León Benavente han estrenado el segundo adelanto de ‘Vamos a volvernos locos’, el álbum que publican el 13 de septiembre y que es muy esperado tras el éxito de su segundo disco. Si el primer avance había sido ‘Como la piedra que flota’, un medio tiempo misterioso que contaba con la colaboración de Maria Arnal, ‘Amo’ es una canción radicalmente diferente, aunque también incluye colaboración destacada.
En este caso es Eva Amaral, zaragozana como la banda de Abraham Boba, quien aporta coros en este rockero ‘Amo’ de ritmo bailable, estribillo de ecos hindúes y versos narrados en los que Boba enumera todas las cosas que ama de su persona amada. La primera parte de la canción es un poco más romántica («amo que estés a mi lado, ahora y en cualquier momento») pero la segunda se vuelve claramente más macarra e incluso egocéntrica, pasando del «amo mi autorretrato cuando me reflejo en tu espejo» al «amo cómo me follas», o declarando después «amo tu lado más tierno, también el más hijo de puta» para concluir con la sentencia: «amo usar esta frase para decirte lo que te quiero».
Como decimos, Amaral se limita a hacer los coros en ‘Amo’, si bien su presencia es prominente en el estribillo, donde Boba y ella se reúnen para clamar otra de esas melodías hechas para ser coreadas en los conciertos: «amo tu nombre» tiene incluso un componente místico, presente en toda la canción. Os recordamos que Amaral también publican disco en septiembre, en su caso unos días antes que León Benavente, el día 6.
La voz de Molly Burch es de esas que se identifican a la primera una vez te has detenido a escucharla. Un timbre que es capaz de pasar de bonitos agudos aterciopelados a unos graves guturales, en unos giros que hacen pensar en ella como una artista de otro tiempo, casi como una starlet del Hollywood dorado –quizá tenga que ver en ello los estudios universitarios en jazz vocal que cursó en Carolina del Norte–. Ahí, a un hipotético espacio temporal entre los años 40 y 50, nos transportan las canciones de ‘First Flower’, su segundo álbum de estudio publicado el pasado otoño que esta semana presentará en una gira peninsular: comienza en Praza do Ferro de Ourense (28/06), sigue en Radar Estudios de Vigo (29/06) y, tras pasar por Portugal, continúa en la sala El Sol de Madrid (4/07) y Loco Club de Valencia (5/07), culminando en el Vida Festival de Vilanova i la Geltrú (6/07).
Pese a ser publicadas por Captured Tracks, las canciones de esta californiana afincada en Texas no entran en los cánones habituales del generalmente oscuro y garajero sello neoyorquino. Ni siquiera se puede decir que sean lo-fi. Al contrario, su sonido es cristalino y pulcro, sencillo pero lleno de matices a través de preciosos arreglos de guitarras y coros, que la emparentan con M. Ward –sólo o con su proyecto junto a Zoey Deschanel, She & Him– o, de manera más evidente, con Angel Olsen. Pero, aunque llenas de melancolía, las canciones de Burch raramente caen en ese punto turbio y oscuro que a veces muestra la autora de ‘My Woman’. Como mucho, pueden tener la tristeza de un blues majestuoso engalanado con un arpa, como el de la final ‘Every Little Thing’, o adentrarse en la cadencia propia de una madrugada calurosa, como en ‘Good Behaviour’.
Pero, sobre todo, en ‘First Flower’ predominan unas melodías luminosas que, potenciadas con bases rítmicas musculosas, maduran en canciones tan fantásticas como aquella ‘To The Boys’ que, con su mensaje de autoconfianza, seleccionamos como Canción del Día; o como ese precioso arranque de álbum que, entre ecos de la frontera con México, conforma el trío ‘Candy’, la maravillosa ‘Wild’ –ambos singles son reflexiones sobre vencer la ansiedad, que por momentos, dice, puede ser «adictiva»– y ‘Dangerous Place’. Tanto da si canta reproches como los de esta última o ‘Next To Me’ o directas declaraciones de amor como ‘Without You’, ‘First Flower’ o la vibrante ‘True Love’, Molly casi siempre mantiene un tono colorido que se contagia a través de su maravillosa voz y los preciosos detalles instrumentales interpretados con su pareja personal y artística (Dailey Toliver, co-produce y toca en el disco). Sólo cabe achacar a este ‘First Flower’ que, ante lo reiterativo su ascética propuesta instrumental, por momentos se te puede ir el santo al cielo. Pero, cuando está de dulce en lo compositivo (es decir, en casi todo el álbum), es para ponerla un rancho.
Calificación: 7,6/10 Lo mejor: ‘To The Boys’, ‘Wild’, ‘Candy’, ‘Dangerous Place’, ‘Without You’ Te gustará si te gustan: M. Ward, Angel Olsen, Stella Donnelly Escúchalo: Spotify
The Drums está viviendo un pequeño momento de gloria gracias a un meme viral. El vídeo de dos personas (parece que del sudeste asiático, al menos un medio indonesio se ha hecho eco de la noticia) haciendo el tonto en una habitación al ritmo de ‘Money’ ha corrido como la pólvora en las redes, provocando que la canción entre en las listas de hits virales de Spotify de varios países asiáticos y también de Estados Unidos, y finalmente en la playlist global, donde ahora mismo ocupa la posición 43, entre los últimos singles de Miley Cyrus y Bon Iver.
‘Money’ fue el primer single de ‘Portamento‘, el segundo álbum de The Drums, lanzado en 2011. Aunque ya era uno de sus temas más emblemáticos, el éxito del meme puede consolidarlo definitivamente como un clásico a ojos del público a la altura de ‘Let’s Go Surfin’…. o no. De momento ya son muchas las personas que están compartiendo ‘Money’ en sus redes tras descubrirla gracias al meme, ¿y no tuvo siempre el estribillo «quiero comprarte algo, pero no tengo dinero» potencial popular?
El propio Jonny Pierce, que debe estar flipando en estos momentos ante el exitillo espontáneo de ‘Money’ en streaming, ha animado a sus fans a seguir compartiendo el meme y por supuesto también la canción: «somos una banda de clase trabajadora y esto significa muchísimo para nosotros», ha escrito. Pierce anima también a sus fans a compartir su canción favorita de ‘Brutalism‘, su último álbum, publicado hace unos meses.
Ryan Murphy ha anunciado nueva película para Netflix, ‘The Prom’. Será la adaptación cinematográfica de la obra de teatro del mismo nombre estrenada en 2016, sobre cuatro viejas glorias de Broadway que buscan rehabilitar su imagen mediante una buena causa, en este caso, ayudar una adolescente lesbiana de un pueblo conservador de Indiana a la que no han dejado llevar a su novia al baile de fin de curso.
La película de Murphy contará en su reparto con varias estrellas, entre ellas Ariana Grande, quien ya actuara en Broadway antes incluso de publicar su primer disco, y que también se encargará de componer la banda sonora junto a Murphy y su manager Scooter Braun. También asumirán papeles en ‘The Prom’ Meryl Streep, James Corden, Nicole Kidman, Awkwafina, Keegan-Michael Key y Andrew Rannells, informa Deadline. Se espera que ‘The Prom’ se estrene en cines en otoño de 2020 y después en streaming.
Este será uno de varios proyectos en los que Murphy, que en 2017 entregara la excelente ‘Feud‘ sobre la enemistad entre Joan Crawford y Bette Davis, trabajará este año. Además de ‘The Prom’, el creador de ‘American Horror Story’ prepara tres series, ‘The Politicians’, ‘Ratched’ y ‘Hollywood’, además de un par de documentales y otra obra de teatro adaptada llamada ‘The Boys in the Band.
Joel Iriarte, conocido por todo quisqui como Joe Crepúsculo, parece haberse acomodado en la estrategia de los nuevos raperos: lanzar un single propio o participar en uno ajeno cada poco tiempo para no dejar de estar en el candelabro en ningún momento y sin dejar de actuar. Así, este año ya ha publicado dos llamativos singles firmados por él, como fueron ‘Vete a la mierda‘ y ‘España‘, pero también ha sido noticia por remezclar el célebre ‘Mi gran noche’ de Raphael para transformarlo en un hit bakala, primero, y por poner voz a una canción de Instituto Mexicano del Sonido, ‘Cruzando el río’. Y esta semana vuelve a ser actualidad con un nuevo tema suyo.
Se titula ‘Todo se corrompe’ y sorprende porque cambia el paso no ya de lo que venía haciendo últimamente sino en toda su carrera, aunque no deja de ser coherente. Se trata de un medio tiempo claramente inspirado por los boleros. Pero no en una tesitura clásica de Antonio Machín, sino con una producción que más bien emparenta la canción con un Dyango o una Mari Trini, con llamativos arreglos de teclado y coros femeninos, en este caso cantando a una persona como refugio ante un mundo podrido y cruel. Este nuevo single de Crepus ha llegado este miércoles a las plataformas de streaming, a la vez que se ha publicado su vídeo, filmado en la Puerta del Sol de Madrid. Su portada, una fotografía de Sharon Lopez, es la que veis más arriba.
Pese a esta sucesión de singles, no hay confirmación de que estos vayan a formar parte de un nuevo álbum de estudio que, tras la edición de su recopilación ’10’, dé continuidad a ‘Disco duro‘, de 2017.
Thom Yorke publica este viernes su nuevo disco en solitario, un ‘ANIMA’ que se anunciaba por sorpresa la semana pasada, y que llegará a las plataformas de streaming conjuntamente con un cortometraje de igual título dirigido por Paul Thomas Anderson, y que podrá verse en Netflix.
De cara al lanzamiento de ‘ANIMA’, Yorke se ha sentado con el periodista de Apple Music Zane Lowe para hablar sobre el disco y sus temas. Ha dicho que la mayoría de temas incluidos en él no son exactamente nuevos: «hace tiempo que tenemos estos temas, y lo gracioso es que hemos hecho el disco muy rápido, ya que muchos temas ya los habíamos hecho en directo. Lo hemos clavado a la primera. Ha sido rápido y divertido, sabíamos en qué dirección ir porque llevamos tiempo guardando este material».
En cuanto a la temática de ‘ANIMA’, Yorke afirma: «Hemos empezado a emular lo que nuestros aparatos dicen de nosotros, y a emular el modo en que nos comportamos a partir de eso. La razón por la que podemos ver a Boris Johnson mentir de manera obvia, y prometer algo que sabemos no va a cumplir, es porque no conectamos con ello. Vemos a un pequeño avatar, a un tío con un peinado estúpido sacando una bandera. Las consecuencias no son reales, y mientras nosotros permanecemos anónimos».
Yorke habla también de su fascinación por los sueños y su papel en el proceso de la información que los seres humanos recibimos día a día, y habla sobre la necesidad de escuchar música triste: «Sabes que estás en problemas cuando la gente no quiere escuchar música triste. Es su manera de desconectarse del mundo».
Hot Chip han publicado esta semana un nuevo álbum llamado ‘A Bath Full of Ecstasy‘ que añade nuevas grandes canciones a su repertorio, como ‘Melody of Love’, ‘No God’ o el nuevo single ‘Spell’, para el que acaban de estrenar un vídeo estupendo. Hemos tenido ocasión de hablar con Joe Goddard y Owen Clarke sobre este nuevo lanzamiento o el estado de la música pop, pero la charla se produjo durante una visita promocional a Madrid a principios de junio, un par de semanas antes de que Philippe Zdar, uno de los co-productores del disco, falleciera como consecuencia de un trágico accidente. El grupo lógicamente lamentaba el pasado viernes la muerte de Phil en las redes sociales, y de hecho son varias las veces en las que le referencian hablando del proceso creativo de ‘A Bath Full of Ecstasy’. Hot Chip actúan el 28 de noviembre en Madrid y el 29 de noviembre en Barcelona. Foto: Ronald Dick.
¿Qué creéis que representará este disco de Hot Chip en vuestra carrera a la larga?
Joe: «¡El final del grupo! (risas)». Vale, ya tengo el titular.
Joe: «No sé… Creo que a la gente le va a gustar».
Owen: «No piensas en eso hasta que el disco está acabado. Hemos hecho 6 discos y cuando acabas cada uno, no dices: «¡este es el de ruptura!». No funciona así».
Joe: «¡Para alguna gente sí! (risas)».
Owen: «Pero creo que es atrevido y que no se avergüenza de ser pop. Tiene cosas arriesgadas e interesantes, y creo que funcionará también con los que esperen algo más. Va a ser superexitoso. Tanto que no podremos manejarlo y ese será nuestro fin (risas)».
¿Qué quieres decir con que no le da vergüenza ser pop? Tampoco es tan pop como ‘Ready for the Floor’.
Owen: «No es superpop, pero nosotros siempre hemos tenido una sensibilidad pop. La gente asocia la palabra «pop» a algo sucio, la gente lo asocia a venderte, a ser comercial, a no tener brillo… pero nosotros no lo vemos así».
Joe: «No es tan pop como ‘Ready for the Floor’. Eso es verdad. Intentamos concentrarnos en algo como ‘Melody of Love’, que tiene mucho poder, es todo lo directos que podemos ser, sin ser tan descarado como ‘Ready for the Floor’. Cuando escribimos estas canciones, no queríamos hacerlas lo más pop posible, sino escribir las mejores canciones que pudiéramos, y luego, en términos de producción, sí hacerlas funcionar como canciones pop. Quitarles los excesos que para que fueran así de fuertes y esbeltas».
Tengo la sensación de que algunas canciones, como ‘Clear Blue Skies’, de hecho evitan ser pop. Y otras como ‘No God’ están pensadas más como un grower. No sé si es algo que un artista suele hacer en su carrera cuando tiene muchos discos, hacer más growers que singles frescos e inmediatos.
Joe: «Puede ser, puede ser. Al principio intentas hacer algo directo y simple. La gente tiene un mensaje que quiere decir de manera muy directa, desde la yugular. Luego es más complejo, más profundo, a medida que te vas haciendo mayor. Podría ser. No lo hemos pensado mucho. No nos concentramos en eso cuando estamos escribiendo. Simplemente lo hacemos lo mejor que podemos. No intentamos alcanzar el mercado pop. No es una prioridad».
Cuando lanzasteis ‘I Feel Better’ y os enfadasteis porque no sonaba en la radio sí lo buscabais, ¿no?
Owen: «Hicimos un «radio edit» que queríamos que fuera superpop».
Joe: «Y no funcionó…».
Owen: «La canción no era ya la misma. Aprendimos de aquello».
Joe: «Para nuestra sorpresa ‘Hungry Child’ está siendo bastante pinchada en Radio One, cuando pensábamos que estábamos ya fuera de todo eso».
¿Os gusta oír la radio?
Joe: «Oigo NTS, es una radio que no es pop, no son hitazos, ponen versiones extended de ambient, música india, y discos perdidos de jazz espiritual… No, en serio, a veces me pongo Radio One, no es que me encante, porque tengo 39 años y esa radio es para gente con 16 años, es su target comercial, pero a veces ponen cosas que están bien. Radio 6 tiene muchos buenos programas».
«Hay cosas muy malas en la radio, muy pastiche, pero si buscas, encuentras cosas interesantes»
¿Qué has escuchado hace poco que te pueda gustar?
Owen: «Es saludable escuchar todo eso porque hay cosas buenas, bien sea un sonido o sea una parte de la canción. Siempre merece la pena sumergirse para además tratar de imaginar qué piensa esa emisora de ti».
Joe: «Te pierdes mucha música si no prestas atención a las listas de éxitos de música pop. Así puedes descubrir a Timbaland, Rosalía, James Blake, Travis Scott, ocasionalmente los singles de Justin Bieber que han estado tan bien producidos, Ariana Grande… Hay cosas muy, muy malas, muy pastiche, con demasiado autotune, el mismo ritmo de reggaetón, pero si buscas, encuentras cosas interesantes. Siempre ha sido así».
No creo que hayas descubierto a Rosalía en la radiofórmula.
Joe: «No, la descubrí por mi amigo Marc, que vive en Barcelona. Pero ya se ha hecho famosa en todo el mundo».
En este disco habéis trabajado con dos productores, ¿dónde podemos encontrarles?
No es superobvio. No es como cuando Madonna pasó de trabajar con Jellybean Benítez a trabajar con Nile Rodgers, y básicamente hizo algo que era como un disco de Chic con Madonna cantando (NdE: ‘Like a Virgin’). Los dos productores han cogido nuestras demos y han ido editando, arreglando, añadiendo pequeños sonidos cuando pensaron que hacía falta… Nos han dicho que había que regrabar alguna voz que no era lo suficientemente buena. Es algo que no habíamos hecho antes y ha sido muy interesante. Con Philippe Zdar hemos trabajado en canciones como ‘Spell’ y ‘Echo’ y algunas otras, y sobre todo le puedes percibir en ‘Spell’. Teníamos la canción escrita pero rehicimos muchísimo. Quería que hiciéramos algo de jam session, y por eso hay momentos en directo, muy naturales, que él introdujo. También sugirió un punto de ruptura al final de la canción que no habíamos visto, porque quería darle un aire más «trippy». Le gusta mucho la psicodelia, el delay, las «reverbs» más locas, los ecos espaciales… Es lo que le encanta. Así que el disco es un poco más «trippy»».
Tú, Owen, ¿qué canción has disfrutado más a nivel producción?
Owen: «‘No God’ suena muy diferente. Creo que es muy Hot Chip en cuanto a composición, pero tiene más espacio y detalle. Es más atrevida, tampoco muchísimo, pero es algo que no habíamos hecho».
Casi todos los discos del mundo van de amor, pero por algunas frases de esta canción, ‘No God’, otras de ‘Echo’, el propio single ‘Melody of Love’… me da la sensación de que este disco va bastante más de amor que otros discos de Hot Chip. ¿Es así?
Joe: «Puede ser que sí. No he comparado mucho este disco con los otros. Obviamente ‘One Life Stand’ iba sobre amor, pero si miras este disco en conjunto es un tema bastante común, como lo es en general en la música. Muchas de estas canciones van sobre eso, aunque con diferentes puntos de vista, algunas son sobre el amor obsesivo, otras son más sobre fetiches, otras son sobre el amor inclusivo, otras son más sobre lo humano como ‘Melody of Love’… ‘Echo’ no es tanto una canción de amor, como sobre dejar atrás el pasado. No es de modo general un disco sobre el amor pero es un tema recurrente. Y no es algo que quisiéramos hacer de manera consciente, sino que nos encontramos al unirlo todo».
‘Hungry Child’ menciona la idea de perseguir algo que no puedes tener. ¿Es algo que seguimos haciendo con 30, 40, 50 años?
Joe: «Quizá».
Owen: «Es algo que está contigo toda tu vida, como el arrepentimiento, la envidia… son cuestiones que continúan apareciendo depende de cómo sean las circunstancias, las diferentes parejas… Es como anhelar algo».
Joe: «La gente puede arrepentirse de cosas».
«Phil nos trajo un sintetizador modular Eurorack que hace sonar al disco más moderno, e impide que suene a los 80 porque hace cosas que no se podían hacer antes»
La nota de prensa y los créditos del disco son bastante específicos con los sintetizadores que habéis usado. ¿Son muy importantes para vosotros?
Joe: «Siempre han sido importantes para nosotros y para mí en mi vida, son una de mis mayores pasiones. No sé si ha sido más importante para este disco en particular. Muchos de los ganchos en estas canciones, como ‘Melody of Love’, ‘Spell’, ‘A Bath Full of Ecstasy’… son pequeños fragmentos vocales, ritmos o melodías que hemos creado con un sintetizador que nos trajo Phil para este disco. Se trata de un sintetizador modular Eurorack que hace sonar al disco más moderno, y que se está haciendo muy popular. Eso impide que el álbum suene a los 80 porque hace cosas que no se podían hacer antes. Hemos intentado ser libres. Rodaidh (McDonald) también nos introdujo a un nuevo software para manipular la voz y crear melodías en el ordenador. No es Autotune, sino otra cosa. Así que hemos intentado hacer cosas nuevas. No es algo superexcitante para la gente de a pie, pero para quien esté metido más en la parte técnica, ha sido muy importante».
Owen: «Es algo que hacían Yellow Light Orchestra, veías su lista de sintetizadores en los discos, y también los gastos de envío. Eran bastante caros».
¿Los sintetizadores que usáis en cada disco definen cada álbum?
Joe: «Siempre hay algo nuevo en cada uno, porque nos encanta comprarlos. Hay cosas que hemos usado siempre, como el Arp 2600, que lo hemos usado en los últimos 10 años, un sonido fantástico al que solemos volver. Pero siempre hay nuevas opciones. Es una de las cosas fantásticas que tienen estos instrumentos, que te inspiran cuando das con uno nuevo. Es como estrenar un nuevo juguete. A veces das con un sonido que te conduce a otro sitio porque suena fresco e inspirado. Siempre intentamos trabajar en ello».
Lo preguntaba por si el tipo de sintes puede definir la carrera de Hot Chip. A mis oídos, el primer disco suena bastante diferente, pero el segundo sí que me suena conectado al tercero, y este al cuarto. Mientras que los últimos me parecen definitivamente distintos. No sé si puede ser por los sintes o por vuestros trabajos en solitario, el tipo de melodías, etc.
Joe: «No sé, quizá. Hubo una diferencia entre el tercer y el cuarto disco, y es que el tercero lo hicimos en nuestro estudio, como los dos primeros. Mientras que el cuarto fue más profesional al irnos a otro estudio con un ingeniero profesional, lo cual quizá nos hizo menos raros y más normales en cuanto a la composición de canciones».
«Muchas de estas canciones van sobre amor, aunque con diferentes puntos de vista: sobre el amor obsesivo, otras son más sobre fetiches, otras sobre el amor inclusivo, otras sobre lo humano…»
Seguís haciendo vídeos interesantes, como el de ‘Hungry Child’. ¿Creéis en este formato?
Joe: «No veo muchos vídeos ya, pero nos acaba de decir una entrevistadora que los vídeos son muy importantes ahora mismo. Si eres joven y quieres conectar con un grupo tiene que ser a través de que veas su vídeo. Para mí no es nada importante. Domino (el sello) nos dijo que para ellos era muy importante que hiciéramos un vídeo que fuera como una declaración de intenciones, para anunciar y lanzar la gran campaña, porque habían gastado mucho dinero en el disco. Así que no puedo decir mucho sobre lo que quiere decir a día de hoy el vídeo pop, pero nosotros teníamos muchas ganas de hacerlo y salió muy bien. Habla de la obsesión romántica. Y sale Martin Starr, que somos muy fans de muchos de los programas de televisión que ha hecho».
¿Hay un mensaje o metáfora en el vídeo?
Joe: «¿Que la gente quiere que dejemos de hacer música? (risas). No sé, queríamos que fuera un tema del que hablar, que la gente hablara sobre el grupo. Así que no hay un mensaje oculto. Me gusta cómo juega con la canción y que sea como un corto, como pasaba con ‘Da Funk’ de Daft Punk, que lo hizo Spike Jonze».
Ya has hecho dos bromas sobre el final de Hot Chip. ¿Y eso?
Joe: «Lo hago mucho».
Owen: «Está en nuestra naturaleza, es divertido. Es duro estar en una banda física y mentalmente. Cuando estás en la banda, disfrutas del proceso, pero son años y años de giras. Es un poco que cuando estás fuera, estás deseando volver a casa, y cuando estás en casa lo echas de menos».
Joe: «Es malo para tu salud».
Owen: «Pero también es divertido».
Ahora anunciáis el mayor tour en el que jamás os habéis visto envueltos.
Joe: «Sí, de manera inminente. Desde septiembre a diciembre no vamos a estar en casa en absoluto. Da un poco de miedo, es muy fácil beber demasiado. Pero va a ser algo grande. Tenemos fechas en Estados Unidos, Japón donde a todo el mundo le encanta ir, luego Reino Unido que todo el mundo lo odia pero lo tienes que hacer (risas). Dos semanas en Sudamérica, con unos días para disfrutar de la comida, de la cultura, Santiago, México, luego venimos aquí a Barcelona… Viajamos en autobuses con los que te despiertas siempre en otra ciudad, lo que te renueva después de haber pasado todo el viaje durmiendo. Cuando acabas estás superemocionado.
¿Habéis trabajado ya en nuevas versiones de canciones viejas como soléis hacer en las giras?
Owen: «Sí hemos hecho algunos ensayos, para Europa y Reino Unido. Ahora estamos con los festivales. Hemos rehecho ‘Boy from School’ y algunas versiones».
Joe: «También hemos rehecho ‘Ready for the Floor’ y ‘I Feel Better’. Tenemos un batería que toca muy distinto. ‘Hungry Child’ ya la hacemos distinta a como es en el disco».
¿Hay alguna que os dé más pereza reinventar?
Joe: «‘Over and Over’. Irónicamente».
Owen: «Porque tenemos que tocarla «una y otra vez» (risas)».
Joe: «La retrabajamos, hicimos muchas versiones, una más techno… la hemos hecho de diferentes maneras, pero no nos motiva muchísimo. Así que ahora mismo la hacemos más parecida a la original. No me entusiasma mucho, pero sí hacer algunas viejas como ‘Flutes’ o ‘Night and Day'».
Los discos de Alexis Taylor son muy diferentes. ¿Creéis que le influye lo que ha hecho por su cuenta para lo nuevo de Hot Chip o lo lleva aparte?
Joe: «Creo que para él está bien hacer algo más experimental, inesperado… para cuando vuelve a Hot Chip hacer algo más directo. Hace cosas más extrañas fuera y en Hot Chip las estructuras están más controladas».
Owen: «Imagino que la presión es distinta cuando haces tu trabajo en solitario. Tienes todo el control sobre lo que haces. Nosotros tenemos una relación establecida cuando volvemos a Hot Chip. Puedes hacer cosas que serán divertidas, cosas que funcionan, cosas que no… Igual cuando haces tus propias cosas, buscas cosas más diferentes».
Supongo que aún vivís en Londres. ¿Qué sitios recomendáis para salir donde suene música como la vuestra?
Joe: «A veces pongo música en XOYO, una sala de tamaño medio en Shoreditch. Hay un sitio más pequeño y nuevo llamado Five Miles en Seven Sisters, con un equipo muy bueno. En Giant Steps tienen un equipo muy grande, que es excelente. Phonox en Brixton, con muy buen equipo, menos potente pero muy bueno…»
¿Y tú, Owen?
Owen: «Creo que lo que te ha dicho es bastante completo».
Michael Stipe ha confirmado su regreso a la música. Lo ha hecho en el suplemento cultural de un periódico italiano, La Republicca, en el que además ha revelado que ya tiene «18 canciones listas» nada menos. El músico ha añadido: «he descansado de la música durante cinco años, ahora estoy escribiendo, componiendo y grabando totalmente por mi cuenta y por vez primera».
En 2016, Stipe, que años atrás presentara algo de música o actuara de telonero (medio encubierto) de Patti Smith, versionando a Perfume Genius, entre otros, llegó a revelar que «quería volver a la música», por lo que parece que en los tres últimos años se ha aplicado para componer probablemente su primer álbum en solitario. Un disco que quizá siga una línea electrónica, pues Stipe viene de producir el último disco de Fischerspooner, publicado en 2018, y como recordamos hace unos años, el músico llegó a mostrar inquietudes por la electrónica durante su carrera con R.E.M.
Es un misterio a qué puede sonar este proyecto de Stipe, pues el músico llegó a declarar que no iba a volver a la música pues pensaba que su material en solitario sonaría demasiado a R.E.M., si bien luego se retractó, y los pasos musicales de Stipe tras la separación de R.E.M. han sido escasos. Sin embargo, si tenemos en cuenta la música que compuso en 2017 para una instalación en Moogfest o aquel tema llamado ‘Future, if Future’ que estrenó durante el movimiento anti-armas el año siguiente, además de su trabajo con Fischerspooner, tiene pinta que será electrónico al menos en parte. ¿Y no era la poblada barba que llevaba hasta hace poco parecida a la de Moondog?
En cuanto a las letras, R.E.M. nunca se han cortado en abordar cuestiones políticas en sus canciones (‘Orange Crush’, ‘World Leader Pretend’ o ‘Bad Day’ son tres ejemplos) y, en tiempos recientes, tampoco lo ha hecho Stipe. Le hemos visto apoyando a Bernie Sanders, el control de armas o a Radiohead en su postura en relación a Israel, así como posicionándose en contra del juez Brett Kavanaugh (acusado de abusos sexuales por varias mujeres). ¿Quizá alguno de estos temas haya encontrado lugar en alguna de las 18 canciones que Stipe dice haber compuesto?
La novedad más reciente de Stipe, de hecho, no es su libro de fotografías ‘Here I Am – Take It’, sino musical, pues el artista acaba de aparecer como artista invitado en ‘Time is the Killer’ de la cantante y actriz Rain Phoenix, hermana del fallecido River Phoenix. Incluido en su EP de debut, ‘Time is the Killer’ es un tema de poso country en el que Stipe se limita a hacer coros… excepto hacia el final, donde la voz de él es tan prominente como la de ella. Seguramente una anécdota en la carrera de Stipe que poco tendrá que ver con el proyecto que se encuentra ultimando, y que no parece que vaya a demorarse muchísimo más tiempo.
Sigrid ha estrenado videoclip para uno de los temas destacados de su álbum debut, ‘Mine Right Now’. La nota de prensa lo llama el «FYRE Festival de los vídeos musicales», pues al parecer su rodaje en una montaña de Bulgaria fue un desastre absoluto parecido al de ‘Wyclef Jean’ de Young Thug, empezando por que la propia Sigrid no pudo asistir a él debido a la cancelación de su vuelo el día anterior.
El director del vídeo, Max Siedentopf, hace de Sigrid y explica que, tras pasar una semana «montando sets maravillosos», el equipo de 40 personas que ya se encontraba presente en el rodaje decidió grabarlo igualmente. Sin embargo, añade que la ausencia de Sigrid no fue ni de lejos el peor de sus problemas: «durante el rodaje más obstáculos se cruzaron en nuestro camino: enormes tormentas, montajes caídos, problemas con los guardabosques, la muerte de mi perro… incluso había un asesino en serie suelto en las montañas remotas de Bulgaria en las que casualmente nos encontrábamos».
Es la propia Sigrid quien, en unas imágenes añadidas a posteriori, introduce el vídeo de ‘Mine Right Now’ presumiblemente desde su casa, apareciendo unas pocas veces después. Como puede verse en el clip, el rodaje se ve afectado por el mal tiempo e incluso un dron llega a desaparecer. La cosa tiene su gracia, aunque al menos Popjustice no termina de creerse toda esta historia, que parece diseñada para viralizarse. En cualquier caso, aquí está el vídeo de ‘Mine Right Now’.
La sala Apolo de Barcelona celebrará el Pride Weekend los días 28, 29 y 30 de junio con un macroevento en colaboración con Churros de Chocolate, del que ya se conoce la programación. El viernes 29, la celebración del Orgullo en Apolo arrancará con una fiesta 80s en la que The Txandals versionarán sus éxitos favoritos de la época.
El sábado 29, Churros con Chocolate, junto a la fiesta SOMOSLAS, se unirá a la carroza del Apolo y estará presente poniendo música y ambiente en el desfile-manifestación oficial del PRIDE BARCELONA 2019. El desfile será de 18h a 20h y recorrerá el Paral.lel, desde Colón hasta la Avda. María Cristina. Esa misma noche, Apolo abrirá sus dos salas a partir de las 23.59h para ofrecer su programación de «club». La sala principal contará con las sesiones de Enka DJ, The Pop KidS y los DJs residentes Cheap Son y Chica Barata; mientras la sala 2, la ANTI-Churros, ofrecerá su «fiesta alternativa», que contará con el concierto de Ms. Nina como reclamo principal, además de posteriormente con más sesiones de Cheap Son, Chica B, Andrea Antiheroína y finalmente Hernán Lagos.
Finalmente, el domingo 30 la Sala Apolo cerrará su programación del Pride Weekend con un especial de ABBA en el que Chico Malo aka Jordi Cruz y Ferdiyei repasarán los éxitos del cuarteto sueco. La «niña del micro» Chica Barata y Cheap Son serán los encargados de poner fin a la celebración.
Natalia Lacunza entra en el número 3 de la lista de singles española con ‘Nana triste’, el primer sencillo extraído de su EP de debut, ‘Otras alas‘. Este dueto con Guitarricadelafuente había arrasado en streaming en el día de su salida y es por tanto la entrada más fuerte de la semana en la tabla, si bien no ha conseguido destronar a ninguna de las tres canciones del verano actuales en España, ‘Callaíta’, ‘Otro trago’ y ‘Soltera (Remix)’, que permanecen exactamente en los números 1, 2 y 3 de la lista una semana más. Curiosamente, el éxito de ‘Nana triste’ ha propiciado que Guitarricadelafuente entre por primera vez en solitario en la lista de singles española y ‘Guantanamera’, su canción más escuchada con casi 3 millones de reproducciones en Spotify, entra en el número 69.
Dos pesos pesados del reggaetón también entran esta semana en la lista de singles española con sus respectivos nuevos temas. Por un lado, J Balvin entra en el número 38 con ‘Loco contigo’ junto a DJ Snake y Tyga (el pegadizo tema pasaba por nuestra sección ‘La canción del día’ recientemente), mientras Bad Bunny (actual número 1 en España precisamente con ‘Callaíta) lo hace en el 54 con ‘Estamos arriba’ junto a Myke Towers.
Menos ha interesado en nuestro país la nueva propuesta de Taylor Swift para el mes del Orgullo pese a su vídeo viral. ‘You Need to Calm Down’ no ha conseguido ser número 1 en Estados Unidos de nuevo por culpa de ‘Old Town Road’, pero al menos sí es número 2 exactamente como le pasaba a ‘ME!’ junto a Brendon Urie. En UK es top 5, pero en España, Taylor vuelve con ‘You Need to Calm Down’ a registrar una entrada discreta, en el número 63… a su vez bastante peor que ‘ME!’, que al menos era número 36 aunque ya ha desaparecido por completo de la tabla.
El resto de entradas de la semana en la lista de singles española con ‘Moon Talk’ de Kidd Keo en el número 66, ‘Cúrame’ de Prince Royce y Manuel Turizo en el 74, ‘Mi morena’ de Juanfran en el 84, ‘La rubia (Remix 2)’ de La Nueva Escuela y Omar Montes en el 87, y ‘Pa ti pa mí na má’ de Demarco Flamenco en el 91.
Bruce Springsteen es número 1 de ventas en España esta semana con ‘Western Stars‘, tras debutar en esta misma posición en varios territorios europeos incluyendo Reino Unido. Su gran competidora de la semana, Madonna, entra en el número 3 de ventas con ‘Madame X‘, que al menos sí es número 1 en Estados Unidos y en España representa la entrada más fuerte de la semana en la tabla de streaming, en el número 7. En esta clasificación, el Boss entra varias posiciones por debajo, en el número 18.
La persona que ha impedido a Madonna ser al menos top 2 de ventas en España es Cepeda, cuya reedición de ‘Principios’ ha sido un éxito en ambas clasificaciones. En la de ventas sube del 41 al 2, y en la de streaming del 82 al 4. ‘Principios’, que en su edición original ya había sido top 1 simultáneo de ventas y streaming, es finalmente Disco de Platino.
Siguiendo con la lista de ventas, la reedición por su 40 aniversario de ‘Unknown Pleasures’ de Joy Division entra en el número 18 mientras ‘Doom Days’, el nuevo álbum de Bastille, lo hace en el 35 (en streaming es top 38). Por su parte, Bill Callahan entra en el número 51 con su nuevo álbum doble ‘Shepherd in a Sheepskin Vest’, Calexico y Iron & Wine en el 53 con su nuevo álbum colaborativo ‘Years to Burn’, Baroness en el 57 con ‘Gold & Grey’ y Trogloditas en el 83 con ‘Trogloditas II’. La única entrada en streaming esta semana que o se repite en la de ventas es la de ‘Otra cosa’ de Gente de Zona, en el número 90.
Amaia acaba de lanzar ‘Nadie podría hacerlo’, el segundo single de su álbum debut, que sigue sin fecha de lanzamiento. La navarra ha afirmado que saldrá en septiembre y que contendrá influencias de artistas diversos, como Sufjan Stevens o Kanye West, si bien esta nueva balada compuesta junto a Núria Graham no puede ser más Brill Building. En palabras a JENESAISPOP, Santiago Barrionuevo de Él mató a un policía motorizado, productor de parte del álbum de Amaia, lo que incluye el primer single ‘El relámpago’, ha declarado que ambos han trabajado «en unas 16 o 17 canciones», entre las que destaca la inédita -y provisionalmente titulada- ‘Ha salido el sol’.
Mientras se concretan los detalles del debut de Amaia, la navarra ha colaborado con Vevo para grabar un par de actuaciones en directo. Las canciones escogidas por la artista por supuesto son ‘El relámpago’ y ‘Nadie podría hacerlo’, que presenta al piano y acompañada junto a su banda.
Al menos el directo de ‘El relámpago’ supone una pequeña novedad en el repertorio de Amaia pues se trata de una versión alternativa marcada por un ritmo electrónico, que ofrece una visión diferente de lo que quizá podría haber sido la canción. Por su parte, ‘Nadie podría hacerlo’ cautiva desde la desnudez absoluta del piano y la voz de su intérprete. Recomendado el visionado de ambos vídeos, en cualquier caso.
Si observamos la trayectoria de Mark Ronson, cabe preguntarse si es más un oportunista que un tipo con verdadero talento y personalidad. En los albores de esta web su nombre se hacía prominente gracias a sus trabajos en clásicos de la pasada década como ‘Back to Black’ y ‘Alright Still’, ganándose un estatus estelar. Desde entonces, ese halo de productor-estrella se ha ido afianzando con sus trabajos para nombres comercialmente tan descomunales como Bruno Mars, Lady Gaga o Adele, alternados con otros menos obvios como Black Lips, Queens of the Stone Age o A$AP Rocky, mientras ha ido publicando discos a su nombre en los que dejaba su impronta como autor.
Pero, ¿cuál es esa impronta? Si observamos ‘Version’ (2007), ’Record Collection’ (2010) y ‘Uptown Special’ (2015), lo cierto es que todos ellos tienen poco en común, más allá de un reconocible gusto por sonidos pretéritos. Ese dominio de lo retro que se le venía atribuyendo hace tiempo que dejó de ser intrínseco a Ronson: su trabajo para Dua Lipa (‘IDGAF’) y el tándem formado junto a Diplo llamado Silk City le han despegado de esa imagen de heredero del estilo Brill Building para pasar a parecer más versátil… y también más oportunista.
Y es que este ‘Late Night Feelings’, un álbum que llega con el halo de ser su particular “disco post-divorcio”, se entrega a cierta contemporaneidad que, en sus peores momentos (es decir, los menos atractivos), parece el mero eco de la radiofórmula de modita, al más puro estilo de su colega Calvin Harris en su penúltima reinvención. Sin dejar de ser elegantes en lo sonoro y no carecer de gancho, canciones como ‘Find U Again’ –el tema cantado por Camila Cabello (y que, atención, cuenta con la participación de Kevin Parker de Tame Impala)–, ‘Don’t Leave Me Lonely’ y ‘When U Went Away’ –ambas colaboraciones con la vocalista estadounidense YEBBA, que ha cantado para Rudimental– resultan tan prescindibles como un hilo musical random. Tampoco termina de fulminar la coral ‘Truth’, más próxima al soul en los cánones, en la que Alicia Keys no tiene tanto protagonismo como pudiera esperarse, acentuando la irregularidad del conjunto.
‘Late Night Feelings’ es, de manera llamativa, mejor cuanto más distintivas y personales son las co-autoras (en este caso, no hay un solo instrumental, y todos tienen a una mujer como protagonista) de sus canciones. Así, si ‘Nothing Breaks Like A Heart’ era muchísimo gracias al sentimiento y al poso country que aportaba Miley Cyrus y el tema titular crecía en su nostalgia disco gracias al singular estilo vocal de Lykke Li, el álbum funciona sobre todo cuando se sitúa al frente una artista como Angel Olsen en la maravillosa ‘True Blue’ o la injustamente poco reconocida Diana Gordon en una ‘Why Hide’ que, con letra co-escrita por Romy de The xx, muestra una extraordinaria clase.
No, no es casual, como demuestra el brillo que de nuevo vuelve a sacar la sueca en ‘2 AM’, la exquisita balada semiacústica con la que casi se cierra el disco. Y no, tampoco se trata de ensalzar lo clásico ante lo moderno: como demuestra la fantástica aportación de King Princess, ‘Pieces of Us’, Ronson también puede ser eficaz en una tesitura contemporánea. Se trata, más bien, de cómo el trabajo del productor resulta más seductor y rotundo cuanto mayor es el talento que tiene cerca. Lo cual pone de relieve lo presuntuoso que resulta que Mark Ronson firme discos en solitario, aunque nos dejen perlas tan deslumbrantes como las que aquí encontramos.
Calificación: 6,8/10 Lo mejor: ‘Nothing Breaks Like A Heart’, ‘Late Night Feelings’, ‘True Blue’, ‘Why Hide’, ‘Pieces of Us’ Te gustará si te gustan: las artistas que le acompañan. Escúchalo: Spotify
Con ‘Fixion‘, su álbum de 2016, Anders Trentemøller adquirió un estatus cuasi-estelar que le llevó a realizar giras europeas llenando salas y encabezando carteles de festivales con su electrónica oscura y orgánica. También en nuestro país, donde tras llenar salas de Madrid y Barcelona se situó con su impresionante directo a la altura de los mejores en festivales como WAM o Bilbao BBK Live. Tras ese nuevo nivel alcanzado, el músico danés regresa por fin con un nuevo álbum de estudio. [Foto exterior de Trentemøller: Sofie Nørregaard.]
Semanas atrás Trentemøller reaparecía con una nueva canción instrumental titulada ‘Sleeper‘, sin especificar mucho más sobre ella. Pero, tras estrenar el pasado viernes una nueva canción llamada ‘In The Garden’ –esta vez contando con una parte vocal a cargo de la artista neoyorquina Lina Tullgren–, hoy se confirma que ambos temas forman parte de su nuevo trabajo. Se titula ‘Obverse’ y se publicará el próximo otoño en formato de doble vinilo.
Como revela su tracklist y fiel a su costumbre (en trabajos anteriores habían colaborado miembros de Savages, The Drums), The Raveonettes y Low), el disco incluye featurings de artistas reconocidas como Rachel Goswell de Slowdive o jennylee de Warpaint, además de su compatriota Lizbet Fritze, miembro del trío Giana Factory.
Tracklist de ‘Obverse’:
01. / A1. Cold Comfort (feat. Rachel Goswell of Slowdive)
02. / A2. Church Of Trees
03. / B1. In The Garden (feat. Lina Tullgren)
04. / B2. Foggy Figures
05. / B3. Blue September (feat. Lisbet Fritze)
06. / C1. Trnt
07. / C2. One Last Kiss To Remember (feat. Lisbet Fritze)
08. / D1. Sleeper
09. / D2. Try A Little (feat. jennylee of Warpaint)
10. / D3. Giants
Resultaba inquietante el hecho de que a un grupo como Friendly Fires, que había llevado a cabo con éxito crítico y comercial la apertura del pop rock independiente hacia ritmos exóticos y bailables en el cambio de década, pareciera habérsele tragado la tierra. Máxime cuando no constaba que el grupo se hubiera separado y, de hecho, hubiera publicado varios singles el pasado año –alguno tan atractivo como ‘Heaven Let Me In‘–, apuntando a un comeback discográfico. Sin embargo, su trayectoria intermitente nos llevaba a dedicarles un «algo pasa con…» donde nos preguntábamos si de verdad algún día veríamos una continuación a ‘Pala‘, su disco del año 2011.
Pues bien, parece que sí, desde hoy ese tercer largo del trío británico es una realidad palpable. Se titula ‘Inflorescent’ y verá la luz este mismo verano, concretamente el próximo día 16 de agosto. El tracklist, que se ha revelado junto a su portada, incluye las citadas canciones presentadas entre el pasado año y este: ‘Lack of Love‘, ‘Heaven Let Me In’ y ‘Love Like Waves‘. Y también ‘Silhouettes’, un tema co-producido por James Ford (Arctic Monkeys, Depeche Mode, Foals) y Mark Ralph (Clean Bandit, Years & Years) y co-escrito por Nick Hodgson (ex-Kaiser Chiefs), que se presenta hoy y supera todas las expectativas que pudiera haber con este regreso.
Y es que es toda una orgía pop en la que cabe de todo, y no es un decir: tras una intro con una energía que podemos situar sin rubor como cercano a la rumba catalana, los versos evocan la elegancia de unos Prefab Sprout a pesar de su ritmo disco con reminiscencias latinas. Y, entre la sucesión de ganchos, destacan unos papapá-parapás que nos llevan a pensar en los Miami Sound Machine de Gloria Stefan, nada menos. Toda una sorpresa… relativa, porque ellos ya habían demostrado qué eran capaces de hacer en singles tan certeros como ‘Paris’, ‘Jump In The Pool’ o ‘Hawaiian Air’. Y no sólo eso: en la última edición del festival Tomavistas se mostraban en perfecto estado de forma.
Tracklist de ‘Inflorescent’:
01 Can’t Wait Forever
02 Heaven Let Me In
03 Silhouettes
04 Offline
05 Sleeptalking
06 Kiss and Rewind
07 Love Like Waves
08 Lack of Love
09 Cry Wolf
10 Almost Midnight
11 Run The Wild Flowers
Madonna reinventando a Juana de Arco, Taylor Swift protagonizando una fantasía LGTB+, Katy Perry buscándose a sí misma en la nueva era de Acuario, Rosalía enseñando las uñas, y Alfred García crucificado. Arañamos las imágenes de los videoclips más destacados de las últimas semanas y mostramos sus referentes estéticos y narrativos.
Dark Ballet (Madonna)
En ‘La pasión de Juana de Arco’ (1928), la actriz Maria Falconetti, con la cabeza rapada y el rostro bañado en lágrimas, dejó grabada a fuego la imagen cinematográfica de Jeanne d’Arc. Setenta años después, Milla Jovovich (‘Juana de Arco’), con su corte de pelo a tazón, actualizó la representación de la santa francesa y la fijó en la memoria popular como un spray de laca. El realizador Emmanuel Adjei, conocido por sus vídeos para Sevdaliza, ha puesto en una hoguera estas dos referencias cinematográficas (durante el vídeo saltan varias chispas con fotogramas de la Falconetti) y las ha prendido fuego con el artista y activista Mykki Blanco como combustible. El resultado es una gran fogata de pirotecnia visual (planos con distintas velocidades, ángulos, tonalidades), en la que Madonna vuelve a pellizcar la mano de la Santa Sede como en los tiempos de ‘Like a Player’. ‘Dark Ballet’ retuerce la simbología de un icono católico (Juana fue declarada santa en 1920 por el papa Benedicto XV), hasta transformarlo en un mártir laico, en una metáfora sobre la discriminación, opresión y persecución de las minorías raciales y sexuales.
You Need to Calm Down (Taylor Swift)
Los parques de caravanas, surgidos tras el crack de 1929, son uno de los símbolos más reconocibles de la pobreza en Estados Unidos. El nuevo videoclip de Taylor Swift pone en una batidora el concepto trailer trash (utilizado ya por John Waters en ‘Pink Flamingos’) y le da varias vueltas irónicas y poperas. ‘You Need to Calm Down’ es un azucarado batido de referencias de la cultura LGTB+, una fantasía colorista realizada con ánimo conciliador (el momento Happy Meal), y con “relajado” discurso reivindicativo de fondo. Como es habitual en los vídeos de la cantante, este también está lleno de guiños ocultos, de pistas visuales repartidas por el encuadre como huevos de pascua. Desde el célebre «Mom, I am a rich man» de Cher, el tinte color bandera Bi que luce la cantante a mitad del vídeo, o el Stonewall Inn que está pintando Ryan Reynolds (uno de los muchos cameos que aparecen); hasta los múltiples objetos con referencias al “universo Swift” que luego puedes comprar como merchandising en su web: el reloj con el 13 y el gatete, la funda del móvil con el nombre del disco, o el antifaz que homenajea al que utilizaba Audrey Hepburn en ‘Desayuno con diamantes’ (1961).
Never Really Over (Katy Perry)
Cualquiera que haya visto ‘Wild Wild Country’ habrá soltado una sonrisilla de reconocimiento cuando, al comienzo de ‘Never Really Over’, Katy Perry entra en un “rancho del amor” cuyas puertas están flanqueadas por dos sonrientes cancerberos vestidos de naranja. Sin embargo, según avanza el vídeo, te das cuenta de que no, de que ‘Never Really Over’ no va a ser una parodia de las sectas hippies (por mucho que Perry aplaste la cara contra el cristal en uno de sus habituales gestos cómicos). La comuna setentera es la referencia iconográfica que ha utilizado la directora Philippa Price (Banks, St. Vincent) para representar un proceso de búsqueda espiritual y de autoconocimiento. Las coreografías, las vestimentas, la fotografía y la caligrafía visual, elaborada a base de zooms, planos generales y mucho movimiento de aproximación a contraluz, remite a clásicos del musical hippie como ‘Hair’ (1979) o ‘Jesucristo Superstar’ (1973). Las terapias y tratamientos, a una visión lúdica y festiva de los retiros espirituales en tiempos de desorientación existencial.
Aute Cuture (Rosalía)
En ‘Planet Terror’, la aportación de Robert Rodríguez al proyecto ‘Grindhouse’, una bailarina de striptease lisiada se colocaba una prótesis imposible que la convertía en una heroína de acción. Un similar espíritu juguetón, pulp y tex-mex, con algún que otro arañazo autoparódico, parece animar la realización del nuevo vídeo de Rosalía. El argumento ya lo dice todo. La cantante aparece caracterizada como la líder de una banda de manicuristas ambulantes, que utilizan un taller como tapadera para otro tipo de negocios más turbios. Las uñas, obra del artista Juan Alvear (y que uno, que es un poco friqui, no puede evitar pensar en Zé do Caixão), le sirven a la banda tanto de prótesis letales como de armas de empoderamiento femenino. ‘Aute Cuture’ juega constantemente con las formas del spaghetti western. Por un lado, las pinta con los colores de Revlon. Y, por otro, las araña con las uñas de Tarantino (el montaje y los zooms de la secuencia inicial remite casi plano por plano al comienzo de la célebre escena de lucha de ‘Kill Bill’) y las de Lady Gaga en ‘Telephone’ (donde aparecía el Pussy Wagon de ‘Kill Bill’ que también recuerda al que aparece al final de ‘Aute Cuture’).
Wonder (Alfred García)
En el vídeo ‘De la Tierra hasta Marte’, Alfred García viajaba al planeta rojo dando zancadas en el espacio como un atleta de triple salto. En ‘Wonder’, que continúa el hilo narrativo del anterior, el cantante ya está en Marte. Con un estilo visual que remite a ‘The Martian’ (2015), Alfred se pasea por la superficie marciana como Matt Damon en la película de Ridley Scott. Durante su caminata por este paisaje mental, más que real, se topará con varias escenas de inspiración surrealista. Imágenes de contenido simbólico, en las que el protagonista se ve a sí mismo como en el final de ‘2001: Una odisea del espacio’ (1968): una crucifixión que alude al sacrificio y al “linchamiento” mediático, una interminable alfombra roja como metáfora de las dificultades de transitar por el camino de la fama sin tropezar, y una hoguera con los discos del cantante que podría reflejar la inseguridad de todo artista y ¿el miedo a la ira de los haters? Temores que orbitan alrededor del concepto de exposición mediática y que parece que solo pueden ser conjurados a través de la aparición de lo que realmente le importa al cantante: la música.
Kate Tempest ha entrado en el top 30 de las listas británicas con ‘The Book of Traps and Lessons‘, prácticamente igualando la posición del anterior y tan comentado ‘Let Them Eat Chaos‘. En los tiempos en que cada vez cuenta más el streaming, el logro tiene un enorme mérito que seguro que se debe también en parte a lo que se ha cuidado la edición física del álbum.
Kate Tempest es escritora, ha publicado varios libros y al fin y al cabo este álbum se llama «Libro de Trampas y Lecciones». Por eso suma puntos que el CD haya sido editado en formato DIGIPACK como si fuera «un libro», con tapa dura y el título grabado en dorado, incluyendo en su interior un libreto de unas 30 páginas en las que se pueden leer las letras, un par de borradores manuscritos de las mismas (con los correspondientes tachones, a veces ilegibles) y también un largo texto sobre el álbum escrito por Marlon James durante esta primavera.
Respecto a las letras, sí, ya sabemos que se pueden encontrar en la red. Pero para un disco en el que se bromea sobre consultar el teléfono «17 veces por minuto» para ver si se nos ha perdido una llamada, es lo justo sentarte a degustar su contenido sin móviles ni internet cerca que nos impidan ahondar en el mensaje tan interesante detrás de canciones sociales como ‘Brown Eyed Man’ o personales como ‘Firesmoke’.
Precisamente el texto del escritor jamaicano Marlon James, autor de libros como ‘Breve historia de siete asesinatos’, ahonda en esa idea de la que Kate Tempest habla en las entrevistas, y que han inspirado este disco: cómo hacer el bien en nuestro entorno más íntimo puede influir en el bien social. «Quizá la revolución empieza primero en el hogar, sea lo que sea lo que consideremos el hogar, y sea quien sea a quien consideremos familia», indica Marlon James, al tiempo que considera a Kate Tempest «nuestra poeta de la incertidumbre» y reconoce que leer ‘The Bricks That Built the Houses’ de Tempest le inspiró la idea de una nueva novela. Kate Tempest actúa el 26 de noviembre en La [2] de Apolo, Barcelona; y el 27 de noviembre en la Sala But de Madrid. Las entradas salen a la venta este miércoles 26 de junio.
Hot Chip tienen un nuevo disco a la venta esta semana, el notable ‘A Bath Full Of Ecstasy‘. El nuevo single tras el estupendo ‘Melody of Love’ es ‘Spell’, uno de los temas más Talking Heads del disco que, además, según la nota de prensa de su sello, comenzó como una canción para Katy Perry. No se especifica por qué no cuajó pero sí recordamos ver a Hot Chip como co-autores de un tema de ‘Witness’, en concreto de la balada ‘Into Me You See’. ¿No habría sido esta mejor elección para Katy?
En cualquier caso, el grupo le ha terminado sacando partido y hoy estrenan un divertido videoclip para la misma. Desde que uno ve a esa pareja a punto de meterse en la cama, sabe que algo extraño va a pasar, porque esto es un vídeo de Hot Chip y no uno de música urbana o R&B, y efectivamente la influencia del cine fantástico hace acto de presencia enseguida, seguramente sacando una sonrisa a todos los seguidores del cine de terror.
Simon Owens, que se ha encargado de la dirección, ha querido escoger un fragmento de la letra para tomarlo literalmente. La canción habla de un «hechizo» y una «maldición» (su estrofa escogida ha sido “Like a spell you are under | And now I feel your curse / It’s all that I wanted / A memory in reverse / Forever I’m haunted”) y se bromea con la influencia de ‘Evil Dead’. Os recordamos que Hot Chip estarán actuando en la próxima edición de Bilbao BBK Live, festival del cual JENESAISPOP es media partner.
ionnalee es el nuevo número 1 de JENESAISPOP tras conseguir con ‘Remember the Future’ la canción más votada de la última semana. Las únicas entradas de la semana son dos temas de Shura y Flume, este último con London Grammar, pero habrá más la semana que viene. Y es que toca despedirse de tres temas que aparecen en la mitad de la tabla con 10 semanas o más en lista. Se trata de ‘El final del amor eterno’ de La Casa Azul, ‘Late Night Feelings’ de Mark Ronson y ‘Borderline’ de Tame Impala. Ya podéis escuchar nuestra última lista de novedades y votar por vuestras canciones favoritas, aquí.
Two Door Cinema Club continúan por la senda de la reinvención en su cuarto álbum, lejos de la colección de punteos de guitarra que les han llevado a arrasar en las plataformas de streaming y en los festivales frente a públicos multitudinarios. Mientras el mundo sigue apegado a ‘What You Know’ y ‘Something Good Can Work’, las canciones que más alegrías les han dado y les continúan dando aún a día de hoy; la banda de Alex Trimble vira definitivamente hacia el mundo de los sintetizadores en este ‘False Alarm’ que se publica esta semana. La primera impresión es que continúa la línea artística abierta con el anterior disco ‘Gameshow’, pero salta a la vista que esta propuesta es mucho más colorida, lo cual tiene su razón de ser.
Esta nueva obra de Two Door Cinema Club se plantea como «la hermana alegre» del anterior álbum, pues donde ‘Gameshow’ se pronunciaba en contra de la obsesión por la tecnología y por las redes sociales, ‘False Alarm’ plantea: «si no puedes ganar al enemigo, satirízalo». Según la completa nota de prensa que desgrana la totalidad del largo, ya no odian el mundo tanto como deciden tomárselo a broma. Y si bien las letras son lo suficientemente opacas o ambiguas como para que alguien se pierda por el camino, el grupo sí ha sido capaz de hacer un disco que, frente a ese enemigo común, no sé si suena «satírico» o «divertido», pero desde luego no resulta nada oscuro ni trágico.
Detengámonos por ejemplo en la pista primera del álbum. Se trata de ‘Once’, una canción épica, como de final más bien, en la que encontramos a Trimble cantando algo así como «pronto vas a ser una estrella / y eso es suficiente para saber seguro quién eres». Habrá algún despistado que se lo creerá, pero tras atender a la explicación de la canción, que versa en realidad sobre cómo nos definimos en función de nuestro número de «likes» y de nuestra popularidad online, y de cómo se ha perdido el sentido de la frase «una vez en la vida» cuando todo está capturado por fotos y todo puede ser recreado a través de mil pantallas, la sensación de ironía es evidente. Y aunque lo entiendas como lo entiendas, lo seguro es que lo que te quedará es el poso optimista de la melodía, subrayando que el grupo ya no se toma estos males del primer mundo tan en serio.
Otra de las canciones destacadas es ‘Satisfaction Guaranteed’, una crítica a la sociedad de consumo y de las apps que solo saben vendernos felicidad, en la que han sampleado a una banda de Zimbabue llamada Mokoomba, con la que también han colaborado en el estudio; y que, tras comenzar en plan Cut Copy, presenta tantas aristas como los Talking Heads de finales de los 70 y el David Bowie de 1980. También es eficiente el paso de Open Mike Eagle por una ‘Nice to See You’ llena de cencerros e inspiración funk, que habla sobre cómo nuestros amigos viven su vida como una fantasía glamourosa de Instagram, pero luego son incapaces de expresarte sus miedos o problemas en persona.
‘Think’, cerrando la cara A, parece anticipar una cara B complicada, pero en verdad nada más lejos de la realidad. Aunque uno se queda con ganas de que la balada a lo Paul McCartney ‘Break’ dure el doble (fue insistencia del productor Jacknife Lee recortarla para evitar que el grupo la llevara por caminos ya transitados), lo que diferencia este disco de Two Door Cinema Club del anterior, es que este se va creciendo a medida que avanza la secuencia, en sintonía con el color que vende su portada. Antes de cerrarse con la muy Tame Impala ‘Already Gone’, de final abrupto haciendo honor a su nombre; ‘Dirty Air’ hace lo propio añadiendo al disco una animada dosis de rock y «suciedad» muy bien integrada en los parámetros estéticos del álbum. E inmediatamente después aparece ‘Satellite‘, que tras su disfraz de Kraftwerk o Human League, esconde uno de los mejores estribillos de Two Door Cinema Club, lo cual, a estas alturas, es bastante decir. ¿Superarán estas canciones el impacto de su debut? Eso casi nunca sucede con un cuarto álbum. Pero desde luego no se puede decir que no estén enriqueciendo su discurso.
Calificación: 7/10 Lo mejor: ‘Satellite’, ‘Dirty Air’, ‘Once’, ‘Satisfaction Guaranteed’ Te gustará si te gustan: el Bowie de los 80, Talking Heads, Cut Copy, Human League Escúchalo: Spotify
El “it feels so scary getting old” de Lorde en ‘Ribs’ tiene una doble lectura para nuestra generación: hacerse mayor inquieta, cuando no directamente acojona, pero hacerse mayor en el contexto sociopolítico actual es un poco para echarse a temblar. Si tirásemos los dados en un intento de adivinar el futuro, el resultado sería un poco “susto o muerte”: ¿qué nos espera? Esa pregunta es la base de la última creación de Russell T. Davies. Había expectación por ver lo que había hecho ahora el creador de –ojo– ‘Queer As Folk‘, el revival de ‘Doctor Who’ (y ‘Torchwood’), la trilogía ‘Cucumber/Banana/Tofu’ o ‘A Very English Scandal‘, pero no podíamos imaginar que, además de a ‘Torchwood’, ‘Years And Years’ nos iba a recordar a ‘The Good Fight’, a ‘Here and Now’, a ‘American Horror Story: Cult’ y, efectivamente, a ‘Black Mirror’. Coincidiendo con la temporada más decepcionante de la obra de Charlie Brooker, no han sido pocos quienes han visto aquí un planteamiento más ‘Black Mirror’ que lo que la propia ‘Black Mirror’ ha hecho este año. “Echo de menos cuando las noticias eran aburridas. Pensábamos que lo eran… pero parece ser que nuestra generación nació en una pausa”, dice uno de sus personajes. Las noticias ahora no son aburridas, pero en el futuro planteado por ‘Years and Years’ lo serán aún menos. Porque, como decía otro personaje, en esta ocasión el de Katherine Hepburn en ‘La Costilla de Adán’, “a veces creo que el mundo entero está sufriendo un ataque de nervios”.
Este nuevo trabajo sigue a los Lyons, una familia británica a lo largo de los cambios tecnológicos y sociopolíticos de quince años, mientras contempla también el ascenso al poder de Viv Rook –fantástica Emma Thompson–, una multimillonaria populista que no, no es una referencia a Trump (luego hablaremos de esto). Y, viendo el piloto, uno pasa por tres fases. En la primera disfrutamos con el inicio de lo que parece ser un nuevo drama familiar bien construido, algo de lo que andábamos huérfanos desde ‘Parenthood’ o ‘Brothers & Sisters’. En la segunda fase, pensamos “anda, se pone más interesante esto”; en la tercera, “HOSTIA HOSTIA HOSTIA”. Los Lyons acaban siendo los Alcántara si tuviesen su propio episodio (seis, mejor dicho) de ‘Black Mirror’, y la mención a la familia española no es solo porque esto pueda ser un ‘Cuéntame’ inverso, sino por los sentimientos. Es curioso que los considerados mejores episodios de ‘Black Mirror’ sean los que tienen un componente emocional más obvio (‘Be Right Back’, ‘The Entire History Of You’, ‘San Junipero’, ‘Hang the DJ’), algo de lo que adolece su quinta temporada, y que en ‘Years and Years’ supone una de sus bazas. La serie ha recibido comparaciones con ‘A dos metros bajo tierra’, y aunque a mí parecer se queda muy lejos en el tratamiento de los personajes, sí puedo entender esa referencia si hablamos de la capacidad de atravesarte emocionalmente, algo que ocurre sobre todo con el final, y con el comentadísimo cuarto episodio (sin spoilers: es una fantástica hostia para que quienes estamos inmunizados contra una realidad bastante horrible, que creemos tener lejos, la sintamos más cerca y reflexionemos sobre ella).
En un momento dado de la serie, la abuela de la familia dice que están en un mundo terrible, pero que quiere ver cada segundo de él, y es algo que podríamos decir nosotros mismos mientras la vemos: qué miedo, qué horror, pero quiero seguir. Quizás influya que, más allá de curiosidades sobre esa posible distopía (en lo que nos toca, una revolución comunista-pero-xenófoba en España), y de los duros golpes que se nos propinan, Davies tiene clara su intención de dejar un poso optimista sobre el poder del amor en la raza humana. Al inglés no le preocupa mucho ser 100% realista al hablar de ese futuro, y por eso nos da igual que casi no se mencionen la superpoblación o la subida del nivel del mar, y nos da igual que la abuela no envejezca nunca. Porque ‘Years And Years’ no ha venido a ser sutil y cuidadosa, ha venido a entregar un mensaje claro y a ser una llamada de atención que ni la de ‘God Control’: estamos en una situación de mierda, va a ser peor, y nuestro conformismo se verá convertido en desesperación si no lo cambiamos antes por acción. Eso es lo que nos quiere transmitir Davies, y esa “acción” es para él algo que, admite, puede ser un poco cliché: amor. Amor, empatía, entrega y entendimiento de nuestros semejantes.
Fuera de coñas con ‘Black Mirror’, está claro que realmente ‘Years and Years’ no es la serie de Charlie Brooker (aunque haya llegado en el momento oportuno), ni Davies quiere contarnos lo mismo que él. Aunque ‘Years And Years’ es un proyecto al que lleva mucho dándole vueltas, sin duda le ha influido el fallecimiento de su marido en 2018 a causa de un tumor cerebral (“me gusta hablar de mis series, pero el mejor trabajo que hice y haré en toda mi vida fue cuidarle”, comentó hace poco). Andrew Smith y él llevaban juntos veinte años, y la serie está dedicada a él -literalmente- e influida por él y por todo el amor que ambos compartieron. ‘Years and Years’ está cargada de sentimientos, y hay momentos que, sin exagerar, te hacen llamar a tu pareja o a un miembro de tu familia para recordarle que le quieres, pero también hay otros momentos de verdadero pánico con respecto al futuro, como hemos comentado. Y es que, pese a sus altas dosis de humor, da mucho más miedo que ‘Black Mirror’, entre otras cosas porque es más cercano. Y “cercano” no habla solo del tiempo. El ejemplo más claro lo tenemos con la antagonista: no se trata de que Viv Rook se parezca a Nigel Farage o a Trump, “se trata de que se parece a nosotros. Suena como todo el mundo en Twitter, toda esa agresividad, todo ese sentido del humor, todo ese acoso y derribo de cualquier persona o asunto”, explicaba Davies en una entrevista reciente. “Eso somos nosotros”, prosigue, “nos preguntamos de dónde salió Trump y justo después nos metemos en Internet y hablamos así. ¿Y nos preguntamos de dónde viene toda la rabia? Esa gente no es gente separada de nosotros, son parte de nuestra personalidad”. Como en el acertado vídeo de Mr Avelain sobre “la gente”, Russell T Davies llega a la misma conclusión: el futuro de ‘Years And Years’ da tanto miedo porque “la gente” eres tú. Is that you?8.
Recientemente nos hacíamos eco de la minigira española que The Regrettes acometerán el próximo otoño: el 30 de noviembre, estarán en la sala Razzmatazz 3 de Barcelona y el 1 de diciembre en la Moby Dick de Madrid. Ambos conciertos servirá al cuarteto de Los Ángeles liderado por Lydia Night para presentar ‘How Do You Love?’, su segundo álbum de estudio tras ‘Feel Your Feelings Fool!’, lanzado a principios de 2017.
Este nuevo álbum, producido por el veterano Mike Elizondo, verá la luz el próximo día 9 de agosto, y ya había sido anticipado por canciones de pop nuevaolero tan sumamente monas como ‘Pumpkin‘ o ‘Dress Up‘. Hace unos días lanzaban otro llamativo single que muestra un perfil similar pero que evoca además al encanto de los Strokes más primigenios, los de ‘Is This It‘.
Se trata de ‘I Dare You’, y un vistazo a los créditos da la posible clave de esa querencia: además de Lydia Night y Elizondo, entre sus autores figura Julian Casablancas, líder del grupo neoyorquino que revolucionara el panorama alternativo de principios de este siglo. Con un riff de guitarra que parece directamente extraído del que para nosotros fue el disco más importante de la pasada década, The Regrettes lo que parecen desafiar es nuestra capacidad para permanecer impasibles ante una canción tan vibrante y bonita a la vez, que además está redondeada por un colorido clip que, por su factura forzadamente amateur y sus coreografías, nos remite a otro clip icónico de los 00s: el de ‘1234’ de Feist. Sin duda, con canciones así, ‘How Do You Love?’ se antoja como un posible salvavidas veraniego.
Tracklist de ‘How Do You Love?’:
1. Are You In Love? (Intro)
2. California Friends
3. I Dare You
4. Coloring Book
5. Fog
6. Pumpkin
7. Stop and Go
8. Dress Up
9. Dead Wrong
10. More than a Mont
11. Go Love You
12. Here You Go
13. The Game
14. Has It Hit You?
15. How Do You Love?
Esta semana ha sido interesante para los aficionados a las listas de éxitos, pues dos pesos pesados de la música, Bruce Springsteen y Madonna, han publicado nuevos discos a la vez. Y ya puede decirse que él ha ganado la carrera de ventas en Europa al menos en la primera semana (ya se sabe que el verdadero éxito es mantenerse), pues ‘Western Stars‘ es oficialmente número 1 en Reino Unido además de en varios países, mientras ‘Madame X‘ es número 2 con la mitad de ventas en las islas británicas (él ha vendido lo equivalente a 52.290 unidades equivalentes, y ella 27.227). El álbum de Bruce ha sido número 1 en varios países europeos más, como ha sido el caso de Bélgica, Holanda, Alemania, Irlanda, Italia y Noruega, mientras ‘Madame X’ quedaba en el mejor de los casos en segunda posición (Italia) o incluso en la parte media/baja del top 10 (top 5 en Alemania, top 8 en Irlanda).
Por el contrario, en Estados Unidos ha sido Madonna la ganadora, sumando 95.000 copias vendidas durante la primera semana, por 66.000 de Bruce Springsteen. ‘Madame X’ se ve beneficiado por el «Tour bundle» que incluye además de una entrada para sus conciertos valorada entre 200 y 2000 dólares, una copia del disco para aquel comprador de tickets que lo solicite, y también ha ganado al Boss la batalla del streaming por la mínima (5.000 puntos frente a 4.000). Este es el 9º número 1 en álbumes para Madonna en Estados Unidos, lo que la sitúa tan solo por detrás de los Beatles (tienen 19), Jay-Z (14), Barbra Streisand y Bruce Springsteen (11), Elvis (10) y empatados con ella Eminem, Garth Brooks y los Rolling Stones, estos tres últimos con 9 álbumes número 1.
Tanto Springsteen como Madonna han jugado sus cartas a su manera. Aunque ‘Western Stars’ iba a ser un éxito de todas formas, Bruce ha sido listo publicándolo en la semana del Día del Padre en el mundo anglosajón. Por su parte, Madonna ha actuado en Eurovisión, es decir, ante toda Europa, pero su actuación provocó numerosas críticas negativas que pueden haber pasado factura a su imagen. Lo arriesgado del single principal de ‘Madame X’, ‘Medellín’, y en general del disco frente a la tradicionalidad de ‘Western Stars’, así como la mejor recepción crítica hacia el álbum de Bruce, también explicarían los datos de ambos discos.