rey león’ que ella misma comisarió. De «We got rhythm (We got rhythm), we got pride (We got pride)» a «I can’t forget my history, it’sHerstory«, neologismo con el que pone una nota de feminismo. La canción, coproducida por ella junto a su amigo Derek Dixie, tiene fines benéficos.
Se trata del primer single en solitario de la cantante desde dicha banda sonora, con la que no pasó gran cosa. Si no contamos aquel ‘Spirit’, tenemos que irnos hasta ‘Lemonade’ (2016) para recuperar algún single suyo sola. En los últimos tiempos ha estado colaborando más bien con gente como J Balvin, Ed Sheeran, y Megan Thee Stallion, suponiéndoles esto último un top 1 en el Billboard Hot 100. También sacó un disco con su marido bajo el sobrenombre de The Carters, ‘Everything Is Love’, en 2018.
Annie, la cantante noruega que se diera a conocer a principios de los años 2000 con hitazos como ‘Greatest Hit’ o ‘Heartbeat’ y con su debut ‘Anniemal’, álbum de electropop clave de las últimas dos décadas; para después sucederlo con un disco tan entretenido -pero que se hizo esperar demasiado- como ‘Don’t Stop‘, vuelve con su primer largo en 11 años. ‘Dark Hearts’ sale el 16 de octubre y, en palabras de Annie, es la «banda sonora de una película que no existe».
En 2018, Annie contaba a JENESAISPOP que había estado trabajando en nueva música con Stefan Storm de The Sound of Arrows, y este es de hecho el productor oficial de ‘Dark Hearts’, así como de su sencillo principal, ‘American Cars’. Se trata de un nocturno y atmosférico medio tiempo synth-pop que remite al sonido de los renovados Italians Do it Better y por tanto de la influyente BSO de ‘Drive‘… si bien la cantante noruega apunta a una inspiración concreta, la controvertida película ‘Crash’ de David Cronenberg.
La artista, que explica ha grabado la mayor parte de ‘Dark Hearts’ embarazada, alternando la grabación de tomas vocales con visitas al cuarto de baño para potar (tal cual lo dice), no ha estado parada en todos estos años en que no ha publicado disco largo: en 2015 editó el EP ‘Endless Vacaction‘ y en 2013 el EP ‘A&R‘. Sin embargo, se echaba de menos un disco de Annie de verdad, sobre todo después de tantos años. Y además no será cortito.
‘Dark Hearts’:
01 In Heaven
02 The Streets Where I Belong
03 Dark Hearts
04 Miracle Mile
05 Corridors of Time
06 Forever ’92
07 American Cars
08 Mermaid Dreams
09 Stay Tomorrow
10 The Countdown to the End of the World
11 The Bomb
12 The Untold Story
13 It’s Finally Over
Este viernes 19 de junio se ha publicado ‘Rough and Rowdy Ways‘, álbum de estudio número 39 en la carrera de Bob Dylan. Todo un acontecimiento: pese a estar constantemente en la palestra por sus giras, discos de versionesvarios, incontables reediciones y algún que otro premio Nobel (ná, fruslerías), estamos ante el primer disco de canciones nuevas de Robert Zimmerman desde el fantástico ‘Tempest’, publicado ocho años atrás.
‘Rough and Rowdy Ways’ pasará seguro a la historia por haber procurado a Dylan su primer número 1 de Billboard en sus más de cinco décadas de carrera. Lo ha logrado en un chart menor, sí, pero igualmente es meritorio y sorprendente. Sobre todo porque lo ha conseguido con ‘Murder Most Foul‘, una letanía de casi 17 minutos en el que, rayando el spoken-word, dispara pensamientos en torno al asesinato de J.F.K., con incontables referencias a The Beatles, ‘Lo que el viento se llevó’, The Who, Patsy Cline, The Everly Brothers, John Lee Hooker…
La canción ocupa todo el segundo disco de la doble edición en CD y toda la cara B del segundo disco de la edición en doble vinilo, lógicamente. El resto de sus nueve canciones duran algo más de 50 minutos, muchas con minutajes que superan los seis, siete y hasta nueve minutos, en el caso del penúltimo corte ‘Key West (Philosopher Pirate)’. Grabado junto a su banda habitual de directo (Charlie Sexton, guitarra; Bob Britt, guitarra; Donnie Herron, steel guitar, violín y acordeón; Tony Garnier, bajo; Matt Chamberlain, batería), sorprenden un tanto las colaboraciones de renombre, no demasiado habituales en los discos del genio de Duluth: el guitarrista y productor Blake Mills, el pianista de los Heartbreakers de Tom Petty, Benmont Tench, el pianista de jazz Alan Pasqua, un tal Tommy Rhodes… ¡y Fiona Apple! La autora de ‘Extraordinary Machine’ podría ser la voz femenina que suena en la citada «Key West» pero, sin tener una copia física delante ni más detalles, no está claro qué ha aportado cada uno de ellos al conjunto. Lo cierto es que poco importa: todo se diluye y está puesto al servicio, como no podía ser de otra forma, de Zimmerman.
O, más bien, de su pausada y madura aproximación a estilos eternos como el blues (‘False Prophet’, ‘Crossing the Rubicon’ y ‘Goodbye Jimmy Reed’, referencia al bluesman del Mississippi), el swing (‘I Contain Multitudes’), el jazz (‘My Own Version of You’), el folk (‘Black Rider’, ‘Key West (Philosopher Pirate)’) o el gospel (‘I’ve Made Up My Mind to Give Myself to You’, ‘Mother of Muses’), siempre con esa voz que impregna todo, con la gravedad que le han otorgado los años y que él explota a la perfección. Por supuesto, no faltan referencias literarias ajenas (parece que Walt Whitman podría haber inspirado algunos versos de ‘I Contain Multitudes’), pero sobre todo propone extender una obra poética que ya ha sido valorada –no sin polémica– más allá de la música.
La reacción de la crítica especializada prácticamente en masa ha sido la de considerarla como otra obra maestra a incorporar a su larga lista, como destaca Sony Music en su nota de prensa del disco remitida esta mañana. Se destacan las cinco estrellas (de cinco, obvio) otorgadas a ‘Rough and Rowdy Ways’ por The Guardian («bien podría ser la colección de canciones más brillante de Bob Dylan en años»), The Telegraph («Himnos extraordinarios para los tiempos de cambio que nos toca vivir»), NME («Su mayor declaración poética»), Mojo («Narración atemporal … fascinante, suntuosa y extrañamente conmovedora») o The Times of London («Una obra maestra melancólica, reflexiva, meditativa, desconcertante, divertida e impresionante»). Incluso la exigente Pitchfork le otorgaba nada menos que un 9, y Rolling Stone apenas le escatimaba media estrella de la máxima puntuación, calificando el disco de «clásico absoluto». Con la única excepción de Consequence of Sound, que con un 67 sobre 100 («Dylan podría haber editado algo aquí, seguro, pero sería incluso mejor si desatara a su banda», dice su texto) es la nota más rácana otorgada al disco de momento, Metacritic confirma la gran acogida de la crítica. Con una media ponderada de 13 reseñas, obtiene un 97/100 de puntuación… a un sólo punto del disco más valorado del año, que no es otro que ‘Fetch the Bolt Cutters‘ de su ahora colaboradora, Apple.
Si atendemos a esta web, la reacción del público puede no parecer tan entusiasta. Sorprendentemente, la respuesta parecía muy tibia cuando empezaba a escribir el artículo, rondando el 6,8. No parece una referencia muy fiable, por la sencilla razón que, hasta hace pocas horas, no todo el mundo había podido escucharlo. Y de hecho, a medida que escribo estas palabras, la nota está subiendo por minutos, alcanzando ya un 7,8. Si acudimos a Twitter, varioscomentarios lo califican también de obra maestra, y acudiendo a foros de rock las loas son incluso más entusiastas.
Si acudimos a las páginas de usuarios de Azkena Rock Festival, leemos «discazo», «maravillas de disco», «es Dios», «sacada de chorra estratosférica»… Y, si vamos al espacio del disco en Music Corner, los foros de la web de expertos en grabación y producción Steve Hoffman, el tamaño de los calificativos no es menor. Si bien algunos de sus comentaristas ponen la celebración en remojo. Uno de los más beligerantes asegura que es pura «excitación del comprador», simplemente por «querer sentirse parte de algo, así que decir que los álbumes son geniales les hace sentir mejor». Otro, más razonable, recuerda que los comentarios tras publicarse ‘Tempest‘ eran igual de exacerbados, y hoy ya se habla de ‘Rough and Rowdy Ways’ como de «su mejor disco desde» [pon aquí el título de un disco de hace al menos 15 años]. O, como resume muy bien otro forero, «el nivel de hipérbole de este hilo me deja la cabeza dando vueltas».
Carlos Ruiz Zafón ha muerto este viernes en su residencia de Los Ángeles a los 55 años de edad, ha confirmado la página de Facebook oficial del escritor y también su editorial, Planeta. El autor sufría un cáncer desde hacía varios años.
En su comunicado, Planeta ha expresado que “hoy es un día muy triste para todo el equipo de Planeta que le conoció y trabajó con él durante veinte años, en los que se ha forjado una amistad que trasciende lo profesional”. La editorial ha recordado a Zafón como “uno de los mejores novelistas contemporáneos”.
Barcelonés de nacimiento, aunque residía en Los Ángeles con su familia desde principios de los años 90, Zafón fue uno de los escritores españoles más reconocidos internacionalmente desde la publicación, en 2001, de su novela ‘La sombra del viento’, un superventas global traducido a 36 idiomas y del que se despachan 15 millones de ejemplares. Novela multipremiada, ‘La sombra del viento’ es la primera parte de la exitosa tetralogía ‘El cementerio de los libros olvidados’ compuesta también por ‘El juego del ángel’, ‘El prisionero del cielo’ y ‘El laberinto de los espíritus’. Antes, el escritor se dio a conocer con la ‘Trilogía de la niebla’, compuesta por ‘El príncipe de la niebla’, ‘El palacio de medianoche’ y ‘Las luces de septiembre’, y con otras novelas como ‘Marina’, la cual llega a considerar la más «personal» de su carrera.
Natalia Lacunza se ha pasado por el plató de La Resistencia para promocionar ‘en casa’, un nuevo EP que sale hoy viernes y en el que interpreta en formato acústico cuatro de las canciones que componen su último EP, ‘ep2‘, sobre el que charlábamos largo y tendido con la artista pamplonesa hace unos meses, muy poco antes de que se anunciara el estado de alarma. La artista aprovecha también para promocionar el lanzamiento de un doble single en formato vinilo que sale el sábado, y que incluye los temas ‘olvidate de mí’ y ‘algo duele más’.
En su charla con Broncano, Lacunza habla sobre su fracasado paso por La Voz antes de entrar en Operación Triunfo; David Bisbal, una de las personas de la industria que mejor le caen, y del que recuerda su mítica versión del himno de España con guiño incluido; o sobre drogas psicodélicas, alguna de las cuales siente curiosidad por probar en un futuro. Ninguna de ellas incluye la actividad de «chupar sapos», el tema favorito de Broncano en estos momentos después de la noticia sobre Nacho Vidal que todos conocemos.
La entrevista termina con una conversación de besugos entre Lacunza y Broncano sobre la portada de ‘en casa’, que se compone de la captura de un correo electrónico que incluye una imagen de la cantante, y sobre insectos.
Hoy 19 de junio es el día que Estados Unidos conmemora el fin de la esclavitud en Texas con una festividad llamada «Juneteenth» (un neologismo que combina las palabras «june» y «nineteenth») que es celebrada de manera no oficial en todo el país, ya que no es una festividad nacional (solo es oficial el mencionado estado). Con motivo de esta celebración, multitud de artistas afroamericanos publican hoy nuevos trabajos, y la playlist New Music Friday de Spotify ocupa todo su espacio hoy con los nuevos lanzamientos de Teyana Taylor, Black Eyed Peas, H.E.R, Alicia Keys, Swae Lee, Noname y un largo etcétera.
Algunas de estas canciones ven la luz como apoyo o respuesta al levantamiento antirracista surgido en las calles de Estados Unidos tras el asesinato de George Floyd y otros ciudadanos afroamericanos a manos de la policía blanca, y la destacada en primerísimo plano por la mencionada playlist de Spotify se titula ‘I Can’t Breathe’, como las últimas palabras expresadas por Floyd antes de morir.
H.E.R. firma este escalofriante medio tiempo que concluye con un discurso reivindicativo contra el racismo. La primera parte expresa las mismas preocupaciones que tantos artistas han han plasmado en sus letras en tiempos recientes: «no tenemos los mismos derechos, ¿qué es una pistola para un hombre que se rinde? ¿cuándo se atreverá alguien a defenderla?» o «¿por qué juzgamos a la gente en base a su color de piel? El sistema está hecho para convertirnos en enemigos». En la segunda encontramos ese discurso que no deja títere con cabeza al mencionar el «genocidio» americano, la manipulación de los medios, las manifestaciones pacíficas interrumpidas por la violencia policial o los microrracismos. Tras H.E.R., un arreglo de cuerdas y unos coros ambientan la canción para poner los pelos de punta: «no digas que no ves el color; cuando nos ves, nos ves: no puedo respirar».
Aunque en el último momento se haya caído de la lista de novedades de esta semana el esperado nuevo disco de Jessie Ware, la playlist Ready for the Weekend reverdece tras semanas previas relativamente flojas con varios álbumes muy interesantes e incluso importantes comercialmente: los discos de Bob Dylan, Teyana Taylor, John Legend, Phoebe Bridgers, Jason Mraz, Black Eyed Peas, Darkstar, la revelación francesa Hervé, Baauer, NSG o Braids, en el panorama internacional, y los de Chucho, Carlos Sadness, Cómo Vivir En El Campo, Víctor Herrero y los EPs de Betacam las promesas/realidades Menta y Kimberley Tell, en el nacional.
Al margen de estos discos, hay un porrón de singles que se suman a los presentados a lo largo de la semana por parte de Paula Cendejas, C. Tangana & Alizzz, Doves, The Fiery Furnaces, Arca, The Killers, Joe Crepúsculo & Tomasito, IDLES o La Trinidad. Mónica Naranjo, Delaporte & Putochinomaricón, Toro y Moi, Ashnikko & Grimes, Annie (con esa producción de Stefan de The Sound of Arrows de la que nos habló hace más de dos años), Stay Homas, Lolo Zouaï, Everything Everything, Ladilla Rusa, Cayucas, Soledad Vélez, Shinova, dani, DMA’s, Dream Wife, Polo & Pan, Fryars & Rae Morris, la italiana Tosca y Sílvia Pérez Cruz, Tyga, Ozuna, Asha (co-autora de ‘Ya no quiero ná’ y ‘Booty’, que se lanza como solista), 107 Faunos, El Kanka, Abraham Mateo & Becky G o dos temas que se postulan como canción del verano 2020 –’Estoy soltera’ de Leslie Shaw, Thalía y Farina, por un lado, y ‘Bésame’ de Play-N-Skillz, Daddy Yankee y Zion & Lennox, por otro– amplían nuestra lista.
Es importante remarcar cómo este viernes coincide con el llamado Juneteenth, que conmemora la abolición de la esclavitud en el estado de Texas en 1865. En plena ola de protestas por el racismo sistémico en Estados Unidos, muchos artistas de color han publicado hoy singles por este motivo, con trasfondo reivindicativo: Public Enemy, Alicia Keys, H.E.R., Anderson. Paak o Tom Morello, entre otros muchos, han participado así de este día. Además, la canción de J. Cole que respondía al menosprecio público de la rapera Noname ha tenido respuesta por parte de esta.
Hay, también, varios remixes jugosos: el de Mark Ronson para Angel Olsen, el de Jon Hopkins para Flume & Toro y Moi, el de Avalon Emerson para Robyn… También destacan la nueva versión de ‘Toop Toop’ por parte de Cat Power y -M- en homenaje a Philippe Zdar, o el EP que adapta a formato acústico el último lanzamiento de Natalia Lacunza. Nos llama también la atención un inédito de Aretha Franklin, un recopilatorio que publica en su propio sello la productora Nina Kraviz, y que incluye una divertidísima ‘Como Nina (me gusta el techno como a Nina Kraviz)’ por parte del dúo levantino Crush Converters. Y no podemos olvidarnos del lanzamiento de ‘Homecoming’, el disco que grabó Neil Young hace 45 años y que nunca, hasta hoy, había visto la luz.
Black Eyed Peas publican hoy su nuevo disco, ‘Translation‘, en el que han buscado sumarse a la popularidad de la música latina colaborando con gente como J Balvin en el macrohit ‘RITMO’, con Ozuna en ‘MAMACITA’ o con otros artistas como Maluma , Nicky Jam , Becky G o Piso 21. Algunos de los títulos que encontramos en el disco son ‘VIDA LOCA’, ‘NO MAÑANA’ o ‘TODO BUENO’.
Había especial curiosidad por escuchar qué han hecho Black Eyed Peas con Shakira, ya que los primeros están en racha después de una temporada en segundo plano y la segunda suele petarlo hasta con cosas como ‘Me gusta‘ con Anuel AA. Su tema conjunto es ‘Girl Like Me’ y es una especie de champeta modernizada con ecos de la música dancehall jamaicana, en la que Shakira se anima a cantar el estribillo en un registro agudo medio irritante que puede enganchar u horrorizar dependiendo de a quién preguntes.
El «spanglish» campa a sus anchas en ‘Translation’ y ‘Girl Like Me’ incluye frases en este idioma híbrido típicas de will.I.am. como «esa latina está rica», «I need a bien bonita, elegante señorita» o «me gustan las dominicanas, las boricuas y las colombianas», en un posible guiño a ‘I Like It’ de Cardi B, J Balvin y Bad Bunny. También aparece en la letra una mención a Selena Quintanilla. ¿Hit? ¿Engendro? ¿Ambas cosas? Juzguen ustedes mismos…
Doves fueron uno de los grupos más conocidos de lo que podemos llamar post-BritPop. Coldplay fueron los grandes supervivientes de una generación en la que también podríamos meter a Travis y Embrace. Doves y Elbow apostaban por un sonido algo más abstracto; los primeros llegaron antes, pero los segundos se llevaron un Mercury a casa y duraron más.
Si has seguido escuchando ‘Lost Souls’ y ‘The Last Broadcast’, que fueron platino en Reino Unido gracias a sencillos como ‘Catch the Sun’, ‘Pounding’ y ‘There Goes the Fear’, estás de enhorabuena, pues el grupo está de regreso por primera vez en 10 años. Ellos han escrito en Facebook que hoy sacan su primer tema en 11 años, pero en realidad, hace 10. Y es que si su último disco databa de 2009, no hay que olvidar que en 2010 sacaron un recopilatorio con tema inédito. Un single llamado ‘Andalucia’ de vídeo gitano, tras el cual desaparecieron de la faz.
El nuevo single se llama ‘Carousels’, es muy fiel a su estilo, y contiene un guiño en la batería a Tony Allen que procede de mucho antes de su muerte pues, como han contado al NME, la maqueta se hizo en 2017. Hay nuevo largo en camino, si bien de momento no se han dado a conocer los detalles.
El nombre de Paula Cendejas puede sonarte porque la artista madrileña ha compartido varios pequeños éxitos con Jesse Báez (‘Tu cama’) o ‘Sal de mi cabeza’ y ‘Ya te avisé’.
Todos estos temas fueron producidos por Alizzz, escudero de muchos de los pasos de C. Tangana, y ahora este se une en el que puede ser otro punto de inflexión para Cendejas. Se trata de un tema llamado ‘Cómo habla una mujer’ en el que ambos discuten sus problemas de comunicación. Ella, con toda la sensualidad del R&B, referencia al lenguaje corporal («La forma de hablar de mi piel / Lo que digo callada con cada mirada»). Él, en cambio, parece no enterarse de nada: “Estoy harto de interpretar lo que te pasa / Y yo no soy adivino / Si pienso que no, «no» es lo que te digo) / No sé por qué tú te armas tanto lío”.
A nadie que haya escuchado la versión de ‘Sabor a mí’ de la artista sorprenderá la inspiración clásica de este tema, influido directamente por ‘Noche no te vayas’ de Los Tres Caballeros. Indica Paula en la nota de prensa: “Compusimos esta canción el verano del 2019, Tangana, Alizzz y yo después de compartir muchas referencias musicales y grupos que nos inspiraban. Cuando escuchamos el bolero de Los Tres Caballeros, supimos que teníamos que incluirlo en nuestra canción”.
A la espera de que el «lyric video» se estrene esta noche, de momento el tema se puede oír en tu plataforma de streaming favorita.
Eurovisión acaba de abrir un melón que puede cambiar tanto el curso del festival como la eliminación de la orquesta y toda música en directo. «Debido al coronavirus» y ante la posibilidad de nuevos rebrotes, para curarse en salud, el festival aceptará que se puedan llevar coros pregrabados. El certamen está buscando fórmulas que aseguren la celebración del festival tras haber tenido que aplazar un año la edición de 2020.
Según informa Vertele, «la idea detrás de este cambio es permitir a las cadenas la posibilidad de explorar nuevas ideas creativas, viajar con una delegación más pequeña y reducir la carga técnica que ha de asumir el país anfitrión», según palabras del supervisor ejecutivo Martin Österdahl. En principio, tiene cierto sentido, aunque el peligro viene cuando se abre la opción de que esta norma sobreviva al coronavirus, pues se habla de los beneficios de que «los compositores y productores presenten un trabajo lo más cercano a la composición original, y sobre todo, asegura que el festival avance con el tiempo». La medida se probará durante un año y podría implantarse de manera permanente en el futuro.
Ese «avance con el tiempo» puede funcionar de manera positiva en varias vías: si los coros en directo van a ser como los que llevó Beth en ‘Dime’, es mejor que sean pregrabados del propio artista. En segundo lugar, se abren posibilidades artísticas para cierto tipo de canciones, y quizá existan algunos artistas que se anoten un tanto echando imaginación a la nueva medida. Por otro lado, parece algo desafortunada la explicación de que lo que se presente sea «lo más cercano a la composición original», pues para eso que sea todo playback; y a su vez, da un poco de miedo que «el festival avance con el tiempo» tanto que se convierta en uno de esos conciertos actuales de música pop en los que ya nadie sabe quién está cantando y quién no.
La tradición australiana del buen pop rock de guitarras está lejos, muy lejos, de languidecer con grupos jóvenes como The Beths o Rolling Blackouts Coastal Fever. El quinteto de Melbourne se presentó a lo grande con ‘Hope Downs‘, un muy buen debut que sacaba tanto partido a sus constantes juegos de guitarras entrelazadas de sus tres guitarristas Tom Russo, Joe White y Fran Keaney, como a sus talentos compositivos: los mismos se reparten la firma y la voz de las canciones equitativamente, dinamizando su propuesta.
Curiosamente, su clasicismo suponía una refrescante inyección de naturalidad para una escena independiente más preocupada por asimilar la preponderancia del hip hop y el R&B. No en vano, Rolling Blackouts C.F. estuvieron tocando por todo el mundo durante año y medio de manera ininterrumpida, lo cual les procuró una enorme alegriía, pero también no pocos quebraderos de cabeza: relaciones rotas, extravío físico y mental, añoranza de los suyos, desconcierto… Un síndrome «lost in traslation» que, de manera bastante acertada, es la principal inspiración de ‘Sideways to New Italy’, su recién publicado segundo disco.
En él, las imágenes del estrés de la vida en un avión, coche o autobús, perdiendo la noción de día y noche, del lugar en el que se está, se estuvo ayer o se estará mañana, de si hace frío o calor, de si se ha dejado de amar o se ama, o de si se añora por mera costumbre… se suceden en sus nuevas canciones dando una imagen borrosa (como no podía ser de otra manera) de la realidad que han vivido, por suerte y por desgracia, como grupo. En esas circunstancias, buscaron una forma de encontrar conexiones entre los lugares que visitaban y sus lugares de origen. New Italy es una pequeña población en la zona de Nueva Gales del Sur, de donde procede el batería de la banda Marcel Tussie, fundada en torno a 1800 por migrantes venecianos. A la vez, los hermanos Russo (Joe, hermano de Tom, completa el grupo como bajista) se sentían en cierto modo cerca de casa en la propia Italia, de donde procede su apellido. De ahí el título del álbum, aunque en realidad las canciones mezclan el anhelo de regresar a casa y, paradójicamente, sentirse ya un extraño allí, que todo ha cambiado sin que ellos sean parte de aquello.
«Vi la señal de aviso a las afueras de St. Anne / y las palabras se estaban desplomando. / Todos los días se fundían en el olvido / en el pliegue temporal entre dos años», es la primera frase que escuchamos cantar, significativamente, en ‘Sideways to New Italy’. Es el primer verso de ‘The Second of the First’, impetuoso y vibrante tema inicial del disco que marca el vigoroso tono del que apenas se apea. Puede ser a través de composiciones en los cánones del indie rock, como la antes citada (con ciertos ecos de Pixies en las guitarras, como también sucede en ‘Cameo‘) o ‘Cars In Space‘, una gozada sobre todo en el plano instrumental, repleta de intrincados giros, riffs reconocibles y hasta trazos de saxofón. O en otras más armónicas y bonitas, en una línea cercana a Real Estate, Teenage Fanclub y hasta los primeros R.E.M., como el enorme single ‘Falling Thunder’ o su maravillosa sucesora en el tracklist, ‘She’s There‘.
Por supuesto, la sombra de precedentes patrios como The Go-Betweens, The Chills o The Bats no se despega tampoco del conjunto, gracias a cortes como ‘The Only One’ (aunque su armónica aluda a otros aussies más desprestigiados, Midnight Oil), ‘Not Tonight’ o ‘The Cool Change’, que sostienen la recta final del disco en la que agrada el islote de reposo titulado gráficamente ‘Sunglasses at the Wedding’. En ‘Sideways to New Italy’, Rolling Blackouts Coastal Fever superan el trance del siempre difícil segundo disco con buena nota, sacando partido a sus mejores armas. Puede que no siempre construyan melodías adictivas capaces de convertirse en hits más allá de su ámbito, pero están presentadas con tal mimo (recordamos muy pocos discos recientes con tantas canciones con pre-coro y post-coro enmarcando el estribillo) que degustarlas es una gozada (y lo será aún más cuando podamos hacerlo en directo, por ejemplo en Tomavistas 2021).
Calificación: 7,5/10 Lo mejor: ‘Falling Thunder’, ‘She’s There’, ‘The Second of the First’, ‘Cars In Space’, ‘Cameo’ Te gustará si te gusta: Real Estate, The Go-Betweens, los primeros R.E.M. Youtube:vídeo de ‘Falling Thunder’
Las noticias sobre las cancelaciones -o aplazamientos- de festivales han dejado de serlo porque ya todo el mundo las ha dado por supuestas. Lo que sí que es noticiable es que se anuncien festis nuevos para este verano.
Natural Live ha sorprendido confirmando a una serie de artistas en una «reserva natural situada al aire libre, en plena naturaleza serrana, en las inmediaciones de Hellín (Albacete), cerca de Férez, en donde, además, podrás alojarte -en casas rurales y glamping- para gozar cómodamente de una experiencia Natural Live 360º». El aforo será reducido a solo 400 personas, que eran las máximas permitidas al aire libre de la fase 2, antes del paso a la «nueva normalidad». El evento tendrá lugar en Las Ramblas de Talamansi.
El cartel está conformado por Viva Suecia, La La Love You, Varry Brava, Miss Caffeina, Burrito Panza, Mueveloreina, Krakauer y Marcelo Criminal, entre otros, y los conciertos tendrán lugar del viernes 24 a las 16.00 al domingo 26 de julio. También habrá programación diurna, incluyendo dj’s, vermú con karaoke, «sesiones golfas», etcétera. La programación por días, los horarios, las actividades paralelas y gastronómicas, y las entradas a la venta desde hoy a las 18.00, en la web oficial.
Según la nota de prensa, «para tranquilidad de todos, en Natural Live adoptarán las medidas establecidas y aprobadas por el Gobierno y autoridades sanitarias en la denominada “nueva normalidad” para garantizar así unas condiciones de seguridad e higiene máximas frente al virus de todas las partes (público, trabajadores y artistas). Entre otras muchas, se llevará a cabo un control estricto de acceso y aforo, respetando las distancias determinadas, desinfección de vehículos a la llegada, toma de temperatura a todos los asistentes y trabajadores, y limpieza y desinfección de los aseos públicos después de cada uso. Además, el aforo estará limitado a un máximo de 400 personas y se priorizará el pago con móvil o tarjeta y los vasos serán ecofriendly».
SAINt JHN es un rapero estadounidense de origen guyanés que está protagonizando una carrera de lo más atípica. Engullido por el monstruo del «efecto remix» que convertía en hits globales temas que previamente no habían obtenido similar éxito como ‘Sing it Back’ de Moloko, ‘A Little Less Conversation’ de Elvis Presley o ‘Summertime Sadness‘ de Lana Del Rey, el artista está triunfando ahora con el remix de una canción que publicó en 2016, hace cuatro años.
Se trata de ‘Roses’, una canción cuya remezcla discotequera por parte del DJ kazajo Imanbek has escuchado sí o sí si has estado atento o atenta a las listas de éxitos en los últimos tiempos, pues el tema, que ha ganado más y más adeptos, sí, gracias a TikToK, lleva semanas inamovible del top 10 de canciones más escuchadas a nivel global de Spotify (ahora mismo es número 3 solo por delante de ‘ROCKSTAR’ de DaBaby con Roddy Ricch y de ‘Blinding Lights’ de The Weeknd), acumula más de 600 millones de streamings solo en esta plataforma y, de manera más significativa, ha alcanzado el número 1 en Reino Unido… y también en Australia, Países Bajos e Irlanda, y top 10 en Estados Unidos. El «remix», que transforma el sonido trap de la canción original en un ritmo de house-pop bailable bastante genérico pero efectivo, tampoco ha pasado desapercibido en España, donde ha alcanzado el número 23 y actualmente ronda el top 40.
El rapero, que arrasa a los 33 años, empezó en la industria de la música escribiendo para artistas como Usher, Kiesza o Jidenna, y su primer disco, ‘Collection One’, salió en 2018. El año pasado publicó el segundo, ‘Ghetto Lenny’s Love Songs’, y apareció como artista invitado en uno de los temas más queridos de ‘The Lion King: The Gift‘ de Beyoncé, ‘BROWN SKIN GIRL‘. De manera esperada, el siguiente paso de SAINt JHN tras el éxito del remix de ‘Roses’ ha sido publicar un segundo para otro de sus éxitos, ‘Trap’, del que se ha encargado el DJ ruso Rompasso. La pregunta es obligada: ¿será SAINt JHN uno de los primeros artistas «one-hit-wonder» de la década… junto a Powfu y BENEE?
Fiery Furnaces, el dúo de Brooklyn compuesto por los hermanos Eleanor y Matthew Friedberger, vuelve con su primer single en 11 años. Se titula ‘Down at the So and So on Somewhere’ y está disponible desde hoy en las plataformas de streaming y también en un vinilo de 7″ junto a la cara b ‘The Fortune Teller’s Revenge’.
El nuevo tema de Fiery Furnaces es pizpireto, presenta un punto kraut y habla de «tutores de trigonometría», «manchas azules en el espejo», visitas a la «gasolinera» y mañanas en las que uno se despierta «intentando enviar emoticonos y saludos en mayúscula» para después concluir que «todo está bien en el mundo… quizás». Sus autores explican que es una canción llena de «arrepentimiento sobre tener arrepentimientos» y aclaran quién ha tocado qué en ella: «a Matthew le parecía bien usar una batería electrónica soviética, Eleanor prefería tocar baterías reales». Sobre ‘The Fortune Teller’s Revenge’, que solo podrá escucharse en el vinilo, también cuentan que es una «canción triste». Los hermanos Friedberger grabaron ambos temas en febrero de este año.
Una buena noticia para los seguidores de Fiery Furnaces la edición de este single, ya que el último disco del dúo, ‘I’m Going Away’, vio la luz en 2009, haciendo honor a su título. Desde entonces, Eleanor Friedberger ha publicado varios discos en solitario, el último de ellos en 2018, un ‘Rebound‘ que decepcionaba pese a su original concepto inspirado en los orígenes griegos de la artista. Por su parte, Matthew Friedberger ha formado parte de proyectos como Saqqara Mastaba, grupo junto a Bob D’Amico de Sebadoh a través del que, en 2016, lanzaba el disco ‘Libras’.
Duffy ha estrenado una canción nueva en su página de Instagram, la cual vuelve a no estar disponible en las plataformas de streaming habituales, como ya era el caso de una ‘Something Beautiful‘ que la cantante británica decidía simplemente lanzar en un programa de la radio británica, para no ser escuchada nunca más.
La nueva canción de Duffy se titula ‘River in the Sky’ y es una bonita balada a piano en la que la autora de ‘Rockferry’ canta sobre una presencia que le visita por las noches, cuando está «sola en la oscuridad», y le «cubre pacientemente mientras aprende a lidiar con el dolor». «Si me permito volver al pasado, veo la tristeza en sus ojos», canta, «sabía que las lágrimas iban a ir y venir como un río en el cielo».
Duffy ha sido noticia este año por revelar haber sido secuestrada y violada en el pasado, explicando que este ha sido el motivo de su larga ausencia de la industria de la música. Recientemente, la cantante de ‘Mercy’ publicaba un texto llamado ‘The 5th House’ en el que detallaba esta experiencia con pelos y señales, advirtiendo de su dureza. Duffy dedica ‘River in the Sky’ a los «tiempos mejores que se avecinan».
La valenciana Raquel Adalid había dado ya un salto considerable de personalidad y consolidación con ‘Panorama‘ respecto a su álbum debut como Chlöe’s Clue. Pero la pirueta para la que nos ha venido preparando desde hace semanas meses y que tiene su punto culminante mañana viernes es de aupa: al fin se publica ‘Carmín y rubor’, un disco muy valiente que estábamos esperando hace tiempo, en el que se ha entregado a las cadencias de la canción hispanohablante más clásica para hacerla suya y ponerla en total vigencia. Una manera distinta de hacer folclore que tiene una de sus cimas en ‘Quémame’.
Curiosamente, esta canción ya se dio a conocer en una forma más básica y primitiva hace más de un año, antes de que otros singles como ‘Carmín y rubor‘, la descolocante ‘Tango techno’ o ‘Pecados delicados‘ vieran la luz. Pero la forma en que se presenta dentro del álbum es mucho más seductora y poderosa. Completamente remozada y arreglada con ampulosos arreglos, se presenta como una colaboración con el intersantísimo dúo mexicano Daniel, Me Estás Matando, revitalizadores del bolero («bolero-glam», lo llaman ellos) que, sin duda, son perfectos para dar una nueva perspectiva a ‘Quémame’.
Junto a ellos, Adalid se enfunda con comodidad en el papel, a medio camino de una femme fatale y una cupletista, de intérprete apasionada. No podía ser de otra manera para una canción que arranca cantando «sólo sé que quiero ser salvaje y arrancar heridas por placer» y que sobre todo plasma el ansia por «quitarse las ganas de…» Así, dejando en el aire la conclusión de esa frase insinuante. O mejor/peor, siendo más explícita con un «no quieras saber». Y realmente sí, queremos saber, como decía Lobatón. Una interpretación envuelta en el aire de seducción inherente al bolero, que adquiere en manos del insólito trío una capacidad de evocación brutal. Más aún cuando se ve realzada por un estupendo vídeo en el que Raquel, además de presumir de una llamativa colección de mohines que potencian su voz rasgada, luce looks icónicos en escenas poéticas y sórdidas, con especial protagonismo de un histriónico diablo que, entre llamas, simboliza esa pasión desquiciada que irradia la canción.
Por si no fuera suficiente con que la era del streaming haya expandido el acceso del público a la música hasta niveles completamente insospechados e inabarcables, Twitter ha estrenado una nueva herramienta que permite a sus usuarios literalmente tuitear su propia voz. Así, un sinfín de celebridades podrán expresar barbaridades sin miedo a ser malinterpretadas por culpa de la ausencia de tono. ¡Bien! Y quién sabe si otras se animarán a inventar el formato de «álbum tuiteado». Seguro que Charli XCX ya está maquinando posibles proyectos.
De momento, la cantautora estadounidense Liz Phair ha estrenado una meta-cancioncilla sobre esta nueva herramienta en su cuenta de Twitter. La cancioncilla, a voz y guitarra acústica, no tiene título, dura 2 minutos y 19 segundos, es improvisada in situ o lo parece e incluye frases como «la nueva herramienta de Twitter me gusta mucho, y probablemente la usaré demasiado» o «Twitter no debería hacer esto a la gente que no puede mantener sus manos alejada de sus instrumentos ni puede dejar de componer temitas en su cabeza», sin olvidar la meta-frase de rigor: «seguramente me iré a trabajar después de este verso».
Con esa última frase, Liz Phair se puede estar refiriendo a seguir trabajando en su próximo álbum de estudio, ‘Soberish’, que sale este año, una década después del anterior. Entre las fans de esta bobada se encuentran la amiga de Liz Phair, Aimee Mann, a quien Liz ha sugerido versionar la canción la «próxima Navidad».
Vera Lynn, una de las cantantes de pop británicas más longevas y queridas por el público, ha fallecido hoy 18 de junio a los 103 años de edad, ha confirmado su familia tal y como recogen los medios británicos.
Conocida por haber entretenido a las tropas británicas con sus alegres canciones durante la Segunda Guerra Mundial, periodo durante el cual pasó a ser conocida como «la novia de las Fuerzas Armadas» y cantó en lugares como Egipto, India o Birmania, Lynn interpretó el éxito ‘We’ll Meet Again’ -utilizado en una escena inolvidable de ‘Teléfono rojo? Volamos hacia Moscú’ de Stanley Kubrick- y otros como ‘(There’ll Be Bluebirds Over) The White Cliffs of Dover’, ‘Land of Hope and Glory’, ‘A Nightingale Sang in Berkeley Square’ o ‘There’ll Always Be an England’. Después de la guerra, la popularidad de Lynn no decayó y la cantante apareció en programas de televisión y radio de Reino Unido y Estados Unidos y obtuvo un single número 1 en su país natal con ‘My Son, My Son’, además de conseguir otros éxitos como ‘Auf Wiederseh’n, Sweetheart’.
La veterana cantante, conocida también por su labor solidaria, fue la primera mujer en lograr, en la década de los 50, tres éxitos simultáneos en el top 10 de Reino Unido con ‘Forget Me Not’, ‘The Homing Waltz’ y el mencionado ‘Auf Wiederseh’n Sweetheart’. Después, solo Rihanna, Ariana Grande y recientemente Dua Lipa repetirían la hazaña. Además, la artista ha alcanzado varios récords debido a su edad: en 2009 se convirtió en la artista viva más longeva en lograr un álbum número 1 en Reino Unido con el recopilatorio ‘We’ll Meet Again: The Very Best of Vera Lynn’, y en 2017 en la primera centenaria en colocar un álbum en el top 10 de ventas del país con ‘Vera Lynn 100’, el recopilatorio que conmemoraba su cumpleaños número 100.